¡BASTA!
Pov Bruno
No es un sueño... Él está aquí... ¿Cómo lo sé? Pues... Esta abusando de mí.
Aseguró la puerta para evitar que alguien entre y amarró mis muñecas a la cama. Por el shock no reaccione ni pedí ayuda... No quiero que mis hijos vean esta escena.
Pov Mariano
Hace un año recibí la visita de mi hija, no tenía idea de cómo me encontró.
Cuando Bruno me abandonó junto con nuestros hijos, no tenía sentido quedarme en esa casa. Todo lo que hice, lo hice por él, pero ya no está.
Quiero verlo... Lo hecho de menos... Demasiado... Hay días que sueño con Bruno. Él viene corriendo hacia mí para darme un abrazo, pero despierto y mi corazón se parte en dos... Porque sé que eso no va a suceder.
Vendí la casa a un buen precio y viaje a Barranquilla para hospedarme con mi tía, después de un tiempo mi Madre se mudo a Barranquilla y decidió construir una casa para que ambos vivamos tranquilos. Nunca me preguntó sobre Dolores o con quién me fui, aunque miraba mucho el anillo que traía. Jamás me saque el anillo ¿Cómo hacerlo? Si tiene grabado el nombre del amor de mi vida.
Un día cortando leña, se apareció una señorita de ojos verdes y cabello ondulado preguntando por mí, al confirmarle que yo soy la persona que busca procedió a atacarme con fuego que salía de sus manos. Desgraciadamente logró quemarme la cara en el lado derecho.
—¡LAIDY DETENTE! .—Le grite a mi hija enfadado por el dolor.
—¿Cómo me reconociste? —cuestionó inexpresiva.
—Eres mi hija... Te pareces mucho a Bruno.
—No te atrevas a pronunciar su nombre. ¡ME DA NÁUSEAS SER TU HIJA!. —Su cuerpo está completamente en llamas por la furia que siente—. Todo lo que le hiciste pasar a mi Papi Bruno, no tiene perdón.
—Tú existes gracias a mí, por si no te diste cuenta —regañe a mi hija. La piel me arde como el infierno, sin embargo, aún puedo ver.
—¿A qué costo? ¿¡EH!?.
—Bruno y yo decidimos tener hijos. ¿No te lo dijo?. —Debo saber quién le dijo. Bruno prometió que jamás lo haría.
—Isabella me contó la verdad.
—Te mintió ¿Por qué crees que Bruno y yo vivíamos lejos de su familia? Ellos nos impidieron estar juntos.
—¡MENTIROSO! No importa, porque Papi esta con una nueva pareja. —Mi hija se quedó pensativa unos segundos y de su boca sale un nombre—. Se llama Martín.
Al escuchar tal barbaridad no pude creerlo. La sangre me hierve al imaginar que alguien, que no sea yo, toque a Bruno. La quemadura que me ocasionó Laidy, ya no duele. Mi mente sólo repite "otro hombre tiene a Bruno".
—Vine a matarte... Pero... No vales la pena Papá. —Escupe al suelo y con desdén me dedica una mirada llena de frialdad para luego retirarse de mal humor.
°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°
°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°
°°°°°°°°°°°°°
Los días posteriores desde el encuentro con su hija no ha logrado conciliar el sueño, los celos lo están matando. Creía que si dejaba a Bruno irse podría soportar vivir sin él ¿A quién engaña?. No puede... Peor ahora que sabe que está con otro.
La Madre del Guzmán está angustiada, porque ya no sabe que es lo que hace su hijo. No le cuenta nada y la sonrisa que le muestra todos los días sabe que es falsa. Sospecha que tiene que ver con el anillo que trae puesto, no se lo saca por ningún motivo.
Deja que los días pasen y sus celos crecen cada día más. Ha decidido ir a buscarlo, pero sus planes son interrumpidos por una recaída de su Madre. El estrés junto a la tristeza la enferman, siente que no puede ayudar a su querido hijo.
Mariano creyó que la salud de su Madre mejoraría en unos días... Pasó un año hasta que su Mamá no soporto más y falleció.
—Lo siento, Mamá —dice el Guzmán frente a la tumba—. Ni siquiera tuve la valentía de decirte que tienes nietos y que me case con un Madrigal. Te juro Mamita, que yo lo amo con todo mi corazón... Pero él no a mí... No quiero dejarlo ir, por eso decidí regresar a Encanto.
Pov Alex
A paso bastante lento entre a casita, mientras me invadía un dolor en el pecho como si alguien hubiera clavado un cuchillo y lo olvidó ahí a propósito. Necesitaba con urgencia hablar con mi Papá Bruno, le pregunté a varios si lo vieron, pero ninguno sabe dónde está.
Revise cada cuarto y extrañamente el de Mirabel estaba cerrado, ella nunca cierra con llave. Toque la puerta preguntando "¿Papá estas aquí?" no hubo respuesta. Debe estar preparando una sorpresa para Laidy y para mí, pensé.
Baje las escaleras y me dirijo al comedor de afuera, ahí me encontré a Antonio comiendo alfajores. Me senté a su lado y el me miró sorprendido.
—¿Alex, acercándose a mí voluntariamente? —pregunta burlescamente.
—¡MMMM! Creí que no había nadie aquí, pero... Necesito hablar con alguien. —Baje la cabeza.
—Debe ser bastante serio, si eso te llevo a acercarte a mí.
—¿Por qué dices eso? No es como si te despreciara.
—Lo sé. Sin embargo, sólo hablas con Mirabel o Isabella. Camilo y yo somos ignorados por ti la mayor parte del tiempo —responde con sinceridad.
—Lo siento... No debí ser tan odioso... Siempre culpe a Camilo por separar a mis Padres... Lo que realmente hizo fue salvar a Bruno de Mariano.
—¿Eh? ¿Ya lo sabes?. —Frunció el ceño preocupado—. ¿Bruno te lo contó?.
—No —negué con la cabeza.
—¡HUM!. Sé que no es buen momento.
—Metió la mano en su bolsillo y sacó un collar con un dige de madera con forma de tigre—. Esto lo hice yo. Quería darte un regalo para que me recuerdes. —Me coloca el collar con delicadeza.
—¿Recuerde? ¿Te vas?. —La tristeza me invadió e hizo que mis ojos se humedezcan.
—No será mucho tiempo.
—Eso también dijo Isabella. —Rodé los ojos.
—¡Ha, Ha! No soy de tu agrado, pero también sé que no te gusta estar solo. No te tortures con los problemas del pasado vive tu presente. —Come otro alfajor—. Te contaré algo...
Antonio no completo su oración, ya que su leopardo se abalanzó sobre él, rugiendo.
—¿Qué sucede?. —Cayó al suelo golpeándose la espalda—. ¿Qué sientes el aroma de...? ¡Oh, no! Esto no es bueno... —Se levanta apresurado—. Alex necesito que vayas a decirle a la tía Julieta que Mariano esta aquí.
—¿¡QUÉ!?. —Entre corriendo a toda velocidad. Mi mente sólo pensaba en el cuarto de Mirabel, era el único con llave. Agarre el hacha de mi Tío Agustín y subí las escaleras, le di a la manija con el hacha y por suerte se abrió... No estaba preparado para ver a mi Papi Bruno llorando atado a la cama y encima de él a mi Papá... Pude sentir como en cámara lenta giro la cabeza. Un escalofrío recorrió todo mi cuerpo al ver sus ojos llenos de ira.
Las manos de Antonio me taparon los ojos y me levanto para sacarme de allí. Pude escuchar a Isabella gritar "¡ALÉJATE DE ÉL!".
Antonio me llevo en sus brazos hasta fuera de casita, seguía tapando mis ojos. Mi mente está en blanco... No quiero estar aquí.
—¿Me puedes dejar ver?.
—Alex... No viste nada ¿cierto? —pregunto angustiado.
—No —respondí. Preferí mentirle e intentar mentir a mi subconsciente de que no vi nada. Mis lágrimas salieron de mis ojos sin que pudiera evitarlo.
—Isabella tiene las cosas bajo control. —Tomó mis mejillas para limpiar las gotas de agua.
—Ese hombre no es mi Padre... Él nunca me hubiese mirado de esa forma... Nada de esto debió pasar... Yo soy el único que puede cambiar todo.
°°°°°°°°°°°°°°°°°°
°°°°°°°°°°°°°°
°°°°°°°°°
Alex se deshizo del agarre de Antonio y corrió al pueblo. Tiene un plan, no quiere detenerse a pensarlo mejor porque es su decisión definitiva.
Pide prestado un violin y se dirige lejos del pueblo, donde nadie pueda escucharlo. Se ha decido borrar todo lo escrito y crear un final totalmente diferente, aunque eso signifique desaparecer.
Controlo su respiración visualizando a dónde quiere llegar, escucho unos pasos cerca.
—¿Qué mierda crees que haces? —inquirió con hastío Laidy.
—¿Cómo supiste dónde estaba?. —Esta seguro que nadie le siguió.
—Siempre estoy pendiente de lo que haces, por si se te ocurre alguna idiotez. Me disgusta que tengas el don de viajar en el tiempo... Debió ser mío.
—Nadie los elige, es depende a tu personalidad. Pero encontré la razón de mi poder... Es para poder salvar a Papi Bruno —confiesa seguro de si mismo.
—¡HAHAHA!. Que tonterías dices.
—No estoy jugando. Me aseguraré de cambiar todo lo que sea necesario para que Bruno sea feliz.
—¿Sabes lo que eso significa?. —Borro su sonrisa—. Nosotros no vamos a existir.
—No importa. —Se da la vuelta e ignora su presencia para poder tocar el violin, pero Laidy le arrebato el instrumento de las manos y lo quemo por completo.
—No lo harás —ordenó con una voz dominante y sus llamas encendidas en sus manos.
—¿No quieres que Papi sea feliz?. —Trata de convencerla.
—¡NO ME IMPORTA! Él vivió lo que tenía que vivir, no es mi culpa que conociera a un asesino. —Se puso en posición de pelea—. ¿Seguirás dando problemas?.
—Y si es así ¿Qué harás?. —Duda unos segundos, porque Laidy se ve segura de su elección.
—Los accidentes existen, Alex... Algunos llegan a ser fatales... Podrías morir.
El chico la mira estupefacto. No sabe que es lo que pasa por la mente de su hermana. La muchacha es firme con cada palabra que pronuncia. No existe duda ni miedo en sus ojos.
Alex aún sostiene el arco del violín. Laidy da unos pasos adelante y pregunta "¿Seguirás de testarudo?". El joven sólo la mira sin dar respuesta.
Su hermana le advierte de que si lo ve intentar cambiar el pasado, le quemaría las manos. Una vez finalizada esa advertencia se dio la vuelta. Alex no desaprovecho la oportunidad, ya no esta a la defensiva. Con el arco del violin golpea la parte posterior de la cabeza y el arco se rompe a la mitad.
Laidy cae al suelo agarrando su nuca por el dolor, miró su mano con sangre, eso la hizo enfurecer y cuando iba a atacar a su hermano este clava la otra mitad del arco en el epigástrico, cayó de rodillas y levantó la mirada "Te... Arrepentirás". Fue lo último que dijo, tosiendo sangre.
Sale huyendo directo al pueblo a prestarse otro violín. Una voz en su cabeza repite "Mataste a tu hermana". Pero si no hacía algo, ella lo iba a matar.
Consigue el violín y esta vez no se aleja mucho del pueblo, quiere que todo termine de una vez. Toca una melodía muy deprimente mientras le salen lágrimas, y cierra los ojos.
Termina de tocar y abre los párpados algo cansado. Descubre que logró viajar al momento exacto, cuando la casa Madrigal estaba en construcción.
Recordó que, Mirabel, una vez le contó que Bruno conoció a Mariano en la construcción.
Pov Alex
De seguro este debe ser el inicio. Si logro cambiarlo, tal vez pueda conseguir un mejor final para él, me dije a mi mismo.
Mis pies se movieron solos, sentía que yo no los controlaba, pero iban en dirección a casita.
Al llegar, vi a mi prima Dolores, sólo la veía en fotos, esta es la primera vez que puedo verla en carne propia. "Que adorable" alague en voz alta y ella inmediatamente volteó a verme.
—¿Hum? ¿Quién eres? —preguntó con nervios.
—Soy... ¡Eeeem! Alex.
—¿Alex? es la primera vez que te veo. —Jugaba con sus manos muy nerviosa—. Por favor no le digas a nadie.
—¿Decir qué?. —La mire raro, porque no entendí su comportamiento.
—¡Oh! Nada.
—¿Ok?. —Incliné mi cabeza y me di cuenta que Mariano estaba a lo lejos mezclando cemento—. ¡Ah! Lo estas espiando.
—¡Shhhh! No... Bueno si, pero habla más bajito. —Se tapo la cara con ambas manos, avergonzada.
—¿Te gusta? —pregunté, y Dolores asintió con la cabeza sin quitar sus manos por la vergüenza—. Puedo ir a hablar por ti, esperame aquí. —Caminé donde se encuentra mi Papá.
—¡ACHU!.
—Salud.
El siguiente capítulo es el final ✨
Disculpen si hay errores. 🌿🍃
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro