Abro lentamente mis ojos intentando de alguna manera averiguar de quien era el pecho en el que ahora estaba acostada. Se supone que estaba sola en mi habitación y luego al despertar siento la presencia de alguien a mi lado....,algo desorientada levanto la mirada para encontrarme con Demián dormido, lucía fresco y tranquilo, no pude evitar percatarme de sus largas pestañas y barba, algo que me encantaba realmente de el.

Me levanto lentamente de la cama para dirigirme a beber un vaso de agua..

Era aún de madrugada eso lo podía ver a través de la oscuridad del lugar.

-- Gracias por ayudarme...-- suelto al sentir su presencia.

Era inevitable para mí no sentirlo cuando ya sabía con exactitud sus movimientos.

-- No hay nada que agradecer...-- Camina hacia donde me encuentro para tomar un vaso y servirse agua.--¿Ya te sientes mejor?.

-- Sí, no te preocupes.

-- ¿Porque no me habías informado de los mensajes Keityn.?..-- abro los ojos al darme cuenta de lo que acaba de mencionar.

—¡¿Haz revisado mi celular ?!..-- me altero. 

Ahora si...., dios mio, ¿Porque eres así conmigo, que demonios te he hecho yo?.

— Sí, Keityn

—No deviste.

—pero lo he hecho.

—ahora si estoy en problemas

—No lo estas...,¿Sabes quien es?

—No tengo ni la más mínima idea, llevo tiempo recibiendolos.

— Por eso te alejaste.

—Si—Suelto en un suspiro —Demián mi familia esta en juego, si les llega pasar algo yo no....--Me corta.

—No les pasara nada —Me interrumpe para luego besarme.

—Lo prometes

—Lo prometo Bonita.

—¿Pasamos el día juntos?,quiero recompensarte lo de la cena—Levanto ambas manos hacia su cuello

—Si lo dices asi—  Acerca su boca a la mía para darme un casto beso.

—Creo que tengo mucha ropa,¿No crees?

Me le entrego en un posesivo beso, aquel que me gustaba, entrelazo mis piernas en su cadera, mientras me lleva a mi habitación a divertirnos.

—¿Usted no se encuentraba enferma señorita Keityn?—Me pregunta con cierta ironía.

—Usted lo a dicho...., sentia—Lo halo a besarme— Hazme tuya.

—Como ordena Patrona.

Levanta salvajemente su sudadera de mi cuerpo para empezar a lamer mis pecho, me da risa que tenga una pequeña obsesión con mis pechos, hala de un tirón mis bragas para empezar a besar entre el medio de mis senos hasta llegar a la entrada de la gloria, deja un casto beso en la entrada para bajar a hacer milagros.
Pasa su lengua por toda mi zona para empezar a lamer, chupar y morder.

—Ahh—Suelto poniendo ambas manos en el cabello de Demián.

—¿Te gusta?—asiento con la cabeza, el placer y el nudo en mi pecho no me dejaba hablar.

—No pares Demián —Suelto en  medio de placer

—No tengo intenciones Bonita.

Hala mis piernas para girarme y darme una nalgada, sin darme tiempo a reaccionar me penetra de golpe.

                      •°•°•°•°°•°•°•°•

Me encontraba haciendo el desayuno cuando siento sus manos posicionarse en mi vientre y pequeños besos húmedos ser llevados desde mi cuello a la clavícula.

—Buenos días, dormilón..-- me giro hacia el para darle un casto beso en los labios.

-- Al parecer alguien despertó de buen humor hoy..-- me devuelve el beso para luego encaminarse a una de las sillas.-- Buen día para ti también.

-- No me puedo quejar..-- sonrio ante su comentario..--...,supongo que tú igual.¿Has dormido bien?.

-- De maravilla.

-- Eso era de esperarse. No es normal que te levantes a las diez de la mañana.

Saco una de los panqueques para luego volver hacia el.

--¿Miel o Chocolate?

--Miel ,no soy muy amante del chocolate..

—¿¡Que!?¡¿Es enserio?!-- me altero ante tal comentario.

-- No es que no me guste—Dice poniéndole Miel en sus panqueques -- Solo que prefiero más la miel.

—Yo amo ambas —Suelto para sentarme a su lado—Buen Provecho

—Buen provecho querida .

El desayuno transcurre en pláticas triviales y algunos conflictos que realmente debíamos solucionar. Sacamos conclusiones e intentamos de alguna manera sacar teoría para poder investigar quien era la protagonista de dichos mensajes tan ofensivos.

— Keityn..

—¿Si ?—Me giro para encararlo ya que me encontraba limpiando los mesones de la cocina...,cuando siento un líquido algo frío y pegajoso bajar entre el medio de mis senos, llenando mi pobre top y short deportivo.

Sonrió maliciosamente cuando identifico lo que trata de hacer el Señor Petrov.

—Creo que se ha ensuciado un poco Señorita Ross,¿podría ayudarla a limpiarlo?

—Si deseas — le sonrio coqueta intentando seguirle el juego.

— Sus deseos son órdenes hermosa damisela.

—Pero yo no he dese...—No deja que termine la frase cuando me encuentro encima del mezon de mi cocina ..

Hala de mi top, para dejar expuesto mis senos a su merced, aplica un poco más de miel entre el medio de mis senos para empezar a lamer.

Levanto un poco mis caderas permitiendo que quite mi shorts, por inercia bajo la mirada encontrándome con su hermosos ojos grises..

Suavemente empieza a llevar besos húmedos desde mis piernas a mi monte venus.

—Demi...—Suelto en un gemido , antes de ser cortada.

—Shh—Tomo la miel para dejar entre mis entrepierna.— Disfruta...¿Si?— No sabía como responder así que solo asiento.

Me empuja para que me acueste en el mesón de la cocina.

Joder esto es antigienico.

Acuesto mi cabeza y cuerpo en dicho lugar, cuando siento nuevamente aquel frío entre el medio de mis piernas enviando estragos a mi cuerpo y cosquilleo a mi entrepierna y estómago.

Lame de manera pausa y tranquila mi zona provocando que mi respiración decida dar un paseo no muy cerca de mí.

Se supone que esto es tan delicioso.

Sabía que estaba entrando en un mundo de caos y sentimiento que no sería realmente correspondido. Pero, me gustaba el hecho de que estaba disfrutando la estadía.

Chupa, muerde y lame de manera rápida provocando mi orgasmo de manera rápida y profunda. Su mirada no dejaba la mía por ningún motivo, lo cual hacía que mi cuerpo entrara cada vez más a una especie de excitación inexplicable.

Lo miro atontada al tenerlo, no tenía la suficiente fuerza para levantarme de aquel mesón, mis piernas aún temblaban y mi cerebro aún no dejaba de procesar tan maravilloso momento.

Este orgasmo se había convertido en uno de mis favoritos..

—¿Te ayudo a levantarte?.

— Y si me llevas a ducharme.

Me toma en sus brazos para luego emprender su camino hacia el baño de mi habitación, me deja sentada en retrete mientras pone la bañera a llenarse con agua tibia. Al percatarce de que está ya estaba lista decide salirse dejándome sola en ella, de manera automática hecho el jabón y luego me sumerjo en ella.

Me gustaba relajarme con esta técnica, desde hace mucho tiempo que me funcionaba. Cierro los ojos intentando concentrarme...., cuando escucho los leves pasos de Demián aproximarse hacia donde me encuentro, no abrí los ojos, no había necesidad, sabia con exactitud lo que haría.

Abro los ojos al sentir su piel rozar con la mía al intentar meterse en la bañera.

-- ¿Te gusta lo que ves?...-- me sonríe coqueto.

Demián si que sabía ser sexy y sensual.

-- No, pero tal vez si me besas puede que cambie de opinión.

Sus grandes manos se aproximan a mis mejillas invitandome a estar cerca de él....,me subo ahorcadas  posicionando mis piernas a ambos extremos.

-- Sabes a menta...-- sonrio.

-- Ya vez si me hubieras informado que querías probar de tu néctar, no fuera lavado mis dientes.

— ¿En que momento lo has hecho?

— Un mago nunca revela sus secretos, Keityn.

-- Si lo dices así...-- acomodo mis piernas buscando una mejor posición.--...quisiera pedirle a ese mago que me gustaría que siga haciendo sus trucos en mí.

Perplejo por lo mencionado lo veo sonreír.

-- Mmmm...-- Me da un casto beso en la mejilla..-- déjame pensarlo con claridad..-- siento su mano bajar de manera lenta por mi hombro hasta posicionarse en mi cadera.

-- ¿ Crees que lleve mucho tiempo considerar la oferta?.

-- Todo depende de cómo se desenvuelva la ayudante.