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-K-Kacchan no puedes irte solo, te vas a perder en este lugar - el de verde salió corriendo.
Nadie evitó que salieran, sabían que no podrían escapar, no cuando la escuela estaba llena de héroes.
- Bueno...
-dios nisiquiera se que decir para alivianar la tensión aqui
Sero se veía impactado, osea, todos habían visto a Bakugo enojado o irritado, era su estado de ánimo habitual.
Pero el chico medieval, a pesar de que era igual físicamente, la mirada de desesperación e impotencia, le caló los huesos a más de uno.
- Yo aún no me creo esto, podría se obra de algún quirk perteneciente a algún villano - dice Uraraka, la cual se mostraba escéptica a la situación.
Los quirks de copia son comunes entre héroes y villanos, no le sorprendería que fuera un estupido plan de parte de la liga.
-Pues a mi me pareció muy real, me pregunto si tu reaccionarias igual si perdieras a tú Kirishima
- Por favor no empieces con tus estupideces nerd de mierda y tu bastón navideño, saca esa cara de mierda, sabes que no hablaban de ti.
Todoroki simplemente apartó la mirada, la verdad es que las palabras dichas anteriormente si le habían dolido en cierta manera, y como no, al parecer su padre no dejaba de ser un imbecil nisiquiera en otras dimensiones.
El rubio se sacaba las granadas de sus brazos, dejandolas encima del escritorio de su profesor y empezó a caminar hacia la puerta.
-¿Bakugo a donde crees que vas? Aizawa está po-..- la voz del teñido se alzaba
-El nerd sigue siendo el nerd, yo sigo siendo yo, por lo que ese Eijiro sigues siendo tú, así que iré hacer algo que siempre quise.
"Me voy a golpear a mi mismo"
Salió del Aula en busca de su propia figura, para Bakugo, le era inaceptable ver una expresión tan inútil en su cara, menos cuando se hablaba del teñido.
Si ese imbecil en verdad era él, lo iba a moler a golpes por haber subestimado a alguien como Kirishima.
Él como Bakugo Katsuki, nunca subestima a alguna persona cuando se trata de un duelo, siempre dará todo de si, esperando que el contrario haga lo mismo.
Le parecía incluso asqueroso el que este tipo con su misma apariencia crea que Kirishima lo necesitaba a él como para dar pelea por su cuenta.
Kirishima era fuerte, determinado y un terco de mierda, el lo sabía ¿y ahora me dices que no era capaz de confiar en él?¿Incluso cuando es un puto dragón según ellos? Es estupido.
Claramente necesitaba unos golpes.
Más cuando diviso al cazador sentado en el patio de la escuela, a pesar de que quiso acercarse a paso duro, unos brazos firmes le impidieron avanzar.
-Hey, ¿donde crees que vas? ¿No crees que es mejor darle su espacio?
-Cabello de mierda, soy yo, crees que me conoces mejor yo mismo?
- De verdad quieres que responda esa pregunta?
Las manos del pelirrojo subieron a sus hombros, en busca de poder calmar un poco al rubio.
-Dejalo solo, necesita pensar, y cuando piensas en cosas serias no te gusta que te molesten ¿verdad?
- Eso no me quita las ganas de pegarme
-Dejalo por ahora, después cuando estemos en los dormitorios, podrás conversar con ... contigo? Con él? Si bueno, me entiendes.
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Era raro, muy raro
Eijiro aún le costaba diferenciar a oos dobles que se movían por la sala común.
Bakugo se vio obligado a prestarle ropa al rubio medieval, puesto que no lo dejarían andar sin camisa en las dependencias de la escuela.
A Midoriya le fue más difícil lidiar con su otra versión, con razón dicen que las personas que más te caen mal, son las que más se parecen a ti.
Y no es algo mínimo, el pequeño mago no podía evitar preguntar cosas sobre la dimensión en la que se encontraban, llegando a desesperar al estudiante, que por primera vez se notaba el hecho que había crecido junto al rubio explosivo.
A Kirishima le sorprendió ver como el propio Izuku se insultaba a si mismo pidiéndole que cerrara la puta boca.
Pero le sorprendió más ver cómo los Katsuki's que se habían vestido igual, solo se habían sentado frente a frente, analizando al contrario.
La tensión era demasiada que el teñido no soportó el no meterse en medio.
-Hey que hacen ustedes dos, eh?
Logro sentir como el cuerpo a su lado se tensaba, casi tratando de repeler cualquier contacto con él, pero a la vez rehusandose a levantarse su lado.
-Hey!! Tú, cuidado donde miras.
El Bakugo que estaba en el sillón contrario alzó la voz, en cuando el rubio que estaba a su lado lo escaneo con la mirada.
- Ha?! Y quien te crees que eres tú como para mandarme, a mi ?
- ¡¿Quieres que te enseñe quien soy?!- uno de los Bakugou's se levantó del sillón de manera amenazante
Eijiro quedó confundido, no sabia que Bakugo era cual, solo sabía que debía evitar que alguna pelea iniciase.
-Hey hey calmense ustedes dos, lo que menos necesitan es pelearse en este momento así qu-...-
La mano del rubio a su lado lo jalo y lo volvió a sentar de golpe, mientras se levantaba para mirar a los ojos a su doble.
- No es necesario, te conozco muy bien, sé lo mierda que eres.
- Estoy rifando unos golpes y tu tienes todos los putos números.
El contrario sólo se quedó callado, formando una sonrisita burlona, triunfadora
-No le haz contado lo de Midoriya aún cierto?
Los colores de la cara se desvanecieron, Katsuki estaba pálido, ese tipo había tocado un punto sensible.
Al cerebro de Kirishima le iba a dar un corto circuito en cualquier segundo, por que el chico le debería contar algo de él y Deku.
-Mira pedazo de mierda, que hayas salido de la nada con tu historia triste, donde solo me enseñaste que eres un imbecil débil, y aparte perdiste al pelo de mierda por tú estupidez, no te da el derecho de meterte en mis problemas con mi Kirshima.
- Lo que digas bomba de tiempo, no vayas a querer saltar después de que se entere.
¿Que se entere? ¿de qué estaba hablando? Sus dudas no pudieron ser resueltas, puesto que el mago de verde se acercó hacia nosotros, junto con el libro con el cual aparecieron esa mañana.
Su aparición solo hizo que Katsuki se pusiera más pálido de lo que estaba, mientras que Cazador le empujaba con el hombro al pasar desapareciendo con Izuku por la puerta.
El teñido no quiso preguntar sobre ello, no se sentía correcto, pero asumía que era un tema importante entre los amigos desde la infancia.
Lo que aún no podía entender, que tenía que ver su persona en medio de eso.
Lo que si sabia era que odiaba ver a Bakugo así, totalmente perdido en sus pensamientos.
El cuerpo de Eijiro quiso mover sus manos, para sostener las contrarias, más se arrepintió antes de hacerlo, no quería hacer sentir incómodo al rubio.
Asi que optó por darle un apretón en su hombro, regalándole una de sus sonrisas tranquilizadoras.
Porque Kirishima seguía siendo él, sabía que podía esperar por alguna explicación, pero nunca lo iba a presionar. Estaría siempre para escucharlo
Siempre estaría para él y Kats estará para el contrario.
"Me pregunto si tu reaccionarias igual si perdieras a Kirishima"
No...
El seria peor.
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