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Se encontraban sentados en la sala esperando a que Jin y Nam llegarán para contarles la nueva noticia, el nerviosismo era inevitable, ambos conocían el temperamento de Jin y era de temer.
La puerta principal fue abierta asustando a los enamorados, era Nam el primero que llegaba.
– Que hacen tan serios en la sala es raro que no estén en su nidito de amor.
– Estamos esperando a que lleguen – Respondió Tae.
– Ya me puedo imaginar de que quieren hablar es mejor que me valla antes que Jin acabe con todo como un huracán.
– No te vallas tu eres el único que lo puede tranquilizar cuando se altera.
Mirando la carita de suplica que le daba Jungkook no tenía más opción que sentarse en el sillón a esperar a que el drama empezará.
La incomodidad entre los tres era mínima, aún no se acostumbraban a vivir bajo el mismo techo.
– Cuando me pensabas decir sobre la clínica que estás como socio principal?
Tae había decidido romper el incómodo silencio, había muchas dudas sobre su hermano y el las tenía que descubrir.
– Así que ya te enteraste. – Contestó desinteresado, ese era un tema que no tenía importancia para el – No es nada..
– Como que no es nada, si llega a oídos de las autoridades podrían ir a la cárcel.
– Solo será hasta que tú esposo de a luz a tu hija.
Esa pequeña palabra había sonado muy fuerte y clara en los oídos de Jungkook "Esposo" no se oía nada mal, sonaban tan bien que el menor sentia como su corazón brincaba de alegría, estaba tan sumergido en sus pensamientos que dejó de escuchar lo que los demás hablaban..
– Ya no es necesario que sigan con esa estupidez, Jungkook se va a regresar a Corea conmigo y se atenderá en un hospital normal.
– Que es lo que acabo de escuchar? – La voz de Jin había sonado en la sala asustando a los tres hombres.
El tema del regreso de Jungkook a Corea ya se había platicado antes pero Jin seguía en negación, no confiaba en dejara a su amigo en manos de Tae..
– El doctor nos dijo que Jungkook está en perfecto estado para viajar.. Se regresará conmigo a casa.
– Eso no es buena idea, debe estar comiendo sanamente y contigo solo comerá chucherías además debe reposar y con.....
– Jin.... – Interrumpió el menor un poco molesto, estaba cansado de ser tratado como un niño de diez años – Yo decidí irme con Tae y tú no puedes impedirlo, quiero estar con él y con mi mamá, necesito estar con mi familia en estos momentos.
– Lo se, pero no quiero que te pase nada y menos a la bebita.
– Es mi hija la que carga es su vientre si no lo recuerdas, daría mi vida por ellos, así que no dudes que los cuidare de todo el mundo.
A estas alturas de las circunstancias Jin estaba menos molesto que al inicio. Tae no era de su agrado pero si él era la felicidad de su amigo debía confiar y aceptarlo por completo.
– Si me llego a enterar que Jungkook lloró por tu culpa o que tú padre lo trata mal, ese mismo día voy por él y me haré cargo de ellos, además si lo engañas o lastima de alguna manera te cortaré el miembro y los testículos con mi bisturí, entendido?
Las frías amenazas habían dejado helado el ambiente, ver de esa manera tan seria y ruda a Jin los tenía impresionados.
– Entendido.... En dos días salimos de aquí, hasta entonces deja de meterte en mi intimidad con MI pareja – Recalcó Tae, sacando un gesto de molestia en Jin.
– Como sea me da igual, me voy a descansar hoy inicio mi turno de noche...
Salió de la sala directo a su habitación siguiéndolo Nam Por detrás, el moreno sabía que Jin estaba muy afectado y el debía consolarlo y aconsejarlo.
– Vamos a preparar algo de comer y después descansar, la bebé debe tener hambre.
Más tranquilos entraron a la cocina para preparar unos sandwiches y fideos las galletas de chispas de chocolate no podían faltar como postre para el joven embarazado.
– Es temprano qué tal si comemos en la habitación mientras vemos una película...
Jungkook aceptó la propuesta animado, amaba ver películas de comedia romántica.
Todo era paz y tranquilidad en el cuarto de los enamorados, disfrutar tiempo juntos era lo mejor que les podía pasar.
El ambiente era cálido, de vez en cuando el menor se soltaba riendo por alguna escena chistosa de la película y eso le daba un toque de armonía al ambiente.
– Ya se acabó la película, ve a bañarte para darte un masaje en los pies, hoy anduvimos todo el día caminando haz de estar cansado.
– Si eso haré.....
Jungkook salió del cuarto para ingresar al baño mientras Tae recogía los platos de la comida y los llevaba a la cocina para lavarlos.
Después de una hora ambos se encontraban bañados y con pijama puesta en la comodidad de su cama, mientras Tae masajeaba los pies ajenos y Jungkook se relajaba y descansaba.
– Tae, tengo antojo de algo...
– Son las ocho de la noche y no hace más de una hora que cenamos, espérate poquito.
– Pero es un antojo diferente...
El mayor miraba un poco confundido a su pareja, en ocasiones sus antojos eran raros.
– Que es lo que quieres comer?
– A ti.
Las palabras habían salido sin una gota de vergüenza.
Tae llevaba meses esperando con ansias estar entre las piernas del menor pero la situación ahora era diferente, su pareja estaba en un estado delicado y el no quería lastimarlo.
– Creo que no es lo correcto, el doctor nos dió permiso pero me da miedo hacerte daño o a la bebé.
Jungkook se movió de lugar hasta quedar sus labios a centimetros de los de su pareja .
– Se que no lo harás, hay más formas de darnos placer sin que haya penetración.
Los sensuales susurros chocaban en los labios contrarios, haciendo que la sensible piel de Tae se erizará – Se que me deseas tanto como yo a ti. – Seguía susurrando muy cerca del mayor mientras sus traviesa manos iban desabrochando los botones de la pijama.
– Si Jin se entra de esto me dejara sin pene.
– No lo hará porque este – Tocó sobre la pijama al semiduro miembro de Tae – Es mio y yo sé que hacer con el.
Tragó duro al ver lo sexy y caliente que se veía el menor seduciendolo, con esa imagen no se iba a poder contener.
– Solo haremos el sesenta y nueve y nada más..
Las palabras quedaron en el limbo cuando Jungkook cortó la distancia para fundirse en un candente beso, sus manos habían extrañando mucho la piel caliente del mayor, cada centímetro que tocaba era como si estuvieras en el cielo.
La ropa salia volando de sus cuerpos, la necesidad de sentir su desnudes era demaciado demandante por sus hormonas.
Cada delicada caricias y beso que Tae dejaba era tan caliente y romántico que se quedaba tatuado en la piel blanquecina. Sus besos iba bajando por el pecho hasta llegar a los sensibles pezones del menor, lamer esa zona erógena activaba más la exitacion de Jungkook haciendo que se su espalda se arquera.
– De dete.. detente si sigues así los vas a dejar adoloridos. – Sus labios decían una cosa pero sus manos las cuales estaban perdidas en el cuero cabelludo del mayor, daban un ligero masaje guiando a qué siguiera con la acción.
Siguió su recorrido de besos hasta llegar a esa bello lugar donde el amor estaba dando frutos – Hola bebe preciosa – Hablaba en tono bajo mientras daba besitos en el lugar.
– Ya quiero tenerte entre mis brazos...
– Es enserio Tae? te vas a poner hablar con la bebé en este momento?
Su exitacion lo tenía abrumado y el comportamiento del mayor lo sacaba de sus casillas.
– Tu papi está celoso, dejaremos la charla pendiente para otro día...
Dió un par de besos hasta llegará al bello púbico, el miembro de Jungkook estaba tan duro y húmedo que se antojaba tenelo en la boca.
– Dijiste que haríamos el sesenta y nueve, también quiero tu pene en mi boca... – De un fuerte pero delicado movimiento giró el menor quedando en cuatro.
– Estarás arriba, para que tú manejes tu cuerpo a tu gusto.
Se acostó en la cama en lo que Jungkook colocaba sus rodillas a los lados de su cabeza, sus manos estában en la cama a la altura de las caderas del mayor mientras que el duro y venoso pene de Tae quedaba muy cerca de sus labios.
De pronto sintió como la lengua de su pareja daba lamidas a su miembro sacándole jadeos.
Recargó sus codos en el colchón para quedar más cerca del pene ajeno , con delicadeza lo metió hasta donde su boca daba alcance, era grande y grueso que no le cabina por completo.
Después de un rato su labios hacian un buen trabajo, lamian y chupaban el tronco y el glande de ese gran pedazo de carne, por otro lado Tae también tenía su pene en la boca haciendo un perfecto vaivén.
La posición era cómoda y placentera, ambos estaba disfrutando del salado sabor contrario.
De pronto un dedo estaba tocando suavemente su ano, las pequeñas manipulaciones que daba en ese pequeño lugar lo estaba llevando al éxtasis, quería gemir pero tenía un grueso pene en su boca el cual ahogaba sus gemidos.
Las estimulaciones anales que estába sintiendo lo tenían perdido, sus caderas se empezaban a mover de arriba abajo penetrando grotescamente la boca de su mayor, estaba en pleno orgasmo succionando fuertemente el pene de Tae, sus caderas seguían moviéndose al compás de su boca, el dedo de su pareja no estaba dentro de él peor con solo tocar y dar pequeñas presiones lo tenían en el borde del placer.
Fue el primero en llegar a su límite llenando la boca de Tae con su esperma, sus piernas se sentían débiles y cansadas pero Tae aún no terminaba, succionó y chupó más fuerte hasta sentir como la viscosa y salada esencia del mayor llenaba su boca.
Limpiaron sus bocas con una bella sonrisa que decía más que mil palabras, habían echo el amor como hace mucho no lo hacían, las palabras sobraban no era necesario hablar solo hacía falta acomodarse desnudos uno junto al otro y dormir abrasados toda la noche.
Que lindo es el amor...😍😘😘.... Yo quiero una relación como la del Taekook llena de amor y reparto, me encata como se cuidan y como son atentos uno con el otro.. Simplemente los amo 😍💚😁💚
Gracias por leer nos leemos pronto ☺️💤💤☺️ feliz noche o día, nose a qué hora estén leyendo esto 🤦🤭🤭
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