capítulo uno — editado
820 palabras

Louis Tomlinson dejaba todo en orden en su antiguo y ahora remodelado locker, el director le entregó la clave y le permitió ir un día antes de que las clases dieran inicio.

Hace poco se encontraba en Los Ángeles, ha vivido ahí desde hace algunos años, tres (3) par a ser exactos. Ahora ha vuelto a Inglaterra, el lugar dónde nació y en donde dejó tantas cosas atrás, sus amigos, compañeros... su chica. También algunos problemas que no pudo resolver pero para eso regresó nuevamente a Londres, volvió a su antigua cuidad, vecindad e instituto, estaba feliz de tener una nueva oportunidad para pedir perdón y comenzar las cosas desde cero.

¿Como estará ella? Debe estar hermosa, siempre tan amable y gentil, me enamoré de su cálida y tierna sonrisa. Pensó.

Aún podía recordar claramente el primer beso que le robó, la chica sentía tanta vergüenza que huyo de él durante e
¡Una semana!

Sonrió ante el dulce recuerdo, cerró su locker y se dispuso a salir por aquellos largos pasillos llenos de bueno y malos recuerdos en el cuál solo trataba de revivir los momentos felices aunque sabía que no podía ignorar los malos momentos, él estaba solo, bueno con algunos trabajadores del área de limpieza y decorativa quiénes se encargaban de dejar todo listo para la bienvenida al nuevo año escolar. 

—Louis. —escuchó detrás de él.  Se giró y vio a su rubio amigo.

—¡Niall! —dijo emocionado.—Amigo, ¿no me darás un abrazo?

Niall parpadeó rápido como si estuviera procesando la imagen, no era para menos, tenía en frente a su viejo amigo Louis. 

—¿Qué haces aquí Louis? —preguntó mientras lo abrazaba. 

—He vuelto, Nii. —rompió el abrazo —Voy a pasar mis últimos años aquí en el instituto.

—Me alegro, por lo menos cumpliras con nuestra promesa.

Louis sonrió recordando esa vieja promesa en su niñez.
—Asi es, voy a graduarme con ustedes.

—El viejo me pidió que viniera por unos horarios y que se lo entregara a un chico nuevo... Vaya sorpresa, pensé que no volvería a verte. Y como no eres alguien nuevo, no necesitas de mis servicios, así que nos ahorramos el tour por el instituto porqué conoces este lugar tanto como yo.
Aquí tienes tu horario —Niall le entregó la hoja que contenía su horario y volvió abrazarlo nuevamente. —y como estoy muy feliz de verte, te invito un café.

—Acepto, solo si es en Starbucks. 

—Tranquilo, el lugar no se ha movido de lugar tras tú partida. Sigue aquí fiel a nosotros.

Louis río por la indirecta mientras ambos salían del lugar, Starbucks era su lugar favorito con sus amigos al final de cada tarde se reunían en ese lugar. Cuánto los extrañaba.

¡Incluso al gordo de Liam!

Además Starbucks también era el lugar preferido de su chica.

Llegaron en menos de siete minutos al lugar, Niall abrió la puerta y la campanilla sonó por todo el lugar, avisando la llegada de nuevos clientes. El lugar estaba un poco lleno pero había uno que otro espacio disponible. Tomaron la mesa que se encontraba al fondo y detrás de esta había un gran ventanal, la mesa perfecta que siempre habían tomado, hoy de nuevo Louis se sentaría para  platicar sobre todo de lo que se había perdido.

Una joven pelirroja y voluptuosa por lo que pudo notar Louis, los atendió, le había quedado clarísimo de que ella y Niall tenían algún rollo sentimental.

Nee, seguro era la novia de Niall, aunque este no la había presentado como tal.

Louis pidió el de siempre, un Espresso Americano en cambio Niall pidió un Vainilla Latte.

Con su pedido en manos, Louis decidió romper el hielo con lo poco que había hablado con Niall desde su llegada notó lo mucho que ha cambiado, ya no era ese imprudente chiquillo que desbordaba una extrema felicidad que lo volvía completamente hiperactivo, ahora se mostraba cuidadoso, prudente, coqueto y más maduro. Con total confianza, Louis decidió sacar las preguntas que lo atormentaban constantemente.

Él no podía esperar a ver cuanto ha cambiado todo, él necesitaba saberlo. Ya.

—¿Cómo está ella?, —Niall dejó de tomar su café y lo miró.— ¿Eleanor sigue estudiando en el instituto? 

—¿Por qué me preguntas por ella?

—¿Acaso no puedo saber que pasó con mi chica?

—Louis... —Niall se inclinó hacia delante quedando frente al rostro de su viejo amigo.—Te lo diré para que te abstengas a los cambios y no te lo tomes por sorpresa.e

—Dilo ya. —Louis miró atentamente a Niall, esperando obtener buena información sobre su chica.

—Ahora ella es la abeja reina... Ella ya no es tú chica, espero que te mantengas alejado de ella para que no sufras y no digas que no te advertí. 

Louis escuchó esas palabras por parte de su amigo Niall sin embargo no las comprendió a la perfección.

¿Él sufrir por estar cerca de Eleanor?
Eso es algo imposible, ¿no?.