Dedicación para Babylonx5sos , aimr04 , barbsterspace , MaferQueenx y Nuvi_AE08 ❤️

¿Le damos play al maratón? Y si andamos act, los próximos caps luego de estos dos también irán en maratones, ¿sí vacata?

Aquí empieza la prendedera.

Le ha gustado a vanessasuarez, marioruiz, sherylrubio, luisitocomunica y a 432.087 personas más

pepeseva To the moon and back

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barbrodriguez Tas claro que lo que se ve atrás es el congelador

barbrodriguez Siempre tuki, nunca intuki

        pepeseva @barbrodriguez No ps

            pepeseva @barbrodriguez Es la nevera

pepeseva @barbrodriguez Y se te cayó la moral pa'l subsuelo, oíte?

ricardodias Kike la luna, con razón vives perdido en la galaxia, papi

fiorella Upaaaa, yo te doy hasta la cédula, chamito chamo

grpepe Arriba, tocayo💪🏽

luciarodriguez Aaaay valeeee, después soy yo la gringa

pepeseva @luciarodriguez De bolas, tú eres la que tienes casa gringa, colegio gringo, amigos gringos, novio gringo... Eres gringa mrk

luciarodriguez @pepeseva Llora ps. Y mi novio es australiano, no gringo, rolo 'e pajuo

             pepeseva @luciarodriguez Lliri ps, es la misma verga

luciarodriguez @pepeseva Es como decir que una empanada es lo mismo que un cachito, así que ningún ningún

pepeseva @luciarodriguez Ahí sí me jodiste

sebas ¿Pa' cuándo la colaboración?

andyjimenez Alta lacra, manito

           luisipolito @andyjimenez Jalando bolas

katieangel 🔥🔥🔥🔥

luisferpolito En esta mierda todo el mundo tiene los ojos claros

luisferpolito Me arreché

            luciarodriguez @luisferpolito Tú te quejas por todo, vale. Agradece que tienes tus ojos y ya

pautips 😍

danibarranco Marico, haces falta

         pepeseva @danibarranco Tú nunca vienes para Maracay njda

          danibarranco @pepeseva Hoy me llego entonces

          pepeseva @pepeseva Váyalo convive. Llégate al dm y cuadramos bien ese beta

          fiorella @danibarranco @pepeseva @barbrodriguez Mano, Bárbara, reatziona. Te están soplando el bistec, no me la calo

           luciarodriguez @danibarranco @pepeseva  @barbrodriguez Ataca, fiera, ataca

        danielrodriguez @danibarranco @pepeseva @barbrodriguez Se prendió demasiado

—

EL CLOSET
creado el 14/01/2016

Andy💉, Bestie❤️, Bro🙄, Luisa🐥, Luisf😍, Pepe🔥🤙🏼,  Sis💜

Luisa🐥
Veeee marico kike se prendió el peo con Mayor Monograma y Pinocho

Andy💉
Ajá @Sis💜 te están quitando lo tuyo

Y pa' rematar la Daniela Barranco
✓

Figúrate tú
✓

Bro🙄
Esa caraja está más buena que comer con los deos'

Andy💉
Qué si no

Pepe🔥🤙🏼
Más curvas que la carretera 'e Choroní

Sis💜
🙄

Sis💜
Píquenle una torta ps

Luisa🐥
YA FUE

Luisa🐥
SE PUSO CELOSA

✓

Luisf😍
maRiCO

Luisf😍
Se pasó

Sis💜
Les caes a coñazos tú o lo tengo que hacer todo yo? @Pepe🔥🤙🏼

Pepe🔥🤙🏼
Acepta que te pusiste celosa

MARICOOOOOO AAAAAAAAAAAH
✓

Luisa🐥

Bestie❤️
Lit

Bestie❤️
Esta ñelda no se apaga ni que le echemos el Guri encima

Luisf😍
@Luisa🐥 Kiabusadora con el sticker ese

Luisa🐥
Soy tu hermana, tengo derecho a usar tus fotos para montar mi negocio de stickers cuando quiera

Luisf😍
🖕🏼

Sis💜
@ToditosUstedes kike celosa yo JAJAJAJAJAJAJA

Sis💜
De sueños también se vive @Pepe🔥🤙🏼

Sis💜
Dicen que a las 20000 ilusiones acumuladas te dan un descuento

Sis💜
Así que ve recolectando

Pepe🤙🏼🔥
Ya quisieras tú que yo soñara contigo, mami

Métanse ya, pls
✓

Luisa🐥
Para que por fa

Luisf😍
Ya, pues

Luisf😍
Dejen el peo

El pacifista ahora
✓

Luisf😍
Voy a mandar una foto tuya por pajua

Andy💉
Eso se hace, chamo, no se avisa

Luisf😍

Bro🙄
JAJAJAJAJAJAJAJA

Bro🙄
El pájaro loco

Bestie❤️
Mrk échate una peinadita de vez en cuando

Pepe🔥👍🏼
@Lu🌺 Chama, tú no conoces una vaina que se llama peine??

Tan buscando lo que no se les ha perdido
✓

Los voy a acusar a todos con el Yonaiker
✓

Pepe🔥👍🏼
@Luisf😍 Ya le dijiste a la pana esta lo que tú y yo sabemos?

Decirme qué??
✓

Luisf😍
Sí eres cagón @Pepe🔥👍🏼

Luisf😍
Ahora la marica aquella no se va a quedar tranquila hasta que se lo diga

Menos mal que tú estás es claro
✓

Ahora voy a dedicarme al completo a joderle la paciencia a pelo 'e coleto
✓

Los amo, chao
✓

Ah, y mámense un webo del tamaño 'e la nariz de Pepe toditos
✓

—

—¿Pa' dónde vamos, pues? —exigí una respuesta a Luisfer, guardándome el celular en el bolsillo.

—Péinate y te digo.

Qué bolas.

Él trató de decírmelo con seriedad y todo, pero fue sendo fail, porque se le formó una risita toda burlona en la jeta.

Qué peo con esa gente, vale. Yo no andaba despeinada, sino estilo natural. Eso es todo. ¿Qué tan difícil era entender?

—Pajuo —lo insulté, justo antes de ponerme en puntillas para así poder espelucarle toda la totuma. Pa' que fuera serio—. Ahora ¿quién es el pájaro loco?

Él chasqueó la lengua, luchando por no sonreír mientras se acomodaba el pelo otra vez. —Eres tú, y seguirás siendo tú. Aunque dejaras a un lado tus diferencias con el peine. Tu pelo como que se resiste.

—Qué bolas, de pana, pero no me cambies el tema —insistí, al darme cuenta de sus intenciones de distraerme pa' que no le siguiera preguntando, las cuales había estado a punto de convertir en logros—. ¿Pa' dónde me estás llevando?

Luisfer se encogió de hombros, haciéndose el loco. —Yo te dije que era una sorpresa. —Pasó de mirarme a mí a echar un vistazo a su alrededor, como acordándose que era él el que nos estaba guiando a ambos en nuestro caminar por plena Nueva York—. Además, en cinco minutos llegamos. No me eches a perder la vaina.

—Jum —me limité a musitar, haciendo un gesto rápido con la cabeza acompañado de una buena mueca.

Luisfer soltó un suspiro de alivio al ver que me resignaba, jurando que no le iba a joder más la paciencia. Yo lo dejé tranquilito que creyera, callándome la boca por un rato, hasta que...

—¿Cuánto falta? —comencé diciendo como la propia carajita, dándole play al paso 1 de mi plan macabro. La idea, claro está, era ladillarlo poco a poco, lento lento, hasta un punto en que me tuviera que decir pa' dónde coño íbamos.

—Cuatro minutos —me contestó, viendo su reloj, y sin captar la vaina al primer momento.

Yo asentí, volviéndome a callar la jeta.

—¿Cuánto falta? —volví a preguntar, fingiendo seriedad.

La cara con la que me vio Luisfer no fue normal, menor, pero esa era la idea. Ya el paciensómetro estaba bajando.

—Medio minuto menos que la última vez que me preguntaste —fue lo que contestó, apretando los labios en una sonrisa de si vuelves a preguntar te caigo a coñazos.

—Ah ok. —Me hice la loca, la que no lo estaba haciendo a propósito, y regresé a mi estado de silencio momentáneo.

—¿Cuánto falta?

—Mira. —Luisfer se volteó hacia mí, deteniéndose con las manos en la cintura—. ¿CUÁNDO COÑO DE LA MADRE VAS A DEJAR DE JODER TANTO? —Me peló los ojos así burd'e grande, queriendo arrecharse aunque perfectamente que no podía, no conmigo—. ¿AH?

—Cuando a Maduro se le caiga el bigote.

—Qué rara eres... —Luisito entrecerró los ojos mientras me miraba como si fuera una loca, haciendo una mueca con la jeta—. Pero ya, cállate la boca que me tienes arrecho con tanta preguntadera.

Por cuarta vez ya, fingí tranquilidad, aunque todos sabíamos perfectamente que no tardaría mucho en repetir aquella frase tan estresante, ganándome un buen lepe de parte de mis mejor amigo.

—¿Cuánto falta?

****

—...y esta es la sala —decía el valenciano, caminando dentro de la amplia —y cuando digo amplia me refiero a que era realmente inmensa— habitación.

Resulta y acontece que no faltaban ningunos cinco minutos pa' la mardita sorpresa. Pasa que cuando llegamos al sitio en el que creí que esta se encontraría, Luisito me salió con que el edificio donde estábamos, era el del apartamento de la amiga suya que tenía que ir a fisgonear. O sea, que primero que todo íbamos era a verle la vaina al culish de él.

Cómo se puede ser tan vende-patria Yahoo respuestas.

Total que en contra de mi voluntad terminamos subiendo a la verga esa, pues. ¿Qué más?

Ya llevábamos como quince minutos ahí metidos para cuando yo dejé el puji-puji y me puse seria a evaluar el apartamento. Ya sabes, si no puedes con ellos, úneteles.

Y hablando claro el bicho era bello, así que no me tomó demasiado enfrascarme en buscarle los detalles a todo como hacía cuando pasaban los "jueves de hogar" en Discovery Home & Health. Sendo canal, 'tas claro.

Como te iba diciendo, el betulio era burda 'e lo grande: dos pisos, cinco cuartos, una vaina que era mitad biblioteca y mitad estudio —con su computadora y tal—, dos baños, senda cocina, semerenda sala, y de paso, una terraza y un patio pequeño. Pa' remate, todo amueblado. Tipo la humilde morada de mi novio versión apartamento. Ksual.

Las decoraciones eran en blanco, marrón cerezo y negro, básicamente. Había mármol por todos lados —resaltando en la cocina y en uno de los baños—, al igual que madera, contrastando el toque delicado con el rústico.

Los cuartos, todos y cada uno de ellos, daban a la terraza, gracias a la labor de una buenas ventanas que hacían entrar luz a la habitación. En la zona externa, se hallaban colocados unos cuantos muebles de estos que venden en Epa, que son como entretejidos en un material marrón y tienen largos cojines blancos encima. Estos se posicionaban alrededor de un gran budare de metal hundido —que tenía pinta de servir pa' hacer fogatas—.

Por otro lado, la mayor parte de las secciones del piso de abajo —a excepción de las escaleras— daban al patio de grama artificial.

En resumidas cuentas, esa vaina era demasiado bella, y tenía pinta de ser cara, ¿oyó? Ni vendiendo la virginidad que no tenía me hubiera podido pagar eso.

—¿Qué opinas? —me preguntó Luisfer, llegándose hasta mí cuando me detuve frente al gran ventanal que hacía de pared al gran espacio junto a la cocina.

—Que el culito tuyo debe tener burda 'e plata —respondí todo lo sincera que pude, haciendo sobresalir mi labio inferior en una mueca.

—Y dale con que es mi jeva. —Chasqueó la lengua, mirando pa'l techo mientras bajaba los brazos bruscamente—. Si fuera ya te lo hubiera contado, pues —aseguró, alargando la "s"—. Esa eres tú que no me cuentas las vainas.

—Sabes que no te conté lo de Luke en su momento porque no podía, ridículo. —Me crucé de brazos, pero no me molesté en voltearme hacia él. Preferí seguir admirando la preciosa ciudad desde mi lugar.

—Ajá, ajá... —"aceptó", obviamente con un tono de sarcasmo que estaba que se lo compraba pa' ponerlo como tono de llamada. Bueno, no, lo mejor era quedarme con mi Want You Back—. Bueno, chica, ¿te gusta el sitio o no?

Pero qué insistencia, nojoda, pensé. Debe ser que soy yo la que va a hablar con la amiga suya en vez de él.

Ay, no, susto, sape. Yo no estaba preparada para conocer cuñadas todavía. No mano. Baygon.

—Me encanta, pues —confesé, apreciando cómo una parejita se metía hasta el ombligo en el parque de la otra calle mientras un señor meaba dos árboles más atrás.

—¿Segura? —insistió nuevamente Luis, parándoseme al lado para fisgonear conmigo desde las alturas.

—Coño, que sí —repetí mi afirmación, cagándome de la risa internamente cuando llegó un perro buscando una pelota que le lanzaron, y terminó mordiéndole la nalga al tipo—. Es bello, demasiado bello. Quisiera yo tener un apartamento así, con esta ubicación. ¿No tendrá tu amiga un huequito en esas cuatro habitaciones restantes? Yo estoy dispuesta a dormir en la terraza.

Luisfer se rió full HD, más de lo que yo hubiera esperado. Tipo que yo sabía que yo era senda Ni Fu Ni Fa, pero tampoco era pa' tanto.

—Me alegro —dijo cuando terminó de cortar su show, cruzando sus brazos tal como yo—, porque ahora es tuyo.

YA VA, ¿QUÉ?

—¿Cómo es la verga? —le pregunté, impaktadeishon, pelándole los ojos tipo:

No, mano. Eso no podía ser verdad, aló. Qué bonche con sus bromitas. Pa' que te enteres, papi: #FaltaUnMesPa'l28DeDiciembre.

—Bueno —se autocorrigió mi mejor amigo ante mi estupefacción, cagado de la risa—, tuyo tuyo tampoco. Se supone que es miti-miti con tus hermanos, Pepe y yo, pero igual.

¿Pinocho y Monograma viviendo uno al lado del otro? JAJAJAJAJAJA.

Y tal. Me la comí. Yo te aviso. Esos tumbaban la casa en menos de una hora, ya fuera peleando o dándose duro contra el muro.

Pana, Luisfer, o sea, era casi imposible lo que estabas insinuando. Sé más realista, mijo.

—De paso Bárbara y este otro viviendo juntos. —Fruncí el cejo en una expresión de confusión, para luego soltar una carcajada—. Te fuiste, mano. Capaz me lo hubiera creído si no fuera por eso.

Luisfer me miró el doble de confundido que yo a él, y se quedó analizando la situación en su mente por unos segundos. Después, cuando entendió lo que pasaba, me dijo: —Ah, pues, ¿tú eres gafa? De bolas que es verdad. —Se volteó completamente hacia mí, haciendo gestos con las manos mientras hablaba—. ¿Tú de pana crees que alguien que no vive ni aquí se va a comprar un apartamento con cinco cuartos? Yo juraba que ya te habías dado cuenta, pues, pero como que subestime tu pajuatez.

¿Cómo era la vaina? Ese ya iba a ver quién era el pajuo de verdad...

Aunque, entonces que lo pensaba, tenía todo el sentido del mundo lo que Luisfer decía —a excepción de la última parte, obviamente—. También estaba lo de Bárbara y Pepe, pero bueno. Habían un 20% de probabilidades de que hubieran acordado aguantarse el acherreso que se tenían.

"¿Ya le dijiste a la pana esta lo que tú y yo sabemos?" le había preguntado Giuseppe a Luisfer hacía un par de horas por el chat del grupo. Eso, sumado a que Pinocho había dicho que se quería venir pa' Webo York...

2 y 2 son 4, 4 y 2 son 6, 6 y 2 son 8, y 8, 16...

MaAriCO. La casa sí era nuestra.

Literal yo por dentro era un cotillón de emociones:

Por un lado los coroticos, un lapiz, una pulcerita, las chucherías... De Todito Mix. Pasa que era un cotillón pre-patria.

—No, no, no, no... —empecé a repetir consecutivamente, quedándome más pegada que silicón caliente—. No puede ser, no puede ser... No, no, no, no...

Luisfer rodó los ojos a mi lado, todavía riéndose por lo pajua que yo era. —Te lo juro, radio fiao'. —Puso sus manos sobre mis hombros, batuqueándome toda para que reaccionara y dejara el pegue-pegue.

—¿Pero tú no 'tas instalado en Miami? —le pregunté, alzando la cabeza para mirarlo a los ojos—. ¿Y la empresa? ¿Con qué plata compramos esto? ¿Cagas real? ¿Por qué no me lo habías dicho? Y yo gafa que te prestaba pa' que te compraras los tequeños en la cantina 'e Mario cuando éramos carajitos. Todavía me debes como ocho mil bolos, por cierto. Que ya no es un coño, pero ajá... ¿Cómo vamos a hacer?

Y así, comencé a cuestionarme hasta de qué color era el caballo blanco de Simón Bolívar. Luisfer debía estar arrepintiéndose de haberme obligado a reaccionar, ¿oyó? Pero bueno, nadie lo mandaba.

—S-T-O-P, Lucía. Bájale dos si quieres que responda, coño —me exigió, batuqueándome más fuerte para hacerme callar. Una vez lo hice, prosiguió a explicarse—. Yo llevo insistiendo en que abramos la segunda sede de la empresa en Nueva York en vez de Washington desde que me contaste que te venías. Hace tres meses que empezamos a instalarlo todo, y la semana antepasada me llamaron para confirmar mi traslado. Por ser el co-fundador, y por haber promovido que cambiáramos la vaina pa' acá, me están dando el cargo de director ejecutivo.

No si, mencantó, pensé. Mi niño llegando alto. #ProudBestFriend.

—Pepe, Barbie, Daniel y yo lo hemos estado calculando todo fríamente desde entonces, aprovechando que tú estabas por ahí con la catira —no paró de echar su cuento, haciéndome callar cuando fui a decirle lo feliz que estaba por él—. Total que conseguimos este sitio, que según yo es perfecto, pues: es grande, no es demasiado caro si lo dividimos entre cinco, tiene buena ubicación... De hecho, está a una cuadra del apartamento de Fiorella...

NO SI. MENCANTÓ, MARICO.

Ya yo me veía a mí misma en una rumba todos los días con Ranchito. ¿Me imaginas a sapeándole a Ashton cada vez que aquella bailara con algún tipo? Porque es que tú sabes que "Ella" es más cuca-caliente que bueno pues. Esa no se corta por nada.

Pero no, mentira, vale. Ranchi es una gata fiel. Además, que esa estaba de lo más perreada por aLRighT LoS anGELeS... Ashella forever, chao.

—Total que tuvimos que caernos a coñazos con una gente ahí que quería quedarse con el apartamento también —siguió contando Pelo 'E Coleto—. Pero al final ganamos nosotros, así que todo chill. Bárbara se llegó y decoró toda esta verga ella solita antier'. Nosotros le dimos los reales, y ella colaboró también vendiendo un poco 'e corotos en MercadoLibre.com, pero el trabajo en sí es suyo, pues.

No si. Asombrada con mi hermana.

Ella cocinaba, cantaba, tocaba todos los instrumentos que te pudieras imaginar —sí, hasta el triángulo—, bailaba, y ahora también decoraba. Bárbara diseñadora de interiores. Tipo Barbie que tenía como 700 profesiones.

De paso que algunos le decían Barbie también, no si... Cuando descubres que tu hermana es la muñeca disfrazada... *suena música alienígena*

—Así que bueno —Luisfer dio por terminada su aclaración, soltándome los hombros y dando un par de pasos hacia atrás, para proceder a abrir los brazos como si fuera a agarrar vuelo. Barbie mariposa—. Ámame.

Hablando claro sí lo hacía. Es que, naguara. Piensa tú dónde iba yo a conseguirme a alguien que dejara atrás todas sus comodidades, todos los años que llevaba viviendo en un sitio al que ya se había acostumbrado, todo, por mí. Y ya sé que suena muy marico, sobre todo considerando que en ese momento tenía novio, uno al que quería muchísimo y respetaba un montón, pero es que tengo que decirlo: Luisfer no era para mí como un mejor amigo, ni un primo, ni siquiera como un hermano, mucho menos como un marido. Lo que teníamos nosotros —esa amistad tan larga, toda chalequeadora, gracias a la cual estábamos dispuestos a hacer lo que fuera por el otro— iba mucho más allá de lo descriptible.

Resumiendo, simplemente quiero decir que lo amaba demasiado, pues.

Yo de pana estoy es pasada de marica ya. Alguien que me pase un tobito de esos en los que uno remoja las patas pa' echármelo encima de una vez.

—Eres lo máximo —acabé por decir, guindándomele encima al pelo 'e coleto para abrazarlo con todas mis fuerzas—. De pana te mereces una buena cachapa con queso 'e mano gratis por ser tú.

Luisito se rió entre mis brazos, levantándome con más ansias. —No jurabas que iba a dejar que Maduro me separara de mi mejor amiga toda la vida, ¿o sí?

Sonreí ampliamente, otra vez tipo el gato de Alicia en el País de la Droga, clara en lo claro que tenía agarrada a una de las mejores personas existentes, y no pensaba dejarla ir.

Alo, menor.

Sólo les digo que el próximo capítulo lo narra alguien bastante especial, nada más. Ah, y que será la primera parte del especial que les había comentado.

Chao, los amo, vale😘

~Camulish🥰