Hola a todos 😊 aquí yo con el siguiente capítulo espero les guste n.n me alegro que les este gustando, de hecho está fue mi primer Ship de Turbo que me gustó e.e xD y quería hacer algo lindo e.e

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02- Primer ¿beso?

La amistad de Shu fue para Fubuki como una salvación a la tristeza de haberse mudado y no conocer a nadie en el nuevo lugar donde vivía...

Con el paso de las semanas pese a que ya tenía un poco de mejor comunicación con sus compañeros de salón, era en los recreos cuando pasaba el tiempo con Shu, quién no se oponía a ello, al contrario.

— ¿Tu no tienes amigos Shu?

Ese día había preguntado, pues algo que le inquietaba a Fubuki era pensar en que Shu tuviera amistades en su salón y que por su culpa no esté con ellos, aunque tampoco le gustaría que el mayor lo fuese a dejar solo.

— Si tengo amigos, pero me gusta estar contigo.— Explicó.

— A mí también.— Fubuki sonrió.

También conforme pasaban el tiempo juntos, Shu dejaba ver su seriedad de vez en vez. Pues era un niño responsable si de la escuela se tratara, además de que siempre era un niño poco expresivo, y no por eso significaba que fuera apático o algo similar, era un buen niño.

Y solo dejaba ver esa amabilidad con las personas que le importaban. Con Fubuki por ejemplo.

— ¿Te gusta eso?.— Shu le había compartido un poco de spaghetti que el mismo había preparado.

— ¡Es delicioso!.— Sonrió feliz llevándose el tenedor a la boca.— ¿Lo hiciste tu?.— Vio a Shu asentir.— ¿Te dejan usar la estufa? A mí no...

Era entendible pues era todavía muy pequeño para eso, por ello le sorprendía que a Shu si le dejarán cocinar a tan corta edad.

La razón de eso era muy sencilla: los padres del albino trabajan la mayor parte del día y por lo tanto Shu pasa mucho tiempo solo, por esa razón tuvo que aprender a cocinar y hacer varias de sus labores por si mismo. Era un niño autosuficiente.

Se podría decir que Shu lo que le faltaba en su vida era ese afecto y calor familiar que muchos alumnos tenían y él no, ya que varias veces sus padres no asistían a las actividades que realizaba la escuela. Pero no importaba, de cierta manera era feliz; tenía buenos amigos, era un niño muy bien portado... y sobretodo, lo tenía a él.

A Fubuki.

Salían a jugar juntos de vez en vez y se visitaban también... los padres de ambos niños conocían su amistad... Al principio la madre de Shu dudaba un poco pero lo había aceptado, no del todo pero aceptado al fin.

Los padres de Fubuki sin embargo, eran harina de otro costal.

Pues casi enseguida Shu noto como estos eran un poco sobreprotectores... Y no lo dejaban demasiado tiempo con él tan a como lo desearía.

— Fubuki trata de no estar demasiado tiempo en el sol.— Hablo su madre mientras llevaba una sombrilla y estaba sentada cerca vigilandolos.

Ese día habían salido al parque y la señora Sumie estaba al pendiente de ellos.

— Si mamá.— El niño comenzó a moverse a un área del juego con sombra.

— ¿Porque no puedes estar mucho en el sol?.— Eso no lo había entendido bien Shu.

— La verdad no se.— Se apenó el niño.— En la escuela no hay problema, pero estando mis padres cerca... me dicen que y que es lo que no debo hacer.

Todo ello le era un poco extraño a Shu, frente a los señores Sumie, Fubuki obedecía lo que le indicaban, ya sea no pasar tiempo en el sol en exceso, no cargar cosas demasiado pesadas, correr demasiado, cosas que fueran peligrosas...

Esa sobreprotección era demasiado rara para él, no lo entendía aún siendo un niño.

Y no por ello afectaba su amistad.

Porque era solo ello, una dulce y tierna amistad. Sus cabecitas infantiles no sabían todavía sobre lo que significa llegar a enamorarse.

Pero si lo que significa ser incondicional para alguien, porque eso era Shu para Fubuki. Se estaban el uno para el otro en todo.

Así es como Fubuki quería permanecer...

Bien dicen que las cosas que más se disfrutan son las que menos duran, ya que, tan pronto como paso el tiempo, Shu entro a sexto grado y Fubuki a cuarto...

Eso significaba que iba a cambiar de nivel para cuándo pase a primer grado de secundaria.

— ¿Significa que ya no vamos a vernos?.— Eso le preocupaba a Fubuki.

— No te preocupes Fubuki, aún tenemos tiempo para estar juntos.— Le sonrió para tranquilizarlo.— No me iré lejos.

El pelirrubio lo vio todavía preocupado, pese a que la secundaria era un nivel también de la escuela, los alumnos estaban separados por una pared... una pared tan oscura y fría como la mayor parte del plantel.

— Pero...

No era suficiente... Fubuki tenía miedo a que Shu conociera a más personas y lo fuera a olvidar... y fuera a ya no quererlo.

Dejarlo solo de verdad.

— Estaremos juntos.

Shu lo abrazó con ternura y Fubuki se aferró a ese gesto como si de verdad fueran a separarse en ese momento y ya no se vayan a ver más.

— Shu... te quiero.

— Yo a ti más.— El mayor se separó un poco de él para verlo y sonreír.

Esa mirada fue el detonante para que Fubuki sonriera, y le diera un beso en la mejilla... fue un acto sorpresivo y extraño pero, Shu no dijo nada.

Lo había vuelto a abrazar.

— Nunca te dejare solo Fubuki.

— ¿Lo prometes?.— El niño dudo en su voz.

— Es una promesa.

Y las promesas, siempre se deben cumplir.

Shu iba a hacer ello debido al cariño que le tenía a Fubuki, cariño todavía porque aún no sabía que ese sentimiento fuerte e intenso con el paso del tiempo seguramente se iba a convertir en algo más grande y más especial... por lo que su amistad es lo que más le importaba y era lo más valioso para él.

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CONTINUARÁ

Espero que les haya gustado n.n quizás aún no les diga nada realmente esto o quizás si e.e xD ya verán que onda
Gracias por leer 😊❤️ y nos leemos pronto ❤️😊