Precioso

¿Cómo no lo notó antes? ¿Por qué no lo detuvo?

¿Por qué permitió que se hundiera en la depresión y el auto desprecio?

Tony tocó su puerta en medio de la madrugada. Y al saberlo fuera de su taller su rostro de iluminó.
Tal vez al fin decidió volver al equipo. Tal vez había vuelto.

¿Cómo pudo perder otro amigo justo frente a sus ojos?

Pero ese anciano hombre aún era ingenuo. Abrió la puerta con un rayo de esperanza que se apagó de inmediato al ver el rostro transtonado del hombre frente a él.

El castaño había bajado notablemente de peso. Tan delgado, lo hacía preguntarse como se mantenía en pie.

— ¿Tony?

— Steve. Siento molestarte tan temprano, pero tienes que ver algo.— Soltó frenético.

— No. No es molestia. ¿Qué sucede?

— Sígueme.

Un alterado Tony lo tomó del brazo y lo arrastró hasta su taller.

— Pensé que no querías a nadie allí.

— Así era, pero no puedo ocultar mi mayor logro. Ser modesto no es nada como yo.

Aunque ahora mismo no era nada como él.
No era él.

El capitán dirigió la mirada hacia el taller que permanecía en absoluta oscuridad.

Tony encendió las luces.
Caminó a través de un caos de herramientas, planos y trastos, hacia un escaparate, donde colocaba sus trajes y que estaba cubierto por una fina sábana. Alrededor todo estaba destruido. Parecía que un tornado había pasado por allí, aunque la explicación era un arranque de ira.

— ¿Un traje nuevo?— Preguntó intentando atravesar el pasillo sin pisar nada.

—Oh no, mejor que eso.— El castaño casi sonreía.

—¿Mejor? No imagino que es...

—Claro que no lo haces. Eso arruinaría la sorpresa. Entonces, cierra los ojos, Cap.

Obedeció.

Un traqueteo. Obviamente las manos torpes y el nerviosismo de Tony producirían un desastre.

— ¡No! ¡No te atrevas a abrir los ojos!

— No lo haré.

La sábana cayó.

— ¿Puedo?

— Hazlo.

Abrió lo ojos.

Ellos se llenaron de lágrimas que rápidamente resbalaron por sus mejillas sin control.

No pudo pronunciar su nombre.

No pudo decir una palabra.

— Es él.— Tony sonrió.

No.

— Es Peter. Yo... Lo traje de vuelta.

No era posible.

— Aún no despierta. Necesito energía para eso. Sin las gemas no puedo hacer mucho. Una fuente de energía auto sustentable lo suficientemente poderosa...

Dirigió su mirada hacia ese hombre que ya no reconocía.
Un hombre roto.

— Visión ya no está así que no puede ayudar, no es que pensara usarlo para esto... No tiene sentido que lo piense siquiera. En fin. Lo importante es que el niño está de vuelta. May va a estar muy feliz cuando despierte.

Tal vez lo había subestimado. El hombre de hierro era tan frágil que un golpe fuerte fue suficiente para romperlo.

Y todo volvía a repetirse. Igual que con Bucky, sólo dejó de mirarlo un momento y él ya se había ido. Sólo había flaqueado un segundo. Sólo fue egoísta un momento y su amigo ya se había perdido.
Otra vez.

Pero había algo allí.
Tal vez no todo estaba perdido.

Tony aún estaba allí. Porque él era Tony.
Ese pequeño y desesperado hombre era su amigo, era su Tony.

Y ese gesto. Ese sentimentalismo junto con el arrepentimiento tardío, y los desesperados y torpes intentos de arreglar las cosas... eran tan suyas.

Eran la prueba de que Tony Stark tenía un corazón.

Un corazón más noble que el material de su traje. Un corazón más valioso que el oro o el diamante, pero más frágil que la seda.

Tony Stark era hermoso.

Tanto por fuera, como le gustaba presumir, como por dentro. La belleza que tanto luchaba por ocultar.

Tony era precioso...

— Quiero mostrárselo cuanto antes, pero primero debo desp— El castaño se vio interrumpido al ser estrechado entre sus brazos.

Su débil cuerpo se sentía aún más pequeño.

Precioso.

— ¿Me estás felicitando? Ehm... las muestras de afecto de este tipo son un poco extrañas viniendo de tu parte, Cap...

Precioso.

Lo apretó aún más, para poder besar su coronilla. Acariciar sus gastados cabellos era reconfortante.

— Pero supongo que podría acostumbrarme.

Deslizó sus dedos por detrás de sus orejas, hasta llegar a sus mejillas. Besó su frente intentando trasmitir su afecto. Una vez. Otra vez. Otra. Y otra.

Pero aún no era suficiente.

Se separó un momento. Para ver sus ojos.

— Hiciste un gran trabajo. Lo hiciste muy bien.— Dijo acariciando su cabeza.

Sus ojos, antes despojados de toda su adorable arrogancia, carentes de brillo alguno, relucieron ante sus palabras.

— ¿Verdad?— Rió por fin. Rió, y las gotitas de cristal que se asomaban a sus almendras, cayeron. Pero se veía feliz.

Y lo hubiera dado todo por proteger aquella sonrisa.

Lo daría todo.

Precioso, precioso, precioso, precioso, precioso, precioso, precioso. Tanto. Tanto que podría llorar.

Sus manos se movieron sin su consentimiento, últimamente lo hacían mucho.

Acariciando sus mejillas, viéndolo a los ojos, era el momento perfecto.
Tal vez no habían bailado, y no lo había cortejado, pero sentía que si no era ahora, no serían nunca.

Y sin más, unió sus labios en un beso.

Fríos, suaves y perfectos. Así eran ellos.

Y todo el dolor provocado por el tiempo que desperdiciaron lejos del otro fue reemplazado por calidez.

Y sintió desesperación y angustia. Porque nada volvería a ser lo mismo.
Su corazón latía a mil.

Nada volvería a ser lo mismo.
Una promesa.

No lo dejaría jamás. Nunca más.

Después de tanto tiempo lo notó.
Algo tan obvio...

Lo amaba.

Definitivamente amaba a ese hombre.

Y de simplemente pensarlo algo dentro se rompió.
No había vuelta atrás, pero no se arrepentía.

Hola.
Bueno, después del estreno de Endgame estuve destrozado, así que dejé de llorar una media hora para escribir esto.
Ah,no te creas. En realidad fue 1 hora.
Ya paro. Pues, ya dije que terminaría esto con las mismas ganas con las que lo empecé, así que gracias por tu paciencia, lindura.
Sé que tardó una eternidad, igual que ella respondiendo tus mensajes, pero tú sigues aquí :'D
Pues nada,me gustó escribir este capítulo, fue lindo. Sorry por mi cursilería.
Tony siempre me pareció precioso, ¿Sabes? Tan pequeño, y como ya dije, adorablemente arrogante, como Loki.
Loki, ¿Eh?...
Hágase pa' un lao' que me woa suicidar.
Ok. Ya paro.
Sé fuerte estúpida, sé fuerte.jpg
Con esto (me refiero al capítulo) me hago una promesa a mí mismo. Quiero regresar a Wattpad y actualizar más seguido, pero la escuela no me deja :)) Pero ya dije que regresaría así que lo voy a hacer porque sí >:u. Entonces házmelo recordar, ¿Ok?
Ay, si no me detienes voy a hablar (o escribir) demasiado. Lo siento TuT

Sha me boi.

Una vez más, gracias por leer esto.
Ten un besho día. <3