Narrador:

Midnight: ¡Bakugou Katsuki ya no puede continuar con el encuentro!¡La ganadora de este encuentro es Midoriya Kaito! ¡Quien pasa a la siguiente ronda! -Declaró la heroína. Con su porra apuntó a la ganadora que seguía sonriéndole al inconsciente rubio.

Inmediatamente el estadio estalló en gritos de euforia.

Entre todos los gritos de euforia del público, ella seguía piqueteando la mejilla del Bakugou. En realidad había disfrutado la paliza que le dió. Debía tener severos hematomas y con suerte no le rompió una costilla.

Se alejó un poco cuando unos robot con insignia de la Cruz roja llegaron con una camilla y trasladaron el cuerpo a esta, llevándoselo rápidamente. Silvó al ver a esos minions, parecían bastante útiles. Creyó que eran decoración cuando los vio quietos en la enfermería.

Ugh, apretó los labios al recordar que ahora debía ir nuevamente a la enfermería, la anciana se lo repitió con bastante insistencia. No tenía problemas con ella, lo que lo fastidiaba era la rata, es decir, el director Nezu.

Midnight: Bien, ya puedes ir con Recovery -La sonrisa amable que le propinó la mayor no le agradó- Me repitió que debía mandarte de inmediato por si planeabas huir- Finalizó, haciendo notar una sonrisa más astuta.

"Carajo" Maldijo internamente la chica.

- Por supuesto, gracias por recordármelo...- Quizás su sonrisa no fuera del todo sincera, pero no le importaba en ese momento y no frente a la heroína. Ella pareció simpatizar con la chica, entendía que debía ser muy molesto el asunto. Pero la integridad física de un alumno es prioridad como maestra.

Claro, no es que ese reglamento le importe a la chica que en realidad es un clon, prácticamente casi nada podría matarla. Además de su jefe y creador. Amenos que algún héroe del top 10 la ataquen a muerte, pero no hay razón para que hagan eso así que está prácticamente a salvó.

Bajó del cuadrilátero y se adentró al pasillo dentro del estadio, entre giros y giros, su miraba percibió a alguien que parecía estar sosteniéndose de la pared para no caer, casi al final del pasillo así que era bastante lejos para reconocerlo, debido a que esté estaba de espaldas no podía ver más que su deportivo y como no era el pasillo que debía tomar, lo dejo estar. Quizás era alguien que le dió náuseas por su enfrentamiento y trataba de tranquilizarse. Había visto a algunos que incluso colapsaban por los nervios.

En todo caso, no es su asunto.

Tomó el pasillo contrario al sujeto sin mirar atrás. Debía llegar antes de los 10 minutos o seguramente la anciana pensará que se escapó, ese vegestorio es muy astuta para su desgracia.

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Izuku estaba bastante molesto, bueno, no tanto, diría que al punto de regañar o darle una charla educativa a Kaito sobre la empatía con sus allegados. ¡En especial con alguien que podría considerarse casi hermanos! Kacchan, si bien se pasó con picar el asunto de su estado físico, no es razón suficiente para que ella lo agarrara de un pie y lo golpeara contra el piso repetidas veces.

Una imagen divertida al compararlo con Holk y Loki de Marvel.

Pero Kacchan no es un dios, por lo que obviamente salió gravemente herido, no puede calcular cuánto exactamente debido a la lejanía de las gradas al cuadrilátero pero considerando todos los picos que la piedra tenía, suponía que debió haber dejado sus vasos sanguíneos un desastre. Lo mínimo serían varios hematomas, de todos los colores posibles.

Si, debía charlar con Kaito.

- ¡Eso fue brutal! Bastante gracioso... ¡Pero brutal! -Escuchó uno de los tantos comentarios llenos de sorpresa que había escuchado hasta ahora.

- Midoriya-kun, tu hermano es mucha fuerza bruta, no quisiera ganarme su odio -Eso, más que una recriminación parecía un lamento asustado. Solo por curiosidad giró su cabeza, Sero mantenía una sonrisa incómoda con la vista aún en el cuerpo magullado de Kacchan.

No sabía si responder por lo que solo dió un asentamiento con una sonrisa apenada. Cuando Kaito hacia este tipo de escenas, obviamente se sentía avergonzado, por qué es su hermano, lo quería pero no al hacerle llamar la atención por ser hermanos.

Afortunadamente todos seguían enfrascados con el anuncio de la victoria de Kaito, por lo que se alejó de los asientos de su clase y se dirigió a al pasillo dentro del estadio. Antes de siquiera dar dos pasos, una voz bastante alta le llamo la atención.

- ¡Que miedo!¡Dejar así a una persona por una simple provocación!¡¿Eso no es un acto no heroico?! ¡¿No sé supone que la clase 1A tiene a los mejores, entonces por qué ella dejó así a su propio compañero?! Jajajaja -Esas escandalosas palabras lo pararon y giró a mirar a la fuente, un chico rubio que estaba mirando hacia su clase.

Si no recuerda mal, es el tipo que replicó las explosiones de Kacchan, lo recordaba por su gama de peligro, tuvieron suerte de que solo copiara el quirk original de Kacchan, pero no podían dejar que replicará otro quirk que Kaito les había dado, por lo que acordaron alejarse de él. Además de ser bastante molesto.

Inmediatamente de las provocaciones muy obvias, el tipo fue noqueado por una gran mano, seguido de una disculpa de una chica de cabello naranja hacia su clase. Quienes no le tomaron tanta atención y siguieron mirando el cuadrilátero.

Sin más siguió su camino, directo a la enfermería. Seguramente Kaito estaba dirigiéndose ahí, debe estar bastante molesto por tener que hacerse esos chequeos cada que termina una pelea. Pero Izuku prefería que este molesto a qué algo atentará contra su vida.

No quería tener que verlo en riesgo de muerte, ama profundamente a su hermano. Si, a veces se preguntaba si todo lo que hacían estaba bien. Lo que obviamente se abofeteara con que nada de lo que estaban haciendo estaba bien.

Lo sabía, todos lo saben, pero aún así lo siguen haciendo. ¿Por qué lo disfrutan? Los demás parecían disfrutarlo. ¿Y el? ¿Lo disfrutaba? No sabía...o al menos no sentía una gran culpa al ver los ojos suplicantes de todas las víctimas que Kaito mató de las peores formas, unas más creativas que otras. Estaba conciente que debía sentir culpa o impotencia de quedarse quieto y ver morir gente frente a él, su yo de 4 años estaría tan aterrorizado de lo que hacía...bueno, tecnicamente no hacía nada.

No, jamás había matado con sus propias manos, no podía acercarse a arrancarle la vida a alguien por más que lo presenció mil veces. Y a ese punto, no sabía por qué no sé atrevía, bueno, todos los demás lo han hecho ¿Por qué es el único que no siente la necesidad de matar?¿Por qué se abstenía?¿Por qué Kaito no lo había alentado tanto como a los demás?

Sus manos temblaban cuando tenía el pensamiento de acabar con las víctimas de una manera menos dolorosa de la que su hermano alargaba. Pero siempre se acobardaba. Se negaba y volteaba la cabeza para no ver la cara del pobre diablo que moriría ahí.

Su padre es uno de los más grandes villanos de la historia ¡Es el símbolo del mal! Lo contrario a su disque maestro, él podía chasquear los dedos y el top diez de los héroes estaría tres metros bajo tierra. Pero a él le temblaba las manos con solo tener un pensamiento de quitar otra vida, no había sacado nada de ese odio a los héroes o su falta de empatía ante la vida. Si no fuera por sus murmullos similares, su cabello encrespado indomable y su gran intelecto, probablemente dudaría que fueran de la misma sangre.

Es más, sus comportamientos en algunas cosas son bastantes similares.

Izuku recordó como tenían la misma dificultad a la hora de amarrar una corbata, o cuando se perdían en sus mentes. También está el hecho de que murmuraban en ocasiones cuando se perdían en sus zonas. Pero sacó el buen corazón de su madre, ese lado amable y humilde, claro, también las lágrimas Midoriya incluidas, el color verde de sus ojos y cabello.

De hecho, en apariencia se parecía bastante a su madre.

Quizás eso explicaba un poco su negación ah aportar a la muerte. Eso estaba fuera de su material genético dominante.

Aunque tampoco quería llevarle la contra a su hermano, simplemente, si Kaito estaba feliz con matar gente, Izuku no quería interrumpirlo. No se sentía bien restringirle algo que disfrutaba, por más descabellado que suene dejar que siga con su camino de masacres a un ser de pura maldad. Simplemente no podía negarle nada, si lo hacía, quizás cabía la posibilidad de que se molestará con él ¡O le odiara! No quería ser odiado por una de las personas más importantes en su vida. No por el ser que estuvo con él en los peores momentos, dándole ánimos y protegiéndolo de cada persona que intentaba agredirlo por ser quirkless, le debía tanto.

Le dió su amistad.

Le dió esperanzas.

Le dió protección.

Le dió una vida.

Si, Kaito es su persona más preciada, si llegara a perderlo...no sabría que hacer.

Por eso, por el miedo a perderlo a él, y a todos sus amigos por el hecho de que no quiere matar, por eso seguiría estando a su lado.

No quería quedarse solo.

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¡¿Y por eso lo permites?!¡¿Acaso estás loco noveno?!

¡¡¡SUFICIENTE!!!

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Casi tropieza con sus propios pies cuando una voz muy grave y bastante furiosa resonó en su cabeza. Su mano sostuvo su frente y achicó los ojos ¿Por qué escucho eso?¿Quien es?...¿Quienes eran?

Por qué esa voz sonaba distorsionada y en grupo.

Izuku: ¿Que?¿Quien-

Una intensa migraña chocó con su cerebro, podía sentir como golpeaba su cerebro y este sumba, un alto pitido inundaron sus oídos. Se agarró la cabeza ante el incesante dolor, los síntomas cada vez estaban empeorando, por lo que se sentía mareado y débil.

Izuku: ...Voy...a caer- Susurró cuando el pasillo empezó a distorsionarse, podía jurar que las paredes se estaban sacudiendo.

Buscando un apoyo, se acercó a una pared eh intentó caminar apoyándose a esta, no sabía cuál camino estaba siguiendo pero al menos se sentía con menos vértigo. Giró a una esquina y fue...¿A la izquierda? Si, debía ser la izquierda. Todo parecía estar moviéndose y sinceramente no sabía por qué seguía moviéndose, llegando al final de ese pasillo se detuvo.

¡Cierto! La mejor forma de que esto acabará es que se quedará a esperar que el malestar pase, no es que pudiera pedir ayuda a alguien cuando no hay nadie en el pasillo ni por la izquierda o derecha y no confiaba en él en este momento para llegar a algún lugar donde le brindarán ayuda. Por lo que se mantuvo apoyado a la pared y encorvado cuando las náuseas empezaron a surgir.

Quizás estuvo 10 o 15 minutos ahí, el malestar no paraba y estaba comenzando a perder la conciencia si sus párpados no lo engañan, bueno no trataba de parpadear, la acción es involuntaria.

Izuku: ¿Por qué?...estoy...así...-Murmurró en un último intento. Ya estaba bastante cansado.

Y dejó que la oscuridad se lo lleve...

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Abrió los ojos...

Bueno, todo parecía estar en una intensa bruma oscura. Apenas y una sección del piso estaba iluminado, y es donde está parado.

Pero eso no era lo más destacante. Delante de él, estaban enfilados unos desconocidos, seis para ser exactos, la única mujer estaba más cerca. Ninguno lo miraba, su atención parecía estar dirigida al frente. Se giró y vio a otras dos personas, ambas de cabello blanco.

En cuanto vió al que parecía más grande, de cabello corto y una gran sonrisa. Quiso gritar. Aunque no salió nada de su boca, de hecho, ahora notaba que parte de su cuerpo está cubierto por una densa niebla, incluído la boca, dejando solo la mitad superior de su rostro al descubierto y sus manos.

¡Pero era él! ¡Su papá está sonriendo al otro peliblanco de cabello largo! Ese se notaba más delgado y débil. La escena cambió, ahora su padre tenía puesta la mano sobre la cabeza del otro sujeto, este parecía estar forcejeando. Izuku no tenía que atar cabos sueltos para saber que le iba a quitar su quirk, lo que lo horrorisó y extendió la mano en un intento de detenerlo, pero no se podía mover.

Aún así, con toda su fuerza de voluntad, extendía la mano para agarrar a la del sujeto, quien de un momento a otro también le extendía la mano y estaban a centímetros.

- Entonces, ¿tú eres el noveno?

Frente a frente, ambos se miraron. Izuku realmente no sabía que más hacer, todo se sentía tan caótico.

-¿De verdad crees que está bien lo que hace? -Su voz sonaba tan suave, sin apiste de algún rencor. Lo que de alguna forma le hizo sentir culpa - Debes detenerlo, a ambos.

Cuando sus manos estaban por tocarse, algo lo alejó. De un suave tirón, unos brazos lo abrazaron del abdomen y quedó apoyado sobre alguien. Levantó la mirada un poco y ahí, una sombra bastante familiar, con esa sonrisa tan cariñosa que siempre le brindaba en cualquier ocasión, Kaito lo alejó del hombre.

- Está bien Izuku, yo me encargo - Quiso responder pero no podía por la niebla en su boca. No sabía que decirle de todas formas. No entendia nada.

Ambos miraron a la figura de ese hombre quien los miraba ahora parado, no, está mirando a su hermano, con esa expresión tan...serena.

Y abrió los ojos.

Parpadeó varias veces y agarró su pecho, podía escuchar sus latidos en sus oídos. El palpitar era tan intenso que sentía como chocaba con su pecho, al menos así lo interpretaba. Miró a su alrededor frenéticamente y noto que seguía en el pasillo, ¿Un mal sueño? Quizás todo ese intenso dolor resultó en una pesadilla al desmayarse.

No...no, no, no.

Todo eso, esas personas, su padre, el sujeto de cabello blanco. ¡Incluso su hermano! Todo eso lo recuerda perfectamente, no podía ser un sueño. Si lo recordaba tan bien, entonces no había sido su cerebro creando un sueño lucido.

¿Entonces que fue eso? ¿Por qué su padre estaba quitándole el quirk a ese hombre?¿Por qué Kaito estaba ahí? ¿Que quiso decir el sujeto con esas palabras? ¿Por qué debería dudar si está bien?.

¿Detenerlos?

Izuku sabía muy bien el significado de esas últimas palabras, y estaba asustado.

Muy asustado.

De él mismo.

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Narra.....:

Recovery:Bien, ahora respira lentamente y exala de la misma manera- Sin rechistar hice caso la orden de la anciana, me carcomía por dentro tener que volver a esta rutina, es para no soltar sospechas, ¡Pero como molesta! - Exelente, déjame anotarlo.

Bajo su mirada a los papeles donde escribía no se que cosa, los síntomas de mi cuerpo supongo. Observé delante de mi las radiografías, exactamente la parte de mi contorno pélvico...ugh, de verdad soy una chica hecha y derecha, que cutre. Me entró un escalofrío al percibir la mirada del ratón, al lado de esas radiografías.

Parecía un niño en realidad, sentado sobre la mesa y agitando sus patas de un lado a otro.

Nezu: Lamento que tengas que repetir estás pruebas cada hora señorita Midoriya -Mencionó, sin apartar su mirada de la mía, esos puntos que tiene por ojos me dan cosas.

- Entiendo que sea por mi bien, pero podría dejar de llamarme señorita. Si es que en verdad lo lamenta -Le mandé una sonrisa, una sonrisa llena de malos deseos, la cual se me devolvió pero todo lo contrario a la mia. Ugh, me lleva hartando con lo de "señorita". ¡Lo hace a posta! Seguro que es a propósito.

¿Por qué lo digo? Por qué es la tercera vez que se lo repito, una por cada sesión.

Nezu: Sabrá perdonarme, pero según a mi perspectiva, hay una chica frente a mi. A pesar de su situación, llamarlo "joven" cuando su físico dice lo contrario solo fragmentaria mi vocabulario y percepción- Y el muy roedor me devolvió mi petición, disfrazando su rotundo NO con palabras bonitas. -Pero tranquila, en cuanto vuelva a su estado original, dejaré de dirigirme a usted con esos adjetivos.

- Si es que vuelvo a la normalidad...-Suspire, derrotado.

Con esa rata no se puede.

Nezu: Cualquier cosa que te hayan hecho, estoy seguro que será solo temporal. Para que un quirk revierta el sexo de una persona, se necesita de mucha energía de cualquier tipo. En casos de transfiguración anatómica y en una tan completa como la tuya, seguro que no dura mucho, la cantidad de suplementos que se debe obtener para mantenerte así es abismal. Claro, con ciertos factores esto podría ser erróneo -Comentó, en una extraña seriedad en su voz, la anciana le dió la razón, ella estaba empezando a extraer una pequeña cantidad de mi sangre con una aguja- Puede que el quirk tome algo de ti para mantenerse activo, por eso las pruebas, si es que se presenta algún cambio en ti, lo sabremos. En caso que esto sea verdad, tomaremos medidas...

Claro, lo entendía.

Si llegara a ser qué esa "fuente de energía" sea algo necesario para mi cuerpo, entonces estoy en grave peligro. Por supuesto, si estuviera afectando a un humano normal.

Pero yo soy un clon, que de paso, tengo albergado un quirk de aumento, con la suficiente manejo de este, podría sustentarme yo mismo. Al menos hasta que mi cuerpo se quede sin células.

Las cuales, en un cuerpo humano hay billones. Pero como yo solo represento una gota de sangre, sería 5 millones de células.

10. 000 glóbulos blancos y un cuarto de millón de plaquetas.

Claro, si hablamos de mi fuente de vida. Lo que sustenta este cuerpo es sangre falsa, o bueno, es algo complicado de explicar. Básicamente, la sangre que corre por mis venas es solo una imitación del material genético que tiene mi fuente de vida, pero una muy exacta, por lo que no habrá problema con que me extraigan sangre y me identifique como el verdadero Kaito Midoriya.

Puede que ser un "clon de sangre" suene simple, pero conlleva muchos detalles y precauciones que no estoy dispuesto a recordar.

Recovery: ¡Nezu! Que lo incómodas -La canosa salió a interrumpir el concurso de miradas que tenía con el animal, es ratón me está mirando con una sonrisa que da escalofríos, a pesar que su boca solo forma un triángulo.

Este animal mete miedo.

Recovery: Bien, joven, ya acabamos, ¡Vaya! Esta vez nos tomó casi media hora. -Ella hablaba mientras parecía estar observando todas las muestras que me tomó, de un cabello hasta muestras de orina...no, no me gustó, ¿Creen que es fácil orinar en un pequeño frasco detrás de una cortina teniendo a una anciana y un animal súper desarrollado escuchando? - Ten, come estás gomitas, tienen vitaminas incluidas. Las vas a necesitar. Ahora ve, que el receso casi acaba, ya van a comenzar las semi finales.

Entregó unas gomitas de ositos en mis manos. Me despedí con rapides de ellas y del...animal.

En cuanto deslice la puerta para cerrarla, me permití un escalofrío, lo necesitaba. Todo esto de los chequeos médicos son tan vergonzosas y fastidiosas, ¡Teniendo que verle el hocico a una rata de laboratorio!. Me veía como si pudiera ver a través de mis palabras, eso complica mi actuación, es difícil mantener la fachada ante un ser con una inteligencia superior a toda la raza humana. ¿O será que estoy desarrollando un complejo de inferioridad ante la rata?

Creo que estoy empezando a desarrollar un disgusto por los roedores

Pero con una de esas dirigiendo una escuela de héroes...

No lo estoy discriminando ni nada, simplemente es un peligro para mí.

De camino de vuelta a las gradas de mi clase, se puede escuchar los vitoreos del público, me preguntó quiénes estarán enfrentándose. Dejé de prestar atención al eco de las voces al percibir a una persona un poco más adelante de mi, está llendo a la misma dirección que yo por lo que está de espaldas. Pero ese cabello encrespado es muy destacante.

Antes de siquiera pensarlo, ya estoy corriendo hacia él. No estoy emocionado, solo que seguramente ya me persivió y sería raro que el jefe no saltará a abrazar a su hermano en cuanto lo ve.

Admito que me eh descuidado con mi papel por este inconveniente de cambio de sexo. Mi humor estuvo por los suelos y dejé de prestarle atención a los amigos del jefe, eso sería bastante sospechoso. Que bueno que los demás parecían captar que este cambio me tuvo de mal humor, seguro que este descuido lo atribuyen como parte de mi mal humor.

No es del todo exacto pero se acercan.

Al estar a medio metro, le di palmaditas en el hombro al pecoso, quien como si no me hubiera notado desde hacen metros, saltó cual animalillo asustado, apegándose a la pared como si fuera su protección. Con una expresión nerviosa y temerosa.

Eh...parece que de verdad no me noto.

Izuku: K-Kai-Kaito....-Murmuró muy bajo, pero lo pude captar.

- Ese soy yo. ¿Por qué estás así? -Le mandé una sonrisa absurda, curiosa y bastante sorprendido. ¿Por qué está temblando?

¿Que paso? ¿De que me perdí ahora?...¡¿Y si alguien le hizo algo?! ¡Quizás le amenazaron!.

Oh no, si eso pasó en mi descuido entonces tengo que resolverlo antes de que el jefe se entere y de un chasquido me quite la vida.

Y yo amo mi vida, tanto como amo que el jefe este feliz. Si el jefe está feliz, yo seguiré felizmente vivo.

Izuku: N-No, por nada, solo me metí demasiado en mi zona. De hecho, no te había notado, casi me das un infarto -Su cuerpo paraba de temblar y su mano se posó en su corazón. Soltó un suspiro y me dedicó una sonrisa apasible. -De hecho, iba volver a los asientos.

Empezó a retomar el camino a nuestra clase.

Algo no cuadra.

- Si estás volviendo ¿A dónde fuiste? -Me cole en su caminata, estando a su lado y llendo a su ritmo.

Mi pregunta pareció incomodarlo, ví ese casi imperceptible respingo de "me a pillado". Algo que por cierto, lo tiene desde muy pequeño.

Ya sabía yo que oculta algo.

- Bueno...-Empezó a zarandear sus dedos entre sí y no me miraba a la cara, oh, pequeño, eres tan obvio conmigo, siempre. Uno pensaría que tienes al jefe comiendo de tu mano pero con tu personalidad, no lo aprovechas - ¡Fui a ver a Kacchan! ¡Si! Lo dejaste muy malherido.

Y con esas simples palabras por fin se dignó a verme, creí que no me lo preguntaría pero no, ahí va con el tema. Por qué su expresión demuestra reproche.

Y de hecho me creo que haya ido a verlo, con lo mal que le dejé, debería estar aún en una camilla con casi todo el cuerpo vendado y , espero no, enyesado. Si despierta, estará de muy mal humor por perder y estar rodeado de otros estudiantes. Al menos mis pruebas son en otra habitación, una privada.

Vale, sabía que alguien tomaría mal mis actos y me recriminara.

¡Pero no me lo esperaba del conejo del jefe!

Izuku: ¡Te pasaste! -No precisamente levanto la voz, pero denotaba un tono firme y un poco más alto que el que suele usar- Dejarlo de tal manera, podrían haberte descalificado. No sé por qué no lo hicieron, no digo que debieron, pero picarte solo por unas provocaciones vagas- ¿Disculpa? Levanté una ceja ante la minimización del insulto...y si, Katsuki fue muy vago, de hecho, no fue uno de sus mejores insultos creativos, ¡¿Y Shoto que?! ¡El le dió hipotermia a Sero! - ¡Estamos rodeados de héroes! Y prácticamente, este festival es para que alguno de ellos se fije en nosotros y poder hacer las pasantias. En todo caso, no debiste ni debes salirte de tus cabales para dañar de esa manera a uno de tus amigos. Por más veces que puedan curarlo. Kaito, no entiendo por qué lo hiciste -Su voz se estaba haciendo más pequeña, llegados a un punto dónde parecían susurros, afine un poco mi oído para escucharlo- Es tu amigo, a los amigos no se les trata así, se que para Kacchan los golpes pueden resolver cualquier situación, pero tú sabes eso y le seguiste el juego sabiendo como terminaría.

Ahora parecía estar refunfuñando para si mismo. Perdiéndose en sus murmullos y haciendo pucheros, seguro que no lo nota, pero se ve lindo. Si, mi jefe mataría por ver esto.

Pero él debe estar bastante contento con estar con su hermana en este momento.

Ah, ¿Cómo estará el jefe?

Suspiré y un poco cansado del pecoso que parecía estar tratando de hacerse pequeño. Pero había algo más, podía notar que me mandaba miradas fugaces en ocasiones mientras yo aparentaba mirar al frente. En un momento donde no me observaba, yo lo mire a él, no se que está pensando pero parecía estar titubeando de decirme algo.

Para estar así, seguro que se olvidó de regañarme y se enfrascó en otro tema. Debe ser uno importante si está dudando, por lo que las cámaras que hay en cada esquina no ayudan. Debo llevarlo a otra zona, una con menos vigilancia.

Jefe ¿Tu que harías?...oh.

Se me cruzó una idea e hice mi sonrisa serena más grande, denotando travesura.

En un rápido movimiento y sonriendo con los dientes, me abalancé a mi presa. Poniendo mis brazos por detrás de sus rodilla y espalda. Para levantarlo de una zancada, sacándole un grito no muy masculino de camino.

Izuku: ¿Q-Que?¿Que haces?

- Te secuestro.

Izuku: Secuestrarme...- Si, pude ver el ligero tic en su ceja. Oh, quizás lo estoy "picando" un poco...pero una parte de mi, la más rencorosa, decía que tomara esto como una venganza por tomar las provocaciones de Katsuki demasiado "a pecho". Y si, le haré caso.

- Este malvado villano está secuestrando a la noble princesa para sacarle información valiosa. Y si se puede, pasamos por comida en la cafetería -Sin más me lo lleve, con quejas y todo. Al principio pataleó pero cuando casi lo dejó caer por "descuido", se quedó inmóvil. Ja, por quejica.

No sé si es por qué tiene mucha confianza con el jefe o de verdad tiene algo importante que contarme.

Bueno, cualquier queja, esto es lo que el jefe haría. No yo. Yo lo hubiera ignorado en todo el camino.

Pero fue gratificante, verlo apenado y avergonzado cuando nos encontrábamos con algún héroe en su ronda o estudiante, mirándonos como si fuéramos una cosa curiosa o poco común. ¿Tan raro es ver a una chica sosteniendo como princesa a un chico? Sé que lo normal es al revés, pero así es la venganza, divertida.

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(4435 palabras) Me detuve por qué el capítulo iba ser muy largo, por lo que lo corto aquí y ahora esperen que termine el otro capitulo.

¿Sorprendidos? Si, yo también. Estaba en blanco sobre la continuación y luego viene "Viridian: la guía verde" y me ilumina con su escritura y la manera en que todo encaja tan perfectamente bien que es satisfactorio. Se los recomiendo, no se arrepentirán, y si lo hace, pues les hago un especial a pedido XD. (No es broma)

BAY BAY~