Narrador:

Eri tocó aquella gran palmera, tan alta que se sentía verdaderamente una pulga con tan solo alzar la cabeza y tratar de agudizar su vista para ver sus hojas con más detalle.

Le parecía imponente.

Pero tuvo un drástico cambio cuando aplicó su Kosei en él.

Su pequeño cuerno empezó a chispear y sentía una comezón en ella, ya sea por el miedo o el brillo, cerró sus ojos con fuerza. Intentaba concentrarse, tenía a su hermano detrás de ella por si pasaba algo fuera de lo esperado.

Haci que no tenía que estar tan nerviosa.

Pasaron solo siete segundo y ya no podía sentir el tronco del árbol. Eso la extrañó y abrió los ojos, desactivando su habilidad.

Encontrándose con nada delante de ella.

Bueno, aparte de la demás vegetación y otras palmeras de la isla, no estaba la palmera que justamente debía de estar frente a ella.

Miró abajo, viendo una semilla. Grande, casi del tamaño de su mano. (La cual era pequeña a comparación de su hermano)

Parpadeo un instante y volteó al albino, con una expresión de decepción, eso no era lo que debía pasar. La palmera debía volver a ser pequeña, si, pero no una semilla.

Significa que fracaso.

...eso le sabe bastante amargo.

Odiaba el fracaso.

Su expresión se arrugó hasta hacer una mueca molesta. Odiaba sentir esa sensación amarga que se mezclaba en su estómago de forma desagradable y la hacía sentir inferior ante las expectativas que ella misma solía ponerse. Odiaba la decepción de si misma.

Subió la mirada cuando su cabello fue acariciado por el alto, la miraba con bastante astucia y simpatía. Lo que la molestó más.

Kaito: Eso fue desastroso- "Huy, pero que gran opinión, ¡Claro que fue terrible!" Pensó Eri, bastante de acuerdo con eso- Inténtalo de nuevo. Ahora con ese.

Con su mano libre apuntó a otra palmera a unos metros de ellos, el árbol fue impactado por una esfera que salió del dedo anular del albino y acto seguido es árbol que era la mitad de grande que el anterior, creó incluso mucho más grande que el otro.

Acató, en realidad no debía quejarse o hacer berrinche, se concideraba bastante mayor para eso.

Si, una niña de 9 años se sentía bastante grande para estar haciendo berrinches.

Pero Laine tiene 14 años si la edad de un alma cuenta.

Eri es una niña, y Laine un adolescente.

Una combinación bastante desequilibrada a decir verdad. Pero que había funcionado para él...ahora ella.

Retomó la misma práctica con la siguiente palmera. Habría una irremediable fila de fracasos en toda la mañana.

Fracasó.

Su boca se siente amarga.

Otra palmera, fracasó.

Una más, fracasó.

De nuevo, fracasó.

Otra vez, fracasó.

Eri: ¡¿Por qué no puedo hacerlo?!- Gritó frustrada, acto seguido pateó la semilla, esta vez la palmera era más pequeña por si el tamaño contaba en el efecto de su peculiaridad, pero volvió a rebobinarlo a una andrajosa semilla.

Mientras la niña despotricaba con cada cosa que se le atravesará en el camino, su hermano, quien tanto la amaba, le sacaba fotos con su celular de tres cámaras, bastante encantado.

Pero es simplemente gracioso, a su vista, claro, su hermanita parecía un hamster colérico, mostrando su par de dientes y mordisquiando cualquier objeto para desahogarse.

Era una rabieta infantil.

Le parecía adorable, por qué hace mucho que no veía una rabieta de parte de ella. Al menos no desde que murió.

Claro que también estaba considerando el factor que hacía que ella fracasara, había unas cuantas suposiciones pero la más viable era por que el árbol solo estaba afectado por un quirk y no es el usuario original de la particularidad.

Pensó un momento en eso y asintió para si mismo, de acuerdo con su propia conclusión. Estaba dispuesto a comprobar la veracidad de esa posibilidad. Guardó su celular en un bolsillo y la miró.

Kaito: Bien, utiliza tu quirk en mi- Cantó sin más, con esa sonrisa que ya lo caracterizaba.

Eri: ¿Que?...-Ella había escuchado bien, lo que la paró en seco- No, no, no. ¡De ninguna manera! -Con sus brazos negó la petición, pero el mayor apuntó a su abdomen por encima de su camiseta.

Kaito: Aqui, apunta en este lugar para una mejor distribución -La pequeña volvió a negar, definitivamente no, si una palmera tan gigante se volvía una semilla, seguro y su hermano terminaría siendo un bebé o peor...un feto- La razón más viable por la que no puedes controlar tu quirk es porque solo atacas a la fuente que le proporcioné, pero eso es incorrecto, debes dar conmigo para poder canalizar la potencia. Ya que la palmera solo es una pequeña porción, es obvio que no puedes controlar la presión que influyes ya que no es lo mismo que un quirk real, no tienen el mismo peso y por eso terminan siendo semillas, aparte de cancelarlo, también le quitas gran parte de su crecimiento para compensar la fuerza sobrante que aplicaste.

(Nota: No tengo ni idea si tiene sentido, traté de analizar bien esta parte sin que sonará tan trillado...luego me di cuenta que son personas con poderes que salen de cualquier extremidad...)

Se suponía que el objetivo era inhabilitar solo el quirk, no el estado físico del sujeto.

Era complicado explicarlo de manera que una niña comprendiera. Pero por la cara de iluminación que su hermanita tenía, había captado.

Eri: ¿Entonces no te convertirás en un feto?

Kaito: Probablemente no, como has dicho,tu quirk permite retroceder diferentes estados a un ser vivo con su uso, tú debes estar concentrada en solo afectar al quirk, por lo que estaré bien. No explotarle ni volveré a nacer -En realidad lo pensó dos veces lo último, nop, no quería volver a nacer. No lo dijo, pero nacer es horrible- Por lo que tenemos vía segura, anda, aplica tu habilidad.- Volvio a palmera su abdomen, alentandola.

Eri volvió a pensarlo, si su hermano le decía que estaba bien, entonces debía ser verdad. Él no sé arriesgaría a que quede traumada. Además, se esforzaría el doble para solamente afectar el quirk esta vez, ya que no tocaría practicar con un árbol o algún animal de la isla.

Haci que, con pasos lentos se acercó y colocó una mano en el lugar indicado. Temía por qué pasara lo peor, aún así, no le gustaba fracasar.

Kaito: Y asegúrate que solo lo apliques por 5 segundos, no más- Aumentó la orden, en realidad, él si estaba curioso a que pasaría si anulaba su quirk por completo, todos sus quirk's desaparecerían por unos segundos, y es que, el quirk de Eri no era instantáneo, no era un interruptor. Es más como agua y papel, se expande a través de todo hasta dejarlo totalmente mojado.

Significaba que no podía dejar que el tiempo se expanda, cinco segundos era suficiente para inhabilitar la mayoría de sus habilidades. Por lo que debía tener cuidado, su clon podría desaparecer en presencia de alguien y se joderia.

La pequeña comprendió la orden y lo cumplió, su mano posada en el lugar indicado, los pequeños rayos se expandieron por sus cuerpos y el quirk hacia su trabajo mientras su cuernito crecía unos centímetros por la acumulación de energia.

A los primeros dos segundos no paso nada más que un vacío que se expandía en el mayor.

3 segundos, algo se estaba removiendo en su interior, agonizando.

4 segundos, se sintió muy ligero, como si un gran peso se fuera de su espalda. Fue bastante cómodo. Un viento agradable soplaba en su dirección, disfrutando del contacto.

5 segundos, la ligereza en su cuerpo estaba por llegar a su plenitud. Y deseaba inconscientemente que eso pasara.

Eri alejó su mano. Y todo esa paz fue aplastada por un gran yunque. Su cuerpo se sentía muy tenso y aprisionado. Se tambaleó atrás, casi callendo si no hubiera equilibrado sus pies.

Levantar la manos le costaba un gran esfuerzo, como si grandes cadenas estuviera enrolladas en su cuerpo y jalandolo al piso. Al comprender aquello, abrió los ojos de par en par.

Su hermana estaba preguntándole que pasaba, si estaba bien o le hizo algo, temía haberse equivocado y provocar alguna lesión física a su cuerpo.

Kaito: Esto ahora tiene más sentido...-Su boca se agrandó a una sonrisa insana, con los dientes bastante apretados. Ahora lo entendía.

Eri: Vamos a la casa, tienes que descansar.

Observó la expresión preocupada de su pequeña y asintió, no se sentía cansado, solo pesado, pero si quería charlar de algo con ella.

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Cómo la casa de playa estaba a solo una docena de metros, llegaron a los 10 minutos. Ambos están en el sofá de la sala, prácticamente comiendo lo que Eri preparó para el almuerzo.

Era sopa de corbatas.

Simple pero delicioso. Y no, Kaito no estaba avergonzado de no saber cocinar y que su hermanita menor tuviera que hacerlo, era más seguro para los dos que ella cocinara.

El albino estaba bastante contento con la comida y claro, con haber comprendido varias cosas.

Kaito: Sabes Eri -Llamó a la niña, ella giró a mirarlo, esperando a que continuara- Cuando tenía cuatro años y manifesté mi quirk, lo primero que hice fue quemar el orfanato en donde vivía -Algo de lo que no se arrepentía, le agradó que a Eri no parecía afectarle el hecho de que mató niños- Luego empecé a diseñar diferentes quirk's con mi habilidad, me emocioné bastante...pero, no sabía si tenía un límite y olvide el hecho que un quirk necesita una fuente de energía, ya sea metales de tu cuerpo, minerales, grasa corporal u otra cosa. En especial para un quirk de creación como el mío.

Algo malo presentía la de ojos rojos, le estaba contando cosas de las que ya estaba enterada, pero esa divagación de su quirk no lo sabía. Aún no se ponían al tanto de muchas cosas pero está parecía ser importante.

Kaito: Creí que tenia alguna especie de bug que normalmente los reencarnados con deseos tienen, ya sabes, el cliché de todo fanfic -Mientras habla, revolvía su sopa y se detenía en ocasiones para comer alguna cucharada, recordándole a Eri que debía comer su comida antes de que se enfriara- Haci que no le di tanta importancia. Pero ahora todo encaja -Sonrió- Me sentí verdaderamente fresco cuando inhabilitaste mis quirk's, ni siquiera sabía que llevaba tanto peso ensima, quizás por qué había vivido mucho tiempo con ello.

Eri: Hablas como si tú particularidad fuera una gran carga.

Kaito: Bueno, no una carga física exactamente -Soltó unas risas taimadas, bastante divertidas de sus palabras- Todo este tiempo no me había dado cuenta de que mi estado mental estaba empeorando, por qué de por sí ya me concideraba alguien no tan cuerdo. ¡Vamos! si ves a alguien transmitir una masacre por televisión pública, obviamente piensas que está loco -Se llevó una cucharada de la sopa a la boca, saboreando la mescla de vegetales, especias y la sal.

Mientras, la niña parecía observarlo, no habló por un rato mientras comía.

Ella en realidad estaba pensando demasiadas cosas para dar con el objetivo de esta conversación. Y no le gustaba su conclusión.

Kaito: Hoy, en esos cinco segundos que utilizaste tu quirk en mi, me enteré de todo y uni varias piezas de cosas que estaban pasandome. -La sala se comenzó a llenar de murmullos cantarines del mayor, animados- Ya sé por qué me eh quedado envelezado con Izuku, por qué es tan importante al punto de verlo como familia y quererlo en cuanto cruzamos palabra. Era mi ancla.

La mente de Eri estaba vacía, no por que dejó de escuchar, todo estaba siendo aterradoramente claro ahora y eso la dejaba en un estado en el que simplemente no sabía que pensar.

Kaito: Por qué me aferre a todos esos personajes al punto de torcer sus destinos tan cruelmente, todo para que estén para mí y no perder la cabeza -Casi se podía escuchar sus risillas y su corazón palpital cada vez más rapido- Al final, resulta que mientras más quirk's creaba, estaba más cerca de perder muchas de mis funciones neuronales como cerebrales, o en simples palabras -Alejó su plato ya vacío y se acostó en el sofá, teniendo su mirada en el techo- La empatía, la compasión, la ira, la cordura para ser exactos y quizás unos cuantos sentimientos. Mi mente fue el pago para poder utilizarlo. Y en un intento de seguir cuerdo, me aferre a personas que destellaban todo lo que perdía, Izuku es el protagonista de esta historia, con buenos sentimientos y amor por dar. Yo me aferré a eso, demasiado desesperado supongo. Asegurándome que solo sea para mí -Al final soltó una risa seca- Pero eso no es secreto para nadie.

Dió un largo suspiro abrumador que vació por completo sus pulmones para que luego estos volvieran a llenarse lentamente.

Kaito: Pero ahora, me doy cuenta que él está dejando de ser suficiente, las jaquecas eran avisos de que estaba llegando a mi limite -Se había empezado a inclinar hacia la dirección de Eri, apoyando su cabeza sobre sus piernas y posando su cuerpo sobre el sofá que ambos compartían, enterró su cabeza en el agradable perfume natural de su hermana, sonriendo inconscientemente, mientras, Eri le acariciaba el cabello, para hacer el momento un poco más ligero- El hecho de que tú estés aquí me tranquilizó, eres lo más importante para mi, en esta y en mi anterior vida, eso hace que me esté anclado a ti. Izuku y tú, ambos me mantienen aquí.

Eri: Eso es bueno, seguirás aquí. -Agregó, observando los ojos abiertos del chico, sereno ante toda la explicación.

Kaito: Es que no lo entiendes, si ahora necesito de ti para vivir. Nada me asegura que seguiré consumiendome y necesitando de más hasta perder completamente la cabeza y matarlos en ese frenesí -Ella suspiro, si, lo había concluido. Su propio quirk lo llevaría a ser tan peligroso hasta para si mismo.

Mentiría si dijera que eso no pasará, por qué es la verdad. Aún a pesar de que quería encontrar otra manera, no la había. Y si existía una, solo sería un retraso a lo inevitable, por qué poco a poco, día con día, Kaito se pierde a si mismo.

Eri: Si eso pasa- Pero fue interrumpida.

Kaito: Si eso pasa, mátenme.

Las palabras congelaron inmediatamente la habitación, siendo asfixiado por el terror, morbo y negación.

La niña le agarró las mejillas con fuerza, mientras su expresión pasa a una histérica, podía distinguir por la distancia entre sus rostros que ella iba a llorar, pero lo estaba conteniendo.

Eri: ¡Pero no sabes si eso pasara pronto!¡Puede que aún tengamos mucho tiempo! -Prácticamente fue una súplica. Su voz se escuchó casi quebrada entre la retención de lágrimas.

Es injusto, todo le parecía injusto ¡Tienen pocas semanas de encontrarse y se entera que su hermano morirá otra vez!. No quería que volviera a pasar, esta vez estaría sola, sin la compañía de su familia para que la ayudara a sobrellevar la perdida.

Estaba segura que quedaría destrozada.

Kaito: Laine, eso solo es una baja probabilidad. A lo mucho aguantaré cinco años más. Y eso solo si elimino gran parte de mis habilidades, ya de por sí eliminé la mitad por las constantes advertencias -Las desgraciadas jaquecas. Pensaba que Anti le estaba poniendo un paro, pero ese ser no se había involucrado en nada. Todo esto era por su ingenua mente que solidificó el pensamiento de que podía hacer lo que quisiera.

Y ahora parecía que pagaría con la muerte de sus seres queridos. ¿Karma talvez?

Eri: ¿Y te vas a rendir así? -Esas palabras y el asentimiento que expresó con bastante tranquilidad le molestaron y fueron el ultimatum para que sus lágrimas acumuladas cayeran de sus párpados al rostro del albino - No tienes filtró...- Finalizó con una sonrisa dolorosa en sus labios.

Aún con esa expresión imperturbable, limpió su rostro lleno de lágrimas con las mangas de su camisa.

Kaito: No me estoy rindiendo, lo estoy aceptando tal cual es la realidad. -Daba miedo, todo esto daba miedo, náuseas y asco. ¡Esta conversación le estaba dando unas arcadas!

Eri: ¿Y no crees que los demás no se rendirán? ¡Tus amigos! ¡A los que hundiste en el peor fango, ellos se darán cuenta si es que no lo descubrieron ya! - Le gritó, sus lágrimas le estaban ardiendo las mejillas. No quería ver esta faceta tan tranquila de su hermano con un tema tan serio que amenaza su vida.

Kaito: Con el tiempo quizás, Shoto es un teórico de la conspiración así que no dudo que ate cabos sueltos eh Izuku definitivamente podría descubrirlo si se centra en eso, pero por ahora todos van a estar ocupados con las pasantias. Pero estoy seguro que solo sospecharan de esta posibilidad cuando esté por las últimas. -Y sonrió, el albino había sonreído, ¡¿Por qué demonios sonreía?!

Eri: ¡Pero- ellos...tú...-Se trabó entre las palabras, ya no sabía que decir o de qué quejarse porque parecía que todo le rebotaba. Simplemente se quedó sin ideas.

Kaito: ...Te pido esto por qué ya eh intentado matarlos inconscientemente al darles quirk's. -Y por si sus palabras anteriores no fueran suficientes, le volvía a poner otra razón por la cual debian atentar contra su vida- ¿Sabes el milagro que presencié cuando aguantaron un segundo quirk en sus cuerpos? ¿La carga cerebral y genética que conlleva tener dos quirk's muy diferentes entre sí?. ¡Peor aún!¡Le di una peculiaridad a un quirkless! -De golpe, alejó sus rostros y se sentó al lado de Eri en el sofá, con las manos sosteniendo su frente, de forma que ella no podía ver su expresión colérica- ¡Laine!¡Un quirkless!. ¡Vivo con el pensamiento que Izuku morirá en cualquier momento cada que usa Time!¡Que una sombra mía lo está matando!¡A todos ellos!¡La transferencia de peculiaridades es terrible para la esperanza de vida de una persona y no puedo quitarlos! ¡¡Y TODO POR QUE FUI UN INGENUO!!

Insconcientemente gritó la última parte, sonó más a una recriminación a si mismo por el tabú que hizo. Se restregó a si mismo la falla, la estupidez y todo el tiempo perdido que se supone que utilizó para leer fanfic de BNHA. El tema de la transferencia de peculiaridad no era muy concurrido en esas historias, muy pocas se concentraba en eso o siquiera la mencionaban. Por esa razón suponía que no lo recordaba. ¡Pero era simple lógica! ¡Quizás en algún punto del manga que no pudo llegar a leer trató ese tema!

Estaba totalmente conciente que parte de su cordura mental sería eliminada de ellos. Afortunadamente o desafortunada, quien sea que lo viera, parecía que solo fue una mínima parte, la falta de ese pequeño faltante permitieron que le siguieran en sus locuras. El asesinato, la tortura y el juego psicológico no es algo que un adolescente normal piense, a esta altura, todos ellos debieron haber tenido dudas, preguntas ¡Un sentido de culpa!.

Y no, no daban indicios de sentir culpa. Izuku daba empatía, pero es por ese corazón tan puro que se aferró a él.

De hecho, era muy probable que este sintiendo la culpa por tener ahora a dos anclas que mantienen su mente sana. Estaba obteniendo conciencia. ¿Eso acaso era bueno con todo el historial criminal que tiene? No podía simplemente lamentarse por todas las muertes que provocó.

La de cabello gris solo pudo observar como el mayor se estiraba el cabello y gruñía con al parecer, pensamientos que lo molestaban. Podía comprenderlo de la forma lógica, pero no personal. Claro ¡No puedes simplemente darle una peculiaridad a otra persona sin esperar las concecuencias! Las peculiaridades no funcionan así, empezando que son parte del ADN del usuario.

Parecía verdaderamente iracundo, frustrado y molesto consigo mismo. Y ella no sabe que hacer o decir. Nunca había visto a su hermano mayor tan sacado de las casillas. Entendía que se esté auto culpando, su primera ancla y una de las personas más importantes podía morir en cualquier momento por un descuido suyo.

Simplemente no lo imaginaba, Izuku Midoriya no podía morir, es el protagonista, ese puesto debía tener un montón de beneficios. ¡Es el portador del One For All! No hiba a morir tan fácil...

Espera ...

Eri abrió los ojos y una chispa de esperanza surcó sus ojos.

¡Claro! ¡EL ONE FOR ALL!

No sabía mucho de ese poder, pero si sabía que en ella residen sus antiguos portadores o algo así, los cuales tenían sus propios quirk's e Izuku los manifestó ¿Que posibilidad existía de que eso pasara?. Lo recordaba por qué vio un clip de ese momento, donde el pecoso se encuentra con los portadores.

Y si existiera una oportunidad de que Izuku viviera, era el OFA.

De una subida severa de valor, se lanzó a su hermano, agarró sus manos que estaban enredadas en su cabellera eh hizo que la mirara.

Eri: ¡Izuku puede vivir!

Ahora sabía que ella es un gran apoyo para su hermanos, pero en realidad ambos se necesitan, ambos están necesitados de esa compañía que podía comprenderlos mutuamente. Seguramente para Izuku era igual.

Si Kaito se iba...ellos dos colapsarian.

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.....¿Hola?.....

Resumiendo mis meses de ausencia, tome un curso para técnico medio, estoy en pasantias las cuales terminan a mitad de febrero y una de mis amigas se fue del país.

En qué momento se me ocurrió ponerme ese nombre de usuario, malditos 16 años, eres un estúpido por no pensar en un mejor nombre. Ahora yo con 19 años, me das vergüenza.

Bueno, les traje este capítulo porque quería publicarlo de una ves, extrañaba a Kaito y alfin llegué al punto que tanto quería destacar.

Bueno, la transferencia de peculiaridades no es algo que se vea en muchos fic's o bien no tan a fondo. Por lo que me volví loco tratando de encajar esa lógica en mi historia, lo que me lleva a este capítulo.

¿Izuku morirá? Bueno, si tomamos en cuenta el OFA, como dijo Eri, existe una posibilidad de vida. El cual se explica en el siguiente capítulo. ¿Los demás morirán? Eso sigo viéndolo. :v

BAY BAY~