Final~
-¿Estás listo para este día? -JungKook asintió ante lo que Wheein le estaba preguntando. Ella sonrió y se acercó a él para acomodar su corbata. Ambos sonreían.
-¿Dónde está Tae? No lo he visto. -ella rió para luego alzar ambas cejas como dando a denotar algo. JungKook se sonrojó.
-¿Lo buscas para algo en especial? -JungKook negó rápidamente. -Tranquilo, solo bromeaba. Él ya se fue, tuvo prisa.
-¡Pero la celebración es a las 9! ¡Y son las 7:30! Es más, todavía tengo sueño.
-¿Quién dijo que fue allá? -ella volvió a reír. -Fue a hacer un encargo que le pedí para el desayuno. Pero sí es verdad que madrugó, ni siquiera sé si habrá dormido. Ayer se lo veía demasiado nervioso por hoy. Supongo que estás de la misma manera.
El chico asintió.
-No puedo creer que después de tanto tiempo, después de tantos años de mucho esfuerzo, al fin podré graduarme. Realmente me siento demasiado emocionado. -de repente, Wheein puso una mirada algo nostálgica.
-TaeHyung ya se habría graduado. Recuerdo su mirada de decepción cuando le tocó perder un año. En fin, supongo que las cosas pasan por algo. Si no se hubiera cambiado de colegio, no te habría conocido, y supongo que eso no habría sido algo bueno, ¿no? -JungKook sin querer, sonrió. -Vaya, realmente no creí que te vería así de enamorado por mi sobrino.
-¡¿D-De qué está hablando?! -Ella se divertía al ver al muchacho comportarse de una manera cohibida. Se lo veía tierno.
-No me lo niegues. Por mucho que TaeHyung me diga "No te metas en mis asuntos, ¿sí?", no es difícil adivinar que ustedes dos tienen algo... no cuando son demasiado obvios.
-¿Lo... Lo somos? -Wheein asintió.
-El otro día iba a tomar un vaso de agua y cuando entré a la cocina, ustedes estaban abrazándose. ¡¿Por qué tendrían que abrazarse exactamente en la cocina?! Tuve ser discreta al salir, aunque ni siquiera fue tan necesario. No se dieron cuenta de mi presencia.
-E-Eso fue p-porque, bueno...
-Dime la verdad, JungKook. ¿Tú y TaeHyung están en una relación? -La mujer tenía el ceño fruncido y miraba a JungKook atentamente. El muchacho sabía que debía dar una respuesta completamente sincera.
Así que negó con la cabeza.
-B-Bueno... Nosotros a veces nos damos cariño. Nos abrazamos, a veces nos b-besamos, y eso... pero ninguno ha hecho la pregunta específica. Y sé que eso se debe a mí.
-Oh... Ya entiendo. -JungKook de repente se sintió mal consigo mismo.
TaeHyung estaba listo, completamente dispuesto a entregarle su corazón, y él todavía no había tomado la decisión adecuada, aunque ya sabía con exactitud cuál era.
-¡Yo realmente lamento esto! Es solo que Tae dijo que esperaría a que yo estuviera listo a empezar algo, y por eso, yo... -Dejó de hablar en el momento en que miró a Wheein negar con la cabeza.
-No, no te culpes, JungKook. Estoy al tanto de todo. -Ambos caminaron hacia la sala y tomaron asiento en los muebles, uno en frente del otro. JungKook sabía que se venía una charla sumamente importante. -Escucha, seré sincera; cuando escuché de ti por primera vez, te odié completamente. Te odie porque gracias a ti mi pequeño estaba sufriendo de una manera tremenda. Yo... yo solo deseaba que el instituto acabara, solo porque ya no quería ver a TaeHyung llorar por alguien que no merecía sus lágrimas. Estoy al tanto del porqué actuabas así, ya hemos tenido esa conversación algunas veces, lo sabes. Y si hay algo de lo que soy fiel creyente, es que la gente puede cambiar, JungKook, y tú lo has hecho. Por eso ahora estoy orgullosa de ti. Porque dejaste atrás tus creencias erróneas, porque ahora eres un JungKook más transparente. Eres quien de verdad debías ser desde un inicio. Alguien de gran corazón, algo tímido, pero al mismo tiempo lanzado. Eres muchas cosas, JungKook, y estoy segura de que Tae ve eso y muchísimo más. No solo por el hecho de que ese chiquillo está perdidamente enamorado de ti, sino porque es la verdad.
-TaeTae es un ángel... -JungKook, sin quererlo, comenzó a derramar algunos lágrimas. Se preguntó qué había hecho para estar rodeado de gente tan linda como Wheein, TaeHyung, y su propia madre. Se sentía alguien afortunado.
-Tú también lo eres para él, corazón. A eso iba orginalmente. Entiendo perfectamente si todavía no sabes qué decisión tomar, y no pretendo apresurarte ya que es algo que tú debes elegir, pero solo te pido que no te niegues la oportunidad de ser feliz con alguien que te quiere muchísimo. TaeHyung te aprecia como no tienes idea, y no lo digo porque él me lo haya aclarado o algo así, sino porque se nota a leguas. Y también se nota la mirada que le brindas. Ambos sienten lo mismo, ¿por qué negarse a tener la felicidad abolsuta?
El chico asintió, entendiendo aquellas palabras. Wheein tenía razón, y él lo sabía.
Y estaba dispuesto a darle a TaeHyung al fin una respuesta definitiva.
Wheein iba a decir algo más, pero se escuchó la puerta principal abrirse y de repente, TaeHyung se encontró en la sala con una funda en sus manos. Cuando vio la escena que se encontraba frente a él, frunció el ceño.
-¿Ocurrió algo? -La mujer negó con la cabeza mientras sonreía cálidamente.
-Nada, solo que Jordan está muy emocionado por el día de hoy, ¿no? -El nombrado asintió mientras reía levemente. Se notaba que TaeHyung no creyó nada.
Wheein se acercó a TaeHyung y le arrebató la funda que este tenía, la observó y sonrió al ver el contenido.
-Pan recién horneado. Tal como me gusta. Vayan a sentarse, pronto les serviré el desayuno. -Theo se quejó.
-¡Pero Wheein! Pronto serán las 8 y debemos estar allá a las 9. ¿No podemos comer algo afuera? -hizo un pequeño puchero que fue olímpicamente ignorado por su tía, mas no por JungKook, quien mentalmente pensó que se veía súper lindo.
-Que se vayan a sentar, dije.
Al final, la muchacha se fue a la cocina dejando a los chicos en la sala.
-¿Seguro que no pasó nada? Te veías algo nostálgico. -expresó TaeHyung mientras se acercó un poco al menor. Posó su mano en el rostro contrario y sonrió cuando este soltó un pequeño suspiro, aparentemente disfrutando del pequeño contacto.
-N-No... No pasó nada. Solo hablamos de temas sin importancia. -JungKook se aclaró la garganta antes de volver a hablar. -¿Así que fuiste a comprar pan?
-Sí, me levanté temprano porque quería estar listo a tiempo, pero Wheein aprovechó para enviarme a hacer las compras. Es demasiado sabida. -rió. De repente, notó que JungKook se encontraba algo avergonzado, como queriendo decir algo que no se atrevía. -¿Sucede algo?
El otro muchacho sentía su rostro arder debido a la vergüenza de lo que estaba a punto de pedir.
-¿Yo... podría darte un abrazo? -Y TaeHyung nuevamente sintió un cosquilleo apoderarse de su interior. Una cálida sensación en su pecho que lo hacía sonreír como un completo tonto.
Un completo tonto enamorado.
-¿Todavía debes preguntar eso? -fue su respuesta.
JungKook, sonriendo, se acercó a TaeHyung y tímidamente, fue rodeando su cuerpo con sus brazos, para luego posar su cabeza en el pecho del mayor. Sonrió aún más cuando este también lo rodeó, formando así un abrazo repleto de cariño.
No habían palabras para expresar lo enamorados que se encontraban el uno del otro.
TaeHyung jamás pensó que encontraría a alguien que sería capaz de agitar su corazón a tal punto de pensar que saldría de su pecho; jamás pensó que la vida le daría una sorpresa tan malditamente bella como lo era JungKook; jamás pensó que se sentiría tan bendecido y agradecido.
TaeHyung se sentía feliz. Demasiado feliz.
JungKook, por su parte, quería llorar. Quería llorar de pura alegría.
Él se sentía demasiado agradecido de que la vida lo guiara hasta TaeHyung, y aunque siempre se arrepentirá de haberlo tratado muy mal en un principio, sabe que aquello fue lo que posteriormente lo hizo recapacitar y a orientarlo a actuar correctamente.
JungKook ya no podía, ni quería ocultarlo, TaeHyung le gustaba muchísimo. Tanto que en ocasiones se sentía asustado. Sentía que todo su corazón estaba repleto de amor por aquel joven que llegó a poner su mundo de cabeza.
-Me gustas. -susurró TaeHyung en el oído del otro muchacho. JungKook, una vez más sentía que entraba al paraíso.
-Tú también me gustas. -Y solo esas palabras bastaban para que Tae se sintiera volar hacia el cielo.
Por ahora, le daba igual que el muchacho no se sintiera listo para iniciar un romance entre ambos. Sabía que ambos sentían lo mismo, y eso le bastaba.
¿Eran necesario los títulos?
-¡Oh, por favor! ¿Otra vez abrazándose? ¡Dejen de comer en frente de los pobres! -Wheein soltó esas palabras haciendo que ambos jóvenes se separaran rápidamente. Al final, todos rieron. -Vengan a comer.
TaeHyung asintió, dispuesto a caminar hacia la mesa y sentarse a degustar los alimentos que Wheein había preparado. Sin embargo, no se esperó que en un segundo, JungKook haya tomado su mano deteniéndolo.
-¿Kook? ¿Qué pa-
No pudo hablar, pues JungKook había posado sus labios contra los de TaeHyung, y había comenzando a moverlos lentamente, mientras colocaba sus manos alrededor del cuello del mayor. Tae correspondió más que gustoso.
El mayor sentía miles de emociones cada vez que JungKook lo besaba, y a pesar de haberlo hecho ya algunas veces, en esta ocasión lo sintió distinto; y no supo si fue por la razón de que esta vez el otro muchacho por primera vez hubiera tomado la iniciativa, o si en realidad algo bueno estaba a punto de ocurrir el día de hoy.
Fue un beso sumamente tierno, repleto de cariño, y sobretodo, amor. Cuando JungKook se separó, sonrió y dejó por última vez, un casto beso en los labios contrarios.
-Me gustas. -volvió a decir antes de separarse por completo y caminar hacia la mesa.
TaeHyung se quedó de pie, estático, sorprendido. Al final, sintió morirse de amor.
-Tú también me gustas, muchísimo. -susurró de igual manera, aunque sabía que esta vez, JungKook no podía escucharlo.
🎀
La celebración duró aproximadamente dos horas. Entre que iban nombrando a cada estudiante para entregarle su respectivo diploma, el agasajo demoró más de lo esperado, tomando en cuenta también que eran demasiados alumnos a comparación de veces pasadas.
JungKook y TaeHyung llegaron con diez minutos de retraso -gracias a Wheein-, pero eso no les impidió acomodarse en un buen asiento mientras esperaban pacientemente que sus nombres fuesen nombrados.
JungKook miró a su alrededor. Muchos padres de familia, alumnos con capa y museta, maestros por todos lados. De repente, sintió una oleada de nostalgia.
Fue en este lugar que se formó por 6 años. En ese instituto había pasado por tantas cosas, tanto buenas como malas.
Recordó sus primeros años, en donde no hizo absolutamente ningún amigo, sencillamente porque su padre le decía que no era necesario. Aún recordaba sus palabras "Los amigos son falsos. Nunca debes confiar en alguien que no sea tu papá. Otras personas solo se acercan a ti con el fin de obtener lo que quieren para luego decepcionarte. Así que, me escuchaste bien, ¿verdad? Sé que tú vas a ser listo y no te dejarás llevar por esas mierdas de sentimentalismos". Y así fue como estuvo muchos años a la deriva, sin nadie en quien confiar, sin nadie con quien hablar. JungKook actualmente se preguntaba cómo pudo sobrevivir solo por tanto tiempo. Al final, él mismo se convenció a sí mismo de que su padre tenía razón, y creó una barrera en donde nadie podía acercarse a él sin salir herido.
Su padre tenía razón. Los amigos no servían para nada.
No tuvo amigos hasta el último año, cuando ocurrió algo que definitivamente le cambiaría la vida. Conoció a TaeHyung.
Claro que jamás va a negar que su primera amiga en tanto tiempo, fue JiHyo. Eso es algo que siempre tendrá presente.
Ella era alguien que no se dejaba llevar por los rumores, y no le importó que JungKook se comportara de manera despectiva al inicio. Se quedó a su lado, dando el comienzo de una bella amistad. Amistad que tal vez al final no terminó tan bien, pero que al fin y al cabo fue hermosa.
También pensó en ChaeYoung. A pesar de que después se formó un grupo de cuatro personas, JungKook podía asegurar que no tuvo tanto contacto con aquella chica, puesto que ella era más cercana a TaeHyung, pero no podía negar que era alguien sumamente preciosa, con un corazón de oro, y muy comprensiva.
Definitivamente JiHyo y ChaeYoung eran personas muy importantes para él, y siempre iban a formar parte de su corazón.
El muchacho entre la multitud, pudo reconocer a su mamá, quien se encontraba con una sonrisa de oreja a oreja, y una expresión de orgullo en su rostro. Él se sintió cálido.
Si no fuera por ella, demasiadas cosas no habrían pasado. Mina, su mamá, fue aquella persona que supo guiarlo por el camino correcto y hacerle ver lo que verdaderamente estaba bien. Su dulzura y forma de ver las cosas logró que él reaccionara y caminara hacia la dirección que debió haber estado en un inicio. Rumbo a la felicidad.
Por último, se enfocó en TaeHyung, quien estaba a su lado concentrado mirando el programa, y sintió que sus piernas comenzaron a temblar.
Tenía tantas cosas que decirle, tantas, pero tantas, que sentía que explotaría si no se desahogaba por completo. Sin pensarlo, posó su mano en la contraria, y sintió un cosquilleo al notar que el mayor se encontraba sorprendido por aquel acto. JungKook lo estaba tocando en público.
Kook se acercó al oído de TaeHyung y el muchacho quiso reír cuando sintió al otro temblar levemente.
-Cuando esto acabe, necesito decirte algo importante. -TaeHyung por alguna razón, se preocupó.
-¿Es malo? -preguntó. JungKook negó.
-Espéralo.
TaeHyung tenía un presentimiento. Tenía una pequeña idea de lo que podía ser eso que el mayor quería decirle, pero sinceramente tenía miedo de aceptarlo. Tenía miedo de ilusionarse a lo tonto y luego resultara ser otra cosa completamente distinta.
Así que solo decidió que sería paciente y esperaría a que la gran noticia llegara.
🎀
Cuando la ceremonia culminó por completo, todos los estudiantes estaban hablando con sus padres. TaeHyung se encontraba con Wheein, mientras que JungKook estaba con su mamá.
Ella no paraba de abrazarlo y susurrarle constantemente un "Estoy tan orgullosa de ti, hijo mío", palabras que lograban que el interior de JungKook se sintiera tranquilo y en paz. Su mamá era alguien que lograba hacerlo sentir seguro.
Después de despedidas entre sus compañeros, más palabras de aliento y de felicitaciones, TaeHyung aprovechó un pequeño descuido para tomar la mano de JungKook y guiarlo hacia un lugar en donde no había mucha multitud. Genial, podían hablar a gusto.
-¿Quieres un helado? -preguntó TaeHyung al otro muchacho. Este lo miró por un segundo antes de agachar la cabeza y reír un poco.
-¿Esta vez también lo tengo que pagar yo? -TaeHyung fingió sentirse ofendido.
-¡Yo sé que disfrutabas pagar mis helados! Felicidades, JungKookie, eres todo un caballero. -Ambos rieron.
JungKook al final solo optó por negar con la cabeza.
-Yo... quisiera hablarte de algo justamente ahora. Si no lo hago en este momento, no lo haré nunca.
-Está bien, te escucho.
JungKook soltó un pequeño suspiro, y decidió que ya era el momento de hablar. Se iba a sincerar de una vez por todas.
-Sé que cuando nos conocimos, definitivamente no tuvimos un buen comienzo. Yo en el inicio te odié solo por tener un gusto diferente, y en mi cabeza solo pasaba el pensamiento de hacerte la vida imposible, porque mi estúpida mente pensaba que lo merecías. Nunca te ayudé en las primeras veces que Jackson junto con sus estúpidos amigos comenzaron a golpearte. Fui un jodido hijo de puta, y eso es algo que jamás voy a negar; pero... pero realmente puedo asegurar que el haberte conocido fue lo mejor que me ha pasado en la vida. Si no fuera por ti... si no fuera por ti, yo seguiría pensando de la misma manera en que lo hacía. Si no fuera por ti, y por mamá, yo seguiría siendo el mismo arrogante que se alejaba del resto y que no pensaba en nadie más que no fuera en sí mismo. Si no fuera por ti... yo jamás habría experimentado en carne propia lo que es estar jodidamente enamorado a tal punto de sentirse perdido por todas esas conmociones.
-JungKook...
-¡No! ¡Déjame hablar! -JungKook sin querer, había empezado a derramar un par de lágrimas. -Eres lo mejor que me pudo haber pasado. Gracias a ti es que hoy soy lo que soy. Gracias a ti es que puedo sentirme más tranquilo conmigo mismo. Gracias a ti, aprendí cómo apreciarme correctamente y a quererme. Aprendí a aceptarme tal y como soy, y a no dejarme llevar por los deseos de otras personas que no tenían nada que ver conmigo. Te debo demasiadas cosas, ya que gracias a todo tu apoyo es que pude abrir los ojos y poner de mi parte para así mejorar como persona. En serio, no te haces una idea de lo agradecido que estoy contigo. Y-Yo...
-JungKook. -volvió a llamar TaeHyung, interrumpiendo al otro. -Si lograste todo eso, es porque tú te lo propusiste. Eres una persona sumamente fuerte. Ten eso presente. Yo siempre voy a estar a tu lado, aún si me alejas por creer que tal vez he hecho demasiado por ti, te haría entender que hago todo esto porque te quiero, porque eres alguien muy importante para mí, y que da igual los altercados que tuvimos al inicio, ahora ambos sabemos lo que sentimos, y prometo que jamás, jamás, voy a hacer algo que te lastime, o que te haga sentir menos. Eres todo lo bueno que hay en este mundo, cariño. Nunca lo dudes.
Ambos habían empezado a derramar lágrimas de felicidad.
JungKook no podía más, definitivamente necesitaba desahogarse. Definitivamente debía hacerlo.
-Te amo. -Soltó de pronto.
TaeHyung abrió la boca debido a la impresión y parpadeó constantemente.
-¿Q-Qué? -JungKook sin decir una sola palabra, se acercó a TaeHyung y lo abrazó de la misma manera en que siempre solían hacerlo. TaeHyung correspondió. -¿JungKookie?
-Te amo. -repitió. -Sé que dirás que es muy, pero muy pronto que diga esto, incluso yo lo pienso así, pero es lo que siento exactamente ahora. Son las palabras que quiero decir, y estoy hablando desde lo más profundo de mi corazón. Y-Yo... quiero intentarlo, ya sabes... algo contigo. Quiero estar contigo como una pareja, poder tomar tu mano en cualquier momento, y darte besos cuando tú y yo queramos. Quiero apoyarte en los malos momentos, y celebrar en los buenos. Quiero estar contigo todo el tiempo posible, hasta que la vida nos lo permita. Quiero... quiero poder verte y decir con orgullo que estoy con una persona extremadamente maravillosa. Quiero... salir contigo. Yo en serio quiero. Lo quiero.
JungKook había permanecido oculto en el pecho de TaeHyung, pero alzó la mirada al escuchar un ligero sollozo. El mayor estaba llorando aún más.
-¿Tú... -susurró. -me estás preguntando si quiero ser tu novio? -JungKook asintió tímidamente.
-¿Sí quieres?
TaeHyung rió y posó sus manos en las mejillas del contrario, para luego comenzar a besar todo su rostro.
-Por supuesto que sí, mi amor.
Ambos sentían mariposas en su estómago y gran armonía en sus corazones. La sensación era tan indescriptible, tan hermosa, tan difícil de explicar con palabras.
Se besaron con lentitud, saboreando los labios ajenos, y mostrando en aquel beso, todos los sentimientos que ambos poseían por el otro. Este momento sin duda, era mágico.
¿Así se sentía estar enamorado? ¿Así de hermoso era?
¿Se podía ser más feliz?
Ambos se separaron con una sonrisa en sus rostros. Ambos conscientes de que una nueva etapa venía, una que sin duda, disfrutarían al máximo.
Porque TaeHyung y JungKook estaban dispuestos a superar todos los obstáculos que el destino les trajera.
Porque ambos se encargarían de demostrarle al resto que no importaban los malos comentarios, ellos seguirían amándose como siempre.
Ellos estarían juntos, porque el destino así lo quiso.
Porque el destino se encargó de poner a Tae en la vida de Kook. Y viceversa.
Porque ambos sabían que ahora no habría nadie que se interpusiera entre ellos.
Porque ambos ahora sabían que se querían más que a nada.
—¿Prometes que estaremos juntos, TaeTae?
El nombrado besó los labios del contrario antes de susurrar:
—Lo prometo, bebé.
~~~
Soy lágrimas 🤧
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro