43 (parte dos)
N.A:
Como verán, el reparto ya está listo.
Uriah Shelton, interpretará a Sebastián Wyght. Es una decisión que tomé yo, ya que cuando estaba viendo "El Mundo de Riley" apareció él, y fue tipo: "NECESITO SABER SU NOMBRE. ES SEBASTIÁN PERSONIFICADO".
Y pues, como también verán, aún no encuentro a la chica que interpretará a Eloise :c
PD: Capítulo narrado en tercera persona c:
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—Dios —comenzó a decir Eloise —, señorita Mathews, usted es la maldita ama de las bromas —¿que si lo que había sucedido era una broma? ¡Pues claro que sí!
—¿Tú dices? —preguntó la mamá de Luke. T y Eloise asintieron —. Es que tenía motivos para hacerlo, pero no creo ser la ama de las bromas; dejarlo en ridículo frente a sus amigos está mal.
—De hecho, no lo hizo quedar en ridículo —dijo T Smith, rascando una picadura de mosquito en su brazo derecho —. Quedó como una madre genial —Wendy sonrió.
—¿Cuáles fueron tus motivos para la broma? —le pregunto Eloise a la madre de Luke, con una sonrisa. ¿Que si parecía un interrogatorio? La verdad es que sí, pero ellas estaban bien con aquello. Wendy suspiró.
—Dijeron que habían ido de vacaciones —dijo ella, apoyando su codo izquierdo en la mesa, seguido de su mentón, que se apoyó en la mano del ya mencionado lado —, pero, ¡sin mí! —gritó Wendy —. Jenna les seguía el juego diciendo que los había visto con las maletas, y Jake estaba escondido en su habitación; yo creía que lloraba, cuando en realidad él reía a costilla suelta.
—¡Ya llegué, personas! —gritó Jake, apareciendo de la nada. Nadie le prestó atención, así que corrió hacia donde se encontraba su madre y T. ¿Eloise? Él no la había visto.
Cuando llegó, se encontró sorprendido de ver a la pelinegra allí, pero una sonrisa más allá de amistad fue el detonante para que T Smith tuviera que ahogar un grito de felicidad; ¿qué diablos sucedía? A ella no le importaba, siempre que pudiera armar alguna pareja.
—¿Qué fue esa sonrisa? —preguntó T, con un tono que logró poner a Eloise roja como tomate. Wendy, al ver que ya no encajaba en la escena, se marchó.
—¡Eloise! —dijo Jake, luego de unos segundos, ignorando completamente la pregunta de T. Volvió a hacer esa sonrisa; algo ocurría entre ellos dos. Y T Smith no pararía hasta saberlo.
—Jake —respondió Eloise, mirando la cerca que tenía a su lado, con el tono más frío imaginable. T volvió a ahogar un grito cuando vio la cara de desilución de Jake.
—¿Qué sucede entre ustedes dos? —preguntó T, con el mismo tono usado por ella misma anteriormente. Otra vez, volvieron a ignorarla.
—¿Qué ha sido de ti en estos años? —le preguntó el castaño a Eloise, sentándose a su lado. Eso provocó que las mejillas de ella se tornaran aún más rojas de lo que estaban.
—Jake, tú sabes lo que ha sido de mí —dijo la pelinegra, escondiéndose detrás de una cortina de pelo —. Me torturabas con mensajes todos los días, especialmente a las madrugadas.
—Bien que tú los respondías —dijo Jake, con su sonrisa encantadora. T ladeó la cabeza para verlos a ambos.
—Sólo diré que harían una bonita pareja —dijo T, antes de correr de un golpe de Eloise. Pero ella no corrió a golpearla, y él no rió a carcajadas.
Ellos dos se miraron, en silencio. Eloise suspiró.
—Simplemente —comenzó a decir Eloise —, olvídate de lo que me dijiste —Jake negó lentamente.
—No me olvidaré de ti, Eloise —dijo Jake, parándose de un salto —. Sería como olvidar mi propio nombre —y así es como se fue a preparar el video de su hermano, dejando a Eloise con confusión, curiosidad y, me atrevería a decir, amor.
Porque sólo ellos dos saben por qué fue lo que fue.
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