Un nuevo día llegaba a Nanimori y con esto significaba ir a la escuela para todos, pero las cosas no acababan ahí; la graduación estaba cerca, solo faltaban cuatro meses para el día tan ansiado y codiciado por muchos pero en especial por un grupo que ya querían que acabaran las clases para que su amigo al fin dejara ese maldito lugar donde había sido humillado un millón de veces (Y seguía siendo, solo que estos no lo sabían).

Siendo despertado de la manera acostumbrada (Un mazo verde en la cabeza), un joven de cabello castaño anti-gravedad salió corriendo de su hogar en camino al colegio, encontrándose a mitad de camino a sus dos mejores amigos que lo esperaban: Yamamoto Takeshi y Gokudera Hayato.

El resto del camino paso entre charlas y pequeñas peleas que solo hacían reír al castaño, también en el trayecto se toparon con el resto del grupo: Kyoko Sasagawa junto con Haru Miura, a pesar de que esta última no iba al mismo instituto que los demás eso no evitaba que los acompañara parte del camino tanto de ida como de vuelta. Una vez todos juntos llegaron con tranquilidad a su destino y después de que Haru se despidiera de los demás todos se dirigieron a sus aulas.

Al inicio las cosas pasaron con suma normalidad y para Tsuna no fue la excepción: Fingir que no sabía nada de la materias, caer con el aire, recibir burlas y ofensas de parte de sus compañeros así también como algunas agresiones que para su mala suerte habían sido captadas por sus guardianes. Cuando llego la hora del descanso, Tsuna se la paso calmando a sus guardianes y para sorpresa de este hasta Yamamoto que era el más calmado quería matar a las personas que lo agredían; después de varios argumentos y mas que no parecían tener fin, logro convencerlos de no hacer nada, para cuando se dieron cuenta a penas y tenían tiempo de comer algo rápido, fue hasta que regresaban a su salón cuando la súper-intuición de Tsuna le alerto de algo, pero no sabía decir si era bueno o malo, solo sabía que sería algo demasiado grande.

Sin notarlo ya estaba en su lugar concentrado en los problemas que les había dejado el profesor Nezu Dohachiro; después de un momento de analizar los ejercicios tomo otra hoja en blanco y volvió a copiar los estos para después resolverlos a una velocidad asombrosa, de algo tenían que servir todas las torturas de Reborn y era por eso que para el todo ese tema ya era lo más fácil del mundo, guardo la hoja en su mochila para dársela después a Gokudera y que este los revisara en otro momento por lo que dejo sin tocar la hoja que le tenían que estregar al profesor. Giro su vista para ver al grupo, donde se notaba que todos sufrían por no comprender la hoja que tenían en frente y no era para menos, al parecer Nezu-sensei no venía de buen humor por lo que les había puesto problemas de mínimo nivel universidad; por lo visto solo Gokudera los había acabado como si nada y Yamamoto por lo visto los respondía con lo primero que le viniera a la cabeza, dejo salir un pequeño suspiro y miro hacia la ventana, pero justamente cuando estaba por perderse en sus pensamientos oyó que la puerta del salón era abierta.

Cuando giro sus vista al frente del grupo, sintió que el alma se le salía del cuerpo y que en cualquier momento moriría y como no estarlo si delante del todo el salón se encontraban parados Reborn con su disfraz de Boreen-sensei y a lado de él se encontraba Nono, los dos con una pequeña sonrisa, además de que junto a ellos se encontraba el director de la escuela.

No solo Tsuna fue sorprendido si no que todo el grupo y además de Tsuna sus amigos no lograban pensar por qué el Noveno de Vongola se entraría en su escuela en frente de todo su grupo; a decir verdad su mirada mostraba su sorpresa.

Tsuna agradecido quedarse sin voz, de lo contrario ya habría gritado por lo que se hubiera ganado un golpe de su tutor, no lograba pensar claramente ya que eran muchas cosas las que pasaban por su cabeza, pero la voz del director lo saco de su mundo (Que en ese momento se encontraba en algo parecido al apocalipsis).

- Lamento la interrupción profesor - Hablo el director, obteniendo la atención de todos. - Pero al parecer tenemos buenas noticias - Termino diciendo con una sonrisa.

- Ciaossu - Saludo como siempre Reborn subiéndose al escritorio del profesor. - Verán hoy les traigo buenas noticias, pero dejare que mi amigo el Noveno se las de - Comento, volteando a ver al mencionado que solo había mirado a su nieto desde su llegada y trataba de no reírse por la cara que tenía.

- Sera un placer - Respondió Nono con una voz suave pero firme a la vez. - Para los que no me conocen soy Timoteo di Vongola, también conocido como el Noveno Vongola, pero por favor llámenme Nono. Estoy seguro que casi todos conocen la empresa Vongola, esta empresa a pesar de que es relativamente nueva ha logrado obtener gran reconocimiento y fama por todo el mundo pero yo ya estoy viejo para seguir como líder de la empresa, como mi querido nieto será el siguiente sucesor y ya que este es japonés decidí hacer una pequeña rifa entre todas las escuelas de Japón de ese sorteo gano esta escuela y volví a elegir pero esta vez un salón a lazar, siendo este el ganador - Hablo tranquilo Nono, pero sin dejar de ver las expresiones de su nieto y sus amigos.

Todo en el grupo a excepción de tres personas se emocionaron con la idea, ¡Claro que todos conocían la empresa Vongola!, tal y como lo había dicho Nono; a pesar de que no tenía tanto tiempo llego con fuerza y grandes avances tecnológicos en casi todos los campos siendo ahora el sueño de todos tener algo de tan reconocida empresa y ahora al saber que se habían ganado algo de parte de ellos parecía un sueño hecho realidad.

- ¿Que ganamos Timoteo-sama? - Pregunto una chica del grupo, sacando de sus mundos a todos.

- Por favor díganme Nono - Corrigió Timoteo para después sonreír de una manera que a Tsuna le recorrió un escalofrió. - Toda esta clase junto con algunas personas más irán a Italia pues todos ustedes están invitados a la ceremonia de sucesión de mi nieto, el décimo Vongola. Allá en Italia completaran sus estudios en estos meses que quedan. Por los papeles y permisos no se preocupen yo ya los eh conseguido - A completo Nono con una sonrisa tratando de aguantarse la risa al ver la cara pálida de su nieto y la sonrisa maliciosa de sus amigos.

- Tal y como dice Nono - Tomo la palabra Boreen-sensei que hasta el momento solo miraba y se divertía con las caras que hacía su alumno. - Así que el sábado todos nos encontraremos en frente de la escuela a las siete de la mañana, no lleguen tarde, Nezu-sensei usted vendrá con nosotros para ayudarnos a mantenerlos bajo control - Dijo Reborn viendo al profesor que solo asintió aunque se notaba que estaba emocionado al igual que los alumnos.

- Los esperare con ansias en la mansión Vongola, hasta luego - Se despidió Nono saliendo del salón seguido de Reborn.

Saliendo del grupo los dos estuvieron caminando en silencio hasta llegar a una limusina negra que los esperaba afuera. Una vez que estuvieron en ella dejaron salir unas pequeñas sonrisa maliciosas.

- ¿Tu qué piensas amigo mío? - Pregunto de repente Nono, viendo a Reborn que ahora ya vestía normal.

- Esto será inolvidable - Fue su respuesta, pasando le ha Nono una hoja con problemas resueltos a la perfección, era la hoja que Tsuna había metido a su mochila.

- ¿Como la conseguiste? - Pregunto curioso Nono viendo la complejidad de los problemas.

- No olvides quien soy Nono - Respondió con algo de burla Reborn.

- Jajaja tienes razón - Comento riendo un poco para después volver su atención a la hoja. - Mi nieto a avanzado demasiado - Agrego con orgullo rectificando que todos los problemas estaban correctos.

- Eso es claro Nono, soy yo quien lo entrena - Dijo Reborn con algo de orgullo en su voz.

Para Nono era más que claro que Reborn estaba bastante orgulloso de su nieto y aunque este jamás lo diga en voz alta, se notaba que le había tomado bastante cariño a Tsuna, al grado de verlo como un hijo y preocuparse por él, a su manera claro está.

El resto del día pasó sin nuevas sorpresas, todo el grupo estaba más que emocionado al saber que viajarían a Italia; ya varios se estaban haciendo la idea de sorprender al décimo Vongola y que este les ofreciera un gran puesto en la compañía, asegurando de esta manera un excelente futuro. Claramente ellos no sabían que ya conocían a tal persona y la impresión que le habían dado era la peor del mundo

Para los amigos del décimo esta era una gran noticia, deseaban ver ya las caras que pondrían esos estúpidos al ver quién era el heredero de Vongola, deseaban cobrar un poco de venganza por todo el mal que le habían hecho al pobre, pero al mismo tiempo les preocupaba bastante su amigo.

Tsuna desde la noticia estaba ido, no presto atención a ninguna de las clases restantes y solo miraba por la ventana con la mirada perdida en algún lugar del inmenso cielo azul. No había dicho nada ni siquiera en los momentos donde no estaba el profesor, no le tomo importancia a las burlas de Nezu-sensei cuando vio su hoja en blanco; todo esto tenía bastante preocupados a sus amigos.

Cuando llego el momento de ir a casa y una vez al verse a fuera de la escuela fue cuando Tsuna reacciono.

- ¡¡¡¡Hiieee!!!! - Grito a todo pulmón el castaño, espantando a Gokudera y Yamamoto que no se esperaban esa reacción. - ¡¿Pero cómo se le ocurrió eso a Nono?! ¡Estaba seguro que él me apoyaba con lo de esperar y mantener las cosas como estaban! - Gritaba círculos y agarrándose la cabeza en señal de desesperación.

- Vamos Tsuna tómalo con clama - Trato de relajar Yamamoto con su típica sonrisa.

- Décimo si el Noveno cambio los planes debe ser por algo, ¿No lo cree? - Hablo Gokudera con el tono más tranquilo que pudo para tratar de calmar a su querido jefe, ya que internamente estaba maldiciendo a más no poder a Yamamoto por ganarle la palabra.

- Tal vez... - Soltó Tsuna después de un momento de quedarse quieto. -... Pero de todas maneras aun pienso que Reborn tuvo algo que ver - Comento volviendo a caminar.

Ya más tranquilo siguieron su camino, donde Tsuna pudo relajarse más al platicar con sus amigos pero eso no quitaba que no entendía nada de lo que estaba pasando, además de que él podía jurar que Reborn era el responsable del todo el asunto y tratando de olvidar el tema por unos momentos, se dedicó a parar la pelea entre sus amigos los cuales de una manera a otra siempre lograban calmarlo.

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Bueno debo aclarar unas cosas antes de todo; en este fic no habrá nada de romance. No se me da escribir ese tema, así que para que no me estén diciendo o preguntando quien sera la pareja de Tsuna o de alguien mas, además de que yo prefiero el Yaoi y a menos que varia gente me lo pida seria Yaoi pero leve.

Dejando aclarado este asunto, ¡¡¡¡Les agradezco a todos los que leyeron el primer capitulo y dar muchas gracias a los que comentaron!!!!

Sin mas que decir, espero sus comentarios, ¡Hasta la próxima! n.n/