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Dedicación pa' @-marikisima, XxavrilisimaxX , @JuanPedroEstafador, @EstrellasYCorazones, _xasperated, justlikkev , barbsterspace  y Babylonx5sos
❤️

Espero que todos estén bien, chamis. Ya verán que saldremos de esta, porque somos venezolanos y la damos horrible y vamos a sacar a esos bichos. Ya verán.

Los amou🥰

Yo, en un principio, me quedé petrificada, sin saber qué decir o hacer. Tipo que por muy confiada que me sintiera, el hecho de que estuviera parada en frente de mínimo quinientas personas desconocidas no había cambiado.

No pases pena, me exigí, intentando calmarme y organizar mis palabras antes de hablar, costumbre que estaba aprendiendo de Luke.

—Sé tú misma —escuché susurrarme al catirrusio, entre el silencio que de repente se había formado en el amplio lugar.

Asentí, decidiendo hablar de una vez por todas. Me medio encogí de hombros, sumando este gesto a un corto movimiento de cabeza, y solté lo primero que se me ocurrió: —Que es un mamaguevo picado.

Michael se hizo el ofendido, mientras algunas de las personas del público se reían por las palabras que yo había escogido.

Poniendo en alto el léxico venezolano, pues.

—Plañirás este día —el peliloco me copió la que se había convertido en mi frase desde hacía unos cuantos días.

Y para mí sorpresa, en tan sólo un par de segundos la gente había comenzado a corear mi nombre empezando por la chama de la bandera, quien la levantaba lo más alto que podía.

De pana que no me lo esperaba en lo absoluto, y al parecer Luke tampoco, pues volteó a verme con ambas cejas rubias alzadas.

Pronto, esa sorpresa pasó a convertirse en una sonrisa, sumada a una mirada que contenía todo el orgullo que puede haber en una persona.

Yo le sonreí de vuelta, mordiéndome el labio inferior mientras me encogía de hombros levemente, aún impaktada por lo que estaba pasando, en un buen sentido.

—Ya veo de qué lado están —dijo Mike al público, pegándosele al micrófono suyo—. Pero lo olvidaré sólo porque estoy de cumpleaños, y nada puede ser mejor que pasarlo aquí con ustedes.

Y dale con la jalabolería, pensé, riéndome internamente.

Cuando Michael se pegó a hablar, ya yo sabía que sería momento de volver al backstage. Mitchy y su gente me lo confirmaron al comenzar a despedirse de los chicos y darse la vuelta en dirección al sitio por donde habíamos entrado.

Yo le lancé un corto beso disimulado a Maikol, quien me respondió guiñándome el ojo sin dejar de hablarle a la gente. De los demás me despedí agitando mi mano levemente hacia Ashton, y sacándole la lengua otra vez a Klum. Tú sabes, de lejitos. Como igual iba a quedarme tomándoles fotos desde distintas partes del backstage... Además que la flojera me vencía, pues.

Está muy lejos...

—¿Y a mí ni un "chao"? —me reclamó Luke haciéndose el picado, alejándose del micrófono para que sólo yo pudiera escucharlo.

—Te daría un abrazo —le contesté aún con la sonrisa de hacía rato plasmada en la cara, para luego hacer un intento fallido de mueca de asco—, pero estás demasiado sudado.

—Qué fresa eres —se quejó, frunciendo el cejo, pero sin dejar de reírse al igual que yo—. Destruyes mi ego, de verdad.

Le iba a decir otra cosa, ya ni me acuerdo qué, pero la inminente presencia de Mitchy —que se paró junto a mí cómo diciéndome que ya debíamos irnos— interrumpió mis intenciones.

Miré a Luke como despidiéndome de él con la mirada, pero me di cuenta que no me estaba parando ni media bola, ya que había centrado su atención en la torta.

Como era Collins el que la tenía, Luke aprovechó de hacerle señas para que se la acercara hasta la cara.

Yo lo miré tipo:

...cuando le dio un buen mordisco así a lo arrecho en una de las esquinas. Más tuki imposible.

—¿Qué? —preguntó al tiempo en que se la hartaba, alzando los hombros bien en alto para luego bajarlos exageradamente—. Yo ayudé a comprarla; tengo derecho.

Rodé los ojos con diversión, ya clara que tenía demasiado tiempo ahí y que era momento de bajarme de la tarima, literalmente.

Aún sabiendo eso, para evitar futuras fotos bullying de mi chico rodando por ahí —porque eclipsarían la cuenta que tenía con Michael y se nos acabaría el negocio del tráfico de memes de Luc— me acerqué rápidamente a él, parándome sobre mis puntillas para quitarle unas manchas de chocolate que le habían quedado en las comisuras de los labios.

Con aquel medio tú sabes por la sensación suave del roce de mis dedos en la piel de su cara, me di la vuelta hacia el backstage, antes dedicándole la sonrisita que llevaba bastante rato manteniendo.

Sin embargo, fui detenida por una mano que me rodeó la muñeca, atrayéndome hacia su dueño. Y así de improviso, cuando me di la vuelta para ver qué carrizo era lo que quería, acabé por chocarme con la jeta del novio mío. Sí, chama, el carajo me besó así a lo boleta en frente de medio mundo, y de paso sin avisar.

De todas maneras tampoco fue tan película, pues; fue un mini-piquito, pero igual. Si por menos de eso los fans le hacían la vida de cuadritos a cualquiera... Imagínate.

Yo me separé de él en menos de los dos segundos que duró el beso, demasiado asombrada como para pensar nada en ese momento. Miré a Luke con una mezcla de duda y sorpresa, bastante confundida para hacer otra cosa que seguir mi camino al backstage como si nada hubiera pasado.

—Confía en mí —articuló con los labios Lukrecio desde el escenario.

Yo asentí, no muy convencida, y tragué fuerte ante el grito desesperado de la gente, que no sabría decirte si podía significar algo bueno o algo malo.

Calum fue el que calmó a la gente, puesto que era el único de los tres pajuos aquellos que había reaccionado en vez de quedársele viendo a Luke tipo:

...después de lo que había hecho.

—¡Gente, necesito que para la siguiente canción saquen sus teléfonos! —cambió rápidamente de tema cool guy Cal, haciendo que los otros dos restantes regresaran a la realidad y le siguieran el juego.

Uf, pensé. Desventajas de tener un jevo más salío' que un balcón.

Aunque ahora que lo pienso, a excepción del pequeño detalle que era el que la gente quisiera caerme a coñazos, tenía su lado fino. Porque ajá, le dejábamos a la gente más que claro que estábamos juntos, pues, y que nos enorgullecíamos del otro. Así que bueno, dentro de todo, quizás Luke había hecho algo más que cagarla e incitar a que me lincharan.

—¿Qué ha sido eso? —preguntó Jordan intercambiando sus miradas entre Mitchy, Sam y yo, burda 'e lo perdío' al no haber visto lo que había pasado.

El cantante principal de labandaamorosa fue quien le contestó, aún cargando con la torta: —Sólo voy a decirte que acabas de perderte el mejor momento de todo el tour, hermano.

Jordan se me quedó viendo cuando Mitchy hizo un ademán con la cabeza hacia mí, aún sin comprender.

Yo sonreí...

...sabiendo que la cosa se estaba prendiendo demasiado, más de lo que yo hubiera pensando al aceptar subirme al escenario.

Pero nada, me tocaba quedarme esperando a ver qué pasaba.

****

—...y simplemente lo hice —decía Luke a través de su teléfono a la persona que le escuchaba del otro lado—. No lo sé. Digamos que no pensé; pero tampoco es que me importe.

Mi chico caminaba de un lado a otro frente a las puertas del Wizink que daban a la calle de Felipe II, transpirando nervios a millón. Estaba hablando con uno de los directores de Modest sobre lo del beso, ya que Adam les había tenido que salir con el chisme antes de que se enteraran por sus propios medios.

Yo estaba a su lado, escuchando cómo le contaba al carajo lo que había pasado, y defendía la decisión que había tomado como si nuestra relación dependiera de ello.

—Es mi novia, Keith, y sé que es arriesgado —le insistió, claramente alterado por lo que pudieran decirle—, pero confío en nuestra relación. Por eso, si lo hice, fue porque sé que va a hacer las cosas mucho más fáciles para nosotros a partir de ahora. —Luke hizo una breve pausa, en la que parecía que le estaban diciendo algo del otro, pero pronto volvió a hablar—. Me importa una mierda si no les gusta; ya lo hicimos, y lo volveremos a hacer si nos da la ga... —De repente se quedó completamente callado, conmigo viéndolo tipo:

...ante lo que acababa de decir.

La confusión se notaba burda en su cara, pareciendo querer buscarle un sentido lógico a lo que fuera que le estuvieran diciendo.

—¿En serio? —cuestionó, incrédulo, mientras yo pensaba en las sopotocientas cosas que le podían haber dicho para hacerlo reaccionar así—. ¿Entonces para qué me están llamando?

Lucas Roberto esperó unos segundos, soltando un ajá cada pocos segundos, hasta que esas afirmaciones se convirtieron en un ok, perfecto, que acabó con la llamada, la cual fue cortada por el catire así na' más.

Yo lo miré, buscando una respuesta a todas las preguntas que tomaban lugar en mi cabeza. Él al comienzo no me paró mucho porque seguía como todo shockeado, pero al darse cuenta de lo que yo estaba haciendo, posó su mirada azulada sobre la mía también.

—¿Qué te dijeron? —le pregunté de una vez por todos, enarcando una ceja.

Él suspiró, asustándome un chin, hasta que soltó: —Les encantó —respondió a mi pregunta, sonriendo de oreja a oreja—. Dicen que medio Instagram está hablando de eso ahora, así que aunque no era mi intención que se armara un escándalo por eso, a Modest le parece maravilloso, sobre todo porque la mayoría de los comentarios son buenos.

Yo no sé si era que la pajuatez de Luke se me había pegado o qué, pero me quedé pegada un buen rato, procesando que a Lukrecio le fuera salido bien lo del beso robado.

De pana que amaba a mi macho, porque aunque se había arriesgado horrible con el beso robado, me había demostrado lo orgulloso que estaba de tenerme, y había defendido su punto de vista ante la gente aquella que lo quería someter. Se merecía un premio, de verdaita'.

Ya le iba a ir a comprar su huevito Kinder.

—Lo único —interrumpió mi momento de novia orgullosa— es que no quieren que volvamos a hacer algo así sin comentarles antes, porque puede afectar directamente a la banda, y por tanto a ellos. Ya sabes. —Se encogió de hombros, aún sonriendo.

Yo simplemente no pude contenerme más y me le zumbé encima en un abrazo, rodeándole los hombros con mis bracitos de espagueti.

Él parecía no esperárselo, porque se tambaleó un poco al tener todo mi peso encima tan de repente. Sin embargo, se reincorporó lo más rápido que pudo, poniendo sus fuertes brazos alrededor de mi espalda y cintura.

—Eres tú en 3D —lo felicité, separándome un chin para poder mirarlo a sus bellos ojos azul grisáceo con la felicidad que sentía en ese momento.

Él hizo una mueca de autosuficiencia, sabiendo que por una vez lo había hecho todo perfecto, a pesar de todo lo que podría haber salido mal.

Yo estaba a punto de darle su bien merecido beso, sintiéndome repentinamente más romántica y marica que aquella vez París, cuando una voz interrumpió nuestro momento gay del día.

—¿Será que pueden dejar la noche de pasión para más tarde y ayudarnos aquí? —dijo, haciéndonos a ambos bajarnos de Maricolandia y voltear hacia donde provenía.

Al Luke y yo separarnos, pudimos ver que se trataba de la ladilla de Esteban, que se acercaba a nosotros seguido de Calum y Michael.

Ah, sí, miren. Resulta que nosotros cinco fuimos los últimos en salir del WizinkCenter, porque Esteban tenía un peo ahí desconectando la máquina y nos quedamos a ayudarlo mientras los otros se iban al aeropuerto con el maletero.

Total que mientras Luke atendía la llamada de Modest y yo le servía de apoyo moral, aquellos tres se habían ido a buscar un taxi, sin éxito por lo visto.

—¿Qué pasa, vale? —me les alcé, con uno de mis brazos aún en la espalda de Lukrecio—. Vayan a ver si el gallo puso.

—Cálmate, pioja —intentó tranquilizarme el bandido aquel, plantándose ante nosotros con las manos en la cintura.

Yo le iba a reclamar por lo de pioja, pa' que se enderezara y Se enseriara, pero Luke fue más rápido en preguntar: —¿Y el taxi?

—No hay —contestó Calumcio, dejando salir un suspiro de su boca—. Desde que llegamos no ha pasado ni un solo carro; ni aquí ni en las calles paralelas.

Ajá, ¿y ahora?, pensé, buscando una posible solución en mi disco cerebral.

Tipo que teníamos que llegar al aeropuerto en menos de una hora para hacer el check-in, pues. Si no nos tocaba cambiar el vuelo, y considerando que debíamos estar de vuelta en Los Ángeles para el cumple de Maikol y eran casi diez horas de vuelo... Digamos que no teníamos demasiado tiempo de sobra.

—Será por la hora —sugirió el cumpleañero, metiéndose en el círculo de preocupación que habíamos formado.

—¿Entonces? —Calum se cruzó de brazos, claramente estresado por la situación—. ¿Qué hacemos?

—¿Y si le pedimos a Ashton y a Fiorella que vengan a buscarnos? —propuso Luke, quien me tenía aferrada con su brazo echado por encima de mi hombro y sus dedos entrelazados a los de una de mis manos.

—Es media hora de aquí al aeropuerto de Barajas —argumentó Cal, haciendo una mueca preocupada.

—Yo creo que deberíamos preguntarle a esos de ahí. —Mike señaló hacia detrás de Esteban, logrando que todos nos giráramos para ver a qué se refería.

Pudimos ver que "esos de ahí", era un grupo formado por dos chamas y un chamo, que parecían estar esperando a alguien en plena acera.

—Quizás sepan dónde podemos conseguir un taxi —siguió diciendo el peliloco a favor de su propuesta.

—Yo estoy de acuerdo —opinó otra vez Calum, quien parecía el señor de la palabra ahí—. Debería ir Lucía, como es la que sabe español...

—Ajá, ¿y Esteban? —me quejé, sin nada de ganas de socializar con nadie en ese momento. Ya mucho por ese día.

—No sé de qué estás hablando. —Esteban se hizo el loco, mirando pa'l techo como el niño inocente que no era.

Yo los miré a todos tipo:

...porque sabían perfectamente que lo hacían por joder más que por otra cosa, mientras ellos me señalaban el sitio donde estaba la gente aquella, como diciéndome que fuera ajuro.

—Amor, anda —me pidió Luke, siendo el único que me tenía un poquito de respeto al parecer—. Por favor. —Ladeó la cabeza hacia mí, mirándome desde el último piso de la Torre Sindoni que era su cara.

Yo, por mi parte, rodé los ojos, sabiendo que me acababa de convencer con piso mojado incluido y todo. —Sólo por ti —acepté, separándome del poste para encaminarme hacia los tipos esos, mirando a todo el grupo mío
—a excepción de Luke— con una mirada de son unos trimarditos.

Yo me alejé de los 5 Ayuda -1 y Estebandido, a la vez acercándome al trío que esperaba en la acera.

Una vez llegué a ellos, me atreví a tocar el hombro de una de las chamas, diciendo en español: —Hola, buenas. Perdón por la molestia, pero unos amigos y yo necesitamos llegar a Barajas lo antes posible. ¿Saben dónde podemos conseguir un taxi?

Ellos se me quedaron viendo, una de las chamas medio sorprendida al igual que el chamo a su lado, y la otra tipa, bueno... Primero me analizó de arriba a abajo, para luego quedarse paralizada, y acabar por parecer que le daba un patatús.

Yo me quedé medio confundida, aún más cuando gritó: —¡Eres tú!

Ay, manito.

Manish, esta semana ando normal, sin mucho examen. Así que bueno, si anda burda de lo act, trataré de publicar lo antes que pueda, y mover ese teclado.

luisangela123 Me haces falta, chama❣️

Los amo🥰

~Camz

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