La espada de Kanao ya está sobre su cuello, está pasa lentamente, siente que la corta un poco, pero no lo suficiente como para desprender la cabeza, sabe que debe actuar rápido, hacer algo respecto, debe pensar en algo.

Entonces solo se pregunta... ¿Porque los recuerdos vienen a su mente?, La horrible masacre de sus padres siendo asesinados, Himejima apareciendo para salvarlas, la promesa que se rompió, niñas sufriendo, llorando, niñas que vuelven a sonreír, Shinobu enojada, llena de ira por los demonios... Y ella que jamás fue capaz de odiarlos.

Nunca lo dijo, ni siquiera a su propia hermana porque sabía la opinión que tenía sobre los demonios, Kanae cuando miraba a un demonio, ante sus ojos era un humano lamentable, un asesino nada más, que debía de arrebatar vidas para poder vivir, es lo mismo que los animales con los humanos... No hay diferencia, después de todo si los demonios no comen, sufren, no son capaces de morir los pobres al menos que sientan el ardiente sol que los quema. 

Además hay seres humanos realmente crueles, detestables, se hacía la pregunta de como ellos podían estar vivos, ¿Porque mejor no eran devorados por demonios?, Se pregunta en sus más oscuros pensamientos, que esas personas mueran en vez de las buenas, en vez de sus padres.

Como unos padres fueron capaces de vender a su propia hija, ni siquiera le dieron un nombre, ellos deberían estar agradecidos de haberla tenido.

Kanae ya no quería ser una cazadora, desde que empezó a cuidar a las niñas que perdieron a sus padres, ella se hizo la hermosa ilusión de verlas como sus hijas, cumplir su sueño de ser madre.

Más la promesa que hizo no quería romperla... Aunque no sirvió de nada, ella agonizo, se convirtió en demonio, no hay manera de corregir lo que hizo, después de todo ella tomo la decisión de devorar a las horribles personas que hacían daño, y también seguir con el culto de Douma.

También decidió tomar la vida de Shinobu, hacerse una con ella, esa fue la única opción que tenía, y entonces sería odiada por la pequeña Kanao, dolía... Después de todo aún conservaba tantas emociones humanas, y además ella era su querida hija.

De verdad amo a cada unas de sus niñas, solo quería protegerlas, también a su hermana Shinobu, pero Douma la asesino tan fácilmente, todo se quebrantó, ella se corrompió con su sangre, entonces decidió hacerse fuerte usando ese poder, sabiendo que esto la mandaría al infierno.

—¡Nueva técnica!.—La voz del chico que perdió a su madre en manos de Douma la escucha, solo lo mira de reojo, él lanza sus espadas hacia las de Kanao, sabe lo que hará, levanta su mano lentamente, puede hacerlo, acabar con el muchacho.

Pero por alguna razón siente que su mano es retenida, por un momento vio reflejada la mano de Shinobu en su muñeca, como si se tratará de una ilusión.

Después su atención se ve en Kanao, su pobre niña llora amargamente, pero luchando sin detenerse, está orgullosa de ella. —Ka...nao...—La Kocho es capaz de decir, la Tsuyuri le escucha, entonces los ojos sangrantes de ella se abren con sorpresa, el rostro de Kanae empieza a sanar, pero el cuello se está cortando al fin. —Lo siento, y gracias.—La sonrisa que ve la recuerda muy bien... Fue la primera vez que alguien le sonrió tan dulcemente, que la miraban a los ojos y no la despreciaba con estos.

Kanae lloró.

Entonces la cabeza al fin fue cortada, la técnica de Kanae se deshace lentamente, el cuerpo podrido termina lejos de su cabeza, la cual está cerca de Inosuke, quien caía aliviado, alegre por haber vencido al demonio junto con Kanao.

Mientras tanto la cazadora cae de rodillas, recordando a ambas mujeres que le salvaron la vida, tan solo puede pensar que todo es culpa de ese horrible demonio, Douma, él hizo que Shinobu sintiera amargura porque mató a su hermana, y también corrompió a Kanae, arruinó su su felicidad, las quebrantó a ambas, lo que Douma tocó lo contaminó.

—¡Ja!... Gana-...—Inosuke gritaría la victoria, más vio a Kanao, tan triste por haber matado a una persona que quiso, después a sus pies estaba la cabeza de la demonio, esta ya desaparecía poco a poco, con lágrimas en su único ojo visible, no supo porqué, y odio esto, pero por un momento vio a su madre en ella, cayó en su retaguardia, las vivencias con su madre aparecieron en su cabeza, lloró por ella.

—Hermana...—Escucho la voz de Shinobu, y eso solo significa una cosa, Kanao e Inosuke la lograron vencer.

Kanae no podía moverse, era como si no pudiera tener control de su propio cuerpo, al instante supo porqué, Douma la sujetaba, la mantenía medio absorbida, permitiendo que sus brazos estuvieran libres, más la mitad de su cabeza y espalda se encontraban dentro de él, además Douma sostenía sus brazos, como si él la estuviera controlando.

El demonio sonreía con placer, no decía ni una palabra, sus ojos se veían cubiertos por su flequillo y la oscuridad que cubre a ambos. —Kanao es muy fuerte, tu la ayudaste ¿No?.—Comenta una tranquila Kanae, no tenía caso alterarse por algo que era inevitable.

Shinobu llora amargamente. —Si... Se supone que el debió de sufrir, no tú.—Agacho la cabeza, dolida de no poder hacer nada.

—Esta bien, era mi castigo por arrebatar vidas humanas.—Y ahora es ir al infierno, unida al monstruo que la asesino.

—¡Ven conmigo!.—Suplica la hermana menor, para así tomar con fuerza la mano de Kanae, jalando con fuerza.

—Shinobu...—Realmente quisiera estar a su lado, con sus padres, pero no merece tal paraíso.

—No quiero que te quedes sola.—La jala más fuerte, e increíblemente el cuerpo de Douma la soltaba, miró hacia atrás, él no hacía ni decía nada.

Shinobu la libero y Kanae la abrazó con fuerza. —Te quiero tanto Shinobu.—Le dice, llorando porque al menos pudo abrazar a su hermana antes de irse.

—¡Hermana no te vayas!... Papá y mamá te están esperando.—Shinobu se aferró a ella con fuerza, el cuerpo de Douma empieza a ser absorbido desde abajo, un enorme charco de sangre se lo lleva, como si se tratará de arenas movedizas, más el demonio solo se queda callado.

—Diles que los amo mucho, y me perdonen por haberme convertido en esto.—Siente como las manos de Douma las sostiene de sus pies, el ya tenía la mitad de su cuerpo en esa sangre, olía a azufre.

Es obvio que la arrastra con él, deshace su abrazo, pero Shinobu insiste en no dejarla, tuvo que emplear algo de fuerza para liberarse, y además la sangre que derramó la empieza a reclamar, para que así pague por sus pecados, se hunde lentamente, junto a Douma que no la suelta, un pequeño recuerde que se llevará consigo, algo tan hermoso tendrá en el infierno, es feliz, la corrompió y fue devorado por una hermosa mujer y esta misma se irá con él.

El demonio solo piensa que es un hermoso final.

—¡No por favor!.—Mas la hermana menor no quiere eso, sostiene con fuerza la mano de su hermana mayor, teniendo que usar ambas manos.

—Todo está bien Shinobu no debes sentir lástima por un demonio ¿No?, por favor se muy feliz, ahora eres libre.—Se hundió rápidamente, ya casi todo su cuerpo está en esa sangre espesa, y lo único que se nota de Douma es un poco de su cabeza, y los brazos que ahora sujetan el rostro de Kanae, enterrando una de sus garras en el ojo izquierdo, haciendo que sangre, la menor Kocho no se rinde.

Pero Kanae ya se resigno a este castigo, sus lágrimas brotan. —Si se me permite, espero poder ser tu hermana de nuevo.—Y no importo cuánto lo intento Shinobu, ni ella es capaz de parar esto, el rostro de su hermana desapareció en esa sangre, solo sostenía su mano, que terminó soltando.

—¡Hermana!.—Un horrible grito de dolor y sufrimiento se escuchó en aquel vacío que se fue distorsionando, rompiendo, Shinobu se reencontró con sus padres, quiénes la abrazaron con fuerza, lloraron por la persona que nunca llegaría aquí.

Kanae y Douma terminaron en un espacio manchado de sangre, donde el fuego arde con fuerza, el castigo de ella fue permanecer unida al demonio que la mató, sentados en aquel lugar donde antes eran adorados como dioses, solo la mitad de su cuerpo se podía ver, aunque su cabeza y brazos estaban liberados, pero sus manos eran sostenidas por Douma, quien fue condenado a tener el rostro podrido, con un ojo que cuelga pero que nunca se desprenda.

La mirada de ella está perdida, sin poder derramar lágrimas de arrepentimiento pues estás las evapora el fuego, ladea su cabeza a un lado, el demonio detrás suyo sonríe. —Suframos juntos por siempre.—Kanae solo cerró sus ojos sin decir ni expresar nada en su rostro.

Douma solo se rió, está complacido, ama esto. 

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¡Tada! Lo he terminado (｡•̀ᴗ-)✧ espero les haya gustado <3 fue algo raro y medio difícil poner a Kanae como "demonio mala" pero quedó bien, bueno eso digo(?) xDD muchas gracias por leerlo <3 ( ꈍᴗꈍ)( ◜‿◝ )♡ y perdón por el final tan triste (?) UvU