Mientras que Verónica volvía a su hogar para pensar un poco y estar tranquila. Una tarde en la Casa Loud, el joven albino pasaba leyendo sus cómic de a Ace savvy, pasaba así un buen rato hasta que recibe una notificación en su celular y era de Clyde quien quería invitarlo a pasar una noche de amigos en su casa, a lo que este acepta de buena manera dando acordado que estaría antes de las 15:00, este apaga su celular y se dispone a ponerse algo de ropa y sale directo a la cocina para tomarse un refresco.

De paso se topa con algunas de sus hermanas como a las gemelas que paraban jugando a perseguirse, a Luan quien al parecer le había contado un mal chiste y a otras de sus hermanas que estaban viendo la Tele en el sofá.

Lincoln: uuahh, alguna novedad para esta tarde??

Luna: nada interesante, diablos hermano estoy aburrida... -dijo empezando a cansarse del aburrimiento-

Luan: justo tenía unos chistes sobre el a uburrimiento.

Luna: y??

Luan: pero solo me aburrio.

Lincoln: literal?? Jeje no estuvo nada mal ese chiste.

Luan: ¿cuál chiste?

Luan: aahhh! No hay nada interesante en la tele, creo que iré a casa de Sam toma.

Le da el control a Lincoln, a lo que está solo se levanta y va a su habitación dejando solos a Lincoln y a Luan sentados en el sofá.

Lincoln: bueno, tengo tiempo para algo de TV.

Luan: y si... Uhmm por cierto como te fue en tu baile de escuela.

Lincoln: baile, mas bien un desastre, no quisiera hablar de eso.

Luan:  apuesto que coqueteabas con una chica y su novio te contó una mala pasada jeje.

Lincoln:  no, la verdad es otra, bueno yo... La chica que me gustaba solo me rechazo y todos excepto mis amigos solo se rieron y sintieron pena por mi, Dios esa noche fue un asco. -decía este mientras cambiada de canal para aliviar su estrés-

Luan: yo... Lo siento bueno hay muchas chicas en este mundo, apuesto que tarde o temprano encontraras a la indicada.

Lincoln: tu crees?? Sabes que nunca tuve suerte en una relación creo que es la tercera que me rechaza.

Luan: solo no pienses en eso y enfócate en ser tu mismo. - se levanta del sillón para después despedirse de su hermano-

Lincoln: bueno, al menos el pasado es pasado, supongo que sufrir por algo así no vale la pena.

Mientras en la casa de Haiku, esta se encontraba llorando, tenía cortes en todo a parte de su antebrazo y un dolor que no desaparece, tenía puesto sus auriculares con la música más deprimente en sus oídos y un cigarro a mitad de fumar en el escritorio de su habitación, claramente está se la estaba pasando terrible.

Haiku: deberé curarme estos cortes que me hice, por lo menos me siento mejor. -diria para buscar el botoquin-

Fue para su armario donde tenía Guardado un pequeño botiquín por si lo necesitara.

Haiku: -lo agarra- deberé que nadie se percate de mis Cortes también

Ya teniendo el botiquín comenzó a abrirlo para tomar algunas vendas y todo para curarse, pasaron unos 20 minutos hasta que se pudo cubrir los cortes con las vendas y este mejor.

Haiku: mmmm, me gustó esta sensación mientras me cortaba lo volveré hacer si necesito desahogarme.

Terminado con lo que debía hacer de dispuso a ponerse un suerte y conectar un teclado que tenía en su laptop, para poder escribir mejor y estar más cómoda.

Haiku: -pensando que podría escribir- un buen poema

Poema: mi corazón oprimido.

Mi corazón oprimido Siente junto a la alborada
El dolor de sus amores
Y el sueño de las distancia.
La luz de la aurora lleva
Semilleros de nostalgias
Y la tristeza sin los ojos
De la médula del alma.
La gran tumba de la noche
Su negro velo levanta
Para ocultar con el día
La inmensa cumbre estrellada.
¡Qué haré yo sobre estos campos
Cogiendo niños y ramas
Rodeado de la aurora
Y llena de noche el ama!
  
¡Qué haré si tienes tus ojos
Muertos a las luces claras
Y no ha de sentir mi carne
El calor de tus miradas!
¿Por qué te perdí por siempre
En aquella tarde clara?
Hoy mi pecho está reseco
Como una estrella apagada.

Fin del poema

Haiku se mantuvo escribiendo otros poemas para despejarse pero en su cabeza tenían unos pensamientos que eran momentos.

- nadie te valora

- todos te dejarán de lado o te reemplazarán como hizo clyde

- sacate este sufrimiento simplemente contándote

- al fin, al cabo terminaras sola y nadie te querrá

Ella se golpeó con su mano en su cabeza para debe de pensar en esas tonterías y mantenerse distraída.

Haiku: *pensamiento* como me gustaría vengarme de clyde, si pudiera lo mataría con un cuchillo!! Desgraciado

Se notaba que tenía ganas de vengarse pero si hacía ese tipo de cosa terminaría en serios problemas.

Eran las 15:34. Justo la madre de haiku llegó a la casa y dejando su bolso en el sillón dijo.

Veronica: YA LLEGUE  -dijo para ver si estaba su esposo o su hija-

Como haiku no salió de su cuarto para saludarla porque quería terminar un pagrafo que le faltaba a su poema, si madre simplemente se fue al baño para darse una buena ducha pero justo recibe una llamada.

Verónica: -revisa quien podría ser- e..es..es el... justo ahora me debía llamar!!

Por su mala fuerte dijo eso haiku se encontraba en las escaleras.

Haiku: como justo ahora te debía llamar? -diria con una voz fría y una pícara de saber a que se refería su madre-

Verónica quedó congelada por ver que su hija la había escuchado.

Continuara...

• le quería agradecer a mi amigo TheFanficLector por ayudarme a escribir la mitad de este capítulo, muchísimas gracias bro.