En algún lugar del mundo
Siempre existirá alguien
Con quien puedas compartir
Tus más oscuros secretos...

●°●°●—————— ⚡ ——————●°●°●

Mes de Noviembre.

Que rápido pasaban los días. Se iban volando tan deprisa que si no los aprovechabas no tenias tiempo de disfrutar. Un nuevo mes había llegado.

Era sábado, Dan había invitado a Alin a salir, el plan era dar un paseo por lugares remotos en su motocicleta, disfrutar el aire libre y admirar hermosos paisajes.

Cerca de las diez el chico se dirijió a la casa de la chica. Al llegar tocó la puerta y en pocos minutos ella salió.
Se veía tan hermosa, Dan se quedó impresionado al verla, sus ojos se encontraron y ambos sonrieron.

— Hola Aly — saludó

— Hola Dan — respondió ella

— ¿estás lista?

— si, eso creo — murmuró

— ¡vamos!

Dan caminó hacia donde estaba su moto, se subió y luego Alin hizo lo mismo.

Minutos más tarde ambos jóvenes se encontraban en un pequeño campo a las afueras de la ciudad, frente a ellos un hermoso lago y árboles a su alrededor.

El sol brillaba, el cielo azul con algunas nubes.
Un viento suave y agradable.

Ellos dos sentados en el pasto sobre una manta y entre los dos una canasta llena de comida, tendrían un picnic.

Era un momento mágico.

Comenzaron a platicar mientras sacaban los sándwiches y se disponían a comer.

— ¿entonces eres hija única? — preguntó el muchacho

Alin le había contado sobre su familia: sus padres, lo que ocurrió y el por qué se fue a vivir con su abuela.

— si así es — respondió

— debe ser aburrido no tener hermanos

— si, lo es — soltó un suspiro

Dan recorrió con su vista todo aquel lugar, sonrió y dijo:

— es un hermoso lugar ¿no te parece?

— si, es muy lindo — contestó Alin

— Me alegro de estar aquí — le dió un mordisco a su sándwich — que bueno que Paola haya aceptado cubrirme en la tienda.

En eso un recuerdo llegó a la mente de la chica.

<¿de verdad crees que el hijo de un gran empresario se enamoraría de ti?>

Alin decidió sacarse de dudas, así que intento hacer que Dan le contara sobre su familia.

— cuéntame de ti — dijo ella jugando con sus manos — ya sabes sobre mi familia y...yo no se nada sobre la tuya.

— bueno...— comenzó a decir — pues solo vivo con mis padres, y...— su semblante decayó — no tengo hermanos

— ¿es todo?

— si — respondió Dan de una manera fría

— crei que dirías más...

— ¿qué más quieres que te diga? — exclamó algo molesto.

— No lo sé...

— Es todo...

Alin no insistió más, un silencio se hizo entre ambos.

Dan con su mirada perdida en algún lugar pensaba en todo, los recuerdos del pasado lo atormentaban.
Había creído que ya todo había quedado en el olvido pero no era así.

Aún sentía su ausencia, aún se sentía culpable por lo que había ocurrido hace tiempo.

La herida aún no había sanado y cada vez que alguien mencionaba algo relacionado a ella, era como si le echaran limón a su herida.

Dolía mucho, constantemente en sus sueños ella aparecía, se repetía aquel horroroso momento en el que la vio morir justo frente a sus ojos.

El chico sintió la necesidad de contarle a Alin su historia. Así que rompió el silencio que se había formado y dijo:

— ¿recuerdas la primera vez que nos encontramos en la tienda?

— Si, lo recuerdo — respondió Alin

— Mi padre es dueño de la gran compañía: Venessie

— ¿Hablas de la marca de ropa más reconocida? — preguntó asombrada

— así es...Mi madre es diseñadora de modas, ella es quien diseña la ropa.

— oh, es...impresionante

— mi padre tiene varios locales dispersados en toda la ciudad, y aparte en otros estados...

— ¿entonces realmente no trabajas en la tienda?

— no, bueno si, solo ayudo en lo que sea necesario...

— oh — fue lo único que pronunció la chica.

El silencio se hizo presente nuevamente, ninguno de los dos se atrevía a hablar.

— Tenia una hermana...— soltó Dan con su mirada fija en el horizonte

— ¿tenías? — cuestionó

— si, era mi hermana melliza — sonrió tristemente — Se llamaba Venessie...

— es un poco raro el nombre.

— Si, a mis padres les gusto, es raro pero original...

— ¿qué pasó con ella?

Dan agachó la cabeza y negó. Sus ojos comenzaron a cristalizarse. Estaba a punto de llorar pero se contuvo.

— Ella...ella murió hace 3 años...

— lo siento mucho — Alin se acercó a él y puso su mano en su hombro haciéndole saber que estaba ahí para escucharlo.

Él suspiró antes de comenzar con el relato:

— anteriormente Yo vivía en otro lugar junto a toda mi familia, eramos una familia feliz...
Cuando tenía 13 años nos mudamos aquí, yo no quería y por eso entré en una etapa de rebeldía. Para mis padres fue un tiempo muy difícil.
Yo empeze a tener malas amistades, fumaba, tomaba alcohol y también llegué a usar drogas.
En ese tiempo Venessie se hizo Cristiana, iba a la iglesia y siempre me hablaba de Dios.

— Vaya, crei que eras Cristiano desde siempre...

— No — el joven mostró una pequeña risa — eso fue después de lo que ocurrió...— su voz se fue apagando.

— ¿y qué fue lo que ocurrió? — preguntó ella.

Dan bajó la mirada.

— Si no quieres contarlo esta bien...

— No, esta bien, te lo contaré, he comenzado, tengo que terminar — dijo el chico — Una noche como de costumbre salí con un grupo de amigos a una fiesta...

.....

La música estaba a un volumen demasiado alto. Luces de colores inundaban todo aquel lugar.

En una mesa rodeado de varios chicos y chicas se encontraba Dan con una botella de vino en su mano.
Todos estaban riendo y disfrutando del momento.

Una chica llegó a donde ellos estaban con una bolsa llena de droga. Los jóvenes presentes comenzaron a experimentar nuevas sensaciones con el efecto que producían ciertas sustancias.

Era una completa oscuridad la que reinaba en cada vida de aquellos jóvenes que se encontraban en aquel lugar.

Venessie estaba en su habitación, era media noche y su hermano no llegaba, comenzó a preocuparse.
Hacia ya varios meses que había decidido entregar su vida a Cristo. Lo hizo en un campamento juvenil al que acudió por invitación de una de sus amigas, y desde ese día todo en su vida fue diferente.

Se acostó en su cama e intento dormir, pero le fue imposible debido a la preocupación.
En ese momento sintió la necesidad de salir en busca de su hermano.
Sus padres ya dormían, así que sigilosamente salió de la casa.

La noche era oscura y solitaria, solo unas cuantas luces seguían prendidas en los faroles. Un frío viento hizo que la chica se abrazara a si misma.
Caminó hasta el bar en el que sabía que podria encontrar a Dan.

Tras varios minutos de tanto caminar, Venessie se detuvo frente a dicho lugar, con temor caminó lentamente hacia el interior.

Adentro, Dan se encontraba junto a otros chicos mayores que él, jugando a las apuestas.
Pero para mala suerte del chico, perdió y ya no tenía suficiente dinero para pagar.
Los otros muchachos tomaron a Dan del brazo y estaban dispuestos a golpearlo cuando una voz los interrumpió:

— ¡¡Dan!! — gritó Venessie con lágrimas en los ojos cuando vio a su hermano acorralado.

— ¡¡Venessie!! ¡¡¿qué haces aquí?!! — preguntó Dan en cuanto vio a su hermana en aquel lugar.

La chica corrió y se lanzó a los brazos de su hermano.

— Nessie tienes que salir de aquí — susurró en su oído

— No sin ti — respondió

— ¡¡Dan tienes que pagarnos!! ¡¡perdiste!! — gritó uno de los chicos a los cuales Dan debía.

— les pagaré, pero hoy...no tengo más dinero — explicó

Dan tomó del brazo a su hermana y estaban dispuestos a irse, pero aquellos chicos se lo impidieron.

— ¡Dejenos ir! — exclamó Nessie titubeando

— ¡Tu hermano tiene que pagarnos! — sonrió maliciosamente — ¡y como no tiene dinero para hacerlo...pagara con alguien que ama!

Dos jóvenes tomaron a Venessie de los brazos. Y otros dos tomaron a Dan.

— ¡¡Dejen a mi hermana!! ¡¡ella no tiene nada que ver!! — Gritó Dan e intentó safarze y ayudar a Nessie.

— tienes razón, ella no tiene nada que ver, pero pagará por ti...— uno de los muchachos sacó una pistola de su chaqueta de cuero negra, la recargó y apunto a Venessie — ¡¡esto es por tu hermano!! — disparó.

El cuerpo de la chica cayó al suelo, Dan se soltó del agarre y corrió hacia ella:

— ¡¡Nessie!! ¡¡Nessie!! ¡¡por favor!! ¡¡No te vayas!! ¡¡despierta!!

.....

Alin miró a Dan, sentia su dolor, sentía lo que él sentia.
El chico a su lado lloraba, aún después de tanto tiempo se sentía culpable.

— Si yo no hubiera ido a ese lugar, ella estaría viva...— dijo al borde de las lágrimas.

— Dan — habló con dulzura — no puedes cambiar el pasado...

— es mi culpa — lloró con gran dolor en su corazón — ella no merecía morir, todo fue culpa mía...

Alin no sabía que hacer o que decir. Así que sin pensarlo se acercó aún más a él y lo abrazo. Él correspondió a su abrazo.

Un abrazo vale más que mil palabras, un abrazo es la forma en la que le hacemos sentir a la otra persona que estamos ahí a su lado...

Desde aquel instante en el que Venessie murió, Dan cayó en una terrible depresión por varios meses, hasta que un día la luz llegó a su vida.
La luz que le mostró el camino a la felicidad y al amor.
La luz que le dio nuevas fuerzas y motivaciones para vivir.

Comenzó a asistir a la iglesia junto a sus padres, la muerte de Nessie fue lo que los llevó a buscar a Dios.
Todo lo ocurrido tenía un propósito...

Un año después nació el grupo "Luz en la oscuridad" liderado por Dan.
En una entrevista que le hicieron, le preguntaron el por qué del nombre, a lo él respondió:

— Dios llegó a mi vida, yo me encontraba en las tinieblas.
Él, fue la luz que brillo en medio de la oscuridad...