-- Sabes que la bebé no va a responder...--Demián entra a mi habitación, haciendo que me sobresaltara.

Hace una hora que Dimitri y Reachel se habían ido a su casa en New York, así que Demián y yo decidimos volver a la mía. Ya no había necesidad de seguir en aquel hotel, no cuando ya lo tengo a él a mi cuidado.

--Si, pero igual escucha lo que le digo...-- me encontraba vistiendola con un conjunto rosa con blanco.

Lo menos que quería, era que llegara su madre y la encontrara mal arreglada.

-- Has dejado el biberón en una olla con agua, así que lo he traído.

--Gracias, solo esperaba que se enfriara.-- se lo quito de la mano para tomar a la pequeña en mis brazos.

Me va a doler en el alma cuando se la lleven, ya me había encariñado más de lo que imaginaba con la pequeña.

Giro el biberón para hercharme dos gotitas de leche en la parte trasera de mi muñeca, la cuál hace que me queme un poco al notar que sigue aún caliente.

--Toma a la bebé ya vuelvo..--se la coloco en los brazos para salir nuevamente a la cocina.

Enfriar el biberón fue mucho más rápido de lo que tenía planeado durar, así que muy juiciosa vuelvo al cuarto encontrándome con Demián haciendo pequeños cariñitos en la cara a la bebé.

Así que no es tan gruñón como se ve.

Al parecer se percata de mi presencia porque vuelve a su compostura de macho alfa.

--Dale tu el biberón...-- se lo entrego.

--¡¿estás loca?!...-- se queja.--..,no le daré esto a la bebé.

--¿Por qué no?

--Porque no quiero.

--Vamos, no seas así.

--Keityn, he dicho que no.

--Si antes no merecías sexo, ahora menos.

--¿Me estás manipulando?.

--¿Yo?-- finjo no saber nada.

--¿cómo se hace esto?...-- pregunta al cabo de unos minutos.

--No es difícil..- camino hacia el para ayudarlo a acomodar la cabeza del bebé en su brazo izquierdo, así sería mucho mas fácil darle el biberón.

No se cómo explicar la sensación que invadió mi cuerpo al verlo alimentar a la pequeña Eda. Todo mi cuerpo había entrado en una especie de burbuja donde solamente eran ellos dos.

Pude percatarme que los pequeños ojos de la Eda no se apartaban de los  de Demián ni por un segundo, lo que me garantizaba que estaba tranquila y se sentía segura.

Hasta ahora me doy cuenta ,de lo mucho que necesito un hijo.

Pensé que no me dolería tocar nuevamente este tema, pero al parecer no, aún esa herida estaba abierta, tan abierta que quemaba cada fibra de mi piel.

Demián se veía feliz, mucho más de lo que quería admitir, le gustaba esa sensación de ser padre y se que el al igual que yo desea uno.

Lastima que su primer hijo no será conmigo.

A decir verdad, nunca tendrá un hijo conmigo.

--Puedes ayudarme...--Me entrega a la niña para poder sacarle los gases y el poder ir a ver quién estaba tocando la puerta -- Ya vuelvo.

Era muy claro quienes eran, así que solo me limito a seguir sacándole los gases a la bebé.

--No sabes cuánto te extrañe...--Alicia aparece en mi campo de visión haciendo que sonriera.

Ya no parecía mi amiga, ya que se había hecho un cambio de look. Su cabello estaba completamente corto hasta su cuello.

--Y yo a ti...--Intento abrazarla pero al tener al bebé encima se me dificulta.

--Te amo preciosa...-- Me da un casto beso en la mejilla para luego tomar a su bebé.--. Estoy muy agradecida amiga, gracias por cuidar de mi hija en cada momento y apoyarme incluso cuando me he desaparecido.

-- No tienes que agradecer. Para eso estamos.

Mi tarde transcurrió en anécdotas de parte de Alicia y agradecimientos de parte de Stefan, cada vez que podían me agradecían, lo cuál me parecía completamente estúpido, se suponía que para eso estamos los amigos, para apoyarnos y estar ahí en los momentos más difíciles.

--Demián y Keityn ustedes han hecho mucho por ambos, así que hoy quiero pedirles que sean los padrinos de nuestra querida Eda..-- Stefan habla mientras Alicia solo se limita a sonreír.--. Aún no es seguro cuando sera el bautizo, pero sacando algunas cuentas, creemos que para diciembre.

-- Eso es en tres meses más o menos.

--Lo se, por eso le estamos informando ahora, para que vayan apartando espacio en su larga agenda.

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Mi casa estaba completamente sola, más de lo que quería admitir.

Demián se había ido a hacer no sé qué cosa en la empresa, Emma aún no me hablaba y Valeria ahora vivía en el departamento que le había regalado a mi hermana hace unos meses atrás.

Ahora que lo pienso es más caótico estar sola nuevamente, antes no me importaba en lo absoluto, pero ahora que conviví y me adapte a tener personas a mi alrededor es inevitable no sentirse mal. No quería permanecer en un lugar que me hacía sentir incómoda, así que decido darme una ducha, ponerme algo cómodo y salir a comer cualquier tipo de comida que involucre dañar mi estómago.

Tomo las llaves de mi coche para dirigirme al estacionamiento. Se que Demián me había prohibido salir sola dadas las circunstancias, pero no pretendía seguir en casa sin hacer absolutamente nada.

Ahora que lo pienso con exactitud no había ido a ver a Abril, la chica que me había ayudado aquella noche tan caótica llena de drama. Tomo el volante, coloco música para así poder dirigirme a mi destino.

Recuerdo perfectamente que el lugar era una zona altamente peligrosa así que decido bloquear las puertas y apagar las luces que había puesto alrededor del coche. Intentando enfocarme en las calles y tratando de recordar exactamente donde vivía tomo caminos erróneos, llenos de lugares sin salidas.

-- ¡¡Holaa!!-- toco la puerta al encontrarla.--..,¿se encuentra alguien en casa?.

Hace mucho tiempo que no veía una casa sin timbre, así que algo asustada por como las personas que merodiaban me veían decido darle unos golpes más fuerte a la puerta.

Vamos salgan, quiero llegar sana y salva a mi casa hoy.

Encontar la casa se me hizo más fácil al encontrar un callejón sin salida, recuerdo perfectamente haber visto su alrededor al salir. Aquella casa era común y corriente al igual que todas en un barrio a excepción de que las paredes se encontraban algo sucias y desgastadas.

-- Hola..-- una señora mayor se asoma por una ventana haciendo que retrocediera unos pasos para poder verla a la cara.

-- Buenas noches, mi nombre es Keityn Ross.-- intento ser profesional --.., ¿De casualidad la señorita Abril se encuentra en casa?.

--¡¡ABRIL!!--Aquella señora comienza a llamarla mediante gritos.

¡¡Que sofocante!!.

--Abuela que pasa..--La escucho responder al cabo de unos segundos -- Estoy ayudando a mamá a hacer la cena.

--¡¡TE BUSCA UNA SEÑORITA MUY WAPA!!..-- su grito nuevamente hace que gire hacia otro lado, al parecer  esta señora no sabia hacer otra cosa que no fuera gritar..-- ¡¡KEITYN ROSS, ESE ES SU NOMBRE!!.

--¡¡AHHHHH!!-- Supongo que tenía que venir preparada para escuchar aquel grito proveniente de aquella adolecente.

Hoy llegaré con dolor de cabeza a casa.

A tan solo segundo veo a la chica abrir la puerta con el pecho agitado y una sonrisa de oreja a oreja.

--Es un gusto volver a tenerla aquí señorita Ross.

-- Dime Keityn, Abril. No sea formal conmigo, eso me incomoda un poco.

--Lo siento, solo lo hago por respeto. No volverá a suceder.

-- Se lo agradezco.

--¿ Que la ha hecho volver a este mugriento lugar?.

--He venido por ti, he querido invitarte a comer.

--Lo siento, pero no podré salir, estoy ayudando a mi madre a hacer la cena y no quiero dejarla sola, hoy es su cumpleaños.

--Oh está bien. Puede ser otro día.

--Pero si gustas puedes pasar, para mí seria un gusto que la conozcas.

-- Claro.

Ambas entramos a la casa, a excepción de ella yo me encontraba nerviosa, era extraño para mí hacer amigos o por lo menos conocer nuevas personas.

--Familia...--Abril me lleva a una pequeña sala donde apenas habían unas seis personas-- Les presento a...

--Keityn Ross..-- Una morena se levanta de la mesa chillando.--¿como sucedió esto?¿Ella está aquí?.

--Si, ese es su nombre..--Abril se limita a sonreír mientras una señora de los mismos rasgos que ella llega hacia mi.

--Es un gusto conocerla, he escuchado hablar maravillas de usted.

-- Ahora si me creen que la conozco.

--Es obvio que si..-- un pequeño menciona mientras la misma señora que grito le da un golpe en la cabeza.

--Soy Keityn Ross y por lo que ven soy real...-- me atrevo a decir con una sonrisa en el rostro..

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Paso por aquí para informarle que quédate esta a punto de acabar. Amo escribir este libro lleno de locuras y llenando mi corazón de amor ante personajes que realmente me hacen feliz.

Así que pueden dejarme en comentarios como se sienten al leer este libro.

Quiero leer sus experiencias al leerlo y como los hace sentir.

Saludos y besos mis querid@s lector@s de confianza 🥺❤️