Hola a todos 😊
Pues, es esa parte del insomnio que te hace ver sombras en la pared y escuchar ruidos a las tres es de la mañana con tus crisis existenciales y no te dejan dormir... y una cosa llevo a la otra y aquí estoy e.e
La inspiración llegó después de repetir como mil ocho mil veces la canción.

Así que hice esta pequeña historia corta de tres  capítulos sobre Lui y Free, dedicado a las personas que aman la parejita 💙💛

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"Yo lo odio"

Realmente así era, realmente lo detestaba al punto de no querer verlo, pero la mala suerte me perseguía siempre.

A dónde quiera que iba él estaba ahí, no había sitio donde no me lo topará donde no estuviera... ¡La maldita escuela era demasiado grande! ¿¡Porque carajos siempre estaba ahí!? ¿Me estaba siguiendo? Seguramente...

No solamente detestaba cruzarme con él en los corredores o cualquier sitio. Odiaba su carácter...

Free de la Hoya tenía una personalidad enigmática. Pues tenía toda la pinta de flojo y vago, realmente no se sabía a ciencia cierta que era lo que pensaba pues esos oscuros ojos no delataban otra cosa más que desinterés. Despreocupado y desinteresado, pero, un genio en todo lo que hacía ya que era siempre el primero de la clase. Las mejores calificaciones, mejor en deportes, mejor en todo.

Odiaba eso de ese sujeto...

Y siempre lo encontraba en todas partes... Ya imaginaba que me seguía.

— Lui.

Escuché la voz detrás de mi, note a un joven de cabello rubio con un mechón rojo y ojos oscuros acercarse a mi por detrás subiendo también las escaleras.

— Free.

Era él.

— Si vas a estar siguiéndome mejor vete.

— ¿Que?.— Me estaba viendo con curiosidad.

— ¡Todo el maldito tiempo es igual contigo!.— Gruñi para verlo molestó.— ¿Eres un acosador, o que? ¿Estás siguiéndome? ¿¡Te divierte hacer eso!?

Estaba exaltado, ya que mi paciencia con el y su acoso ya se me había acabado.

— No te estoy siguiendo, solamente coincidimos en todos los lugares, después de todo, estamos en el mismo salón.

Free había sonreído y observé con desconfianza su semblante. No le creía.

Conocí a Free hace un tiempo, unos cuantos años en medio de mi adolescencia pues yo llegue a mudarme a esa misma ciudad hace tiempo y desde ese día el a sido la persona a quien se podría decir que conozco más, como dije antes, mi mala suerte era la causante de todas mis desgracias pues siempre compartimos el salón de clases en la preparatoria hasta incluso en la universidad.

Desde siempre el fue enigmático y eso me molestaba, porque nunca dejaba de buscarme, ya que yo nunca fui de hacer amigos, no los necesito y jamás lo haré. No después de lo que eh pasado.

Pero el encontraba siempre la manera de molestarme e intervenir en mis asuntos.

— Creo que le gustas a ese chico.

— ¡No digas estupideces Gabe!

Gabe Bruain es un compañero que también conocí al tiempo en que conocí a Free pero no era tan molesto y fastidioso como ese torpe vago... Su comentario me molestó demasiado debido a que yo no siento nada por ese tipo.

— Deja de decir estupideces.— Volvi a repetir.— Free solo busca la manera de fastidiarme.

Porque así era... A mí también me gustaba ser el primero en todo, amo competir y amo pisotear a los demás porque yo también soy el mejor en todo lo que hago. Pero desde que ese maldito se interpuso en mi camino y aún más cuando entro al mismo edificio de la rectoría universitaria que yo... De verdad empiezo a pensar que su competencia está llegando demasiado lejos, ya me está artando.

No pensé que Gabe tendría razón....

Ese Viernes por la tarde después de la escuela estaba en el área de los casilleros vaciando el mío para después dirigirme a casa a estudiar, los exámenes estaban a la vuelta de la esquina y no quería como siempre quedar en segundo lugar. Esta vez haría que Free pierda el primer puesto como número uno de la clase, está vez lograré serlo yo.

— Hola Lui.

Ahí está nuevamente mi terrible dolor de cabeza. Cerré el casillero con fuerza y le di la peor de las miradas.

— Tranquilo.— Sonrió con aire inocente.— ¿Porque tan molesto? ¿Te paso algo malo?

— No, más bien algo que me acaba de pasar hace un momento.

— ¿Ah si? ¿Que cosa?

— ¡Ver tu presencia!

Le solté un golpe con mi brazo para apartarlo y comenzar a caminar pero me falló el plan, ya que trastabille y caí al piso.

Vaya vergüenza.

Free solamente se me quedó viendo y soltó una ligera risa para darme la mano ofreciendo su ayuda para que me pueda levantar.

— ¡No quiero nada de ti!

Le azote la mano y me levanté con torpeza.

De verdad lo detesto... Detesto tenerlo cerca de mi.

Llegué a mi casa y me tiré a la cama pensando en como me caí frente a él, el coraje por lo menos había ocultado el sonrojó que tenía debido a la vergüenza que había sentido. Pero también... sentí algo extraño que no sabía que era.

Y eso era normal porque yo nunca antes lo había sentido de esa manera, pues lo que yo viví fue algo completamente distinto a lo que uno tendría como "concepto del amor" yo no creo en esas estupideces o eso era lo que pensaba.

El tiempo pasaba y siempre era lo mismo.... Free siempre estaba ahí, cerca o lejos estaba siempre cerca de mi, ya sea en la universidad, topandome con el en cualquier lado, causalidad, coincidencia destino, mala suerte pero el siempre hallaba la manera de buscarme y estar cerca de mi.

Y me terminó artando.

— ¡Ya deja de seguirme!

Lo había encarado a mitad de camino en las escaleras de la universidad, mi paciencia siempre a tenido un límite y el como siempre lograba superarlo.

— ¡Que diablos quieres de mi! ¿¡eh!? ¡Dímelo!

— ¿Aún no te das cuenta?

— Maldita sea...

Lo golpee en el pecho con mis puños encarandolo aunque el es un poco más alto que yo. Pero no conte con que Free sujetaría mis muñecas y en un movimiento inesperado me acorraló contra el y  enmedio de mi sorpresa y nervios me estaba alterando y yo, siempre eh sido de mecha corta y es fácil hacerme perder los estribos.

— ¿En serio no te das cuenta?.— El tono de voz de Free sonaba burlón y eso solo empeoraba mi mal humor.

— ¡Ya sueltame imbe-...

— Lui me gustas.

Free había interrumpido mi histeria para enseguida posar sus labios sobre los míos en un sorpresivo beso que me dejó la mente en blanco.

¿Cómo que le gustó? ¿¡Es acaso una broma!?

No...

Aquel beso era real.... Me estaba demostrando sus sentimientos y yo con torpeza enmedio de mi confusión.... comencé a aceptar.

Al parecer el se dio cuenta de que empecé a ceder ante el momento y el agarre de sus manos sujetando mis muñecas se suavizó poco a poco hasta que finalmente me soltó.

Pero no hui...

No recuerdo cuanto tiempo duro aquel beso, no fue mi primer beso pero se sentía incluso más especial de lo que podía imaginar. Solamente recuerdo las sensaciones que me transmitió, que me hizo sentir... Pero también recuerdo que una vez que nos separamos le solté una bofetada, lo empuje y salí corriendo escaleras abajo avergonzado de ahi.

Después de ese día Free bajo su acoso porque no se acercaba tanto a mi. ¿El estaría pensando en el beso? O... ¿solo yo tenía pensamientos extraños?

— Te dije que le gustabas.

Gabe se había burlado un poco mientras yo veía su estúpida sonrisa... Debí haberme quedado callado y no contarle nada.

— ¿Pero que piensas, Lui?

— No se, el es un perfecto idiota.— Cruce mis brazos viendo hacia otro lado aunque al pensar nuevamente en aquella escena, me sonroje.

— ¿Estás bien?.— Y al parecer Gabe lo noto pues el tono de mi piel es muy blanco. Comparado con él o con Free se podría decir que estoy pálido.

— Que no estúpido, solo....— Desvíe la mirada para no verlo.— Bah, no se ni para que te cuento las cosas.

Mi amigo solo soltó una risa pero yo seguí en mi actitud evasiva.

No podía decir que el beso me gustó.

Los días pasaban y parece que Free se había alejado siendo este un plan con maña. Porque su distancia me hacía pensarlo, me hacía esperar a verlo y me hacía extrañarlo.

Hasta que finalmente sucedió.

— Free.

Nuevamente "la mala suerte" nos había hecho coincidir al doblar una esquina de la avenida para tomar el autobús.

— ¿Me extrañaste?

Su sonrisa burlona me hizo olvidar que si lo había extrañado, lo único que hizo con eso fue irritarme y ponerme de mal humor.

— ¡¡Yo no te extrañe idiota!!

Le iba a golpear nuevamente el pecho con el puño pero él fue bastante rápido que detuvo mi muñeca en el aire haciéndome poner nervioso nuevamente.

— Te vez tan lindo cuando te enojes.

— ¡Ya sueltame!.— Su estúpida sonrisa me fastidió pero forcejee mi mano ligeramente y así el me solto.— Ya deja de decir tonterías.

— La verdad, yo sí te extrañe... Dime si tú lo hiciste.

— Obviamente no.— Lo empuje para seguir mi camino.— Y ya déjame en paz.

Comencé a caminar pero una frase suya me hizo detenerme y claro que me heló la sangre.

— Algún día serás mi esposo.

Había volteado a verlo con una expresión entre sonrojado y molesto. El únicamente ladeó la cabeza, bostezo y me dio la espalda comenzando a caminar dejándome con mi nerviosismo.

¡Yo nunca seré esposo de alguien como él! ¡Nunca nunca!

Nunca digan nunca....

No sé si podría tomar aquella frase que el dijo cómo una forma de coqueteo o una forma de iniciar una conquista, quién sabe, pero desde aquel día, las cosas cambiaron de cierto modo.

Pues Free había comenzado a buscarme para darme detalles, pequeños a veces, como dulces, o traerme el almuerzo... no sé si el cocine o lo mandé a hacer pero, no sabía tan mal lo que me traía. En varias ocasiones quiso darme flores pero los ramos se los rechazaba...  Me avergonzaba.

A Gabe le causaba gracia todo ello. Siendo yo, alguien que domina fácilmente sus emociones y no se deja llevar por estás; alguien que usa y se deshace de los demás cuando no le sirven: alguien que no ve por nadie más que uno...

Alguien que se estaba poniendo nervioso con cada gesto de atención de parte de ese molesto...

Alguien que se estaba enamorando....

— ¿A qué le tienes miedo?

Volteé a ver a Gabe con una mirada llena de molestia, pero también nervios.

— ¿A qué le temes Lui?.— Volvió a repetir.

— A que las cosas no se den como se debe...— Ya tenía suficiente confianza en él pues sabe cosas de mi pasado que nadie más conoce.— A que vuelva a vivir lo mismo.

— Lui, el pasado es eso, pasado, porque si te sigues aferrando a el no podrás disfrutar el presente...

Gabe sonrió pues entendí lo que el decía. Free a pesar de su estupidez y acoso, me gustaba la forma en que se acercaba a mi, realmente no se cómo explicarlo pero, las cosas eran más complicadas porque yo no soy lo que el espera, de eso estoy completamente seguro.

Pero aún así a pesar de mis intentos de alejarlo Free se acercaba más... Sus detalles, y también a veces su forma de ser tan cínica que me hacía rabiar... Todo ello me estaba gustando de él y me tenían confundido.

¡A mí! ¿Cómo era posible?

Me estaba enamorando.

— Lui.

Free se había acercado con una sonrisa y una única rosa roja. Era entendible si todos sus ramos terminaban siendo rechazados.

— ¿Que quieres maldito?

— Nada, solo veía que te vez más lindo este día.— Había sonreído y yo desvíe la mirada fastidiado.

— Si vienes a molestar...— Mi tono de voz ya se había alterado.

— De hecho... quería decirte algo.

— ¿Que quieres?

— ¿Quieres ser mi novio?

Al extenderme la rosa y ver su sonrisa nuevamente esa imágen de el me desarmo por completo... Ya imaginaba que algún día me saldría con una tontería cómo está, y claro que estaba preparado para rechazarlo pero...

¿Porque mi corazón estaba latiendo de esa forma?

Me habla vuelto a quedar en blanco.... solo recordé las palabras de Gabe y tenía él razón; en el fondo yo también merezco ser feliz...

Así que solo tome la rosa pero volví a desviar la mirada. No quería toparme con los ojos de Free y que viera lo vulnerable que estaba...

— Tomaré eso como un sí.

Sonrió para sujetar mi mentón y para mí sorpresa me beso, yo está vez menos torpe que la primera vez correspondi el beso de una mejor manera.

— Espero no me vayas a golpear.— Se había alejado ligeramente para burlarse y nuevamente rozar sus labios con los míos.

— Cállate si no quieres una patada donde no te da el sol.

Él solamente volvió a reír levemente para volver a profundizar el beso.

Desde ese día nuestro romance fue ¿lindo? ¿tierno? Algo así, porque a mí modo lo era, no soy de hacer ese tipo de cosas pero parece que a Free aquello no le importaba, era feliz porque yo era feliz y viceversa. Nunca pensé en que esa felicidad existiera, pues yo antes de Free no era precisamente feliz en el aspecto de una pareja sentimental, nunca necesite a nadie después de lo que me pasó, pero Free, él era diferente...

Y así paso el tiempo en nuestra relación, aunque yo todavía seguía sin poder demostrar tanto, el me entendía y me amaba y yo a él, porque con su cariño comprensión y detalles me habla enamorado como nunca nadie anteriormente lo había hecho...

Por esa razón le hable de mi pasado... y eso poco a poco lo fue entendiendo, al principio parece que tardo en asimilarlo pero después, solamente me abrazo.

— No importa lo que haya pasado Lui...— Sonrió al verme.— Yo te amo, eso nunca cambiará.

— Eres un idiota, deja de decir tantas cursilerías...— Baje la mirada avergonzado pero él solo sonrió para después darme un beso.

Había encontrado a la persona correcta, alguien tan inusual e irreal...

Alguien que me hace realmente feliz.

— ¿¡Que rayos haces!?.— Mi voz sonaba nerviosa.

— ¿Te quieres casar conmigo?

Meses después de haberle dicho mi más importante secreto Free me había sorprendido con un paseo donde después de este, se había hincado al suelo mostrándome la pequeña cajita forrada de terciopelo rojo mostrando un precioso anillo de compromiso y claro que eso me avergonzaba debido a la multitud que se había congregado a nuestro alrededor. A esos idiotas les gusta el chisme parece...

— ¡De-deja de hacer eso imbécil!.— yo estaba realmente avergonzado por el show que Free estaba dando.

— No hasta que aceptes ser mi esposo.— Pero parece que al torpe ese le causaba más gracia mi pena que todo lo demás.

— Está bien está bien pero ya ponte de pie.— Lo jale del brazo para que se levantará.

Enseguida Free me puso el anillo en el anular de la mano izquierda y se levantó robándome un beso, eso hizo que las personas aplaudieran ante nuestro acto de amor.

— Te dije que algún día serías mi esposo.— Me había murmurando en mi oído mientras me abrazaba.

— Que te calles.— Le solté un golpe en el abdomen que lo hizo retorcerse levemente por el dolor, pero también lo abrace.— Te amo...

— Yo más a ti.

Sonrió para darme un beso nuevamente.

Después de lo que viví, no imaginé que me casaría, no imaginé que sería con alguien como Free.

No imaginé que fuera a ser feliz.

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Esta es la primera parte, espero les guste 😊 ❤️ y que también sea de su agrado todo. Me gusta la parejita y también a unas cuantas amigas más, así que como dije hace rato, solo me salió así e.e
Espero tener pronto la actualización.
Gracias por leer 😊❤️ y nos leemos pronto ❤️😊