13 de abril de 2016.

Hola, Dylan:

Verás, volví a escribirte─una vez más─ desde hace vario tiempo en que no lo hacía y Jade volvió a regañarme. Sí, sí, como sea. Hoy compré una coca cola, como las amo, creo que me dan orgasmos. ¡Ajá! Como te decía, entonces como ya sabes ahora éste delicioso refresco, viene con "canciones" impresas, las cuales mayormente son solo frases. Da igual, ésta decía, "Can't stop, won't stop grooving" ¡y bingo! Es Shake It Off de Taylor.

Entonces, me puse a escuchar todo el día Shake It Off porque en serio se me pega. Y, al escucharla recordé los días de secundaría, justamente cuando terminamos y toda la escuela lo sabía (espero lo recuerdes), y bueno, cuando todos se enteraron de ello y luego muchos chicos me invitaban a fiestas, "citas" y demás. Esos tiempos en los que comenzaron los rumores de que yo, sí, ésta que está escribiendo, salía en diferentes citas y no los podía retener a estar conmigo.

Pero, ninguna era segura, era simplemente una cita y ya. Ellos querían más de lo que yo les podía dar y es que... tenía el corazón roto, ¿no?

Al menos eso era lo que la gente decía.

Pero yo seguí navegando como un crucero. No podía parar, no me paré de mover. Es como si tuviera música. Música en mi mente, diciendo que todo va a estar bien.

Y como sabes, los jugadores van a jugar, los que mienten van a mentir, los que odian van a odiar y los que rompen corazones como tú van a continuar rompiendo corazones.

También recuerdo cuando entraste con tu nueva novia al baile de graduación y todos como "oh dios mio" y yo mire a un chico de buen cabello y le dije "bebé, vamos a menearnos toda la noche".

Como sea, está canción combina perfectamente con esta situación y estoy agradecida con Taylor por ello.

¡Que tengas un excelente día, Dylan!,
Kate.