Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

| 15

Demencia vio al jefe salir de su despacho con una cara bastante extraña, con el ceño fruncido. Para cuando el demonio se perdió en la esquina del pasillo, la chica salió de su escondite y entró al despacho con una sonrisa de oreja a oreja.

Pero se perdió al ver al científico con su bolsa y en medio del sitio, temblando levemente y su mirada perdida.

-¿qué sucedió? -preguntó Demencia, acercándose a él.

Y Flug salió de su trance con un sobresalto.

-e-es solo que-e Black Hat debe-e salir, una-a sucursal ha-a sido atacada por héroes y-

-no me refiero a eso. -interrumpió.- ¿qué le dijiste?

¿qué le dijo?

Eso es tan fácil de responder:

-nada...

Y eso le hacía sentirse tan estúpido por no hacerlo en verdad. Era muy estúpido el haberse quedado callado.

-¿¡qué!? -exclamó la chica lagarto.- ¿¡cómo rayos-!?

-el jefe se irá pronto. -le calló mientras pasaba a su lado.- debemos ayudarle a empacar.

Era obvio que no quería hablar de ello. Y, aunque Demencia quería decirle todo tipo de insultos a su persona por quedarse callado, debía aceptar que no quisiera hablar de ellos.

Necesita tiempo.

-perdón, Flug. -susurró la chica mientras se giraba y miraba al doctor, quien yacía en el marco de la puerta, dandole la espalda.- lamento meterlos en ese aprieto... pero no me quería quedar de brazos cruzados.

-no-o te preocupesmpor eso, ya pasó... -dijo en voz baja mientras salía del desastroso despacho.

Y no llegó a notar la desgastada sonrisa de la chica, y menos lo carmesí que poseía en sus ojos.

~●~

Caminaba lentamente por el pasillo principal, con una maleta en su diestra se aproximaba a la puerta principal.

Tan solo habían pasado 10 minutos de la llamada y ya estaba con todo su maletín hecho y su mejor mirada amenazante para aquellos seres tan abonibles que le sirven al bien.

Que asco.

-¡Blacky! -escuchó la voz chillona de la chica largarto cuando tan solo estaba a unos pasos de retirarse.

-¿qué quieres, Demencia? -preguntó irritado mientras se giraba y la miraba acercarse sonriente a él.

-¿qué? ¿¡te ibas a ir sin despedirte!? -preguntó hasta cierto punto ofendida.

-no exageres, tan solo me iré unas horas.

-¿tan rápido piensas acabar con ellos? -rió Demencia.

-me tomaré un tiempo para poder hacerles sufrir a esos bastardos. -se limitó a responder.

Es verdad. ¿por quién tomaba a Black Hat? ¡su segundo nombre era sufrimiento! Bueno, para Demencia lo era, pero no es el punto.

-suerte, Blacky. -le sonrió Demencia.

-no necesitó suerte. -bramó mientras desviaba la mirada.- pero, gracias. -murmuró.

Y Demencia sonrió mucho más amplio. El amor le estaba cayendo muy bien, pero lo dañaba si no era correspondido.

En eso, se escuchó un gruñido y ambos se giraron a ver a un avergonzado oso quien estaba con una débil sonrisa. Esa era su forma de despedirse. Había planeado hacerle un dibujo, pero la última vez no resultó muy bien la reacción. Así que esta vez se abstuvo de todo obsequio.

Pero el demonio sabía lo que quería y quiso decir el animal. Y suspiró un poco pesado.

-la intensión es lo que cuenta. -dijo mientras colocaba su mano libre en la suave cabeza de 5.0.5. y la acaricaba.

Y pudo ver la felicidad en los ojos del animal y en su cola.

¡en verdad el amor le estaba viniendo tan bien!

-bueno ya, es hora. -dijo Black Hat, apartando su mano y una leve sonrisa.- me retiro. -y se dió media vuelta, y avanzó lentamente hacia la puerta.

Demasiado lento.

Y es que esperaba que alguien más llegase.

Pero ese alguien más estaba en sus propios conflictos en su laboratorio, y no tenía la cara ni la máscara como para verlo luego de lo que sucedió. Y eso lo hacía sentir peor. Los hacía sentir peor.
Demencia y 5.0.5. notaron lo que esperaba y también sintieron el malestar por ello.

-iré a por Fl-

-los veo pronto. -se despidió sin más el de sombrero tomó el pomo de la puerta, la abrió y se retiró de la mansión.

Y él jura haber escuchado la palma de la chica impactar en su frente y luego una serie de insultos hacia el científico.

Ella hizo lo que él hubiera querido hacer. Pero no lo hizo, por mostrarse fuerte y no maldecir a su amado.

-maldición... -murmuró con una sonrisa.

~●~

Bostezó por... me doy, perdí la cuenta.

El de bolsa, desde la partida de su jefe, había estado en su laboratorio, encerrado. Se había negado a dejar entrar a Demencia. Por más fuertes que fueran sus golpes ni sus gritos ni sus reclamos. No saldría.
Ni siquiera por el dolor que en su estómago sentía a falta del alimento. Nimpor el cansancio...

Tan grande era su cobardía que entre frascos y artefactos y planos se ocultóny ni un ojo pegó.

Suspiró con un cansancio tan pesado...

Y se armó valor y salió de su laboratorio.

Sus piernas temblaban, era normal por el cansancio y el hambre. Con dificultad, se desplazó hasta la cocina. Debía cocinar para sus menores. Porque sí, Flug podría sentirse de la completa patada, pero no descuidaría a sus creaciones.
Vagamente, cocinó unos omellets para dos, pues él no comería. Casi hace el tercero, pero recordó que su jefe se había ausentado...

¿hizo lo correcto al evitarlo?

¿al no despedirse de él?

Se decía que no, que ya hablarían en su regreso, regreso que no tardaría nada, puesto que ¡por dios! ¡es Black Hat! ¡villano de villanos! ¡héroe alguno no existe que pueda derrotarlo!

Al volver, él se disculparía y hablarían y...

¿qué más quería?

Para él, decir que quería más era extraño, en especial si hablamos por parte del demonio. Pero... si él ya lo había hecho, ya había dejado en claro su parte, ¿por qué él no?

~●~

Suspiró con pesadez al ver el desastroso sitio.

El despacho.

Black Hat prometió ordenarlo. Pero no lo hizo... bueno sí, lo hizo ¡lo juro! ¡pero volvió a caer en sus descotrolados sentimientos! Y volvió a destrozar todo.
Y ahora era Flug quien estaba decidido a limpiarlo. ¿por qué? Porque no tenía otra cosa que hacer y quería hacer algo lindo por su jefe a pesar de la insistencia de Demencia para que descansara, pues en sus movientos torpes y bostezos continuos se notaba demasiado sus dos trasnochadas por pensar en las cosas que en su mente rondaban.

Como sea.

Ahora se armaba de fuerzas para seguir. Porque no descansaría hasta ver ese sitio limpio... o caer rendido, lo que suceda primero.

Comenzó primero levantando los pedazos rotos y sin reparación. Movió los muebles que aún daban para más a sus correspondientes sitios y barrió. Aun faltaba pegar lo que se pudiera, clavar, remplazar vidrios y demás materiales para hacer que esa oficina volviera a quedar impecable.
Movía la escoba de un lado a otro, llevándose consigo la suciedad, el polvo...

Por un momento sintió su cabeza doler, pero no le tomo importancia, pues ya había sucedido antes. Pero a medida que limpiaba, el dolor comenzaba a hacerse mas grandes y un asqueroso hueco se formaba en su estómago.

Y llegó.

Un fuerte y asqueroso mareo que lo hizo tambalearse y respirar con fuerza. Pero eso no fue lo peor. Ese presentimiento, ese sentir de que algo estaba muy próximo lo volvía a albergar y con más fuerzas.

Sujetó con fuerza aquel bastón, soportando ese dolor tan fuerte junto al presentimiento tan ácido que lo recorría.

-nada sucederá...-se repitió.

Y el dolor se intensificó de golpe, haciendole soltar la escoba de golpe y sujetando su bolsa con ambas manos y dejando soltar un alarido de dolor.

Y su cabeza dejó de doler de golpe y el presentimiento desapareció.

Y el teléfono sonó.

Se giró y se acercó y atendió la llamada.

-¿Black Hat Organization? ¿en qué podemos ayudarle? -habló al tener ek teléfono en su costado.

-¿habló con la mano derecha de Black Hat?

-doctor Flug, ese soy yo. -respondió el de bolsa.- ¿en qué puedo-?

-soy uno de los jefes de empresas aliadas a su corporación. Por razones que entenderá, no puedo revelar mi nombre. El punto es que... estoy en la sucursal que fue atacada y... -quedó callado y su respiración se hizo escuchar pesada.

Y el científico comenzó a asustarse.

-¿qué sucedió? ¿están los villanos bien?

-logramos evacuar, logramos vencerlos... pero lord Black Hat... no salió del sitio... al menos no...

Vivo

-¿a-a qué-é se re-refiere? -tartamudeo con el miedo en su voz.

-murió, caballero. E-el villano más grande... acaba de finar*...

Tan solo esas palabras bastaron para que el de bolsa dejara de escuchar lo demás de la conversación, donde explicaba lo malvados que fueron aquellos héroes, el cómo recuperaron la infraestructura. Pero eso no importaba.

Era Black Hat quien importaba

Y estaba muerto

-¿do-octor Flug? -preguntó el villano al otro lado de la línea al escuchar solo una pesada respiración con unos sollozos.

-no-o, es una broma-a ¡claro que lo es! ¡é-él no podría siquiera morir y-!

-pensabamos lo mismo... -interrumpió el villano.

Y Flug tragó duró y se esforzó en no sacar ni una lágrima.

-es mentira. Yo-o lo sé. -aseguró y acto seguido corto la llamada con algo de brusquedad.

Claro que debía ser una broma.

Porque, reitero: es de Black Hat de quien se hablaba. Villano de villanos. Héroe alguno no existía que lo derrotara.

¿verdad?

Sacudió su cabeza, alejando esos malos pensamientos. Porque, vamos, el que eso suceda solo pasaría si era en verdad desafortunado.

Pero...

-¡Flug! ¡Flug por favor, ve-en rápido! -se escuchó el grito desesperado de la joven.

Olvidó un detalle

El científico, alarmado por la salud de la chica, salió corriendo del despacho hasta la sala de estar, donde estaba la chica lagarto con el oso, viendo la televisión y con la mirada rota.

-¿qué sucedió? -preguntó preocupado.

Resulta que Flug

Y Demencia apuntó a la televisión con su tembloroso dedo. Y el gira a verla, y ve el noticiero y su noticia principal.

"Ataque a edificio del mal termina en destrucción y la muerte de su fundador."

-no-o...

Sí era desafortunado.

Y mucho.

-¡no! ¡es una broma de ese sujeto! -exclamó desesperado.- ¡es solo una trampa y-!

-los bomberos han logrado entrar más entre los escombros y han encontrado el cuerpo de su fundador"

Su fundador...

-Bla-ack Ha-Hat... -murmuró mientras se dejaba caer de rodillas.

Que cruel era el destino con aquel enamorado que tanto se tardaba en aceptar.

Y ahora, lo estaba aceptando.

Aceptaba que su patética vida... era exclusiva de Black Hat.

Vivía para servir y adorar y amarlo...

Lo amaba.

Pero era tarde, demasiado, para decirlo. Porque él ya estaba muerto y no podría decirle cuánto era su amor. Bueno, sí podía.

Se puede decir "te amo" a un cuerpo.

Y este no te responderá.

Y demasiado dolerá.

-no puede... no puede estar muerto... no... yo-o pude evitarlo... pude decirle que no fuera, que se quedara... pude-e decirle que... que-e...

Lo amaba

Y Demencia quiso decirle cualquier cosa... pero también estaba debastada. Después de todo, tampoco pudo declararle su amor y ya era tarde. ¡y 5.0.5.! Llorar en esos momentos era lo que hacía, porque también lo estimaba, porque su última acción fue acariciarlo por primera y última vez.

Los tres estaban debastados, pero fue Flug quien reacciono peor.

-¡él va a volver! -exclamó, poniéndose de pie con dificultad, con sus ojos llenos de lágrimas.- ¡él está bien! ¡él sigue vivo y-!

-Flug... él ha muerto... -murmuró con dolor la chica.

-¡ÉL SIGUE VIVO! -gritó desesperado y pateó con fuerzas la pantalla de la televisión, rompiendola.

Y asustando a sus creaciones.

-¡por-!

Antes de siquiera acabar, Flug tomó la rota televisión y la lanzó con todas sus fuerzas al suelo, destrozandola mucho más.

Y no se detuvo allí.

Tomó la mesa de noche, los sillones, cualquier cosa del sitio para poder arrojarla lejos de él y tratar de deshacerse de esa furia, esa ira que sentía a su persona. Por ser tan idiota y... no haber actuado a tiempo.

Pero el destino volvía a actuar.

Demencia y 5.0.5. se alejaron de él y a la puerta se acercaron, queriendo dejar la sala pero temiendo por el científico que ahora estaba loco.
Este mismo tomó una lámpara y la arrojó sobre sí, queriendo que golpeara el techo y él alejarse antes de caer, pero...

Había un objeto que recibió el fuerte impacto.

El candelabro.

Fue demasiado fuerte ese golpe que hizo perder su estabilidad y unión al techo y simplemente cayó.

Sobre el débil y ardiente cuerpo de aquel pobre enamorado.

-¡FLUG!

Continuará

* Finar. Morir, fallecer.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro