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20

JungKook caminaba por los pasillos del colegio con algo de cansancio. Pensaba constantemente en cómo resolver aquel deber que se les había impuesto.

¿Qué podía decir de los homosexuales? Su madre le había aconsejado que sea sincero consigo mismo, que no preste atención a opiniones ajenas, que solo escribiera lo que él pensaba.

¿Eso significaba que debía escribir que los odiaba?

Porque los odiaba... ¿Verdad?

Sacudió su cabeza, era inútil que su cabeza siguiera pensando, siempre llegaba a la misma conclusión: no entendía una mierda.

Recordó una y otra vez las palabras de su padre cuando le comentó que debía hacer un ensayo acerca de la homosexualidad, y no pudo evitar compararlas con las de su madre.

"¿Pues qué crees vas a poner? Lo que realmente son: una escoria, son solo personas cualquiera que no hacen otra cosa que dar asco. Eso está ganado, hijo. Solo argumenta la mierda que le hacen al mundo, y verás como tendrás una buena nota"

Sí, definitivamente su padre y su madre eran jodidamente diferentes.

"No te voy a decir que escribas que los apoyas, qué no es así. Pero solo te diré una cosa, hijo: los homosexuales también tienen los mismos derechos que los demás. Son personas, al igual que , al igual que yo, incluso al igual que la basura de persona que es tu padre, y realmente lamento expresarme así de él, pero no hay nada bueno que recalcar. Así que por favor, JungKook, el que piense qué escribir en ese ensayo, no tu padre. Escribe lo que piensas, no lo que alguien más piense.''

Y aunque al principio se burló de su madre por aquella repuesta tan cursi, no pudo evitar a ponerse a pensar en tales palabras tan profundas.

Así que los homosexuales son normales... Eh.

Supuestamente son como los demás y piensan como los demás, ¿no?

"¿Y por qué rayos una persona supuestamente normal está siempre con humor de perros?" Pensó JungKook sin querer al darse cuenta de la presencia de TaeHyung cerca de él. Mientras que JungKook caminaba, notó al otro muchacho sentado en un pequeño banquito mientras estaba con la mirada perdida.

No estaba llorando, tampoco parecía que tuviera intenciones de hacerlo, pero definitivamente se lo veía triste...

Muy triste...

El muchacho dudó si irse de ahí o acercarse. En primer lugar, ¿por qué demonios se acercaría?

Soltó un suspiro muy pesado cuando notó que inconscientemente comenzaba a caminar hacia donde TaeHyung se encontraba.

No tenía nada que perder, a lo mejor y se enteraba de un buen chisme.

— Hey. — TaeHyung se sobresaltó un poco y sacudió la cabeza, estaba perdido en su mundo. Alzó la mirada y frunció el ceño al ver a JungKook mirándolo con simpleza.

¿Qué rayos...?

— ¿Has venido de nuevo a burlarte de mí o qué? — TaeHyung no se molestó en ser amable como las veces anteriores, ahora definitivamente no se encontraba en condiciones de tratar de hacer recapacitar al cabeza hueca que tenía en frente.

— Vaya, tu actitud es muy diferente a cómo suele ser. — JungKook no sabía que hacía, simplemente soltaba lo primero que se le venía a la mente. Él ni debería estar con él, no, no debería.

— ¿A eso viniste? ¿Solo a molestar? No puedes simplemente irte de a...

— ¿Qué tienes?

Ambos jóvenes se sorprendieron. JungKook, quién no entendió el porqué preguntó aquello; y TaeHyung, quien definitivamente no se esperaba esa pregunta.

Pero no, TaeHyung no era tonto, aquel muchacho lindo no podía estar preocupado por él, no cuando en realidad es un estúpido homofóbico.

— ¿Para qué quieres saberlo? ¿Te afecta acaso? No lo creo, así que déjam...

— No. No me afecta, pero... A veces es bueno hablar con alguien.

— ¿Y crees que ese alguien eres tú? — TaeHyung volvió a fruncir el ceño, JungKook estaba raro, muy raro.

— Bueno, pues... Ay, joder, solo intento ser amable por primera vez en mucho tiempo. — el muchacho se veía muy frustrado, estaba confundido consigo mismo, y el que TaeHyung se comportara de manera arisca, solo lograba empeorar las cosas.

TaeHyung se dejó vencer. Después de todo, realmente necesitaba hablar con alguien, así esta persona sea una completa mierda.

— Wheein está mal. — soltó mientras miraba un punto fijo. JungKook ladeó la cabeza algo confundido.

— ¿Wheein? ¿Tienes una hermana? — TaeHyung soltó una risa cortante.

— Es mi tía, la única persona que ha estado ahí para mí.

JungKook no supo qué decir, así que dejó que aquel muchacho que se encontraba herido, lograra desahogarse.

— Wheein estuvo conmigo desde la muerte de mi madre, desde que el hijo de puta de mi padre decidiera abandonarme como un jodido perro. Siempre fue homofóbico, siempre se encargó de decirme la mierda que soy, lo perdido que supuestamente estoy y de cómo supuestamente yo busco por mi cuenta el camino del infierno. Pero... ¿acaso es mi culpa? ¿acaso yo pedí que un niño me gustara cuando era pequeño? Mamá siempre me quiso, nunca le importó cómo era, o qué me gustaba, ella simplemente decía que siempre me querría, que era su hijo, y que nunca debo negarme a lo que soy. Ella... Ella siempre me amó.

Y JungKook no supo qué hacer cuando TaeHyung rompió en llanto.

— Cuando ella murió, papá no quiso hacerse cargo de mí. Wheein fue la única que me dió una mano, desde ahí se convirtió en mi tutora legal y en una amiga, ella llenó el hueco que la muerte de mi mamá dejó en mí. Y ahora, ahora... Está sufriendo por mi culpa, ella no lo dice, pero sé que es así.

»Ayer cuando llegué a casa, la vi desmayada en el suelo, me asusté, corrí al hospital más cercano, tenía miedo de que algo grave le pasara. Al final, el médico dijo que solo era un desmayo debido al estrés acumulado, que debía cuidarse y tomar reposo. Ella enseguida dijo que se encontraba bien, pero sé que no lo está. Trabaja para el sustento de ambos, y aparte tiene que seguir sus estudios que tuvo que suspender una temporada por mi causa. Le he dicho que puedo conseguir un trabajo y ayudarle con los gastos, pero es tan terca que siempre me lo niega diciendo que mi obligación es estudiar. Por favor, tengo 18, ya no soy un niño. Ya no soporto verla así, quiero ayudarla, realmente quiero...

TaeHyung se calmó, después de haberse desahogado como nunca, pudo calmarse. Sentía como el decir lo que pensaba hizo que se quitara un peso de encima.

Ya no lloraba fuertemente, ahora, solo lágrimas algo traicioneras adornaban sus mejillas.

JungKook sencillamente callaba, se sentía abrumado. La homofobia que él también poseía, había logrado destruir un hogar completo, ¿eso hacía ver a la homofobia como mala?

¿Qué era lo correcto?

Quiso decir unas cuantas palabras de consuelo, pero nada salía, absolutamente nada.

— JungKook — el nombrado notó cómo TaeHyung se levantaba se su lugar y se iba retirando lentamente.

¿Qué estaba pasando? ¿Por qué de repente todo comenzó a dar vueltas?

— Estoy ansioso de saber qué colocarás en ese ensayo.

Y se fue, se fue dejando a un JungKook extremadamente confundido, y por alguna razón, asustado también.

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