Ambos pequeños miraban los peces junto a otros tres niños mientras la mujer se mantenía hablando con las mamás de esos niños.

Ambos miraron todo con curiosidad y asombro.

—¿Le dijiste a tus papis que quieres un hermanito!— dijo un hermoso niño de nombre Sungjae, con cabello negro y piel algo pálida.

Rosé asintió con una sonrisa, Rosé había comentado aquello a sus nuevos amigos.

—Eso es muy tonto— dijo Chaeryeong mirando como un pez globo pasaba frente a ella.

—No, no lo es— dijo Rosé mirando a la niña.

—Si, si lo es— agregó el niño pelinegro de nombre Mingi.

—¿Tienen hermanos?— preguntó Jeonghan mirándolos.

—Yo si, tengo una hermanita, su nombre es Tzuyu, apenas tiene un año— Chaeryeong apunto directo a la carriola de color negro junto a las mamás— Es muy molesta— dijo haciendo una mueca.

—¿Porque?— preguntó Rosé— Parece ser linda— dijo mirando a la niña de cabello castaño.

Chaeryeong negó con una mueca.

—Llora todo el tiempo y siempre quiere mis juguetes, además que mamá solo le hace caso a ella— dijo la niña mirando a los peces.

Los demás niños solo fruncieron el ceño.

—¿Tu tienes hermanos, Mingi?— preguntó Rosé al niño de 9 años igual que ella, este asintio.

—Si— asintió— Pero son muy grandes, uno es San y tiene 18 años y las otra Sujin de 16 años— dijo el niño— También son molestos, hyung siempre pone música a todo volumen cuando quiero dormir o ver tele y mi noona siempre grita cosas raras de grupos de chicos, son extraños.

Rosé lo miró y suspiró mirando a Sungjae quien se mantenía con una mueca triste escuchando todo.

—¿Y tú tienes hermanos, Jae?— preguntó Rose tranquila al niño, este la miró y negó.

—No, no tengo hermanos, mis papis no están juntos.

—¿Porque no?— preguntó Chaeryeong a lo que recibió un codazo de Rosé, Chaeryeong solo la miró mal.

—Soy adoptado, porque mi mami no podía tener bebés, pero cuando pedí un hermanito ellos dejaron de quererse, creo que fue mi culpa pero papá y mamá dicen que no fue así— explicó Sungjae— Tiene algo bueno en eso, celebro dos veces todo, en navidad abro regalos al doble y en mi cumpleaños siempre tengo dos fiestas— dijo levantando los hombros.

Rosé abrió sus ojos al tope y miró a Jeonghan, este también la miró.

—¿Y si pasa eso con mis papis?— preguntó la niña asustada, Jeonghan negó rápidamente.

—Eso no pasará con el tío Yugyeom y Jungkook, Rosé— dijo Jeonghan tratando de tranquilizar a la niña.

—Pero...— fue interrumpida por Chaeryeong.

—Eso solo pasa cuando los papis ya no sienten cariño— dijo Chaeryeong— Sucedió con los papis de una amiga.

—Lo ves, tus papis se quieren mucho Rosie, no pasará— dijo Jeonghan.

Rosé asintió aún con preocupación.

No mentiria, la niña había creado sus propias preocupaciones, había recordado como sus papis actuaban raro desde que les dijo que quería un hermanito.

Cómo se miraban entre ellos después de que ella decía algo.

Pero quería un hermanito y no se rendiría.

—¿Pero estás segura de que quieres un hermanito?— preguntó Mingi.

—Si, estoy segura— dijo Rosé firme.

Chaeryeong hizo una mueca y negó.

—Ella quiere compartir cosas— dijo Chaeryeong.

—Mi papá Kook dijo que compartir te hace mejor persona— dijo Rosé causando que Chaeryeong soltará pequeñas risas.

—Eres extraña— dijo la pelirroja.

—Tu también lo eres— dijo mirando mal a Chaeryeong— Yo quiero un hermanito y tú qué tienes uno no lo quieres, eres extraña— dijo Rosé cruzándose de brazos.

—Pues te regalo a mi hermana— dijo Chaeryeong, Rosé frunció el ceño.

—No, es tu hermana, las hermanas no se regalan, se les quiere— dijo Rosé.

—Ya, oigan no peleen— Jeonghan las calmó, ambas niñas se miraron mal.

—Mejor vayamos a ver los pulpos— dijo Mingi para salir corriendo a donde estaban los pulpos seguido de Sungjae y Chaeryeong.

Rosé y Jeonghan fueron tranquilamente hasta allá.

—Descuida Rosie, se que tus papis decidirán adoptar a otro bebé— dijo Jeonghan mirando a Rosé, esta lo miró y asintió con una media sonrisa.

La verdad es que quería un hermanito y haría lo posible para tener uno.

Jungkook acomodaba todo en aquel patio grande donde se llevaría acabo la ceremonia, Bambam le ayudaba junto un par de empleados más.

Pero realmente estaba pensando mucho en todo lo sucedido, ya hasta se había picado dos veces con las pinzas.

—¡Cuidado!— el grito de Bambam hizo que diera un brinco y se girara a mirar como un arco estaba en el piso.

Los ayudantes lo levantaron rápido, el rubio se acercó a revisar que las flores no se hayan aplastado.

—Están muy pesadas para estar en el arco— dijo Bambam detrás de él.

Jungkook miró las flores.

—Esos arreglos van en el piso, como no van a ser pesados— dijo el rubio— Aquí solo van rosas, tulipanes, nube y listo— dijo Jungkook mirando al Bambam.

—Kook, tu decoraste el arco— dijo Bambam para el mayor.

—Lo siento, yo ando en otro mundo prácticamente— dijo Jungkook mientras se acercaba a sacar los arreglos del arco.

—¿Has peleado con Yugyeom o algo así?— preguntó el menor preocupado.

—No, no es nada de eso.

—¿Problemas con Rosé?— preguntó de nuevo el castaño a lo que Jungkook suspiró al escuchar el nombre de su hija— ¿Ella está bien?

—Si, ella está bien, solo que a Rosé le ha llegado la loca idea de tener un hermanito— dijo el rubio mientras bajaba un arreglo.

—Oh si, aún recuerdo su deseo de cumpleaños— dijo con un tono burlón.

—Si, no es todo, a Yugyeom también le ha llegado esa idea, cree que sería genial tener otro bebé— dijo Jungkook.

—Oh vaya, ¿Y que harán?— preguntó Bambam.

—No lo sé...lo hablamos un poco, yo dije que no podíamos y Yugyeom solo dijo "Piénsalo" y no he dejado de pensar en ello, me voy a volver loco— dijo mientras comenzaba a poner las flores que realmente iban sobre el arco.

—Tal vez si es buena idea— dijo Bambam mientras lo ayudaba a poner las flores— Es que creo que sería buena idea, ambos se podrían dar un buen tiempo como cuando Rosé era pequeña, ya no somos solo tu y yo en la florería, hay más empleados, además eres el jefe, puedes faltar cuando quieras o tomarte un tiempo— dijo Bambam, Jungkook no respondió solo se quedó en silencio pensando.

—También hay niños grandes, no creo que sea necesario adoptar específicamente un bebé— soltó por último Bambam antes de irse.

Jungkook continuo decorando hasta terminar y pedirle a los chicos que ya lo colocarán.

Tal vez si era buena idea, además también creía que sería bueno tener a dos niños correteando por la casa o tres si contaba a Yugyeom.

Mientras terminaba con todo se imagino a su pequeña familia de tres como una de cuatro, amo su imágen mental, pero no mentiría, tenía un pico de miedo al cambio.

Pensó mucho más e imagino.

Tal vez si era buena idea adoptar de nuevo.

Cuando los pequeños fueron dejados en casa de los Wang, se concentraron en hacer su tarea.

Utilizaron periódico, pegamento, pinceles, pintura marron y ¿Brillantina?

—No creo que sea buena idea la brillantina, Rosie— dijo Jeonghan a la niña mientras daba una pincelada de pegamento para pegar otro trozo de periódico.

Rosé lo miró y asintió rápidamente.

—Será buena idea, la pondremos dentro y cuando lo hagamos ¡Toda la brillantina saldrá como si fuera lava!— dijo empezando a pegar periódico.

Jeonghan la miró dudoso.

—Pero. ¿No llenará todo de brillantina?— preguntó, Rosé miró al pelinegro y bufó— Además no creo que se vea bien lava rosa— dijo regresando a lo suyo.

—Esa es la idea Jeonghannie, que se llene todo de brillantina— se levantó y sacó de su mochila tres bolsas de brillantina— No es rosa, es amarilla, naranja y rojo, así luce la lava según mi libro de volcanes— dijo mostrando las bolsas mientras se acercaba a Jeonghan.

Estaban en la sala de estar trabajando en su volcán tranquilamente. Todo salía bien.

Mientras Mark y Jackson hacían la comida juntos.

—Iré a ver cómo van los niños— dijo Mark pasando por detrás de su marido quien asintio mientras cortaba la verdura.

Mark salió de la cocina directo a la sala en dónde encontró a dos niños cantando la canción de Pokémon.

Sin duda eso era culpa de Jackson.

—Hola, hola. ¿Cómo van?— preguntó entrando a la sala y llamando la atención de los menores.

—Hola pa— saludo Jeonghan dándole una sonrisa a su padre.

—Hola tío Mark— saludo Rosé— El volcán ya casi está listo, esperamos que se seque y después lo pintaremos.

—Si pa, ¿Crees que sea buena idea ponerle brillantina?— preguntó Jeonghan mostrando la bolsa.

—Será para la lava, la pondremos adentro y luego saldrá junto con la mezcla— dijo Rosé.

—Parece buena idea, además de ser algo original— dijo Mark, Jeonghan levantó los hombros rendido y dejó caer la brillantina— ¡Jeonghan!— lo regañó Mark cuando la brillantina se esparció por el suelo.

—Nos quedamos sin brillantina amarilla— dijo Rosé mirando la brillantina esparcida por la mesa y piso.

—Sabía que no sería buena idea— dijo Jeonghan.

—No, si es buena idea, pero tiraste la amarilla— dijo Rosé causando que el no riera.

—Nos queda la naranja y roja— dijo Jeonghan.

Mark los miraba esperando a que terminarán su discusión para que levantarán la brillantina.

—Bien, levanten eso— dijo Mark, los niños hicieron un puchero y Mark bufó, Rosé y Jeonghan sonrieron creyendo que se habían salvado de recoger —Pueden levantarlo con la escoba, pero levantenlo— dijo Mark para darse la vuelta y volver a la cocina escuchando los quejidos de ambos menores.

La familia Wang se formaba también de tres personas, era una locura como ellos dos habían acabado juntos, realmente nadie se esperaba ver una relación con dos personas demasiado distintas, creían que terminarían en algún momento.

Pero Jackson y Mark se querían y supieron manejar su relación, hablando en situaciones de conflicto, teniendo confianza y para su segundo año juntos Jackson fue el que le propuso matrimonio a Mark, nadie lo imagino, mucho menos Mark, quien solo lloró mientras tenía a Jackson frente a él con una hermosa sonrisa.

Pronto después de su primer año de casados decidieron adoptar a un niño, aunque sus padres creían que era muy pronto, aún así lo hicieron, al principio querían un bebé pero luego Jeonghan apareció en su camino y ambos dijeron "Wang Jeonghan". Si, al principio no fue muy bueno, Jeonghan era muy borde con ellos, los miraba feo, incluso les sacaba la lengua o les gritaba, les tiraba cosas. Jeonghan estaba en negación total y les gritaba qué lo regresarán con su mamá porque no quería estar con ellos, JeongIn solo estaba dolido y aunque costo la pareja pasaba todo aquello y solo trataban de darle amor al pequeño pero este seguía rechazandolo.

Hasta que un día Jeonghan le tiró la comida a Mark gritando que lo odiaba por quitarle a su mamá y que quería regresar al orfanato, Jackson le dijo "Ya está, empaca tus cosas" el menor solo lo escucho, Mark se dedicó a levantar la comida evitando llorar, pero fallo en eso.

Jeonghan sintió miedo al pensar que regresaría a ese lugar donde no había nadie para él, ese día mientras miraba a Mark levantar la comida solo susurró un "Lo siento" y comenzó a llorar muy escandalosamente. Mark solo lo abrazó mientras el niño se aferraba a él y les pedía que no lo devolvieran, les dijo que sería bueno y mientras lloraba corrió en busca de Jackson para abrazarlo y disculparse, era un niño de 5 años muy fuerte. Al final Jeonghan amo a sus papis quienes aman mucho.

—¡Papá! ¿Dónde está la escoba?— el grito de Jeonghan se escuchó por toda la casa.

—¡Aquí en la cocina!— gritó Mark mientras se recargaba sobre la encimera a lado de Jackson.

Jeonghan entró corriendo y buscando la escoba.

—No corras Jeonghan— dijo Jackson a su hijo, el niño solo se dedico a tomar la escoba y la pala.

Cuándo la tomó salió corriendo de nuevo, Jackson bufó al verlo correr y Mark solo río.

—¿Que fue lo que pasó?

—Rosé tiró la brillantina— dijo Mark— ¿Cómo está Jungkook?

—Agobiado, con el asunto de que Rosé pide un hermanito— dijo Jackson apagando la estufa y mirando a su esposo— Además, Rosé no es la única, Yugyeom también pide otro hijo.

—Pobre, por cierto, Jinyoung dijo que regresaría a Seúl— Contó Mark.

Jinyoung era modelo y se había ido a New York a vivir por un tiempo, le iba muy bien. Habían visto como la cara de Jinyoung aparecía en pantallas en Corea y New York, realmente era muy genial.

—¿Que sucederá con su departamento y su trabajo?— preguntó Jackson.

—Dijo que su contrato terminará esta semana y que su trabajo le ofreció un mejor trato en la agencia de aquí en Seúl— dijo Mark, Jackson sonrió, Jinyoung regresaría y eso le entusiasmaba— Será bueno tenerlo de vuelta aquí.

—Lo será.

—Además, dijo que conoció a alguien y que se mudaran a un departamento juntos aquí— Jackson alzó una ceja.

—¿Jinyoung con alguien? Suena raro— dijo causando que Mark soltará una risa.

Habían escuchado varias veces a Jungkook decir que estaba mejor solo que mal acompañado.

—Lo interesante aquí es si ¿Será chico o chica?— agregó Mark.

Park Jinyoung se había declarado bisexual luego de tener un ataque de confusión al enamorarse de un chico y una chica cuando estaba en sus épocas de entrenamiento, dijo "Es imposible, son hermosos ambos" y así fue como Jinyoung paso de ser un chico heteroflexible a encontrarse como bisexual y el estaba bien con eso. Aunque sus ataques eran graciosos, Jackson y Mark regularmente se tragaban todo un cuento de "Porque el chico es tan lindo, pero también del porque la chica era tan tierna". Park Jinyoung era un caos.

—Quien sea, está bien. Si Jinyoung se siente bien, por mi genial— dijo Jackson sonriendo. Mark se acerco a dejar un beso en los algo abultados labios de su esposo.

Jackson arrugó su nariz haciendo un puchero cuando Mark se separó, pero no duró mucho porque el chino se acercó a dar besos cortos repetidas veces sobre los bellos del pelinegro haciéndolo reír.

—¡Ah no, mis ojitos!— un niño de 10 años entro por la puerta junto con la escoba y la pala en una mano mientras con la otra tapaba el costado de su cara del lado donde estaban sus padres, los cuales sólo rieron.

—No es para tanto— dijo Jackson a lo que Jeonghan bufó y dejo lo que traía en su lugar.

—Si, si lo es— dijo mientras se giraba con sus ojos cerrados.

Mark soltó una risa mirando como su hijo apretaba sus ojos con una mueca.

—Ya cariño, puedes mirar— dijo Mark, Jeonghan abrió sus ojos lentamente— ¡Mirar esto!— dijo y luego lamió la mejilla de su marido, el niño soltó un grito y tapo sus ojos.

—¡Pa, eso es asqueroso!— dijo y negó rápido con una mueca.

—Ya quiero ver cuándo andes de esta manera, te diré lo mismo— dijo Jackson burlón mientras Mark le limpiaba la mejilla, Jeonghan negó rápidamente.

—No, ugh, no niñas, no niños, no, no— dijo mientras negaba.

Mark río mientras Jackson negaba con una sonrisa. Su hijo entendía muy bien las cosas y eso los hacía sentir orgullosos,   le hacía ver qué le inculcaron bastante bien los valores a su hijo.

Jeonghan sabía bien que sus sentimientos eran lo más importante de todo y el ser feliz con quién él quisiera, también entendía que era muy pequeño para hablar de esos temas y que el momento de encontrarse aún no le llegaba, entendía que los sentimientos actuaban de forma inconsciente y si el corazón se enamoraba de quién fuera, no estaba mal.

—Anda, ve por Rosé, la comida está lista— dijo Mark, Jeonghan asintió yéndose del lugar de la misma manera en la que entró.

Mark siguió a su hijo con la mirada.

—Está creciendo bien— susurró Tuan con una sonrisa melancólica, Jackson asintió mientras lo abrazaba.

—Lo estamos haciendo bien— dijo Jackson, Mark le regresó el abrazo.

Si, ambos lo hacían bien, daban todo de si y se sentían felices.

Todo estaba bien.