Ahora mismo estamos el chico que parece ser que se llama Alexander, el mismo el que acaba estar con el en el baño.

Nos mirábamos sabiendo lo que nos esperaba, mi primer día llamando la atención "Que raro" -pensé con sarcasmo- Lo único que quiero es estar tranquila pero con estos orangutanes a mi lado va a ser un poco difícil estar tranquila.

El director nos miro con mala cara y sobre todo a mi, pero era de esperar, la tranquilidad estaba en Alex y en mi pero en el director todo lo contrario.

-¿Alguien me va a decir que ha pasado?-Dijo intentando estar tranquilo pero se veía a 1000km que así no era.

-Esta de a lado es torpe y se ha "caído"-hizo comillas"- tirándome su comida al cuerpo, y alguien ha dicho "Guerra de comida" y ahí es cuando ha empezado todo- estaba sorprendida por lo sincero que había sido relativamente

-Piensas decir algo señorita-se dirigió el director hacia mi, me sorprendía que su incompetencia le llegaba a pensar que no quería que la gente supiese que es mi tío cosa que estuve agradecida

Si, ahora dirá que "Todo es mentira"-Imitó mi voz- y no digas nada porque llevo razón-añadió

-No he dicho nada...-dije en un susurro con ganas de matarlo- Lo único que quiero decir es...-me dirigí al director-me he caído con la comida porque he sentido la zancadilla de alguien-le comente

-Si si-Dijo el chico de a lado-" Que te hicieron una zancadilla" se puede saber quien es el que te la hizo-me preguntó

-No lo sé, he dicho "me hicieron" entonces no se quien es aquel sujeto o acaso no entiendes el español- le mire con cara de "te mato" mientras me reía

-No quiero discusiones en mi despacho-protestó mi tío- a modo de castigo....-se puso modo pensativo- como vosotros habéis provocado una "guerra de comida"-haciendo comilla- Ahora vosotros vais a limpiar lo que habéis ensuciado

-Te vas a ir a la mierda absoluta- le respondí, mirándole fijamente a sus ojos

-Os podéis callar y a empezar a limpiar TODOS los baños-Dijo irritado

Y así es como acabo la conversación porque el director salió, dándonos un papel de donde se encontraba todo lo que necesitábamos y cuando lo teníamos que hacer.

-¿Cuando es que preparo todo esto el director?-me pregunte a mi misma

-Pues creo que ya lo había preparado-interrumpió mis pensamientos y ahí es cuando me di cuenta que lo había dicho en alto

-Bueno,ahora dice el horario que lo tenemos que hacer ahora entonces levanta tu culo pocho y deja de ser un vago-me reí por mi propio comentario y salí de la sala

Una vez estando en los baños con todo lo necesario, aparece el tonto de Alex, mirándome con cara de poco amigo.
Bueno es decir su cara de siempre-sonreí al pensamiento- y este me miro raro pero le ignore.

-¿Bueno vago cuando piensas empezar?-le pregunte divertida, ya que le estaba sacando de su casilla o eso creo.

-Bueno...-se queda mirándome-parece que hoy quieres dar un poco de molestia, ahí perdona que la das siempre- empieza a reírse y se acerca a donde yo estaba

-Hoy estás gracioso,¿no?-Le mire desafiante

Este se iba acercando más, y cuando estaba a tan solo 5cm de mi cogió la fregona que tenía a mi lado.

-¿Que te creías que te iba a dar un beso? Por qué si piensas eso...-Sonríe mostrando los dientes blancos- No lo vas a tener a no ser que me lo pidas

-Deja tu orgullo a un lado y empieza a trabajar imbécil- agarre la otra fregona y me fui a una parte del baño, alejado de él

El silencio me mataba a más no poder,y como eso no lo aguantaba...saqué el móvil del bolsillo con los auriculares y me los puse, le di a reproducir la playlist y la música inundaba mis oídos.
Me gustaba bastante limpiar con música, es lo que me da animo a hacer lo que quiero, y no tenia nadie que me dijese que lo quitase ya que todos se fueron.

Ahora mismo estaba escuchando "when I was your man" de Bruno Mars, me parece una canción hermosa, estaba tan concentrada en la música y en el suelo que no me di cuenta de lo que pasaba a mi alrededor.

Tenía a Alex mirándome divertido y quitándome los auriculares de los oídos

-¡Eh!-me queje-¿por que me quita los auriculares?-le miro "enfadada", realmente no lo estaba pero más o menos si.

-¿Podrías dejar de cantar en alto?- me mira mientras se ríe, y yo bajo la mirada avergonzada.

Creo que estaba como un tomate, ¿desde cuando estaba así delante de alguien?, mi pregunta es: ¿quien soy?, no me identificaba en esa situación o es que no estaba acostumbrada a eso.

Este me levanta la barbilla para que lo mire a sus ojos lleno de brillos, un brillo bastante bonito. Cuando nuestras miradas se encontraron, sentí una punzada en el corazón. Estuvimos 5min así sin decir nada, y no creo que se necesitaba decir nada, hasta que el interrumpió en voz baja.

-¿Fuiste a clases de canto?-me pregunta suavemente

-No...-le contestó delicadamente y melancólica- mi madre me enseño un poco cuando era pequeña, por decirlo de algún modo lo heredé de ella-ahí es cuando evite mi mirada con la suya, ya que no me quería ver débil delante de personas como él.

-Que gesto tan bonito de tu parte, sigues haciendo lo que tú madre hace o hizo una vez- me dijo con tal dulzura que levante la vista hacia el y tenía una sonrisa honesta que me provocó que le contestase con una sonrisa.

-Hizo una vez-le corregí con la voz entrecortada, en un hilo fino que se podía quebrar en algún momento

-Que amor más verdadero que solo tienes para recordar lo que hizo por ti, sin rencor ninguno- Al oír esas palabras,me quedé estupefacta viniendo de él, nunca había oído tal palabras

-¿Puedo hacerte una pregunta?-le dije tímidamente, este asintió, suspire- ¿por qué te ocultas?-le pregunte y se le cambio el semblante a serio