Tal y como lo eran las limusinas, el avión en el cual viajarían a Italia era de lo más moderno y asombroso que hubieran visto; el lugar está repleto de asientos que a simple vista se veían muy cómodos, cada asiento tenía una pantalla con Internet y más, abajo se encontraba una sala llena de cosas parar entretenerse como vídeo juegos, música, libros e incluso un pequeño restaurante para comer lo que quisieran. Después de salir de su asombro cada estudiante se fue a curiosear el lugar, tan entretenidos estaban que no se dieron cuenta cuando Tsuna y sus amigos fueron guiados (Empujados/Amenazados) por Reborn a la sección que solo pertenecían a la Décima generación de Vongola.

- ¡¿Pero qué haces Reborn?! – Pregunto alterado el castaño una vez que se aseguraron que nadie los veía y oía.

- Calla Dame-Tsuna y mira a tu alrededor – Contesto Reborn sin su disfraz y disfrutando un expreso que solo Primo sabe de dónde lo saco.

Todos miraron el lugar donde se encontraban solo para quedar con la boca abierta al ver toda la tecnología y lujo que había en el lugar, si se habían asombrado al ver la sala anterior, esta no se le comparaba en nada. En el lugar se encontraban cuadros de las generaciones anteriores y algunas fotos de ellos en marcos que juraban eran de plata y oro, además que se podían ver algunos cuartos en un pasillo y por lo que alcanzaban a ver algunas tenían sus nombres, también había una sala de juntas, un lugar para comer lo que sea y para el placer de algunos también había una sala de entrenamiento bastante resistente.

- Vallan a dormir o hacer lo que quieran – Fue lo único que dijo Reborn para después jalar de la oreja a su estudiante y meterlo a su habitación.

- ¡¡¡Hiiieeee!!! – Grito de dolor le castaño al verse empujado a su recamara.

- Calle Dame-Tsuna – Le ordeno el ex-arcobaleno para después patearle la cabeza. - ¿Qué es lo que estás pensando? – Le pregunto un vez que se subió a la cama y veía al castaño en el suelo.

Sobándose el lugar donde su tutor lo había golpeado se quedó callado ante la pregunta de su tutor y este al ver que no decía nada, volvió a tomar la palabra un poco más serio.

- Sabes que no me puedes ocultar nada Dame-Tsuna, le puedes mentir y esconder cosas a todo el mundo pero a mí no, si tu no me lo dices me terminare enterando de otra manera, lo sabes muy bien – Hablo con voz firme el Hitman número uno del mundo sin dejar de mirar a su pupilo.

Y es que a pesar de que no demostraba se encontraba algo preocupado al ver a su estudiante más distraído de lo usual: Este no dormía en las noches hasta alta hora de la madrugada, se encontraba perdido en sus pensamientos por mucho tiempo y en más de una ocasión lo había encontrado demasiado serio con un tono de culpabilidad.

- Reborn yo.... –

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El viaje a Italia había resultado rápido para todos en el avión; los pertenecientes a Vongola, sabiendo del cambio de horario habían dormido para llegar con energía a su destino mientras que lo demás alumnos se le habían pasado todo el tiempo entreteniéndose con las cosas que le eran ofrecidas. Cuando llego el momento de aterrizar todos se acomodaron en sus asientos y así la arribada a Italia fue todo un éxito.

Al bajar del avión todos los alumnos estaban extremadamente cansados, por lo que no se percataron de los nuevos integrantes ni que estos se metían a la mejor limusina junto con Tsuna.

El viaje a la mansión Vongola fue bastante divertido para la Décima generación que admiraban todo lo que veían a su alrededor, sobre todo Tsuna que miraba maravillado todo lo que podía con sus ojos brillando intensamente junto con una gran y hermosa sonrisa, logrado que todos sonrieran al ver a su cielo tan feliz, incluso Hibari había sonreído un poco mientras que Reborn ocultaba su rostro con su fedora y con ello la sonrisa que tenía al ver a su alumno como un niño de cinco años.

Justamente cuando la mansión Vongola estaba a la vista, todos quedaron con la boca abierta el ver lo que tenían en frente, para ellos, eso parecía más un castillo y no una mansión, tan sorprendidos estaban que solo escucharon la voz de Reborn diciendo que ya habían llegado.

Al bajar de las limusinas, varios encargados de Vongola los esperaban en la entrada; todos los mayordomos y mucamas se encontraban alineados a las puerta de la mansión y una vez que vieron a Tsuna bajar de la limosina después de sus guardianes todos ellos se inclinaron a la ves y con una sonrisa en el rostro todos hablaron al mismo tiempo.

- Bienvenido a casa Decimo Vongola y sus guardianes -

En ese momento Tsuna deseaba que se lo tragara la tierra, se había puesto demasiado pálido y parecía que en cualquier momento el alma abandonaría su cuerpo, mientras que los guardianes junto con el tutor del chico tenían una sonrisa maliciosa en el rostro, pero, para suerte de Tsuna y desgracia de los demás los alumnos estaban más dormidos que despiertos por lo cual no le prestaron a atención a lo que decían y solo entraron en el lugar para después ser guiados por los mayordomos a sus habitaciones con al aviso de que la cena seria en tres horas.

Una vez que los todos los demás estudiantes junto con el profesor Nezu estuvieron en sus cuartos correspondientes, Tsuna junto con sus guardianes se quedaron en la entrada.

- ¿Qué esperas Dame-Tsuna?, Nono te espera en su oficina – Dijo Reborn de repente, dándole una patada a su estudiante que lo dejo en el suelo.

- ¡¡¡Hiieee!!! – Grito el joven castaño de dolor para después ver a su tutor. - ¡¡¡No tenías que golpearme Reborn!!! – Exclamo mientras se ponía en pie con ayuda de su mano derecha.

- Solo date prisa Dame-Tsuna que no es bueno hacer esperar a Nono – Respondido el Hitman para después subirse a la cabeza de su alumno. – Ustedes pueden ver la mansión, sus habitaciones están en el piso más alto, solo muestren sus anillos y los dejaran pasar – Comento Reborn viendo a los guardianes.

Una vez que se despidió de sus amigos fue guiado por Reborn a la oficina de Nono, la persona a la que él considera como su abuelito; el viaje fue corto para el castaño que se entretenía viendo la hermosa decoración del lugar y una vez que llego a estar en frente de la puerta solo escucho que alguien le decía que pasara. Un poco nervioso el castaño abrió la puerta y lo primero que vio fue a aquel que considera su abuelito sentado en su escritorio con una sonrisa al verlo.

- Tsuna-Kun – Saludo su abuelo parándose de su asiento y acercándose a su nieto para abrazarlo.

- Abuelito – Contesto el pequeño cielo, correspondiendo el abrazo junto con una gran sonrisa. 

Reborn que se encontraba viendo todo desde un sillón no pudo evitar sonreír un poco ante la escena que presenciaba.

- Un gusto verte otra vez Nono – Saludo Reborn después de un momento.

- Me alegra saber que llegaron con bien viejo amigo – Respondió Nono con una sonrisa después de separarse del abrazo y viendo a Reborn con una sonrisa. – Dime querido nieto, ¿Te gustaron los regalos que te deje en casa? – Pregunto Timoteo con una sonrisa, esperando con ansias la reacción del joven.

- ¡Claro que si abuelito! – Exclamo el castaño con la cara roja, los jitomates desearían tener ese color. – Pero abuelito, ¿¡Porque tantos?! – Pregunto.

- Me alegra que te gustaran y sobre lo otro, no podía decidirme cual darte así que mejor te di todos - Respondió Nono con una sonrisa, le encantaba ver a su querido nieto de ese color.

- ¡Nono! – Grito avergonzado el Décimo Vongola aún más rojo si era posible.

- Nono hay algo que Dame-Tsuna quería decirte – Interrumpió Reborn con una voz más seria al igual que su mirada.

- ¿Qué sucede Tsuna-Kun? – Pregunto algo preocupado el Noveno volviendo a sentarse en su asiento.

- Abuelito... - Tsuna lo miro algo indeciso para después soltar un pequeño suspiro, no había vuelta atrás, Reborn ya había sacado el tema. – La verdad yo... –

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Cuando la hora de la cena llego todos los estudiantes junto con el profesor Nezu fueron guiados al comedor, en el trayecto se encontraron con los guardianes que curioseaban en la mansión, al llegar al comedor se sorprendieron al ver lo enorme que era con una mesa larga con sillas para todos, candelabros en el techo y unos enormes ventanales que dejaban ver la hermosa luna alumbrando el jardín de afuera.

Sola la voz del mayordomo los saco de sus pensamientos junto con Tsuna que apenas entraba en el lugar e ignorando a los jóvenes que iban a comenzar con insultos y burlas al castaño, el mayordomo tranquilamente los fue ordenando en la mesa, más de uno pensaron que sería el profesor Nezu quien iría al otro extremo de la mesa pero cuál fue su sorpresa al ver que era el castaño el ocupante de ese lugar, incluso el mismo se había sorprendido pero su super-intuicion le decía que su tutor era el responsable de eso y sabiendo cómo le iría si se negaba o reclamaba mejor se quedó callado, pero, justamente cuando quería tomar su lugar alguien hablo.

- ¿¡Porque Dame-Tsuna ira en la cabecera?! – Se escuchó la voz del profesor Nezu, parándose de su lugar con visible molestia en su voz.

Inmediatamente varios comenzaron a protestar por lo mismo, inconformes y molestos porque el inútil de la escuela tuviera un lugar tan privilegiado e importante; mientras el castaño solo bajo un poco la mirada al escuchar las palabra de sus compañeros ya que aunque estas ya no tenían el mismo efecto que antes aun llegaban a dolor un poco, los guardianes ya estaban sacando sus respectivas armas para matar a todos los que le están haciendo daño a su cielo pero no solo ellos, todo el personal que se encontraba en el lugar quería callar a todos esos malditos que insultaban al Décimo, pero nadie pudo hacer nada ya que en ese momento las puertas del lugar se volvieron a abrir, callando a todos al ver quienes acababan de entrar.

Observando todo el lugar, se encontraba Timoteo Vongola junto con sus guardianes y su querido amigo que llevaba su disfraz de Boreen-Sensei, todos ellos se dieron cuenta del ambiente tan pesado y tenso que había, pero, fueron solamente Nono y Reborn que notaron al castaño con la mirada oculta por su cabello junto con la sed de sangre que tenían sus guardianes incluyendo a Hibari para su sorpresa y eso les dio a entender que algo grave estaba sucediendo.

- ¿Por qué tanto alboroto? – Pregunto Reborn subiendo a la mesa sin despegar la mirada de su estudiante.

- Hay un problema Boreen-Sensei – Habla Mochida que miraba con furia a Tsuna, cosa que no pasó desapercibida de todos los relacionados con la mafia.

- ¿Y cuál es el problema? – Pregunto el Hitman innecesariamente ya que el sabia el porqué las molestias de todos.

- Un Dame no puede sentarse frente a Nono – Respondió Mochida con un tono de superioridad y olvidando por un momento al igual que casi todos quien se encontraba delante de ellos.

- ¿Están tan molestos solo porque el joven tenga ese lugar? – Intervino Nono con una voz sin tono, recordándoles que el se encontraba en el lugar; cosa que le provocó un escalofrió a casi todos, ya que los guardianes tenían una pequeña sonrisa en su rostro mientras que el castaño deseaba que se lo tragara la tierra.

- Claro – Respondieron todos los estudiantes normales junto con Nezu- Sensei con un tono de inseguridad ya que la mirada que les daba Nono era una de temer.

- Pues fui yo quien eligió los asientos de cada uno – Informo Timoteo, sentándose en su lugar correspondiente junto con sus guardianes y Reborn.

Después de esas palabras todo el lugar se vio inundado en el silencio, hasta que en un extremo de la mesa se comenzó a escuchar peleas y risas; los no relacionados con Vongola se encontraban en silencio por haber ofendido e ignorado a la persona que deseaban impresionar mientras que la Décima generación hablaban y pelaban para hacer reír a su cielo, cosa que funcionaba.

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Oki esto fue todo, ¿Les gusto el capitulo de hoy?

¡¡¡Les agradezco a todas la personas que comentaron y votaron en el capitulo anterior!!!

Les recuerdo que en este fic no habrá ningún romance ni nada de eso, no me da escribir esos temas. Este fic sera mas familiar/amistad y si llego a haber algo seria un poco de Yaoi, pero, solamente que varia gente lo pida.

Otra cosa, comenzare a estudiar para la segunda ronda del examen de la UNAM así que les doy dos opciones:

-Subo los capítulos cortos pero semanales ( Solo si logran los comentarios requeridos ).

-Esperan dos semanas para un capitulo por lo menos de 2000 palabras.

Sera como ustedes deseen.

Bueno sin mas que decir, veamos si logran otros seis comentarios para el capitulo de la próxima semana, ahí diré ya oficialmente su este fic cambia a ser un poco Yaoi y como serán las actualizaciones. ¡¡¡Hasta la próxima!!! n.n/