...

-...Mmmh...-me giré en un lugar mullido-Santiago...-susurré.

Abrí los ojos de forma pesada.

Sentía una cálida respiración chocando con mi rostro, erizándome.

...Cinco...

Pestañeé.

...Cuatro...

Me senté lentamente.

...Tres...

Abrí la boca.

...Dos...

La volví a cerrar.

...Uno...

-¡AAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAH...!-chillé.

-¡....WAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAA...!-gritó él de vuelta, sobresaltándose.

-¡AAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAH!-seguí yo.

-¡...AAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAH....!

-¡...AAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAH...!-empecé a dar brinquitos.

-¡AAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAH...!

...Y así seguimos los próximos veinte minutos...

...

...

Lo miré mal.

Me sonrió nervioso.

-...Maricón de mierda...explícame que hacíamos en una misma CAMA AHORA-exijí.

-¡Ya te lo dije...!-hizo un puchero-¡...Ayer te dormiste mientras bailábamos y yo solo te traje...!

-¿...Ah sí?-pregunté alzando una ceja-EXPLÍCAME PORQUE ESTABAS DESNUDO.

-P-pues...tenía calor y...

-¡MALDITO PERVERTIDO! ¡QUERÍAS CONVERTIRME EN UNO DE LOS TUYOS...! ¡EN UN MALDITO MARICÓN DE MIERDA...!

-...No, Derek, no me...

-¡...CÁLLATE! ¡NO TIENES PERDÓN DE SATÁN...!-me levanté y lo apunté-¡DEJA DE BEBER CAFÉ Y TÓMAME EN CUENTA, IDIOTA!

-¡P-pero si te tomo en cuenta...!-protestó.

-CÁLLATE TE DIJE, QUE ESTOY HABLANDO YO.

-...Okay...-agachó la cabeza, resignado-pero no te enojes...

-CÁLLATE.

-P-pero...

-CÁLLATE.

-Pero...

-NO ESTOY ENOJADO, CÁLLATE.

-...Vale...

-¡...ESTO ES EL COLMO!-exclamé mientras levantaba los brazos-¡ERES DE ODIAR! ¡DE ODIAR! ¡ES MÁS, TE ODIO! ¡TE ODIO! ¿Y QUÉ PASA? ¡RESPONDE! ¿A CASO NO ME ESTÁS ESCUCHANDO? ¡HABLA! ¿¡O TE COMIÓ LA LENGUA EL RATÓN...!?

-E-es que tú acabas de decir...

-CIERRA LA BOCA, Y NO INTERRUMPAS.

No respondió.

-¡...SÉ QUÉ INTENTASTE VIOLARME! ¡NO LO OCULTES! ¡TE APROVECHASTE DE MI DEBILIDAD...! ¡ANDA, ANDA! ¡DI ALGO...! ¿...O A CASO ESTÁS ASUMIENDO QUÉ LO HICISTE?

-...No, D-Derek, no creas que yo...

-¿...Lo hiciste?-sentí como mi voz se trizaba, y se me formaba un nudo en la garganta-S-Santiago, no pensé...-bajé la vista-¿cómo p-pudiste...?

-Pequeño, yo no he hecho nada...-se puso de pie e intentó agarrar mi brazo.

-¡NO ME TOQUES! ¡TE ODIO!-chillé, dando un manotazo-¡...Y MI CABELLO ESTÁ AZUL TURQUESA!-corrí a mi habitación y me encerré de un portazo.

-Homofóbico...ábreme...-golpeó del otro lado-no te hice nada, y no sé que tiene de malo tu color actual de cabello...

Me dejé caer en la puerta.

-...Es que no te gusta...-balbuceé, ocultando mi rostro entre mis brazos y mis piernas.

-...Cielo, ¿quién te dijo eso?-suspiró, dejando de golpear la puerta.

Percibí como, al otro lado, estaba sonriendo.

-...N-no es como si me importe...y no soy homofóbico-dije disminuyendo más y más el volumen, a cada palabra.

-...Se te ve hermoso, combina con tus preciosos y profundos ojos; te podría decir más, pero como no te importa...-abrí los ojos, mientras sentía como mis mejillas ardían.

-...Sigue.-ordené, hundiéndome más en mí.

-Pero si no te importa.

-Solo...solo sigue.

-Ya que insistes...

-...No insisto...

-Entonces...

-...solo un poco...

-¿Solo un poco?

-Solo un poco...

-¿Insistes 'solo un poco'?

-...I-insisto 'solo un poco'...-admití.

-...Mejor lo resumiré. Amo todo tú, Derek; estoy celoso de el idiota de Cole y de cualquier tipo o chica que se te acerque, de como te miran y como te recorren...-sentí como mi respiración se cortaba, y mi corazón comenzaba a bombear sangre demasiado rápido hacia todo mi cuerpo. Siento que me voy a desvanecer en cualquier momento, pero mi cerebro no lo permitirá hasta terminar de escucharlo. Comencé a temblar producto del nerviosismo, mis manos se volvieron frías, y mis labios se resecaron. Probablemente no podía hablar ni mantenerme de pie, eran los efectos colaterales de escuchar a una bomba de azúcar como Santiago. Me pregunto si es así con todo el mundo, si yo seré un más de sus conquistas, no podía darle el poder de conquistar mi corazón, de poseerlo, porque si se lo doy probablemente se irá, se marchará y me dejará a mí en un mar de llanto y rogando por su regreso. Nunca había experimentado el amor. Y espero nunca hacerlo. 

Traté de calmar a mis pulmones, a este paso, me quedaría sin aire.

Alcé levemente la cabeza, para oírlo mejor.

No quiero oírlo, pero lo anhelo.

-...quiero-continuó-, quiero que seas solo mío, protegerte y amarte; no me importa si engordas, si envejeces, si me odias...yo te amo, y seas como seas, cambies como cambies, lo hice, lo haré y lo seguiré haciendo, te guste o no; aún si me mandas a la mierda, volveré, ya estoy aquí y no me iré hasta verte completamente feliz.

-¿...Qué quieres de mí?-cerré los ojos y dije con dificultad, apoyando mi nuca en la puerta.

-Quiero que seas feliz.

¿Qué significaba ello? Es decir...¿cuándo fuera 'feliz', él se iría...?

-Aunque no sea a mi lado, si tú lo eres, yo lo seré.

...Me puse de pie a duras penas, utilizando la puerta de soporte.

-...Entiendo, que por todo lo que te he hecho, me odies, y...-traspasé la entrada, y me paré al frente de él. Tenía la mirada quebrada. Él estaba quebrado. Sus labios tiritaban y temblaba.

Quería golpearlo.

...Por idiota, por masoquista, por romántico, por asaltar mi corazón y hurtar un trozo, por no rendirse, por ser él, por provocarme todo lo que me provoca, por su sonrisa, por su vista, por su cabello, por...¡por ser él!

-¿...Y...?-lo invité a seguir.

...Haré esto corto. 

Santiago era y es mi mejor amigo, pues es el único que está en mis malos momentos, y, al mismo tiempo, es el motivo de mi felicidad. No quiero perderlo.

-...quieras que me vaya.

Me mordí el labio inferior.

-...No seré feliz.-aclaré.

-¿P-por qué no?

-Porque si con mi felicidad, te irás, no lo seré, ni hoy, ni mañana, ni nunca.

Abrió los ojos de par en par, y una lágrima recorrió su mejilla.

-Además...-añadí, corriendo la vista, y restándole importancia con las manos-mi felicidad, sin ti, no estará completa, ¿qué haría yo sin ti, maricón de mierda? Si me has acostumbrado a tu presencia, tu humor, tu volubilidad, tu melosidad...¿si me has acostumbrado a ti? ¿Te irás y me dejarás? No señor, usted no se va a ningún lado-lo miré de reojo, seguía igual-; te tendrás que responsabilizar. 

-...D-Derek...lo siento...

-¿Por qué?-me sobresalté, ¿me dejaría ahora? 

-¿...Somos amigos, no?-trató de sonreír.

-...Supongo...-mentí.

-Es que...-me miró con ojos llorosos-rompí la primera regla de una amistad-bajó sus ojos.

-¿Q-qué...?

-...Lo siento-repitió-, me he enamorado de ti. Estoy perdidamente enamorado de ti.

Pestañeé repetitivamente.

-¿...L-lo dices de verdad?

-Sí. Estoy enamorado de todo tú...¿estás...?

-Nah, si ya lo sabía...

-¿Enserio...?

-Sí...no es como si me sorprendiera, pfff...eres tan obvio...

-E-estás un poco pálido...¿te sientes bien...?

-Sí, sí...estoy perfectamente...-"...Derek ha muerto de un infarto..."

Caí como plomo al piso.

...