JiMin

— ¿No que iba a ser una pequeña reunión, que solo incluía a sus hermanos y familiares más cercanos? — TaeHyung mantenía su semblante... ¿Dolido? ¿Sorprendido? A decir verdad, no sabía lo que trataba de decir mi mejor amigo.

El brazo de YoonGi rodeaba mi cintura inexistente, mientras saludaba a HoSeok con un ademán.

— Iba a ser algo pequeño, pero la madre de YoonGi llegó de visita y cuando descubrió nuestros planes, los modificó por completo y míranos ahora. — Sonríe y recibí el regalo de TaeHyung, para dejarlo junto a los demás que habían traído.

Otro grupo de personas, que no conocía en su totalidad, pero que al parecer mi esposo sí, llegó y entonces les sonreí, agradeciendo su visita y deseándoles una buena estadía en la "pequeña" reunión para nuestra hija.

— ¿Y se piensan quedar aquí todo el día? — preguntó HoSeok al ver que no íbamos a acompañarlos y que tampoco teníamos indicios de movernos de la entrada.

— La madre de YoonGi nos dijo que como buenos anfitriones debemos estar aquí y salu...

— Al diablo con la madre de YoonGi. — dijo Tae, mirando luego a mi esposo. — con todo respeto, pero es su fiesta, deberían estar disfrutándola.

Miré a YoonGi, quien también estaba aburrido y algo agobiado con tantas personas que caminaban a su alrededor. Estábamos iguales, sin contar que me encontraba totalmente enojado por el cambio de planes que habían realizado a última hora, por así decirlo.

— Estoy de acuerdo con TaeHyung, al diablo con esa vieja. — Me sorprendí por la manera de hablar de mi esposo, pero al final reí y dejé un corto beso sobre los labios de mi esposo.

YoonGi y su madre no se llevaban del todo bien, se querían demasiado, sí, pero ambos tenían personalidades muy diferentes, mientras mi esposo amaba estar solo y pasar el rato con la personas que de verdad le importaban, mi suegra buscaba llamar la atención y siempre dar de qué hablar.

YoonGi me guió en todo momento, mientras nos abríamos paso por una de las propiedades de mi suegro. Él nos había prestado el lugar, a petición de su esposa, mientras que esta última se había encargado de decorarlo a su gusto en invitar a muchas personas, más conocidos de ella que de nosotros.

Al llegar al patio tuve tantas ganar ir directamente al buffet, tal y como lo había hecho TaeHyung, pero la madre de mi esposo nos vio y fue nuestra perdición.

— ¿Qué hacen aquí? Se supone que tienen que estar en la recepción, dándole la bienvenida a los invitados. — La señora Min parecía un poco enojada, pues a ella le encantaba mantener el control y ahora mismo no lo tenía.

— Mamá, no presiones a JiMin, es lo único que te pido, ya fue demasiado el haberte aceptado esta fiesta ridícula.

La señora Min parecía demasiado ofendida, pero al final se marchó directamente hacia la recepción.

Mis padres fueron los siguientes en recibirnos, mamá comenzó a acariciar mi vientre de siete meses y medio, mientras me decía que tenía que estar preparado mentalmente para el parto.

— Pensé que esa mujer jamás los dejaría en paz. — habló mi padre, recibiendo un golpe de mi madre, pues YoonGi seguía a mi lado.

— No le hagas caso, Yoonie. — habló esta vez mi madre. — tu madre es una persona muy... agradable. — dijo al final.

YoonGi rio y al final solo dijo que sabía cómo era su madre, dándole entender a mis padres que estaba de su parte.

A lo lejos miré al hermano de YoonGi, íbamos a saludarlo, pero SeokJin y NamJoon nos detuvieron.

— ¡La fiesta está hermosa! — anunció SeokJin, mientras se aferraba al brazo de NamJoon.

— ¡Felicidades, JiMin! — Dijo Nam, alejándose de su esposo para abrazarme.

NamJoon me tenía mucho aprecio, era como un hijo más para él, especialmente porque siempre estuve al lado de TaeHyung, incluso cuando su madre murió.

— Gracias... — susurré a la par que nos separamos.

Posteriormente NamJoon comenzó a hablar con YoonGi, ambos se marcharon hacia la mesa de bebidas, sumergidos en una conversación sobre música, suponía yo, pues lo único que tenían en común era eso.

— ¿TaeHyung vino? — preguntó SeokJin, una vez que su esposo y el mío se alejaron. — Pensé que ustedes harían un baby shower juntos, ya que aún no me ha llegado su tarjeta de invitación.

Reí algo nervioso, pues según lo que habíamos hablado Tae y yo, él no pensaba hacer un baby shower, se había resentido demasiado desde que recibió la tarjeta de SeokJin, por lo que decidió que no haría absolutamente nada. Traté de convencerlo de hacer, aunque sea, algo pequeño, pero él se negó y me dijo que era lo mejor, pues tampoco quería invitar a SeokJin.

— E-en realidad, él...

— ¡SeokJin! — un grito, totalmente inesperado, llamó nuestra atención. SeokJin sonrió y rápidamente tomó mi mano, para así acompañarlo hacia el chico que yacía con una cara de pocos amigos y con una bolsa de Gucci en mano.

— Ven, te voy a presentar a mi primo. — SeokJin parecía tan animado y yo solo estaba tan sorprendido, pues jamás había conocido a un chico tan apuesto como el que se encontraba en la entrada del patio.

— Recuérdame nunca más hacerte un favor. — el chico seguía mirando mal a SeokJin y yo no podía dejar de observarlo, pues a pesar de recién conocerlo y de reconocer su belleza, podía decir que había algo raro en él y no era precisamente el que llevara un abrigo innecesario en esta época del año. — Toma el tonto regalo para el tonto hijo de NamJoon y no me jodas nunca más con eso de “ponte a buscar entre todas las tiendas Gucci para encontrar algo que le guste a TaeHyung”

Casi podía decir que a él no le agrada TaeHyung, tanto como a Tae no le agrada SeokJin.

— No seas mal educado. — habló SeokJin, tomando entre sus manos la bolsa. — además ya no es necesario el regalo, al parecer TaeHyung no hizo un baby shower junto a JiMin.

— ¿Estás tratando de decir que me fui a buscar de tienda en tienda solo para que al final el hijito mimado de tu esposo no hiciera una...?

— ¡Hey, bájame el tono! — SeokJin frunció su ceño y luego me miró, disculpándose silenciosamente. — No sé por qué rayos estás tan irritable, pareces una mujer en sus días.

Traté de alejarme de la discusión que estaban teniendo los primos, pero en cuanto quise irme, SeokJin me detuvo.

— Lo siento, JiMin, sé que JungKook asusta mucho, pero él no es malo.

El tal JungKook solo estaba cruzado de brazos.

— JungKook, él es JiMin.

— Eso lo sé muy bien, conozco su trabajo, sé de quien es esposo y además lo acabas de mencionar hace un rato.

— JiMin, él es el gruñon de mi primo, JungKook. — Al parecer SeokJin hizo caso omiso a su primo, pues luego de la presentación, le pidió que se quedara, incluso le dijo que podía estar a nuestro lado.

JungKook no dijo nada, pero nos siguió en todo momento, incluso cuando nos dirigimos hacia el buffet y comenzamos a probar las delicias que había mandado a hacer mi suegra.

Todo iba bien, SeokJin me iba hablando sobre sus mellizos, incluso sobre lo orgulloso que se sentía de que TaeHyung estuviera iniciando una nueva etapa en su vida (la cual incluía la escritura y el arte, pues mi amigo se había dejado ver en muchos museos y de paseo con HoSeok en estas últimas semanas) hasta que uno de los  mozos se acercó, ofreciendo sus copas de agua y vino, aunque claro, esta última solo se la ofreció a JungKook.

— Oh, lo siento, no puedo. — JungKook sonó tan natural al decirlo, incluso pensé que no bebía, pero en cuanto SeokJin lo escuchó abrió sus ojos en par y escupió el agua que había estado tomando de su copa.

Yo solo lo miré algo confundido, incluso pensé que la bebida pudiera tener algo o yo qué sé, pero él lo único que hacía era mirar a su primo.

— ¿Nos permites? ok, gracias — SeokJin me miró apenas antes de tomar el brazo de su primo y sacarlo a jalones del lugar.

No sabía qué sucedía, pero tampoco le pude tomar mucha importancia, pues TaeHyung llegó apenas SeokJin se fue y me jaló del brazo, llevándome a quién sabe dónde.

— Adivina a quién me encontré en medio de la fiesta. — habló como si estuviera a punto de revelarme los misterios del universo.

— No sé, ¿A Kumamon? Porque si es así, hablaré con el idiota de YoonGi. — dije con claras ganas de matar a mi esposo, pues ya habíamos hablado de esto y habíamos quedado en que no contrataríamos a ningún Kumamon gigante para el baby shower.

— Obvio que no, tonto, hablo de MinHo y su nueva conquista.

— Aquí vienen los celos. — susurré, rodando los ojos al final. — Te recuerdo que estás casado, TaeHyung y que MinHo puede hacer todo lo que quiera.

— Claro que puede, pero el chico tiene dieciocho años y eso es...

Dejó de hablar al situarse delante de su ex y del joven que venía sujetando su brazo.

— ¡MinHo! — fingió una sonrisa y entonces tuve que seguirle la corriente. — ¡Qué coincidencia encontrarte aquí! — continuó con su teatro. — ¿Y quién es él? Pensé que te ibas a casar con... ¿Cómo se llamaba? Ay, mejor no la recordemos, pero dime, ¿Quién es este niño?

Hasta yo ya me sentía abrumado con tantas preguntas y palabrería de mi amigo.

— Soy JiMin. — le sonreí al chico que apenas iba procesando todo lo que había dicho TaeHyung.

El chico miró mi mano extendida y la apretó ligeramente, para luego ver mi vientre.

— H-Hola, soy TaeMin, novio de MinHo. — esta vez miró a TaeHyung, dándose su lugar.

— Oh, qué bueno. — mi amigo continuó fingiendo y esta vez sujetó la mano de TaeMin. — Yo soy, TaeHyung, esposo de HoSeok y ex de tu novio.

Y aquí vamos, TaeHyung a veces realmente era increíble. Sí, increíblemente tonto.

— Eso ya lo sabía, TaeHyung, todo el mundo se conmocionó cuando ustedes confirmaron su relación.

MinHo sonrió algo nervioso y cuando se dio cuenta que habría alguna posible discusión, decidió intervenir.

— ¡Felicidades, JiMin! Me alegra que estés comenzando a expandir tu familia y también me alegro por YoonGi, espero que gane ese premio.

Lo miré algo confundido, pues yo no sabía nada de ningún premio.

— Disculpa, ¿De qué estás hablando? No entiendo.

MinHo rio, como si esto fuera un chiste. En realidad yo NO sabía de lo que estaba hablando.

— Del premio que YoonGi va a recibir en Los Ángeles dentro de tres semanas. Pensé que ya lo sabías.

Y entonces miré a mi esposo a lo lejos, hablando con NamJoon y esta vez con algunos de sus compañeros de trabajo.

— No, no lo sabía, pero gracias por la información.

Realmente lo agradecía, pues era obvio que el idiota de YoonGi no iba a decirme nada y que al parecer, se iba a ir solo. Esto era inaudito.

Datos:

SeokJin y TaeHyung ya tienen seis meses.

JiMin tiene casi ocho meses.

JungKook tiene dos meses y medio.

Nota del autor:

Sé que me he demorado prácticamente cuatro meses o más en actualizar, idk, solo que no he tenido ánimos y antes de eso estuve trabajando, por lo que no tuve tiempo, además de la falta de imaginación. Perdón, bebés, pero trataré de actualizar más seguido. ♥

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