💕Dos💕
—Hagamos algo que te anime, lo que sea que quieras lo haré, incluso si no me gusta— exclamó Jimin apenas entró junto a Taehyung a la habitación.
Todo el camino hacia la casa de Taehyung había sido demasiado silencioso pues Tae permanecía perdido en sus pensamientos y Jimin no sabía que decir para que dejara de estar así.
—No es necesario, en serio estoy bien— aseguró y se dejó caer de espaldas en su cama, cerró los ojos, suspiró y se tapo la cara con su antebrazo izquierdo.
—Tu cara y tu olor no dicen lo mismo, ve a bañarte— se sentó a su lado y palmeó con suavidad su pecho unas dos veces seguidas.
—No tengo ganas— contrarió y se volteo quedando boca a abajo.
—No me quieres ver enojado y lo sabes— advirtió Jimin en un tono muy serio, se puso de pie y se cruzó de brazos. A Tae no le gustaba cuando se enojaba y tenía sus razones, por eso cuando Jimin dijo eso Taehyung abrió los ojos de golpe dispuesto a aceptar lo que el Omega quisiera.
—Bien— exclamó, apoyo sus manos en la cama y se impulso hacia atrás para poder sentarse—, pero no lo hago porque te tenga miedo o algo por el estilo solo que ya me di cuenta que apesto— mintió, y aunque Jimin sabía que era así, no le dió importancia.
—No me importa, solo apúrate— lo jaló tomando sus dos brazos ayudándolo a ponerse de pie.
Taehyung sonrió por primera vez después de todo lo sucedido y Jimin se alegró por ello, Tae sacó de su ropero una camisa blanca, un chaleco de punto verde y pantalones de vestir beige con unas sandalias gruesas marrones y se adentró en el baño, dejó su ropa en un pequeño asiento de madera sin reposabrazos ni respaldo que se encontraba cerca al lavador, abrió la llave del agua y espero a que la bañera se llenará mientras buscaba en su celular que lista de música deseaba reproducir.
Mientras el alfa se daba un baño un lindo Omega en la casa de al lado se asomaba por el balcón de forma tímida y tratando de parecer desinteresado en busca de alguien que no encontraba.
—¿Y Taehyung?— preguntó más para si mismo y algo desanimado. Después de lo sucedido en la cafetería solo quería ver como estaba Taehyung, pero por más que buscaba no lo encontraba.
—¿Qué hace él allí?— exclamó molestó al notar que Jimin se encontraba sentado en la cama del alfa, se cruzó de brazos, frunció su ceño e hizo un pequeño puchero, sus ojos chispearon en un intenso azul y cuando se dio cuenta de aquello negó con la cabeza, calmó a su lobo y también a sí mismo.
—Tranquilo Jungkook, es su amigo y Tae no es nada tuyo, así que no tiene sentido que te moleste— se dijo a sí mismo en voz alta al mismo tiempo en que caminaba de una esquina a otra en el balcón.
Te gusta, solo admítelo y todo será mejor.
—Tú cállate— intentó callar a su lobo, pero de nada sirvió.
Amargado
Jungkook puso los ojos en blanco y suspiró, estaba hartó de su lobo y toda la situación en la que se encontraba. Quería ignorarlos por completo, pero aunque lo intentó con toda su fuerza de voluntad, no pudo evitar observar lo que ellos hacían. Sí, "ellos" porque Taehyung había salido del baño y ahora se encontraba frente a Jimin quien estaba acostado en la cama y veía y hablaba con el alfa desde allí.
—Ven aquí— Jimin hizo una seña con su mano para que se acercará a él, pero Tae negó con la cabeza— tengo que olerte y no tengo ganas de pararme porque tu cama es demasiado cómoda— exclamó mientras movía sus brazos de arriba a abajo sin despegarse de la cama, Taehyung rio y obedeció.
Tae colocó sus dos manos a los costados de la cabeza de Jimin y acercó su cuello a la nariz del Omega, Jimin olfateó y sonrió satisfecho al ver que ya casi no se sentía el olor a tristeza de hace momentos antes y no solo gracias al baño sino también por la presencia y alegría que Jimin le transmitía.
—Ahora hueles mejor, mantente así por un día aunque sea— palmeó su hombro varias veces— ¿Te parece si hacemos karaoke o algo así? Eso siempre te anima— propuso emocionado
—No lo sé— se encogió de hombros dubitativo.
Rompiste tu lápiz
No se había dado cuenta de ello hasta que su lobo se lo dijo, Jungkook había estado viéndolos y su enojo había aumentado al notar que estaban demasiado cerca y que además Jimin había olfateado el cuello del alfa, no fue consciente de en qué momento se había movido para agarrar un lápiz de su escritorio ni como fue que logró romperlo.
—Compraré otro— tiró el lápiz en el piso y frustrado apoyó sus manos en el barandal.
Creí que solo yo estaba celoso, veo que no soy el único así que vayamos, no quiero que esté cerca de ese Omega
—No— negó con la cabeza y suspiró mientras miraba las estrellas en el cielo, ya se había hecho de noche y no se había percatado hasta ese momento.
¿Por qué no?
—Porque Tae y yo no somos ni seremos nunca nada— aseguró.
Es nuestro destinado
—Me mudaré en cualquier momento y lo sabes— le recordó con tristeza en su voz.
Aún si así fuera ¿Que parte de destinados no entiendes? Sea como fuere el destino hará que nos reencontremos
Jungkook pensaba que aún así si comenzaba algo serio con Taehyung lo amaría más y sufriría mucho por estar lejos y tener que esperar el momento en que se llegaran a encontrar de nuevo, si es que eso sucedía, claro está. Además, era consciente de que no todos los destinados terminaban estando juntos.
—Puse mi canción favorita, canta y baila conmigo o te haré cosquillas— escucho a Jimin hablar y volvió a concentrarse en lo que estaban haciendo.
Taehyung y Jimin ahora estaban sentados uno al lado del otro en la cama mientras que en el televisor frente a ambos se podía ver qué habían puesto una canción en versión karaoke.
—De verdad no tengo ganas— expresó Taehyung dejándose caer cuando Jimin se levantó e hizo el intento de ponerlo de pie al jalarlo del brazo.
—Bien, que conste que te advertí— lo señaló con el dedo índice y una sonrisa maliciosa plasmada en su rostro, se colocó a horcajadas no sentándose del todo y movió sin parar sus dedos en los costados de su amigo.
—¿Que haces? No, detente— exclamó entrecortado por la risa que no podía aguantar.
—¿Vas a cantar?— cuestionó mientras le sujetaba los brazos sobre la cabeza al alfa. Taehyung solo negó con la cabeza como respuesta.
—Entonces no me detendré— Jimin estuvo a punto de seguir con lo que estaba haciendo hasta que Taehyung agarró las muñecas de sus manos.
—Esta bien— exclamó con algo de dificultad debido a la falta de aire por reírse tanto— está bien, tú ganas.
—Como siempre— dijo y se acomodó el cabello con chulería—Ten— el Omega le entregó el control remoto con la intención de que fingiera que era un micrófono y buscó el peine de Tae para hacer lo mismo.
Jungkook supo de que canción se trataba cuando Jimin pulsó el play en el control remoto y "Spring Day" se reprodujo en la televisión.
Bogo shipda
ireoke malhanikka deo bogo shipda
neohi sajineul bogo isseodo
bogo shipda
neomu yasokhan shigan
naneun uriga mibda
ijen eolgul han beon boneun geotto himdeureojin uriga
yeogin ontong gyeoul ppuniya
palworedo gyeouri wa
maeumeun shiganeul dallyeogane
hollo nameun seolgukyeolcha
ni son jabgo
Jimin comenzó a cantar y se puso de pie animando a Taehyung para que hiciera lo mismo y cantara la parte que continuaba.
jigu bandaepyeonkkaji ga
gyeoureul kkeutnaegopa
geuriumdeuri eolmana
nuncheoreom naeryeoya
geu bomnari olkka
Friend
heogongeul tteodoneun
jageun meonjicheoreom
jageun meonjicheoreom
nallineun nuni naramyeon
jogeum deo ppalli nege
daheul su isseul tende
Taehyung cantó aquella parte ahora ya estando de pie al lado de su mejor amigo, quien lo tomaba de la mano con la intención de que cantara más alegremente.
nunkkochi tteoreojyeoyo
tto jogeumsshik meoreojyeoyo
bogo shipda (bogo shipda)
bogo shipda (bogo shipda)
eolmana gidaryeoya
tto myeot bameul deo saewoya
neol boge doelkka (neol boge doelkka)
mannage doelkka (mannage doelkka)
chuun gyeoul kkeuteul jina
dashi bomnari ol ttaekkaji
kkot piul ttaekkaji
geugose jom deo
meomulleojwo
meomulleojwo
Jimin cantaba mientras Tae le hacía los coros, ambos se encontraban cantando animadamente mientras alzaban los brazos y los movían de un lado a otro al ritmo de la canción.
niga byeonhan geonji
(niga byeonhan geonji)
animyeon naega byeonhan geonji
(naega byeonhan geonji)
i sungan heureuneun shiganjocha miwo
uriga byeonhan geoji mwo
moduga geureon geoji mwo
geurae mibda niga
neon tteonatjiman
dan harudo neoreul ijeun jeogi eopseotji nan
soljikhi bogo shipeunde
iman neoreul jiulge
geuge neol wonmanghagibodan deol apeunikka
Esta vez Taehyung rapeaba y Jimin le hacía los coros, movían sus manos hacia adelante y con estilo.
shirin neol bureonae bonda
yeongicheoreom hayan yeongicheoreom
malloneun jiunda haedo
sashil nan ajik neol bonaeji mothaneunde
nunkkochi tteoreojyeoyo
tto jogeumsshik meoreojyeoyo
bogo shipda (bogo shipda)
bogo shipda (bogo shipda)
eolmana gidaryeoya
tto myeot bameul deo saewoya
neol boge doelkka (neol boge doelkka)
mannage doelkka (mannage doelkka)
You know it all
You're my best friend
achimeun dashi ol geoya
eotteon eodumdo
eotteon gyejeoldo
yeongweonhal sun eopseunikka
Jungkook sentía celos al verlos tan juntos y felices, pero al mismo tiempo se sentía mal por sentirse así pues no tenía derecho a nada ni podía reclamar nada, Taehyung no era nada suyo y si él decidía estar con Jimin tenía que aceptarlo, pronto se iría así que lo mejor era olvidar todo el asunto o al menos eso era lo que pensaba y quería intentar, mas no era tan fácil teniendo en cuenta que no podía dejar de verlos.
beotkkochi pinabwayo
i gyeouldo kkeuchi nayo
bogo shipda (bogo shipda)
bogo shipda (bogo shipda)
jogeumman gidarimyeon (gidarimyeon)
myeochil bamman deo saeumyeon
mannareo galge (mannareo galge)
derireo galge (derireo galge)
chuun gyeoul kkeuteul jina
dashi bomnari ol ttaekkaji
kkot piul ttaekkaji
geugose jom deo
meomulleojwo
meomulleojwo
Taehyung y Jimin cantaron juntos toda la últimas parte de la canción y al terminar saltaron tomados de las manos emocionados porque habían cantado estupendo y habían pasado un buen rato dejando atrás los malos sentimientos.
—Estuvo genial— aplaudió y saltó hacia su mejor amigo enredando su brazos alrededor del cuello del contrario, en aquel abrazo vio a lo lejos un lindo Omega de cabellos negros con las puntas pintadas de azul, reconoció al instante de quién se trataba. Jungkook los estaba viendo sin ningún disimulo y Jimin no pudo evitar pensar que quizá el pequeño Omega estaba celoso.
—Sí— Taehyung estuvo de acuerdo con lo dicho por el Omega, quien no dejaba de ver el balcón del querido vecino del alfa.
—Qué curioso— susurró esbozando una pequeña sonrisa.
—¿Qué cosa?— Tae preguntó y estuvo a punto de voltear a ver a dónde Jimin dirigía la mirada hasta que el Omega tomó su rostro entre sus manos evitando que eso suceda.
—Quédate quieto— le ordenó y Taehyung lo vio con el ceño fruncido, se sentía confundido por el repentino cambio de actitud de su amigo.
—¿Por qué?— preguntó para quitarse las dudas, pero de repente entró en pánico cuando vio a su amigo cerrar los ojos, ladear la cabeza y acercarse de forma muy pero muy lenta— ¿Qué haces?
—No te muevas— abrió los ojos para mirarlo en forma de advertencia y luego volvió a cerrarlos.
—Sabes que no me gustas de esa forma— lo dijo de la manera más calmada posible y lo tomó de la cintura con la intención de alejarlo hasta que lo escucho hablar de nuevo.
—Ni tú a mí, ahora cállate— exclamó en voz baja y no pudo evitar reír cuando escucho un carraspeo de quien llevaba tiempo viéndolos desde su balcón.
—Si van a hacer esas cosas deberían cerrar la cortina y de paso bájenle a la música porque no me dejan estudiar— gritó pues estaba seguro de que quizá por la distancia y la música que se había comenzado a reproducir sola desde hace rato no serían del todo capaz de escucharlo con claridad.
Jimin se acercó al balcón y Taehyung lo siguió con miedo a que Jimin dijera o hiciera algo que empeorara la situación en la que de por sí ya se encontraban él y Jungkook.
—¿Por qué debería hacerte caso?— cuestionó de brazos cruzados.
—No te cuesta nada, idiota— exclamó en voz baja.
—Ven aquí y dímelo en la cara cobarde— le gritó Jimin molesto por la actitud del Omega, no entendía porqué estaba celoso ni le gustaba el hecho de que sentía que Jungkook estaba jugando con los sentimientos de su mejor amigo de esa forma. ¿Por qué si no quería nada con él y lo rechazaba todo el tiempo estaba celándolo ahora?
—Si quieres te lo grito desde aquí— dijo desafiante.
—Quiero ver que te atrevas.
Taehyung se puso frente a Jimin dándole la espalda para que la situación entre ambos se detuviera y también para dirigirse a Jungkook.
—Suficiente, haremos lo que quieres— le dijo de forma dura y con un tono más grave de lo habitual, no le gustaba verlos pelear porque aunque Jungkook no sintiera lo mismo para Tae él era especial al igual que Jimin.
—Taehyung— Jimin lo tomó del hombro y lo volteó hacia sí, estuvo cerca de reclamarle y seguir en lo que estaba, pero con una sola mirada de parte de su amigo se contuvo.
—Entra— le ordenó.
—Bien— Jimin obedeció con evidente fastidio.
—Adiós Jungkook— dijo sin voltear a verlo, entró junto a Jimin, cerró la puerta corrediza y la cortina; por lo tanto, Jungkook no podía ver más de lo que sucedía, también le bajó un poco de volumen al televisor.
—¿Jungkook?— se preguntó a sí mismo, nunca le decía de esa forma no solo se sentía raro sino que tampoco le gustaba.
Tú le pedías una y otra vez que no te llamara por apodos ¿Qué esperaba?
—Tienes razón esto es mi culpa, lo perdí y todo es solo mi culpa— entró en su habitación cerró la puerta corrediza y también la cortina y se dejó caer boca arriba sobre su cama.
Jungkook suspiró, por primera vez lograba aceptar que su lobo tenía razón, que quizá siempre la tuvo, que tal vez debió haberle hecho caso y que ya era muy tarde.
Sí
—Gracias por lo ánimos— contestó a la afirmación de su lobo a todo lo que estaba pensando y es que solo lo estaba haciendo sentir peor de lo que ya se sentía.
Oye, solo estoy siendo sincero, no me culpes por algo que tú provocaste.
—Te odio— bufó frustrado y pataleó provocando que las sábanas de su cama terminarán completamente desordenadas.
Mientras tanto, en la habitación del alfa Jimin y él se encontraban sentados en la cama frente a frente, ninguno había dicho nada por varios minutos y lo único que se escuchaba era la música en bajo volumen que seguía reproduciéndose.
—Idiotas enamorados tenían que ser— dijo Jimin después de dar un largo suspiro lleno de incomodidad por el silencio entre ambos— bueno igual no sé porqué me quejo si soy igual cuando me enamoró— se encogió de hombros, después de analizar la situación llegó a la conclusión de que aunque Jungkook lo haya rechazado docenas de veces estaba enamorado de Tae y celoso de ellos porque probablemente pensaba que tenían algo más que una amistad cuando claramente no es ni sería así, lo único que no lograba entender del todo era el porqué si le gustaba no aceptaba ser pareja de su mejor amigo.
—¿De qué hablas?— preguntó Taehyung al no entender lo que de pronto su querido amigo le había dicho.
—De que ese Omega— señaló hacia la cortina que cubría la puerta corrediza haciéndole entender que de quién estaba hablando era de su vecino— hace un rato prácticamente te hizo una escenita de celos y tú ni cuenta te diste— movió sus manos para señalar su cabeza con ambas y luego dejarlas mientras se ponía de pie.
—No, solo no quiere que lo interrumpamos, es muy aplicado ¿Sabes?— también se puso de pie.
—Aplicado mi trasero, él no estaba estudiando ni nada, no estaba haciendo nada mas que vernos hasta que se dio cuenta de que estábamos juntos en tu habitación.
—Me ha rechazado miles de veces ¿En serio crees que siente algo por mí? ¿Quién rechaza a alguien que le gusta?— respondió, ya se había dado por vencido y estaba aceptando lo sucedido, no quería ilusionarse de nuevo.
—Mmm déjame pensarlo— acarició su barbilla y fingió pensar— Ah sí, Ese idiota— contestó volviendo a señalar el lugar de antes.
—No le digas así— lo regañó.
—Sí sí, ya sé. Él no es así— trató de imitar la voz de Tae, pero no le salió muy bien—. Como sea, habla con él— le restó importancia al asunto—, pregúntale porque te rechaza y si no te da ninguna razón ahora sí puedes darte por vencido oficialmente— le aconsejó. Aunque Jungkook sintiera lo mismo por Taehyung si no le aclaraba el porqué lo sigue rechazando no tendría sentido que estuvieran juntos.
—No lo sé— dudó Tae, ya había hecho su último intento y no había recibido respuesta ¿Por qué debería intentarlo otra vez? Jimin le habías dicho que era inútil seguir ¿Por qué de pronto había cambiado de opinión?
—Puedes seguir mi consejo o no, eso dependerá solo de ti— Jimin se encogió de hombros, tomó su mano y lo sentó en su cama para después sentarse junto a él— veamos una película— sugirió.
—Mientras no sea de terror está bien.
—Bien, pero primero hay que hacer palomitas, tengo hambre— se levantó y salió de la habitación, Taehyung lo siguió y juntos bajaron las escaleras y se dirigieron a la cocina cuando de repente el sonido de las llaves los alertó.
El papá de Tae había llegado y ellos salieron a recibirlo, le entregó su maletín a su hijo y el saco a Jimin quien lo colocó en el perchero que estaba pegado en la pared. El señor Kim se quitó sus zapatos y los colocó en la entrada para cambiarlos por unas cómodas pantuflas blancas.
—Hola chicos, ¿Cómo están?
—Bien— respondieron al unísono.
—¿Y tú hermano?— pregunto al no verlo por ningún lado.
—Jugando videojuegos en su habitación— señaló el segundo piso.
—Llámalo para que cenemos los cuatro juntos— pidió amablemente.
—Jimin y yo íbamos a ver una película— objetó.
—Podemos verla aquí todos juntos— propuso su papá mientras se dirigía a la cocina para preparar la cena, tanto Tae como Jimin sonrieron ante la idea.
—Eso sería genial— opinó Jimin.
Taehyung asintió, movió el televisor para que se pudiera ver desde el comedor y abrió la plataforma de Netflix, Jimin y él buscaron entre todas las películas en los diferentes géneros que había y terminaron optando por una de comedia. Taehyung decidió llamar a su hermano antes de ponerle play.
—Yeonjunie— gritó Tae.
Yeonjun por estar con los audífonos puestos no escucho a la primera sino a la segunda vez que lo llamaron por su apodo, se quitó los audífonos, puso en pausa el juego, dejó el mando en la cama, salió de su habitación y se asomó por el balcón desde donde podía ver toda la sala.
—¿Qué pasó?
—Es hora de la cena— exclamó e hizo una seña con la mano para que se diera prisa.
—Ya bajo— regresó a su habitación para apagar la luz y cuando volvió a salir bajo rápido las escaleras y corrió hasta el comedor. Tenía mucha hambre, eso era innegable.
Se sentó al lado de su hermano mayor y frente a Jimin, los tres esperaron pacientemente a que la comida estuviera lista, el señor Kim colocó un plato hondo lleno de sopa de algas y otro igual pero con arroz frente a cada uno de ellos y para sí mismo también. Puso una jarra de té en el centro de la mesa y les sirvió en una taza a cada uno, todos agradecieron y Tae finalmente le dio play a la película.
Pasaron el rato entre risas, comentarios hilarantes sobre la película y conversaron de temas triviales mientras comían muy a gusto la deliciosa cena.
En cambio, en la casa de al lado, un Omega se encontraba llorando en su habitación. Si tan solo Taehyung supiera de ello, dejaría de lado el pensar que Jungkook quiere su espacio y correría hasta él para envolverlo en sus brazos y haría que sus feromonas lo calmaran, pero Tae no estaba ahí ni lo estaría. Cuando escucho pequeños golpes en la puerta de su habitación, sollozó por última vez y limpió sus lágrimas lo más rápido que pudo.
—¿Jungkook? ¿Cariño, te encuentras bien? ¿Qué pasó?— su madre le habló desde el otro lado de la puerta. Había llegado hace unos minutos y apenas estuvo en el segundo piso las feromonas llenas de tristeza de su hijo le hicieron saber que él no se encontraba del todo bien.
—No, por favor déjame solo— pidió con la voz quebrada.
—Cariño, ábreme ¿Sí?— suplicó preocupada. Jungkook sopesó la situación y al final decidió levantarse y abrirle, segundos después de hacerlo volvió rápidamente a su cama se cubrió con su manta y le dió la espalda a su madre.
La señora Jeon entró a la habitación, suspiró y caminó hasta estar sentada en la cama al lado del Omega.
—¿Qué tienes?— preguntó mientras acariciaba la espalda de Jungkook quien respondía a los mimos de su madre esbozando una pequeña sonrisa, las feromonas de su madre calmaron su respiración un poco y las lágrimas en su rostro se secaron. Le rompía el corazón ver a su hijo en ese estado, así que el haber logrado que su hijo dejara de llorar le alegraba, pero ahora quería saber el porqué estaba así y qué podía hacer para cambiar la situación.
—Yo creo que estoy enamorado— admitió. No podía seguir negando lo evidente.
—Pero eso no es malo— le dijo y lo vio voltear en su lugar y cruzar los brazos.
—Claro que lo es— exclamó —él ahora parece estar muy pegado a un Omega y ya no me trata con cariño como antes, no debí rechazarlo.
—Ya no entiendo ¿Cómo es que lo rechazaste si estás enamorado de él?
—Él es mi alfa destinado y estuvo todo el tiempo intentando que yo le diera una oportunidad de conocerlo, ser su amigo y después su Omega, pero yo lo estuve rechazando, supongo que se cansó de intentar algo y ahora ese Omega anda con él en su habitación y parece que le gusta mucho y eso me duele— dijo para al final taparse la cara con la almohada que tenía a su costado.
—Sigo sin entender ¿Por qué lo rechazaste?
Jungkook suspiró, acomodó de nuevo la almohada en el respaldo de la cama, se quitó su manta de encima y se sentó con las piernas cruzadas.
—Porque odio las despedidas, porque sé que nos iremos y tendré que despedirme de él, no quería enamorarme porque sabía que me dolería, pero no pude evitarlo y ahora me duele su rechazo y me duele aún más saber que pronto lo dejaré de ver— habló en voz baja y cabizbajo.
—Pero no lo harás— aseguró con el ceño fruncido, no recordaba algún momento en el que le haya dicho que se volverían a mudar por lo que no le encontraba sentido que pensara eso.
—¿Qué acabas de decir?— preguntó sin poder creer del todo lo que había escuchado.
—No nos volveremos a mudar, lo decidimos hace unos días con tu papá, de hecho hoy iba a darte la noticia.
—¿Por qué? ¿Perdieron el trabajo? ¿Pasó algo malo?
—Nos dimos cuenta de que esto te estaba haciendo mal— le contestó mientras le acariciaba suavemente el hombro— todo el tiempo estábamos en busca de un trabajo que nos pagará cada vez mejor para poder darte todo lo que querías, pero al final nos dimos cuenta de que te estábamos alejando y generando miedos que no deberías tener— se lamentó y Jungkook limpió las lágrimas que recorrieron sus mejillas— por eso contactamos a Jin para que te hiciera compañía y le dijimos a nuestro jefe que ya no queríamos que nos trasladara a alguna otra ciudad aún si nos pagaba más por eso, al final él estuvo bien con eso y ya— explicó.
—Habla con él aunque sea para que le expliques el porque lo rechazaste— le aconsejó.
—¿Crees que crea que fui un tonto por lo que hice?
—Seguro lo comprenderá— le dijo mientras le daba un fuerte abrazo.
—Aun así creo que ya lo perdí, es muy tarde— opinó y no podía estar más equivocado.
—No creo, capaz malentendiste la situación de él con el omega— habló tras separarse del abrazo.
—Casi lo besa— le contó con un puchero en los labios.
—Habla con él solo así solucionarás el problema— sugirió y Jungkook sabía que tenía razón porque solo así se quitaría toda las dudas que tenía.
—Gracias mamá, eres la mejor— le dio un beso en la mejilla y le sonrió.
—Bien, baja porque ya es hora de cenar— Desordenó su cabello y salió de la habitación, bajó las escaleras y se encontró con su esposo en la sala de estar, le dijo que todo estaba bien y minutos después Jungkook había bajado para cenar los tres juntos.
Al día siguiente, por la tarde Jungkook se dirigió a la universidad lo más rápido posible con la esperanza de encontrarse con Taehyung y poder hablar con él, cosa que al final no sucedió. Por suerte compartían las dos primeras horas de su primera clase del día, por lo que al finalizar esta esperaba poder hacerlo.
Sentía como si el tiempo fuera más lento de lo que debía, casi no prestó atención a la clase por lo que cuando el profesor se daba cuenta de ello lo regañaba, pero la verdad a él le importaba poco, de vez en cuando y sin darse cuenta hacía muecas al ver a Jimin jugar con Taehyung cuando el profesor les daba la espalda a todos, finalmente la clase terminó, el profesor se despidió de todos los alumnos y se dirigió a su siguiente clase mientras que todos guardaban sus cosas en sus respectivas mochilas y salían del aula para dirigirse a otra clase o al patio a descansar porque les tocaba receso.
Al ver que Taehyung salía junto a Jimin se apresuró y lo siguió, pero sin querer y a causa del pequeño empujón accidental de un alumno terminó chocando con Tae y un poco del agua de la botella que este traía en sus manos termino cayendo en su camiseta mojando una parte considerable de ella.
—Lo siento Jungkook, no fue mi intención— exclamó Tae al notar lo que había sucedido creyendo que había sido culpa de su torpeza.
—No hay problema es solo agua— le resto importancia al asunto y preguntó— ¿Podemos hablar?
Taehyung miró a Jimin por unos breves segundos quien alzó las manos y se encogió de hombros como su forma de decirle "A mí no me metas, no sé que excusa podrías darle" Taehyung suspiró tras entenderle y terminó diciendo lo primero que se le ocurrió.
—Ahora no, estoy ocupado porque tengo otra clase— mintió, Jimin sí tenía otra clase él no tenia nada que hacer, pero fingió que sí y se fue de allí con su mejor amigo.
Jungkook se cruzó de brazos, no le creía nada de lo que había dicho, pero entendía el porqué de su actitud. El omega se quedó viendo a lo lejos como Taehyung bajaba por las escaleras junto a Jimin para llevarlo a su aula por ende creyó haberlo perdido de vista hasta que minutos después, desde el balcón lo divisó en el patio delantero. El alfa se acostó en el césped y usó su mochila como almohada mientras que con su antebrazo cubrió sus ojos debido a lo molesto que le resultaba la intensidad de los rayos de sol. Se veía hermoso incluso cuando no hacía nada justo como en ese momento.
—Jungkook— Jin llamó su atención al tocarle el hombro y decir su nombre, el omega volteó a verlo y esbozó una débil sonrisa.
—Hola Jin— balbuceó y un pequeño puchero se plasmó en su rostro de repente.
—¿Qué tienes? ¿Por qué esa cara larga?— preguntó mientras que con ambos dedos índices intentaba, sin mucho éxito, alzar las comisuras de sus labios para formar esa dulce sonrisa de conejito que caracterizaba al menor.
—Tenías razón, me gusta Taehyung, pero ahora él me evita porque lo rechacé muchas veces y seguro se cansó de intentar algo conmigo lo cual entiendo mas no evita que me sienta mal— le comentó.
—Ay Jungkookie— lo abrazó mientras que con la intención de hacer que se sienta mejor liberó sus feromonas con una combinación exquisita de café y eucalipto que llamó mucho la atención de un alfa que se topó con aquella tierna escena.
De repente Jin recordó que el día anterior una carta había caído del casillero del omega, una que tenía escrito "Taehyung" en el sobre, no se atrevió a abrirla y leerla porque no le correspondía a él hacerlo, tenía que entregársela a su dueño solo esperaba que fuera algo bueno que lograra animarlo.
—Cierto, olvidé entregarte esto— sacó el sobre de su mochila y se lo entregó, Jungkook lo recibió con algo de curiosidad y sorpresa.
—¿Para mí? ¿En serio?— preguntó mientras analizaba el objeto en sus manos y buscaba el nombre de quien se la había mandado.
—Sí, se cayó de tu casillero ayer antes de irte— le respondió. Jungkook sonrió al saber de quien era, abrió el sobre de inmediato y comenzó a leer el contenido de la carta.
°°°
Hola Jungkookie (^^)
Sé que no te gusta que te diga así, por lo que te prometo que está será la última vez. La verdad es que no soy bueno para este tipo de cosas, ni siquiera sé si te guste el hecho de que te haya escrito una carta, tampoco te gustaron ni uno de mis otros detalles, aunque quise creer que no era así y que en realidad me había confundido y lo que te daba no eran cosas que te gustaban, supongo que debo aceptar que no es eso sino que de verdad no te gusta que te regale cosas o te llamé por algún apodo. En fin, solo quería decirte que esto será lo último que te daré si así lo decides después de que termine de decir lo que tengo que decir.
Jungkookie, me gustas mucho más de lo que podrías imaginar. Quería que comenzáramos de poco a poco, deseaba conocerte del todo y tener tu amistad, que pudieras ver en mí a un confidente, una persona en la que puedas apoyarte si lo necesitabas, alguien que con una sonrisa te contagiara su alegría y que te acompañara en tus penas, quería enamorarte con pequeños y lindos detalles, deseaba con todo mi corazón que me aceptaras como parte de tu vida, de hecho aún quiero todo eso y más, lo que no sé ni comprendo es si tu quieres y sientes lo mismo ni si te diste cuenta del pequeño detalle que la luna tuvo con nosotros al juntarnos en esta vida y las siguientes.
Soy consciente de que hay muchas parejas destinadas que se rechazan mutuamente o solo uno de los dos y deciden continuar con sus vidas al lado de otros debido a que se dieron cuenta de que no sienten nada por sus destinados y que todo es solo su parte animal, no sé si tú lo sientas así, pero si es de esa forma créeme que lo comprenderé. Sea esa u otra la razón para no querer ser ni mi amigo si es ese el caso, la aceptaré.
Te dejo mi número para que te contactes conmigo, te daré el espacio que necesitas en el caso de que no quieras ni siquiera ser mi amigo.
Con cariño de Taehyung <3
°°°
—Me dio su número para que le escribiera o llamara y le dijera si le daría una oportunidad— fue lo primero que el omega dijo al terminar de leer la carta.
—¿En serio? Entonces como no respondiste seguro pensó que no querías nada con él y te está dando tu espacio— dedujo el alfa.
Jungkook sabía que Jin tenía razón, Taehyung estuvo esperando una respuesta que nunca llegó por lo que supuso que eso contaba como un rechazo de parte del omega. No quería regañar a Jin y decirle que debió entregarle la carta antes pues se había olvidado y lo comprendía, además nada de lo que había sucedido hasta el momento su culpa. Jungkook era consciente de que era él quien debía solucionar todo y ser sincero.
—Yo no quiero que me dé espacio, quiero estar con él— afirmó decidido.
—Pues ve y díselo aun si te ignora debes hacerle frente, has que te escuche— le aconsejó y Jungkook asintió, estaba completamente de acuerdo con el alfa.
Jin se despidió puesto que se hacia tarde para su siguiente clase, pero le deseo suerte antes de irse. Jungkook regresó su mirada al patio delantero y notó que Taehyung ya no se encontraba donde momentos antes había estado descansado, pero trató de pensar en positivo pues no podía estar tan lejos ni haberse ido ya que lo más seguro era que aún tenía otra clase después porque sino se hubiera ido en el momento en que termino la clase anterior.
Bajó las escaleras hasta llegar al primer piso y caminó por los pasillos revisando ocasionalmente aquellas aulas que se encontraban con la puerta abierta para verificar que no estuviera en clase, fue a la cafetería y buscó entre las personas que compraban algo de comer y los que se encontraban sentados charlando mientras comían y no lo encontró, continuó su camino hasta que su mirada se topó con una máquina expendedora siendo golpeada por un alfa enojado porque el chocolate que había decidido comprar se había quedado atorado.
—Taehyung ¿Podemos hablar?— lo tomó del antebrazo por sorpresa, lo cual hizo que se sobresaltara. El alfa de inmediato se soltó, volvió a su postura anterior y dio un último golpe con el pie a la máquina logrando finalmente que el paquete cayera, lo sacó y abrió la envoltura para tomar un bocado.
—No tengo tiempo ahora— habló luego de tragar el pequeño trozo de chocolate e intentó irse de allí, pero cuando estuvo cerca de hacerlo Jungkook rápidamente lo tomó por los hombros para continuar hablando con él.
—¿Ah sí? ¿Qué tienes que hacer que es tan urgente?— cuestionó en un tono desafiante, con los brazos cruzados y el ceño fruncido.
—Sí, pero es un asunto que no te concierne, adiós— exclamó y le dio la espalda.
—No.
Apenas vio que el alfa comenzó a caminar en dirección contraria, Jungkook tomó su mano y lo llevó hasta el cuarto del conserje.
—¿Qué haces?— preguntó al ver que Jungkook cerró la puerta tras de sí.
—De verdad necesito hablar contigo— le suplicó.
—Hablamos mañana, ahora no— pidió y es que la verdad él ya se imaginaba lo que vendría continuación y no quería escuchar las palabras de rechazo del omega, era mejor si tan solo hubiese contestado la carta con otra o le hubiese mandando un mensaje o llamado porque al menos Jungkook no lo habría visto triste y débil como sucedería si le decía allí mismo estando cara a cara.
—¿Por qué? ¿Irás a ver a tu Omega?— cuestionó entre celoso y molesto, sabía que en realidad Tae no quería hablar con él y le dolía imaginar que lo perdería porque lo olvidaría y comenzaría a salir con el omega con el que siempre está.
—¿Con quién?— preguntó claramente confundido, él no tenía pareja así que no entendía a quien se refería.
—Con el chico con el que estuviste ayer haciendo yo que sé en tu habitación cuando cerraron la cortina— puso los ojos en blanco y evitó verlo a los ojos.
—¿Jimin?
—Sí, como sea que se llame.
—Es mi mejor amigo y al final bajamos a comer y vimos una película solamente— respondió. No pudo evitar aclararle las cosas, debido a que su lobo se encontraba inquieto al notar el malestar del omega.
—¿En serio?— su tono de voz cambio a uno más animado y su mirada se iluminó, aquello hizo que el corazón de Taehyung se sintiera cálido; sin embargo, su repentino cambio lo hizo sentir confundido.
—Sí y de todos modos no sé porqué me preguntas si en realidad no te importa— replicó e intentó abrir la puerta para irse, pero se detuvo al escuchar a Jungkook hablar.
—Sí me importa— exclamó.
—¿Por qué?— preguntó Tae aún viendo hacia la puerta, dudaba si debería irse o no.
—Es lo que trato de decirte— Jungkook entrelaza su mano con la de Tae y él voltea lentamente algo desconcertado, se miran fijamente por varios segundos y Jungkook sonríe ampliamente— también me gustas Tae— admite.
—¿Te gusto? Pero todo este tiempo me haz rechazado.
—Lo sé y lo siento muchísimo, no tienes idea de cuánto— se lamenta cabizbajo.
—¿Por qué lo hiciste?— Taehyung pone su dedo índice en la barbilla del Omega y alza con delicadeza su cabeza para que le responda mirándolo a los ojos.
—Porque toda mi vida me la he vivido viajando, he cambiado de escuela muchas veces y me estaba pasando lo mismo con la universidad hasta que ayer en la noche mi mamá me dijo que ya no sería así porque nos quedaríamos aquí. Tenía miedo de que intentaramos algo y que al final no funcionara porque tendría que mudarme de nuevo, no me gustan las despedidas y no me imagino una relación a distancia.
—Lo entiendo— acarició las puntas del cabello, teñidas de azul, de Jungkook.
—¿Serías capaz de perdonarme?
—Claro que sí, entiendo tus miedos y te prometo que poco a poco haré que todos desaparezcan— acunó el rostro del Omega entre sus manos y dejó un corto beso en su nariz.
—¿No me odias por lo que hice?
—Jamás podría odiarte— negó con la cabeza, aunque lo intentara un millón de veces jamás podría—, solo creí que lo mejor sería darme por vencido y tomar distancia por el bien de los dos, además por un momento pensé que querías hablar conmigo para rechazarme— se encogió de hombros.
—El que llegaras a esa conclusión también fue mi culpa— balbuceo, pero al estar en un silencio que pocas veces era interrumpido por el ruido exterior, Taehyung logró escucharlo.
—No te preocupes, lo importante ahora es que sabemos que nuestros sentimientos son correspondidos— lo abrazó fuertemente y dejó que sus feromonas con aroma a chocolate, ylang ylang y menta reemplazaran las de eucalipto y café que había notado que el Omega llevaba sobre sí mismo desde que se topó con él, y Jungkook hizo lo mismo con Taehyung por lo que ahora ambos tenían la mezcla de sus feromonas sobre sus cuerpos.
—Tienes razón— contestó luego de separarse del abrazo.
—Un momento ¿Qué es contigo el chico nuevo?— preguntó para quitarse la duda de encima.
—Es mi mejor amigo de la infancia, no lo veía desde hace muchísimo tiempo, sé que los rumores dicen que supuestamente es mi alfa y todo eso, pero no es cierto, jamás nos veríamos como algo más a mí me gustas tú y a él otros alfas— aclaró.
—Oh entiendo— asintió. Se sorprendió un poco por la respuesta pues era la primera vez que veía a un alfa que le gustara otros alfas, pero para él eso estaba bien, porque sentía que no importaba si Jungkook fuera Omega, beta o alfa, a él le gustaría de cualquier forma.
—¿Por qué? ¿Estabas celoso?— Jungkook jaló de su corbata haciendo que quedaran a tan solos algunos centímetros, lo cual puso un poco nervioso al alfa.
—Tanto como tú con lo de Jimin— lo molestó mas Jungkook solo pudo sonreír al saber que nada de lo pensó e imagino era real.
—Ahora teniendo en cuenta que ya no hay malentendidos y aclaramos toda la situación ¿Me darías el honor de cortejarte?— propuso Taehyung sin dejar de mirar los labios del contrario.
—Por supuesto que sí, eso me encantaría.
Jungkook pasó sus manos alrededor del cuello de Taehyung, el alfa acarició con sus pulgares la fina cintura del Omega y pegó sus cuerpos de un segundo a otro, ambos sonrieron y unieron sus labios al mismo tiempo creando un vaivén hipnotizante y exquisito, las manos de Tae vagaban de la cintura a la espalda de Jungkook acercándolo cada vez más para profundizar el beso mientras que el omega con una mano acariciaba el cuello del alfa y con la otra jugaba con su sedoso cabello.
Ninguno pudo evitar sonreír cada tanto mientras se besaban pues el sentimiento que invade sus corazones es de alegría absoluta. Cuando sus labios se separaron Jungkook dejó un corto beso en la mejilla algo sonrojada del alfa haciéndolo reír levemente.
—Jamás pensé que nuestro primer beso sería en el armario del conserje— confesó Tae, se había imaginado miles de escenarios románticos y hermosos para ese preciso momento, pero por alguna razón ahora el lugar no le importaba.
—A mí me gusta— dijo Jungkook mientras acunaba el rostro del alfa.
—A mí igual porque no importa donde estemos mientras estemos juntos— respondió y dejó un pequeño beso en la nariz de Jungkook.
Y era cierto, por eso no le importaba el lugar, el sentimiento que invadía su corazón convertía cualquier lugar y momento en el mejor de todos.
—¿Te parece bien si nos vamos juntos a nuestras casas después de las clases?— propuso.
—Claro, después de todo vivimos uno al lado del otro— respondió—. Antes, tengo algunas dudas.
—¿Cuáles?— cuestionó aún sin separarse del alfa.
—Cuando rechazaste las cosas que te di no fue porque no querías o no te gustaban ¿O sí?
—Lo siento— dijo cabizbajo y Taehyung negó, no quería que continuará sintiéndose mal por algo que ya pasó.
—A partir de ahora nada de pedir perdón— ordenó y Jungkook alzó la cabeza para mirarlo directo a los ojos.
—Esta bien.
—¿Entonces?— inquirió, aún quería escuchar lo que Jungkook tenía por decir.
—Tienes razón no fue por eso, fue porque intentaba alejarte por lo que ahora ya sabes— lo reconoció y Taehyung con una sola mirada pudo transmitirle tranquilidad y hacerle entender que ya nada de eso importaba.
—¿Y qué fue lo que más te gustó de todo lo que te di?— preguntó, estaba emocionado por saberlo.
—Me encantó todo en realidad, amaba cuando me buscabas para darme leche de plátano o cuando me diste esas margaritas amarillas, también me gustó mucho la carta— confesó mientras recordaba todos esos momentos y se imaginaba como hubiese sido si no lo rechazaba en cada uno de esos momentos.
—¿Sí la leíste? Pero no me respondiste ayer— hizo un pequeño puchero, Jungkook no se contuvo y dio un pequeño beso antes de responderle.
—En realidad no la había leído hasta hoy en la mañana, ayer Jin encontró la carta en el piso porque al parecer se cayó cuando abrí el casillero y pues olvidó dármela, lo bueno es que ahora tengo tu número de teléfono.
—Entonces ahora podrás hablarme cada que quieras y puedas.
—Y tu igual, te mandaré un mensaje para que puedas agregarme— se separó de Taehyung y sacó su teléfono del bolsillo trasero de su pantalón para enviarle un mensaje.
Número desconocido
Este es mi número <3
El teléfono de Tae vibró en el bolsillo delantero de su pantalón y él lo sacó de inmediato.
—Bien, te agregaré entonces.
—Que sea con algún apodo— pidió mientras jugaba con el largo pendiente que Tae traía en su oreja derecha.
—Creí que no te gustaba— bromeó.
—Pues ya viste que no es así— le siguió el juego.
—Que bueno porque ya tengo uno en mente.
Agregar contacto como "Mi Kookie💖"
Aceptar
Dio en el botón de aceptar, vio la hora en su celular y guardó su celular.
—Creo que ya es hora de nuestra clase— entrelazó su mano con la de Jungkook y juntos salieron de la pequeña habitación hacia uno de los ascensores que había en el primer piso para subir a dónde les tocaba la siguiente clase.
Después de un tiempo el último día de cortejo finalmente llegó y eso significaba que al fin era el momento de declararse y escuchar la respuesta que el Omega le daría.
Jungkook se encontraba muy nervioso, pasó casi media hora buscando que ponerse pues nada le convencía, al final optó por un pantalón blanco que asentaba su figura, unas zapatillas blancas, una camisa celeste de mangas largas y encima un abrigo del mismo color, pero algo transparente. También se puso la pulsera de plata con un dije de una media luna junto a un corazón que Taehyung le regaló en el primer día de cortejo. Cuando estuvo listo salió de su casa y caminó hasta la de Tae, tocó el timbre y espero pacientemente a que le abrieran.
—Hola Jungkook— saludó el hermano menor de Tae, quien había estado en la sala viendo televisión y corrió a abrir la puerta ya que estaba cerca—Supongo que vienes a ver a Tae, él está arriba.
—Gracias pequeño— le dio un pequeño beso en la frente y desordenó su cabello, Yeonjun sonrió y se sonrojó levemente.
—No hay de que, espero la pasen bien en su salida— exclamó mientras regresaba al sofá dónde había estado sentado momentos antes, Jungkook rio y asintió, esperaba lo mismo.
Jungkook subió en busca de Tae a quien encontró en el baño con la puerta abierta, se dio cuenta de que Taehyung se había tapado los ojos con una de sus manos, lo cual le resultó verdaderamente extraño.
—¿Tae Tae?— preguntó y Taehyung se tensó al escucharlo.
—No puede ser— murmuró algo preocupado.
—¿Qué pasa? ¿Por qué te cubres los ojos?— preguntó sin entender bien su repentina actitud hasta que de repente su mirada se dirigió a un estuche de lentes de contacto que se encontraba sobre el lavador— ¿Usas lentes de contacto porque no ves bien sin ellos y se te cayeron?— inquirió.
—Para serte sincero no los uso por eso, sino por esto— se quitó la mano de la cara y abrió los ojos con algo de inseguridad.
El hermoso esmeralda de uno de sus luceros y el cual solía ocultar fue visto al fin por el Omega al que tanto quería y el miedo a ser juzgado o rechazado lo invadió.
—¿No te gusta?— cuestionó tras acercarse y acunar el rostro del alfa entre sus manos. Para Jungkook el alfa era hermoso tal cual y le ponía triste el sentir a Taehyung inseguro.
—La gente se queda viéndome por esto y eso me incómoda mucho— confesó, cuando era pequeño solían molestarlo mucho por ese pequeño detalle además de no considerarlo un alfa de verdad, así que cuando creció simplemente decidió que para evitar eso o cualquier mirada que lo incomodara lo mejor era usar lentes de contacto.
—Entiendo, pero Tae a mí me gustas por como eres no tienes que usar lentes de contacto si estás conmigo, si salimos solo concéntrate en mí y no en lo que digan o hagan las demás personas— pidió sonriente mientras observaba cada detalle del rostro de Tae, desde su cabello hasta su barbilla, todo él era hermoso tanto por fuera como por dentro. Ahora ambos se conocían más mutuamente y eso solo hizo que terminarán por enamorarse más el uno del otro, tanto que ya no había vuelta atrás.
—Tienes razón esto no importa, vamos— tomó de la cintura a Jungkook y besó su mejilla.
Ambos salieron de la casa, Yeonjun se quedó con su papá que salió a despedirse de Jungkook y de su hijo. Omega y alfa tomaron un taxi que los llevó a una gran librería que además de libros vendía una diversidad de dulces y bebidas para probar mientras leen alguno de los libros que deciden comprar.
—Elige lo que quieras— señaló a su alrededor después de entrar y que una pequeña campana sonara anunciando de esa forma su entrada.
—No me puedes decir eso en una librería— replicó Jungkook, él amaba leer y si fuera por él se compraría todos los libros que había en el lugar ya sea porque los había querido desde hace tiempo o simplemente porque le gustaba la portada o la sinopsis.
—Esta bien, elige los cinco libros que más quieras tener— sugirió y Jungkook aún seguía sin creérselo.
—¿Lo dices de verdad?
—Claro que sí— lo animó a caminar hacia los estantes para que escogiera los libros que quería. Jungkook dio pequeños saltitos por la emoción y comenzó a buscar entre las diferentes opciones que tenía, sería difícil elegir y también encontrar los que ha estado buscando para leer desde hace un tiempo.
Taehyung lo sabía porque Jungkook se lo había contado, por eso quiso darle libros como último regalo del cortejo.
Después de varios minutos de observación y meditación de cuáles eran las mejores opciones, al final Jungkook eligió sus cinco libros y acompañó a Taehyung a pagarlos. Luego de que colocaran los libros en una bolsa Tae y Jungkook se sentaron y pidieron para comer, el Omega quiso un helado de té verde y leche de plátano y el alfa un pastel de arroz y un milkis soda de frutilla.
—Esto también es para ti— balbuceó Tae algo nervioso, se secó el sudor de las manos en su pantalón y sacó del bolsillo delantero de este una caja rectangular de color azul—. Jungkook, quiero ser tu alfa ¿Me darías ese honor?— abrió la caja y Jungkook pudo ver en ella un collar con el dije de una luna.
—Si me preguntaras mil veces las mil veces te diría que sí— respondió y Taehyung se puso detrás de él para colocarle el collar.
—Mira— Taehyung acercó la luna a los ojos de Jungkook y el pudo ver qué dentro decía "Te amo" en todos los idiomas—. En verdad te amo— le susurró al oído.
—Yo también te amo.
Lo tomó del cuello de su largo abrigo color marrón y lo besó intensamente. Todo había valido la pena y estarían dispuestos a pasar por eso una y otra vez si eso implicara siempre estar juntos.
°•°
¿Les gustó?
¿Quieren un extra? <3
Con amor...
SweetbabyTJ
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro