Las luces parpadeaban, la musica retumbaba, el rostro de un hombre aparecia y despues se desvanecia, de nuevo las luces. Un escenario, un cuerpo, el cuerpo de una mujer bailando, sus caderas contoneandose, sus piernas con las altas botas negras. La larga melena se balancea al mismo cuerpo que ella se mueve sensualmente. Es ella. Ella es la que esta bailando, ella es la que esta provocando con su propio cuerpo…. Es Diana, la que esta bailando.

-Haahh –se incorporo en la cama bruscamente,  su rostro estaba empapado en sudor, su respiracion aceleraba, sus manos temblaban. Miro a su alrededor, en la oscuridad de la noche.

Recordo donde se encontraba y se giro bruscamente hacia el otro lado de la cama. Un lugar vacio.

Bajo de la cama descalza y camino hacia la ventana, la abrio para que el aire rozara su piel.

-¿Qué fue ese sueño? –miro la cama -¿o eran recuerdos?

Escucho un ruido y miro rapidamente la puerta. Cuando habian regresado a la casa, su marido le habia dicho que tenia trabajo pendiente y que ya subiria a dormir. Despues de eso lo habia visto encerrarse en su despacho.

Descalza atraveso la habitacion, con el fino camison de seda cubriendola, tomo la bata que habia sobre el sillon y tras ponersela, salio de la estancia cerrando la puerta despacio.

Se deslizo por los pasillos de aquella mansion tratando de hacer el menor ruido, bajo las escaleras y se dirigio hacia donde sabia, se encontraba la cocina. Una inmensa cocina de tonos blancos y verdes, con una isleta en el centro y una gran mesa blanca ante un balcon que daba al jardin trasero.

Abrio el frigorifico y saco la jarra de agua, se sirvio un poco en un vaso y despues volvio a guardarla.

Con el vaso en su mano se dirigio de nuevo hacia las escaleras, pero una vez ante estas,no pudo evitar qu ela curiosidad le ganara. Se dirigio al salon y observo la luz del despacho estaba apagada. La puerta estaba entreabierta, asi que no le costo ver dentro. Sobre la mesa habia papeles y un portatil cerrado, desvio la vista por el lugar y se paro en el sofa, en el sofa en el que Marco estaba durmiendo.

Fruncio el ceño observandole. ¿Por qué no habia subido a dormir? ¿Por qué ella estaba alli?

Poso la mano en el pomo de la puerta, con la intencion de abrirla, pero entonces lo penso mejor.

A ella tampoco le apetecia tener a ese desconocido en la cama.

-¿Qué es lo que esta pasando? –suspiro mientras sujetaba el vaso entre su mano. Con decision se giro y volvio a caminar hacia la escalera. Subio por estas y una vez en la habitacion se quito la bata, tomo un poco de agua y regreso a la cama. A una cama vacia, a una habitacion vacia.

Sin darse cuenta se fue quedando dormida, hasta que dejo de dar vueltas a todo lo que la rodeaba y la confundia.

Los rayos de luz que entraron por la ventana la despertaron.  Se levanto de la cama y miro a su alrededor, seguia sola. Lo que implicaba que el habia dormido toda la noche en el sofa del despacho.

Estaba cansada de ser tratada como una idiota, estaba cansada de no entender nada y sobre todo estaba cansada de la forma en la que Marco la miraba. Como sino valiera nada, como si no supiera ser una mujer, una autentica mujer.

Entro al baño y se ducho rapidamente, arreglo su pelo, escogio un vestido adecuado y se maquillo.

Cuando bajo a la planta baja, todo estaba en silencio y sin pensarlo dos veces se dirigio a la cocina, donde las empleadas preparaban el desayuno.

-Buenos días –Entro tranquilamente y todas la miraron sorprendidas

-Señora, se levanto muy temprano –Estela corrio hacia ella –Pronto estara el desayuno

-¿Teneis cereales? –Al oir su pregunta todas fruncieron el ceño

-Si –Estela asintio

-Pues entonces ya tengo mi desayuno –fue al frigorifico y saco un bote de leche, despues miro a las empleadas -¿Me dais un boll por favor?

-Claro –una chica asintio y nerviosa saco uno del mueble y se lo dio

-Gracias –Diana tomo una cuchara y sirvio la leche, despues agarro la caja que Estela habia dejado ante ella y se fue directa a la mesa de la cocina. Se sento alli tranquilamente mientras saboreaba los cereales.

Estaba acabando su desayuno cuando escucho la voz de su marido.

-Estela ¿y mi café? –Marco se paro en la puerta mirando sorprendido a su esposa desayunando en la cocina

-Buenos dias –Diana se levanto de su lugar tranquilamente, tomo el paquete de cereales y el boll con la cuchara y se acerco a la encimera para dejarlos alli.

-Dejeme señora –Estela cogio el boll y se dispuso a lavarlo

-Gracias –Diana le respondio mientras caminaba hacia la puerta, paso junto a su esposo sin decirle naa y tampoco mirarle.

-¿Ha desayunado aquí? –Diana alcanzo a oir la pregunta mientras se alejaba por el pasillo.

Sin tener idea de que hacer, salio al jardin, a tratar de disfrutar un poco del sol y de la naturaleza. Se quito los zapatos y camino descalza por la hierva, finalmente se sento en esta y se quedo mirando a la nada pensativa.

-Diana Le Blanc –una voz conocida hizo que se girara –Un placer verla de nuevo –el paro ante ella e hizo una reverencia guiñandole un ojo

-¿Y que hace en mi casa si puedo preguntar? –sonriendo ella se levanto del cesped y el le tomo la mano para ayudarla

-Por supuesto que puede –el sornio –Si me permite tambien preguntarle ¿Qué hace una mujer tan hermosa sola en este jardin?

Zain, el hombre que habia conocido en el almuerzo de su padre, se encontraba en su jardin, sonriendole e inspirandole mucha confianza.

-Bien, comenzare yo –el le guiño un ojo –Estoy aquí para hablar con su esposo, tengo unos negocios que proponerle

-Ah –asintio pensativa –Pues yo estoy en el jardin, pensando.

-Eso es  bueno –el le tendio el brazo para que se agarrara y acompañarla –Si no te importuna que te acompañe –miro su reloj –llego con veinte minutos de adelanto y supongo que aun Marco no me espera

-Esta desayunando –Diana asintio y tras coger sus zapatos en la mano se agarro al brazo de el y comenzaron a caminar

-Bueno Diana –el la miro de reojo –Puedo saber ¿a que te dedicaras aquí?

-¿Cómo? –ella fruncio el ceño

-Tu padre hablaba orgulloso de tu dedicacion a ayudar a los mas desfavorecidos, tus fiestas beneficas, tus donaciones –el la miro con interes –Me preguntaba si piensas seguir con ello

-Claro –fruncio el ceño –Supongo

-Señor Clark –Marco camino por el jardin a grandes zancadas hasta pararse ante ellos –Llega temprano

-Lo se –el asintio –Por eso me decidi a aprovechar el momento y tratar un asunto con su esposa

-¿Y que asunto puede tener usted que tratar con mi querida esposa? –con delicadeza, Marco la tomo de la mano y tiro de ella, alejandola de Zain, la pego a su cuerpo y paso la mano por su cintura. Una postura normal en cualquier matrimonio, cualquiera menos ellos. Diana se tenso incomoda y el mismo Marco la sujetaba nervioso.

-Supe que su dedicacion a ayudar a los desfavorecidos es inmensa –fruncio el ceño al ver el desconcierto en los ojos de Marco –Andres me hablo de las fiestas beneficas y todo lo referente a eso

-Ah, si –asintio no muy convencido

-Y ya que usted y yo vamos a tener negocios –miro a Diana –Tambien puedo organizar con su esposa alguna recaudacion benefica  ¿Qué me recomendaria?

-¿Eh? –Diana lo miro incoda –yo, no se. Tendria que pensarlo

-Claro –el asintio sonriendo

-¿Por qué no pasa a la casa? –Marco señalo la entrada con la cabeza –La empleada le guiara al despacho, yo enseguida estoy con usted.

-Naturalmente –Zain se acerco a Diana y le tomo la mano, la llevo a sus labios –Señora Le Blanc, ya me pondre en contacto con usted para arreglar ese asunto

-Esperare su llamada –ella respondio sonriendo

Ambos observaron como Zain entraba en la casa y entonces el la sujeto con mas fuerza y la obligo a mirarle.

-Tu no vas ha trabajar con este hombre en cosas beneficas ni en nada –Estaban muy cerca, sus rostros casi se rozaban

-¿Y por que no? –al desafiarle el la miro sorprendido -¿Qué tiene de malo?

-¿Quieres que todos se burlen de mi pensando que eres una cualquiera? –la solto bruscamente y ella se tambaleo sobre la hierva

-¿Pensaran que soy una cualquiera porque organice una cena benefica? –Diana camino hacia el furiosa –No se que es lo que quieres, no se que demonios es lo que esperas y tampoco se si yo era asi antes. ¿Qué se supone que voy a hacer? –apretaba las manos en su cintura –No puedo salir sola, no puedo hablar con nadie, no puedo emplear mi tiempo en cenas benefcas ¿Qué puedo hacer dime? ¿Qué se supone que era lo que hacia? –sus ojos se inundaron de lagrimas –Porque yo ni siquera se si esta era mi vida, si tu me tratabas de esa forma antes, si me despreciabas y me prohibias, si preferias dormir en el incomodo sofa del despacho antes que en la habitacion con tu esposa –y una lagrima resbalo por su mejilla –Yo no se quien soy y que es lo que hago aquí.

-Yo …-Marcio dio un pas hacia ella, mirandola confundido. Entonces volvio a adoptar su pose fria y respiro profundamente –Esta bien, ya hablaremos sobre la cena benefica –miro hacia la casa –Voy al despacho

Diana observo como el se alejaba, como la dejaba alli en mdio, sola. Aun con las lagrimas brotando de sus ojos y ni siquiera fue capaz de acercarse y abrazarla, de darle una palabra de consuelo.

Durante el resto de la mañana Diana permanecio en su habitacion y cuando bajo a comer se entero de que su esposo habia salido y no regresaria hasta la noche.

A pesar de la insistencia de Estela para que saliera a dar un paseo o que el chofer la llevara a dar una vuelta, ella volvio a encerrarse en su habitacion.

De nuevo ceno sola y la verdad tampoco le importo, despues se dio una ducha y se metio en la cama con el deseo de cerrar los ojos y poder olvidar incluso que existia.

Pero hubo algo que la sorprendio. Cuando ya llevaba un rato en la cama, la puerta de la habitacion se abrio y escucho los pasos de su marido por la estancia. Oyo como se cerraba la puerta del baño y despues el agua de la ducha. Nerviosa trato de dormirse pero le fue imposible, fue consciente de cada ruido, de cada movimiento, hasta que sintio el colchon undirse al otro lado e inconscientemente sus manos se sujetaron a la sabana con fuerza.

Seria una noche muy larga…

Y AQUÍ OTRO CAPITULO

DIANA TUVO UN SUEÑO EXTRAÑO… ¿MARCO ESTA SORPRENDIDO DE QUE SU ESPOSA LE PLANTE CARA? PERO A PESAR DE TODO EL NO TUVO EL VALOR PARA ABRAZARLA Y CONSOLARLA¿POR QUE?

OS DEJO UNA FOTO DE DIANA CON SU VESTIDO Y EL VIDEO DEL SUEÑO QUE TUVO DIANA ESA NOCHE..