Neville:

¿Puedes calmarte? Jaja estoy bien amigo, además te recuerdo que sé cuidarme sola. Gracias por preocuparte eres tan tierno, pero esa preocupación deberías usarla en Hannah, no en mí.

Todo está bien y fue muy amable y cortés conmigo. No necesitas lanzarle maldiciones, creeme que ya lo hubiera hecho de ser así.
Los detalles te los daré personalmente cuando nos encontremos en Londres. O si no, después dirás que ya no te quiero y que te cambié, no quiero que te coloques sentimental, jamás te dejaría por nadie.

Para enmendar mi error, hornearé galletas de chocolate para ese día y las podremos comer de camino al castillo ¿Te parece? Yo sé que sí.
Bueno ahora me iré a dormir y apagaré la lámpara, siento que mi padre se levantará en cualquier momento y me regañará por escribirte tarde, ya sabes lo ridículo que es, se coloca celoso de tí.

¿Cómo va tu resfrío? ¿Tu abuela no ha enloquecido? Anoche soñé con ella y era algo muy gracioso, no lo escribiré por acá porque después dirás que te molesto demasiado.

¡Hey! No me mandaste ningún esqueje o semilla nueva este verano. Cada vez que me mandas una agrando la mini huerta que me enseñaste a hacer. Eres un ingrato Neville Longbottom.

Te aprovechas de mi cariño y ahora te haces el ofendido.

Jaja

Besos mi adorado.

Con cariño.

Marlie.