Se supone debe estar feliz, gritar de dicha, salir corriendo y anunciar la buena nueva...¿No?

Pero si bien Lucius está feliz, esa felicidad no es tan...grande.

-no vas a decir nada

-....que...felicidad, es una gran noticia Cisi.

La rubia le mira fijamente, molesta, pensó que con esto ya lo tendría a sus pies  pero, parece que no puede hacer que olvide a ese mocoso.

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Llevaban ya cuatro años juntos, después de terminar la escuela Lucius Malfoy y Narcisa Black se habían casado, fue una boda enorme y muy comentada, dos poderosas familias de sangre pura unidas.

Para la rubia fue un sueño hecho realidad, desde tercer año estuvo enamorada de su compañero de escuela pero Lucius no le hacía caso a nadie, al menos No hasta que ese mestizo ingreso al colegio, porque ahí todo cambió, Lucius se volvió un completo imbécil por ese niño, hacia todo por complacerlo, cosa que ponía furiosa a la joven, no entendía que le veía.

Severus era listo, no podía negarlo, demaciado para su edad, pero no era tan lindo u apuesto, delgado, pequeño, mal vestido, su cabello algo grasiento, su piel era muy pálida, casi blanca, tenía el ceño siempre fruncido y esa nariz, parecía que se la había roto un par de veces y nunca la curo bien.

La chica siemplemente no entendía que es lo que le veía, ella era mil veces más hermosa ¡También estaba el hecho de que era un hombre! Si bien esto no era mal visto por la sociedad mágica, incluso era muy normal, si una familia de alto nivel deseaba herederos, bueno ahí si había un problema.

Es verdad que algunos hombres podían dar a luz, pero estos eran uno en Millones, casos muy raros y exclusivos, aunque también muy codiciados, se decía que cuando un bebé nacía de la Unión de dos personas del mismo sexo, este era la prueba de un amor puro y verdadero, bendecido por la magia misma, un niño que sería muy importante y poderoso. Muchos creen que Merlin e incluso los cuatro fundadores de Hogwarts fueron hijos de padres del mismo sexo, pero eso solo era una leyenda en el mundo mágico, habían pasado siglos y ningún varón fue preñado.

Por este motivo Narcisa sabía que Severus no tenía ninguna posibilidad de estar con Lucius, Abraxas Malfoy jamás lo permitiría, deseaba un heredero de su hijo y ese mestizo nunca podría dárselo.

Por tal motivo la chica no tardó en mover sus cartas para ser la elegida con ese honor, se comunicó con sus familiares y les propuso la unión, su tía Walburga no tardó en apoyarla y convenció al patriarca de la familia Black, Pollux Black, este no tenía muy buenas migas con Abraxas, pero no podía negar que era una muy buena idea.

En principio el patriarca de los Malfoy se negó, la familia Black no era muy agradable que digamos, si bien eran sangre pura y acaudalados, su maldición en la sangre, la locura Black, era muy conocida, tendían a sufrir deterioro en su mente que los consumía poco a poco hasta terminar en un estado catatonico o una locura total. Aunque últimamente parecía haber disminuido, estos Black se veían muy tranquilos y normales, exepto Sirius y Bellatrix, ellos tenían cambios de humor muy peligrosos. Abraxas acepto la unión, Narcisa parecía ser una chica inteligente, era muy hermosa y lo más importante se veía sana, podría darle uno o dos nietos aceptables, el matrimonio fue acordado.

Narcisa grito de felicidad cuando se enteró, ahora Lucius sería suyo. Pero mientras ella estallaba de felicidad, por el otro lado Lucius se sentía morir.

El rubio sabía que su relación con Severus nunca sería apoyada por su padre, no tanto por qué Severus fuera hombre, si no por su mestizaje, Abraxas era la persona más clasista que el conocía y si bien en principio no le importaría y hasta lo habría apoyado, el paso del tiempo y la relación que tenía con su pequeño lo habían hecho cambiar de idea, no es que ahora se pusiera a defender y apoyar a todos los traidores y sangre sucia del mundo, no, pero ahora tenía que admitir que había uno que otro que valía la pena y su Severus era uno de ellos, tal vez por eso, por el amor que sentía por él, se atrevió a enfrentar a su padre.

Abraxas se sorprendió muchísimo cuando Lucius apareció en la mansión ese fin de semana, cuando se supone tendría que estar en la escuela. El chico se negó a aceptar el matrimonio, no quería ser atado en contra de su voluntad con nadie, en especial siendo tan joven, discutieron por horas, incluso su padre le propuso entonces buscar otra prometida si el problema era Narcisa, Lucius decidió jugarse el todo por el todo y le dijo la verdad a su padre, el estaba enamorado de otra persona y solo con el se quería unir, está de más decir que Abraxas explotó, el mayor no tolerará semejante humillación de parte de su vástago, en poco tiempo lo verbal paso a lo físico y las maldiciones no tardaron en aparecer, si bien Lucius era un duelista fenomenal no pudo hacer mucho contra la experiencia y furia de su progenitor, Abraxas barrio el piso con el dejandolo muy mal herido, ordenando que terminara con ese bastardo o de lo contrario Él iría en persona a matarlo, Lucius lloro de rabia, sabía que su padre cumpliría esa amenaza y no deseaba que nada malo le pasará a su pequeño, por lo que muy a su pesar tuvo que seguir órdenes.

Así fue como al día siguiente, bajo un fuerte hechizo de glamour, termino con el amor de su vida. Severus no tuvo que decir  ni hacer nada, lo conocía tan bien para saber que estaba tan desecho como él.

El año acabo y Lucius regreso a su hogar, un mes después la boda se celebraba, Lucius fue confinado a estar con una mujer que no amaba, y ahora está se encontraba embarazada.

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-un bebé...voy a ser padre.

La noticia lo tenía muy sorprendido, le parecía imposible. Sí, había tenido relaciones sexuales con Narcisa después de que se casaron, era su obligación cumplir como marido, pero siempre se cuido, tomaba una poción anticonceptiva, todos los días sin falta ¿Entonces como?

La respuesta no tardó en llegar, claro, esa noche.

Ese día habría sido su aniversario con Severus, estaba tan triste desde la mañana que olvidó la poción y el alcohol se le fue de las manos, no recordó que pasó pero despertó al día siguiente desnudo en su cama junto a su esposa, y por las marcas en su cuerpo es claro que lo hicieron. Ahora ahí tenía las consecuencias.

La sonrisa adorno sus labios, un bebé, su hijo, no era con la persona que lo deseaba pero si le alegraba saber que sería padre.

-Narcisa se molestará si le pongo Severus...

Comenzó a reír, jamás lo permitiría.

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Continuará 😊.

Pobre Lucius, el de verdad quería a Severus.

Crédito de las imágenes a sus respectivos autores.