Ho Seok, estaba adormilado, estiro su brazo para buscar a su esposo. Su lugar estaba vació, pero aún conservaba cierta tibieza , pero esta vez no se sintió abandonado porque podía sentir a Tae por el lazo de unión de sus lobos.

Se estiro complacido con el calorcito de amor que le enviaba su esposo desde algún lugar de la casa.

Su teléfono vibro.

─Hola Alfa

─Hola amor, que bueno que despertaste ahora te llevo el desayuno, ya lo tienen listo.

─Enseguida bajo.

─No amor, debes estar cansado de tanto ejercicio, estuvimos de traviesos toda la coche y debes descansar.

─Te amo Alfa.

─Te amo Omega.

Hoseok colgó y se sintió pleno, era bonito despertar sin miedos, con la certeza que su esposo realmente te ama. Tae Hyung, había cumplido su palabra de cuidarlo y protegerlo contra las groserías de los snobs de sus amigos.

Gracias al lazo su Alfa percibió los sinsabores y desplantes que sus supuestos amigos hacían sentir a su omega y lo cuido mejor. Ahora el mundo sabía lo que representaba el Omega para Tae y nadie se volvió a atrever a ser grosero con él. Los alfas más puristas y clasistas tuvieron que aceptarlo, pues ahora Ho Seok  podía cambiar a lobo y estaba encinta esperando el heredero de los Kim.

En cuanto a los odiosos Wellington, al no tener amor y nada en común,  solo se dedicaban a molestar por envidia a parejas felices. Ahora que las cosas estaban claras y habían cambiado en el matrimonio Kim, fueron advertidos por el Alfa  de no meterse en su vida, los envidiosos Wellington tuvieron que alejarse y buscar un nuevo entretenimiento, las malas lenguas decían que se habían enfocado en el reciente matrimonio de Harry Duque de  Sussex con una actriz americana, a la cuál consideraban indigna. Así que Hobi descansaría por lo menos por un tiempo de ellos.

Pronto daría a luz su estómago se veía muy abultado, se cansaba mucho y la espalda le dolía por los kilos de más que ahora debía llevar, pero no importaba porque era el fruto del amor, pensaba el omega acariciando su vientre, estaba encantado cuando su bebé se movió feliz de la atención de Hobi.

─Pronto nos veremos bebé, espero que seas tan hermoso como tu papá, pero no quiero que seas tan obsesivo como él.

─Cuando te hago el amor no te quejas de lo obsesivo y meticuloso que puedo llegar a ser.─Le dijo Tae, que  entro a la recamara dejando la charola del desayuno en la mesita lateral, para poder abrazar a su omega.

Ho Seok volteo a ver a su esposo ─En esa parte no me quejo, esa parte de tu obsesividad me encanta.

Tae Hyung, gimió cuando su esposo tocó su miembro─ Mi omega esta hambriento.

─Sí, tengo hambre ─Mientras sus manos seguían manipulando su virilidad.

Excitado con las palabras de su omega lo jalo a la orilla de la cama para embestirlo de una sola estocada.

Para Ho Seok era más cómodo hacer el amor subido en su alfa montándolo, pero no se quejó y elevo la cadera, para sentir más profundo a su alfa, pero al hacerlo sintió un calambre que lo obligo a soltar un grito de dolor.

─Te lastime amor.

─No,  pero creo que es tu hijo que quiere llegar

Tae palideció al escuchar las palabras de su omega, se vistió y ayudo a Ho Seok a cambiarse. Llamo a su personal de seguridad para alistar su salida, las muchachas del servicio trajeron la maleta del omega mientras Tae llevaba en brazos a su esposo al coche.

─Puedo caminar─dijo pero un fuerte calambre hizo que escondiera su cara en el pecho de su esposo.

El alfa metió con mucho cuidado a Hobi al coche, mientras el personal se movilizaba. Sentía el dolor y el miedo de su pareja, trato de mandarle todo su amor por el lazo que los unía mientras acariciaba su espalda.

El trayecto se hizo eterno. Al llegar al exclusivo sanatorio, ya un séquito de doctores lo esperaban con una camilla y en cuanto el Alfa lo deposito con sumo cuidado se arremolinaron alrededor del Omega para atender al hijo del magnate.

─Tae, no me dejes solo.

─No te preocupes corazón, ahí estaré siempre que me quieras. ─Sin soltar su mano camino por el pasillo junto a su esposo.

Dos horas después...

Ho Seok, dormía tranquilamente mientras Tae Hyung lo miraba extasiado, su lobo estaba feliz y pleno como él, en sus brazos orgulloso tenía a su hermoso hijo, digno heredero de los Kim, sus facciones eran perfectas, con pequeñas hebras doradas igual que él, era una copia exacta del Alfa, quizás la única diferencia era la hermosa y elegante nariz de su Omega que hacia que fuera más adorable.  Con mucho cuidado dejo a su cachorro en la cuna, se acercó a su Omega y le acaricio el cabello, peino con sus dedos las suaves hebras, se veía tan hermoso.

El alfa nunca se perdonaría como lo hizo sufrir, pero dedicaría su vida a amarlo, no solo le había dado el regalo del cachorro más perfecto, si no que trajo a su vida el amor, la pasión, el sagrado vínculo de una pareja destinada, que solo por seguir las estúpidas tradiciones  casi destruyen su relación.

─Te amo Hobi- Le dio un beso tierno en su cabeza.

Ho Seok abrió los ojos, miro a su alfa con mucho amor─¿Cómo esta sugar?

─¿Quién?

─El bebé

Tae Hyung, fue de nuevo a la cuna y tomo de nuevo a su cachorro para ponerlo en los brazos de su omega.

─Mi terroncito de azúcar.

─No voy a llamar azúcar al niño, se llamará Tae Hyung Tercero.

─Estás loco, mi hijo debe ser un primero.

─Es la tradición.

─¿Y si lo llamamos Yoon Gi?

─¿Tae Gi?

Ambos padres negaron el último nombre.

─¿Tae Seok?

El alfa medito el nombre ─Mmmm, Kim Tae Seok Primero, me gusta.

-De cariño le puedo decir suga o Tae Tae.

─Omega, lo vas a traumar, debe tener un nombre fuerte.

Ho Seok hizo un lindo puchero y el millonario solo sonrió, estaba irremediablemente enamorado y a merced de los deseos de su omega.

La visión de Hobi con el cachorro era la cosa más hermosa de este mundo

─Espero poder borrar todos los malos tratos que recibiste por mi necedad, espero llamarte mi bebé por siempre, ser tu amigo, ser tu amante hasta el final de nuestros días. Gracias por dejarme amarte y quedarte a mi lado.

─Yo te amo Tae Hyung, tú tenías tus razones para no reclamarme. No tengo nada que perdonarte, pues me has dado a Tae Seok, es el regalo más sagrado que alguien me haya dado.

-Mi única razón para no reclamarte era el miedo, tú eres demasiado perfecto y eso me hizo dudar que algo tan excelso fuera verdad. Soy un cobarde y lo admito, aún tengo miedo de no ser para ti suficiente.

A través de su vínculo Ho Seok, le envió todo su amor, toda su confianza y su compromiso por trabajar para que su relación fuera duradera y feliz.

─Te amo Alfa.

─También te amo Omega, nunca me cansaré de decírtelo 

El pequeño Tae Seok lloro con hambre, su padre lo acomodo para alimentarlo. 

Los dos padres se miraron y sonrieron estaban por fin juntos, sus lobos se encontraban plenos y felices al haber encontrado a su otra mitad..

Gracias por leer esta nueva historia.♥