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Capítulo45 ( Mierda).

Mi vida siempre había sido un completo caos, basado en risas, gritos, sexo y más sexo. En estos últimos meses me he dado cuenta de muchas cosas, esas que no creía que podían suceder y que estaba viviendo de una extraña manera.

Demián había vuelto a Rusia junto a Okana, aquella mujer con la que últimamente había estado saliendo a reuniones y quién sabe a que otras cosas.

Es obvio que a mí no me debe interesar lo que el hace con su vida, pero me era imposible.

¡¿Cómo demonios puedes vivir tranquilo!?.

Me molestaba el hecho de que el estuviera viviendo su vida de lo más  tranquila, mientras yo me mortificaba.

-- Keityn, mira a Santiago a la cara..-- hago lo recomendado para luego subir mi pierna izquierda a la altura de su vientre.

Santiago posa su mano en mi pierna intentando que no pierda el equilibrio. Los últimos días hemos estado muy unidos los tres, agregando a Fernanda, salimos, tomamos y compartimos como los grandes amigos que nos habíamos convertido.

Tomo rápidamente mi bolso y las llaves de mi coche para buscar a Emma y llevarla a ver al nuevo miembro de la familia, Byron Abiel, el rey de reyes.

-- Veinticuatro semanas y media señorita..- el doctor le entrega la pequeña ecografía a Emma--.., debo felicitarla señora mamá, su bebé está en perfectas condiciones

-- Muchas gracias..,aunque no ha sido nada fácil, me alegro mucho de escuchar aquellas palabras, porque lo hago de corazón..

-- supongo que aún esta nerviosa por dar a luz.

-- Mas de lo que imagina, tendré mi bebé con dieciocho años..

-- Eso no lo dijiste cuando lo tenías adentro..-- Mario interviene por primera vez en la conversación llevándose un codazo de mi parte y una mirada asesina de Emma.

-- No debe preocuparse, ambos estan en muy buenas condiciones..-- el doctor vuelve a la conversación.-- .Además se ve que tienes a muchas personas que te quieren y apoyan.

Después de ir al doctor y comer algo en la calle decidimos ir a visitar a Dalila a la casa de los Petrov. Aún me seguían tratando con mucho amor y como miembro de aquella familia.

Dalila ya sabía que el hijo que esperaba mi hermana era del suyo y andaba muy emocionada.

Emma decidió contarle porque sabía que pronto debía decírselo a Damián.

¿Motivo?.

Cuando aquel bebé naciera iba a tener rasgos de aquellos rusos millonarios y aunque la idea le parecía absurda, era la realidad.

--Oh que hermoso--Dania toma en la manos el eco del bebé con una sonrisa--¿Ya sabes como se llamará?.

--Sii--Emma sonrié-- Mi pequeño se llamará Byron Abiel

--¿Abiel?-- Dania enarca una ceja

--Sii, le he puesto Byron en honor a mi hermano y Abiel porque es un nombre hebreo que significa "Dios es mi padre " y mi bebé al igual que nosotras le agradecemos a dios de tan bello milagro.

--¿Nunca lo habia escuchado?..-- Mario intenta entrar en la conversación.

--Damián...-Dalila pronuncia lentamente. --...,Damián es Abiel -- no pude evitar reírme al escucharlo.

-- Así que tu hijo llevará mi grandioso segundo nombre...--Damián entra a la cocina con una gran sonrisa--. Por  cierto, hola...--Le da un casto beso en la mejilla a Emma y luego a los presentes.

--¿Esto debe ser una broma?--Emma se levanta de la silla para salir de la cocina, no sin antes jalar de la mano a Damián.

--¿Será que le dirá?--Asustada por lo dicho Dalila abro los ojos.--..Mamá también lo sabe .

--¿Como?.

¿Que es esto?.

Ay dios mío..

--Demián me lo dijo--Dania se agacha para tomar el pastel de chocolate del horno--..,sabes perfectamente que el no es ningún niño.

--Yo...--La verdad no sabia que decir, tenía mucha vergüenza.

Solo Emma me hace estar en estas situaciones.

--No digas nada, se que tu no tienes nada que ver...--Dalila me abraza y con una gran sonrisa agrega. --Ella es la madre, así que ella decidirá lo que va a suceder con el bebé.

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-- Te acuerdas que te comenté sobre un oscuro secreto..-- Fernanda intenta instalar una conversación.-- a esto me refería..-- no pude evitar percatarme del gran letrero que conocía como la palma de mi mano.--- Llevo años teniendo sexo en estos lugares.

--¿Y alex...--Me interrumpe.

--El solo pensaba en como satisfacer sus necesidades, no las mías...-- con cierta sonrisa agrega--..,no me arrepiento de ir a estos lugares .

--Yo...--Vuelve a interrumpir.

--Se que te parece loco esto, pero necesitaba decirlo.

--Yo se lo...--Intenta interrumpirme nuevamente pero me adelanto--Yo también visito estos lugares.

No pude evitar percatarme de su sonrisa. Estaba alegre.

--¿el sabe de esto?.

-¿Quién?--Pregunta Fernanda.

-- Santiago, deberíamos contárselo ahora que somos figuras públicas.

--El también lo visita Keityn...¿Como crees que nos conocimos?.

--¿Tú y el?.

--Un millón de veces -- apaga el auto y abre la puerta--.Ahora bajate y diviértete.

Sea lo que sea que tenía en mente mi prima me daba algo de nervios. Fernanda nunca fué así, de hecho me la imaginaba una loca adicta hacer el amor en medio de risas y rosas...No una desquiciada como yo, las vueltas que da la vida.

Tomo entre mis manos una botella de Wisky para caminar hacia la mesa que se encontraba mi prima.

--Santi--Fernanda se levanta de la mesa y abraza a nuestro gran amigo y jefe.

--Chicas le presento a Drake.

--Mucho gusto-- me presento hacia el rubio de ojos claros que se encontraba a unos pocos centímetros de mi. --...Keityn Ross, pero me puedes decir Key.

--Un placer conocerla Señorita Ross.-- Esa voz.

No.

No.

No.

Me doy una cachetada mental automáticamente...¡¡Nooo!!,el no.

Estamos aquí para olvidarlo.

Decir que escuche lo demás sería mentir. Apenas podía quitarme la sensación de escuchar su voz cuando este hombre me hablaba.

¿¡Por qué tienes que tener la voz gruesa y salvaje como él!?.

-- Otra por favor-- Le grita Santiago a uno de los mesoneros.

Fernanda y Santiago andaban muy melosos y eso me incomodaba, ellos jamás están así en el estudio.

Incómoda giro hacia mi derecha encontrándome con la figura prepotente de Demián. El al igual que yo me miraba con cierta curiosidad.

-- Y si entramos a la siguiente habitación..-- Drake nos invita.

Sí, lo necesito.

-- Sabes que ahora la siguiente sala es la de los espejos.-- Perpleja finjo que ya sabía.

--A mi no me gusta, si quieres ve con Drake.

Los cuatro nos levantamos y caminamos hasta la siguiente habitación llamada sala de los espejos.

El ambiente era un poco más terrorífico de lo que imaginé, el cuarto como decía su nombre estaba repleto se grandes espejos. Era de tono lila y a la misma vez negro, lo que lo hacía lucir realmente impresionante, mubles de terciopelo y líneas llenas de cosas que podrían hacer volar tu mente.

--Yo seguiré a la siguiente con Santiago a ninguno de los dos nos gusta esta.

--Esta bien-- Drake y yo caminamos hacia lo último y nos sentamos en la esquina del lugar, agradecía que estábamos completamente lejos de la puerta. No quería verlo llegar.

-- Se que tienes algo de vergüenza.--Drake agrega mientras ve hacia las otras parejas del lugar--...,y déjame decirte que puedes ir perdiendola..-- me señala el lugar.--.., aquí todos están enfocados en su placer que no les interesa lo que el resto haga.

Al posar la mirada en el lugar pude visualizar aquello que había mencionado, habían parejas besándose, haciendo sexo oral o incluso tocándose.

El morbo es mucho más poderoso de lo que imaginé.

-- Tienes razón.

--No haré nada que no quieres y tampoco te follaré aquí. Lo haré, pero no aquí, en otra habitación.

¿Como puede hablar con tanta facilidad sobre este tema?..

Drake acerca sus labios a los míos en un suave beso, dandome a entender que debía adaptarme a ellos. Sus labios eran muy suaves y me incomodaban un poco, tal vez demasiado.

Hace tanto que no besaba.

Separa sus labios de los míos para luego agacharse a la altura de mi vientre sacando lentamente mis bragas en el proceso. Inconsistente mi cabeza reacciona dejándome a la vista el gran espejo que había en el techo, mi figura y la de el se podían visualizar de una manera exitante y tranquila

--Abre...-- posa ambas manos en mis rodillas para invitarlas a abrirse.

En pocos segundos la música del ambiente cambia y con ello las luces. La habitación comienza a tornarse de un color rojo, aquel rojo intenso que hacía que todo luciera realmente exitante y fresco.

Arqueo mi espalda haciendo que tropezar con la mesa al sentir su lengua lamer de forma lenta toda mi cavidad.

Tanto tiempo sin sentirlo que me había olvidado de lo rico y satisfactorio que era.

Mi cuerpo rápidamente raciona a sus movimientos placenteros y satisfactorio provocando que cada fibra de miel se sintiera apasionada a sentir morbo.

Por inercia decido bajar la mirada y pasarla en la suya, pero el solo tenía los ojos cerrados.

¡Acaso es un nene!

Molesta ante su reacción giro en busca de una pareja, una que me hiciera sentir exitada. Visualizo de forma tranquila el lugar encontrandome la mirada de Demián en el trayecto, él al igual que yo sé encontraba entre la espada y la pared.

Su mano posaba la cabeza de la morena que lamía y satisfacía su necesidades carnales.

Quería molestarme y reaccionar de otra manera que no fuera exitante, pero no. No podía. Mi cuerpo no dejaba de reaccionar a su mirada y mis ojos no dejaban ni un segundo lugar suyos.

Ambos estamos locamente excitados.

Drake introduce un ded enviando estragos a mi ser, un gemido se sale de mi boca y una sonrisa cínica de la boca de Demián.

¡¡Oh....!!

¡¡Dios.!!

Mis piernas comienzan a temblar dándome a entender que se aproximaba mi clímax. Dichosa por el momento decido posar mi mirada en la fría y calculadora de Demián.

Quería que me viera y se diera cuenta que también puedo hacerlo. Sentirme la más jodida del mundo a tener a otro hombre inclinado a mi que no fuera el.

Drake se levanta y con ello me jala para llevarme a la siguiente sala. Una pequeña cápsula nos da la bienvenida y con ello una vocecita.

     *Bienvenidos a la sala negra,            
                   espero disfruten*

Otro pequeño anuncio se hace presente informándonos que debemos entrar completamente desnudos a la sala. Drake, saca de una pequeña cajon un brazalete rosa para entregarmelo y con ello comienza a ponerse una azul.

-- El morado es para lesbianas y el verde para los gay.

A los pocos minutos las puertas comienzan a abrirse dejando a la vista aquella habitación, esa que se encontraba en completa oscuridad.

Ambos salimos y a los pocos segundos de estar allí pude darme cuenta que lo había perdido, su manos había dejado la mía.

¿¡Ahora que demonios hago!?.

En completo silencio he intentado no chocar con nadie, decido buscarlo.

Era imposible, apenas podía concentrarme con tantos brazaletes de colores y los gemidos que resonaban en toda la habitación.

No lo iba a encontrar eso era lo seguro. Decidida a no perder más el tiempo decido caminar nuevamente a la salida.

Drake si que era un idiota. ¿¡Cómo se atreve a dejarme sola en una habitación que nisiquiera conozco!?.

Estaba estérica, apenas podía concentrarme en esta situación y el se atrevía a dejarme sola.

-- ¿A donde vas bonita?...-- mi cuerpo choca contra la pared al sentir el prepotente cuerpo se Demián chocar con el mío.--..,tan rápido acabo la fiesta.

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