Capítulo 60 ( Salta).
-- Como ven la casa de Kitty es pequeña a comparación a la que tienen en nueva York, así que les prestare mi departamento por el tiempo que se quedarán aquí.
--¡¿Tu que?!..-- mi hermana mayor se sorprende ante las palabras de Emma.
-- Mi departamento. Keityn y mi cuñado me lo regalaron por el nacimiento de mi bebé.-- está sonríe con entusiasmo--. Ella la compro y el la amueblo. Yo en lo personal no la he utilizado, así que pueden estar con confianza.
-- ¿Y porque no vives allá?-- Mamá interviene por primera vez.
-- Porque no quiero hacerlo aún.
--Sigues viviendo bajo la teta de Keityn.
Damián toma de los hombros a Emma tratando de tranquilizarla antes que cometiera una locura.
-- Por el amor al cielo...-- me quejo. --..., puedes dejar a Emma tranquila por lo menos el tiempo que van a estar aquí, no pretendo que te la pases discutiendo o haciendo comentarios que puedan ponernos a todos incómodos.
--Keityn ya...--Emma interviene ante mis palabras de frustración.-- . Déjala que piense lo que desee. Por cierto, hoy como es el primer día aquí en Seattle, Damián y yo decidimos invitarlos a comer fuera.
-- Por favor no arruines el momento con tus estupideces y se una buena madre al menos una vez en tu vida...--Papá regaña a mamá mientras intento quitarle al bebé de los brazos.-- Chicos vengan, les enseñare la casa de Emma, traigan sus cosas para que se arreglen y puedan ducharse para salir.
Emma camina junto a Damián hacia la cocina para luego solo venir solamente el a entregarme el biberón.
-- Mandaré a pedir los tres coches grandes con los guardespaldas, para que sea mucho mas fácil.
-- Damián...--Le sonrió-- No hay necesidad .
--Vamos cuñadita, tu me ayudarás con algo.
Mamá decide ir a la cocinar y a los pocos minutos veo a Emma salir de allí, se que no deseaba conversar con mi madre.
-- A mi no me regalaste nada cuando di a luz a mi bebé..- se queja Valeria al verme sola.
-- Antes no tenía dinero.
--Verdad que ahora te has liado con un millonario.
--No solo ha sido eso. Trabajo por mi cuenta.
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-- ¡¡Keityn!!...Un gusto conocerlos a todos. -- mi querida amiga chilla al ver a mi familia reunida.
--Hola preciosa..-- la abrazo para luego quitarle al bebé de los brazos.
Daily estaba creciendo muy rápido y eso me hacía realmente feliz.
-- Si que son bastante. Mi madre está encantada de poder conocerlos. Ha pasado toda la noche redecorando y buscando el menú para la celebración.
-- Me halaga..-- Papá interviene.
-- Emma y Keityn siempre hablan maravillas de ustedes.
-- Me alegro..-- mamá sonríe. -- jamás imaginé que mis hijas conversaran con tanto entusiasmos sobre la familia.
Todos nos adentramos al interior de la casa mediante la charla entusiasta de Dalila. Se que estaba feliz de tener invitados, les gusta tener personas merodeando por su hogar.
--Kania y Kenia, por favor coman decente...-- bufo ante la escena ante mis ojos.
--Linsy, Diego, Jean, Axel y Natalia. Quiten los codos de la mesa.
-- Creo que me volvería loca con tantos niños...-- Emma interviene al percatarse que los estaba regalando.
--Y yo que pensé que me darías otro sobrino..-- Bromeo.
--¡¡No!!-- se altera.--Eso no, ya no pretendo tener más hijos.
--¿Por que?-- Habla Natalia.
--Eso duele mucho.
--No creo que duela tanto, mira a mamá. --Suelto con cierta burla.
--Sal embarazada para que veas..-- Natalia se burla sin saber la gravedad del asunto.
Ahora que lo pienso nadie de mi familia sabía de mi aborto espontáneo.
--¿Cuándo nos darás un sobrino?..-- Axel pregunta entusiasmado.
-- Cuando tu aprendas a leer .
--Ya casi aprendo...--Cuando intente responder a lo de mi hermano, mi teléfono comienza a vibrar provocando que dejase la conversación en el aire.
No pude evitar fruncir el ceño al percatarme que Dimitri me estaba llamando, el no solía hacerlo.
-- Hola..
-- Keityn, necesito que vengas al norte lo más rápido posible.
-- ¿Ha sucedido algo?.
-- No podré decirlo por aquí, así que mejor ven.
Todos en la mesa dirigen rápidamente la mirada al móvil de Damián, el cual comienza a sonar.
--No me jodas Dominick...--Escucharlo decir eso alerta mis sentidos.
-- ¿Qué pasó?-- Dalila pregunta desconcertada ante mi mirada penetrante hacia su hermano.
Damián se queda mirando a mi hermana y luego a mi. Era obvio que algo había sucedido, inconscientemente me levanto provocando que todos posen la mirada en mi.
-- Damián dime que no es....--Las lágrimas no tardan en aparecer en mis ojos.
--Lo siento Keityn no puedo decir nada...---Damián besa la boca de mi hermana para salir corriendo--.Te amo.-- le susurra.
--¡¿A donde vas?!-- Dalila le grita preocupada.
-- A Rusia. Lamento irme así, es algo urgente.
Papá me mira y luego hace lo mismo hacia Emma esperando una respuesta digna.
Mi teléfono comienza a sonar nuevamente dejando a la vista un número no agregado. Asustada lo coloco en mi oreja.
-- Hola...-- susurro. Todas las miradas de la mesa se pasan automáticamente en mi y en los nervios atemorizante quue me carcomía.
-- El avión...-- La voz quebrada de Kelly al otro lado de la línea me deja atónita.--.. Demián y Alex, ambos..
-- ¡¡Noo!!-- grito intentando no escuchar aquella palabra.
-- Voy de camino al norte con Dimitri. Ven conmigo, no me dejes sola. Nos necesitamos ahora.
--¡¡Dime qué es una maldita broma!!-- Me altero ante sus palabras.-- ¡Dime qué el no está muerto!!-- me quiebro ante su silencio.
-- Jamás jugaría con algo tan..-- su voz comienza a quebrase nuevamente dejándome en completa crisis.
Mi celular se aleja de mis manos, mientras mis piernas se desestabilizan ante la noticia reciente.
-- ¿Es Demián?..-- Dalila susurra al ver mi cuerpo entrar en colapso.
--Keityn...-- Me vi acorralada, no podía asimilar la noticia, me había convertido en un maldito cachorro.-- Por favor dime que paso..-- aún escuchaba aquellas palabras hacer eco en mi cabeza.
Al percatarce que mi celular aún seguía en línea lo toma. Mientras la veo atónita, necesitaba que ella me confirmara que todo era mentira, que simplemente yo había escuchado todo mal y que el estaba bien.
-- ¡¡Noo!!-- Su grito desgarrador me hace entrar en razón. --¡¿Cómo puedes decirme eso así!?.-- no era mentira, había escuchado todo perfectamente.
Me levanto del suelo ignorando los gripes provenientes del lugar para tomar el primer coche que encuentro. Quito las llaves a los guardaespaldas que me habían puesto y dos de sus armas, si está guerra había comenzado no debía asistir sin algo me que defendiera.
Tenía que buscar al responsable de mi dolor y hacerlo sufrir de la misma manera que lo había hecho conmigo.
Robo señales de transito y me atrevo a tomar rutas empinadas y peligrosas con la intención de llegar lo más rápido posible.
-- ¡¡Dimitri!!..-- lo llamo a lo lejos, estaba entretenido dando órdenes a sus hombres.
-- Keityn te esperaba. Lamento mucho todo..-- me abraza.
A los pocos minutos de establecer una pequeña conversación con el, Kelly sale de uno de los almacenes con armas.
-- Se que no están preparadas para esto que les estoy pidiendo. Pero necesito que hagan que el mundo arda.
-- No te preocupes. Hay algo que nosotras tenemos y ellos no.
-- Dolor...-- Kelly termina mi oración. --. No te preocupes, las dos regresaremos de esta misión bien.
Ambas subimos a la avioneta que había aterrizando hace unos minutos atrás en el pequeño campo.
Estaba nerviosa, no sabía con exactitud que pasaría de aquí en adelante ahora que no lo tenía a él. El resentimiento y el dolor comienzan a apoderarse de mi provocando que mi visón y mi corazón se tomarán débiles.
-- Esa es la isla. Aquella que ven por allá...-- el piloto nos señala hacia la izquierda.-- . Su nombre es oscuridad debido a los integrantes que viven en ese lugar. Deben tener mucho cuidado son hombres muy poderosos y peligrosos.
-- ¿Y que se supone que hacen aquí?.
-- Esconderse. La basura siempre hace eso cuando se siente acorralado.
Poco a poco la avioneta comienza a ser aterrizada en un lugar un poco despejado del club. Por lo que mencionaba aquel hombre debíamos hacer las cosas con cautela y precaución, habíamos entrado en territorio peligroso.
-- Nosotras podemos continuar hacia aquella isla en el bote. Lo menos que queremos es que lo vean y comiencen a vigilarlo
El hombre acepta mientas no ayuda a entrar en el pequeño bote. Ambas estábamos vestidas de manera elegante, necesitábamos llamar la atención de los hombres en el preciso momento en que pisaramos aquel club.
Debíamos cobrar venganza por las cosas que habían hecho. Y una de esa era la muerte de mi hombre, aquel con el cual me había costado crear vínculos.
-- Lo haremos por ellos..-- Kelly me sonríe mientras me ayuda a bajar del bote.
-- Por ellos lo haremos.
-- Tenemos solo dos horas para enamorarlos, poner las bombas y salir de ahí. Más no, podríamos morir.
Asustada decido ser la primera en entrar al lujoso club de mafiosos.
Mujeres, dinero, droga, sexo y alcohol. Todos esos elementos estaban ligados a la atmósfera lo que la hacia que una parte de mi viajara al club donde anteriormente trabajaba.
Internamente agradezco que las luces del lugar sean pocas, así mi trabajo se poner las bombas serían un poco más fáciles.
-- Un martini fresco, por favor...-- Suelto al mesonero al sentarme en la barra.
Aprovechando su distracción decido ver el lugar con discreción intentando centrarme en las cámaras, aquellas que no lucian nuevas. Lentamente comienzo a sacar una pequeña bomba de mi pierna para pegarla en la parte de abajo de mi silla.
-- Hola preciosa...-- el susurro de alguien a mis espaldas provoca que me asuste.
-- Oh, me ha asustado..-- intento sonar coqueta.
--Me preguntaba si desea ir a nuestra mesa un rato..--Me señala una pequeña mesa llena de algunos de los hombres que había visto anteriormente en las fotografías que Dimitri me había mostrado
-- Oh claro, pero primero buscaré a mis amigas, es que las estoy esperando desde hace rato y no las encuentro.
-- Entonces la esperaré con gusto.-- tomo el martinis en mis manos para luego ir a poner mas bombas en el lugar. No podía distraerme y fingir que todo estaba bien, un mal movimiento y yo moriría con todos adentro.
Intento bailar un rato mientras coloco bombas de forma discreta en todo el lugar. Debía fingir que estaba feliz y drogada, así sería mucho más fácil que ese hombre apareciera.
-- Hola...-- Sonríe un poco exagerada buscando que intente propasarse conmigo.
-- Preciosa...-- el hombre me sonríe.
En este lugar era el que me faltaba poner una bomba, la última que me quedaba.
-- Escucharon que Demián ha muerto...-- Llega a la mesa uno de los hombres de la barra.
--¿Quien fue el héroe esta vez?.-- Habla aquel hombre que me invito a sentarme aquí.
-- Dario Franco.
--¿Donde esta el carnal para felicitarlo?
--A lo mejor sale ahorita, esta en su oficina.
Maldito
Maldito
Maldito.
Aprovechando que todos prestan atención a la charla de aquel sujeto me apresuro a poner la bomba haciendo que la bebida que estaba en la mesa cayera sobre mí luego de dejarla en su nuevo lugar.
-- ¡Que asco!!-- me quejo.-- iré al baño, ya vuelvo.
Me levanto con los nervios al flor de piel de aquella mesa para hacerle una seña con el cabello a Kelly para que me persiguieron. Los pasillos que había elegido hacían sido una locura, todos estaban completamente en oscuridad.
-- Pon una bomba por aquí. Yo iré a seguir con las cosas.
--Keityn es hora de irnos en veinte minutos todo este lugar volará.
-- Te espero afuera. Prometo salir.
Abro la puerta de aquel lugar encontrandome con tres hombres conversandoa gusto.
-- Lo siento...-- finjo..-- creí que era el baño. No era mi intención molestarlo, es que me he llenado de alcohol y estoy horrenda.
--Sasha...--Kelly llega a donde me encuentro.--..,un hombre me dijo que por aquí no era, que esta es la oficina del dueño. Lamento que mi amiga los haya incómodado es que está muy evria.-- Kelly finge intentando ayudarme.
-- Creo que estoy ebria Sofía. Muy ebria.
-- Alguno de ustedes podria ayudarme.
-- Dario...¿quienes son ellas?...-- uno de los hombres interviene.
-- Ni idea..
-- Desaganse de ellas, no las quiero ver --Al escuchar aquello mis instintos se activan.
--¡¿Que?!-- Digo en medio de un hipo falso--.Yo solo quería el baño.
Aquel hombre le hace una seña al tercer integrante insitandolo a que nos saquen.
Ambas fingimos llorar y al pisar el pasillo lo asesinamos con nuestras armas.
--Es uno tuyo y dos mío, nos quedan diez minutos.
Sin pensarlo dos veces entro lanzando disparos dandole en el hombro a Darío y al otro sujeto sujeto en la cara.
Lanzo en segundo disparo en su pierna y luego en ambas manos.
-- ¿Quien eres?
-- La mujer del mafioso que mataste imbécil.
-- No sabía que Demián tuviera perras.
--Bueno ya lo sabes --Le suelto otro disparo en el pie de forma coqueta..--...,disculpa es que quería ladrar.
-- Sasha quedan cinco minutos.
-- No me pude divertir nada..-- me quejo.
Pongo mi arma en la boca del sujeto para luego sonreirle.
-- Nos vemos pronto en el infierno.-- Apreto el gatillo para luego salir por la ventana junto a Kelly.
Los segundos comienzan a transcurrir de manera rápida provocando que ambas saliéramos por la ventana, no nos quedaba tiempo, si no salíamos de aquí íbamos a morir y no contar aquello.
-- Al agua, no llegaremos al bote..-- Suelto.
-- ¿¡Eres loca!?¡Moriremos de hipotermia!.
-- Es mejor que una explosión.
La tomo de las manos invitándola a correr un poco más rápido, los segundo comienzan a sonar en el cronómetro aumentando mis nervios.
-- ¡¡SALTAAAA!!.
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