✧c.-057
N/A: Este (para sorpresa de absolutamente nadie) es otro de mis capítulos favoritos, me hace muy feliz xD
Cap dedicado a vane_zam1138 ♡♡
Hoy os recomiendo 'Jaded' de Miley Cyrus, mi ser humano favorito en todo el mundo. Necesitaba su nuevo disco para poder seguir con mi vida.
[...]
"Oye, pues no estaba mal el sitio este, me ha gustado." Decía Jungkook, saliendo del restaurante y colocándose la chaqueta.
A su lado, TaeHyung esbozó una sonrisa victoriosa, satisfecho con aquellas palabras.
"¿Ves? Te lo dije."
Jungkook y él habían acordado cenar en la pizzería al que tiempo atrás este le llevó. Sin embargo, en el último momento, TaeHyung había decidido cambiar los planes e insistir para ir a un restaurante lujoso. Claramente, al azabache no le hizo demasiada gracia, pero no tuvo agallas para negarse cuando TaeHyung prácticamente estaba haciéndole ojitos.
Era sorprendentemente difícil decirle «no» a alguien cuando estaba babeando de una forma tan descarada. Y admitir aquello era algo que dañaba su ego a niveles estratosféricos.
"Sí, pero me debes una cena en esa pizzería, que lo sepas."
"Por supuesto que sí." Bufó.
Entonces, el azabache tuvo que usar su última carta.
"Si no lo haces por mí, al menos hazlo por Sunwoo." Añadió en el último momento, ocasionando que TaeHyung le mirase de inmediato.
Frunciendo el ceño, su jefe ladeó la cabeza. "¿Mi sobrino? ¿Qué tiene que ver él en esto?"
"El día que fuimos a recogerlo del colegio, tras ese percance con el otro niño, para animarle prometí llevarlo a esa famosa pizzería."
"Um, ya... Ya veo."
"Le dije que era la mejor valorada de la ciudad. Se emocionó mucho."
Kim frunció el ceño, bufando. "Oh, por supuesto que se emocionó, Jungkook, cualquiera con vuestra misma edad mental se emocionaría. Pero eres tú quién se lo prometiste."
"No sé qué has querido decir con eso de la edad mental, pero prefiero quedarme con la duda antes de sentirme herido por mi propio jefe. Además, ¿no crees que Sunwoo querría compartir ese momento contigo también? Eres su tío favorito... Apuesto que le haría súper feliz tenerte allí."
TaeHyung se mordió el labio inferior, mirando hacia el suelo con una clara expresión de incredulidad plasmada en su rostro. No podía creer que estuviera usando a su sobrino para asegurarse una segunda cita.
"Muy bien..." Asintiendo, ocultó las manos en los bolsillos, adoptando una pose desinteresada que hizo alarmar a Jungkook.
Este le observó atentamente, esperando a que añadiese algo más. Sin embargo, él no lo hizo.
"¿Muy bien?" Repitió, sus ojos amplios y brillantes.
"Sí, perfecto... Iremos a ese sitio otro día."
"¿En serio?"
"Por supuesto." Insistió. "Sólo atente a las consecuencias."
Jungkook frunció el ceño, la expresión eufórica en su rostro decayendo gradualmente. "Huh, qué... ¿Qué quieres decir con eso?"
Y, sin siquiera ocultar su sonrisa, TaeHyung volvió a asentir, girándose tan sólo un poco para palmear el hombro de Jungkook un par de veces. Aquel simple gesto hizo que el azabache se sintiera aún más amenazado.
"Lo averiguarás cuando llegue el momento, no te preocupes por eso."
Entonces, dejó escapar un pequeño quejido, agachando la cabeza como si de un cachorro desamparado se tratase. TaeHyung siempre encontraba la forma de romper todas y cada una de sus ilusiones construidas. Era doloroso.
"Se supone que esta cita era para darme una sorpresa después, no para romperme el corazón, jefe... A ver si nos centramos un poco." Sutilmente dejó caer, oyendo su risita de inmediato.
"Tranquilo, la sorpresa aún sigue en pie."
"Oh, bueno." Asintió, algo más conforme. "¿Y de qué se trata? ¿Vas a cumplir alguna de mis fantasías sexuales? ¿Piensas disfrazarte de algo en concreto o-"
Su pregunta claramente inofensiva, por desgracia, se quedó en el aire cuando TaeHyung le golpeó el estómago. Él se quedó sin aliento, incluso si ni siquiera había sido un golpe fuerte o doloroso.
"Ay..." Se quejó, llevándose una mano al abdomen, formulando una mueca de dolor completamente falsa. "Creo que me has cortado la digestión."
Bufando, su jefe ni siquiera le prestó atención, negando. Jungkook era un caso perdido cuando pensaba con la cabeza equivocada.
"Agradece que no he decidido cortarte otra cosa, depravado."
"¡Sólo estaba preguntando, por el amor de Dios! Y casi me cambias el intestino de posición."
"Ya, preguntando, seguro que sí."
"Soy una persona curiosa." Insistió.
"Un cerdo es lo que eres, ¿desde cuándo que me disfrace de algo se ha convertido en una fantasía tuya?"
Jungkook emitió un silbido prolongado, como si quisiera decir que había sido durante mucho tiempo. Su jefe entrecerró los ojos, arrepintiéndose inmediatamente de haber hecho aquella pregunta.
"No sé ni para qué pregunto..." Resopló, apartando la mirada.
Porque, quizás, también se había sonrojado un poquito, pero él no iba a admitir eso.
"En el fondo te encanta saberlo, jefe. No te hagas el tonto."
"No lo hago, para eso ya estás tú."
Jeon asintió. "Exacto."
"Bien... Y sólo por eso lo dejaré pasar." Suspiró, mirando hacia el frente.
Entonces, la sonrisa del azabache volvió a aparecer, felizmente satisfecho. "Genial."
"Por eso y porque hay algo importante que debo decirte." Añadió.
TaeHyung tenía los labios apretados cuando Jungkook le observó, como si hubiera estado guardándose algo por horas. Su ceño se frunció, mirándole con interés y algo de preocupación, pues TaeHyung se veía serio ahora.
"¿Qué es?"
Mordiendo su labio inferior, se mantuvo en silencio únicamente para buscar las palabras correctas. No quería ocultarle nada, incluso si podía ser algo insignificante. Prefería que lo supiera todo (o al menos lo que estaba en su mano).
"Verás... Esta mañana cuando me fui a toda prisa, fue porque tu padre estaba esperándome en la cafetería."
Ahí, la mueca de Jungkook cambió por completo, como si no hubiera escuchado bien.
"¿Mi... Mi padre?"
"Sí, me llamó el lunes cuando estábamos juntos, dijo que mi padre le había facilitado mi número y que quería hablar conmigo." Llenándose los pulmones de aire, dijo.
Antes de continuar, tanteó en el aire la mano de Jungkook, hallándola a su izquierda y entrelazando los dedos.
"¿Qué quería?"
"Hablar sobre ti."
"¿Sobre mí?" Soltando un bufido, puso los ojos en blanco.
"Sí... Quería saber cómo te iba por aquí, qué tal te estabas portando."
Jungkook ni siquiera podía creer lo que escuchaba, negando con la cabeza conforme asimilaba las palabras que TaeHyung había dicho. Él no soltó su mano en ningún momento, caminando junto al castaño sin rechistar.
"Yo le dije que eres un gran asistente y tenerte allí era increíble."
"Ya veo, imagino que te ha costado mucho mentir, ¿no?" Bromeó, oyendo su risa.
Sin embargo, TaeHyung movió la cabeza de un lado a otro, negando. "No mentí, idiota. De hecho es completamente cierto, para no gustarte tu trabajo lo haces de maravilla."
Aquellas palabras tan honestas por parte del castaño, hicieron a Jungkook sonreír, agachando la cabeza para evitar que esté pudiera ver su sonrojo.
"No me gusta mi trabajo, me gustas tú y hacerte las cosas fáciles."
Esta vez, TaeHyung fue quien sonrió, mordiéndose el labio inferior e inclinándose para depositar un beso en su mejilla, muy cerca de la comisura labial.
"Eso es aún mejor."
"Claro, porque te aprovechas..." Dejó caer, sonando falsamente herido al respecto y oyendo su risa. "¿Qué más te dijo?"
"Exactamente lo mismo que te dije yo hace un tiempo, su intención a la hora de enviarte a la agencia era que aprendieras a valerte por ti mismo y así tener éxito en tus planes de futuro. Nada de hacerte la vida imposible o librarse de ti."
Una vez más, Jungkook bufó. "Ya, seguro que esa era su única intención..."
"Pues sí, Jungkook, parecía muy honesto con lo que decía. Tu padre sabe que eres inteligente y centrado cuando algo te interesa."
"¿Cómo va a saberlo si ni siquiera hablamos? Es ridículo."
"Porque es tu padre."
"Eso no tiene nada que ver."
"En este caso sí tiene que ver, Jungkook. Y lo creas o no, él está orgulloso de ti."
Jungkook dejó escapar una risita fingida. "Suena a algo imposible."
Entonces, TaeHyung resopló, dejando de caminar para que el azabache hiciera lo mismo. Viendo los ojos cansados de su jefe, Jungkook puso ambas manos sobre la cintura ajena.
"¿Acaso no confías en mi palabra? Porque no estaría contándote nada de esto, si no hubiese visto lo que vi."
"Confío en tu palabra, TaeHyung, pero no en la suya."
"Pues es la misma..."
"No, no lo es."
"Sí." Insistió, mirándole a los ojos, únicamente para que viera la honestidad en ellos. "Deberíais hablar y aclarar todas las diferencias que existan entre vosotros. No puedes estar molesto con él toda la vida."
Jungkook bufó, poniendo los ojos en blanco. "Claro que puedo."
"No, Jungkook, desgraciadamente no puedes. Te lo dice alguien que también estaba muy enfadado con su padre antes de que le diera un infarto."
Entonces, un suspiro brotó de sus labios, las palabras de TaeHyung, inevitablemente, sintiéndose como un puñal en el estómago. No quería pensar en algo como eso ahora mismo.
"Es diferente... Tu padre y tú tenéis una relación normal."
"Ahora sí, antes ni por asomo."
Para TaeHyung no fue fácil admitirlo, mordiéndose el labio inferior cuando una oleada de culpa arrasó con él. Ante la atenta mirada de Jungkook, se vio en la obligación de aclarar:
"Sé que te dije que siempre he llevado con orgullo el hecho de que mi apellido esté asociado a esa agencia, pero no es completamente cierto."
"¿Por qué no?"
"Porque mi padre trabajaba demasiado, apenas estaba en casa. Olvidó el día de mi graduación por estar en una reunión con la junta directiva." Agachando la cabeza, explicó.
TaeHyung no solía hablar demasiado de sí mismo, mucho menos de su época universitaria y cómo esta se había visto afectada por la relación que mantenía con su padre, especialmente cuando no podía enorgullecerse de sus actos.
"Él siempre me ha apoyado en todo lo que he hecho a lo largo de mi vida, estuvo arrepentido durante mucho tiempo... Y por alguna razón yo sentí que jamás podría perdonarle ese descuido."
"Es comprensible, ¿no? No te graduas todos los días, TaeHyung."
Kim asintió, estando de acuerdo. Sin embargo, continuaba con el peso de la culpa en sus hombros. Incluso si aquello había quedado atrás y la relación actual con su padre era maravillosa, aquellos recuerdos aún le carcomía.
"Sí, es comprensible. Pero yo fui excesivamente rencoroso, estuve semanas, meses sin hablarle... Él me pedía perdón prácticamente a diario y yo le ignoraba."
Los dedos de Jungkook se posaron en su rostro, eliminando una lágrima solitaria de la que TaeHyung ni siquiera tenía constancia, dejando escapar un suspiro ante la comodidad de su simple tacto.
"Luego- Luego sufrió el infarto y creí que jamás volvería a verle." Susurro, como si sólo mencionarlo le rompiera el corazón.
"No tienes que hablar de esto si te afecta, TaeHyung. Entiendo a dónde quieres llegar." Le decía Jungkook, eliminando una segunda lágrima. Luego, acunó su rostro.
"Es que no quiero que te pase lo mismo que a mí." Insistía. "O sea, no pretendo decir que a tu padre vaya a darle un infarto, cualquier cosa menos eso... Pero no quiero que te arrepientas como yo lo hice."
Acariciando las mejillas suaves del castaño, Jungkook asintió, comprendiendo su punto de vista.
"Está bien, puedes estar tranquilo... Hablaré con mi padre pronto."
"Bien. Me- me alegro. Gracias..."
"¿No debería ser yo quien te las diera?"
Encogiéndose de hombros, TaeHyung no fue capaz de darle una respuesta verbal, por lo que Jungkook sonrió, inclinándose para besarle castamente en los labios. Poco después, vació sus pulmones de aire.
"Bueno... ¿Qué tal si dejamos este tema a un lado y mejor me cuentas cuál es esa sorpresa de la que tanto hablabas? Ya estoy impaciente.
Kim asintió, estando de acuerdo con él, aclarándose la garganta.
"Sí, me parece una buena idea. Te he estado llevando mientras que hablábamos, así que estamos cerca. Ven." Indicó, tomando su mano por segunda vez.
"¿Y qué es?"
"Lo verás en cuanto lleguemos." Respondió el castaño.
"No tengo paciencia, TaeHyung..."
Entonces, él le dio una amplia sonrisa, acercándose para depositar otro casto, pero sonoro beso en sus labios.
"Pues vas a tener que hacerlo."
Jungkook no dijo nada al respecto, porque acotar acciones era su especialidad desde que TaeHyung comenzó a ser su jefe, por lo que simplemente entrelazó sus dedos con los del susodicho, afianzando el agarre e inmediatamente siendo invadido por una sensación extraña que fue a parar hacia su estómago.
Dios, a este paso le daría la razón a Bible.
Quince minutos más tarde, ambos llegaron al centro de la ciudad, donde la iluminación era completamente artificial debido a letreros luminosos alrededor de innumerables carteles publicitarios.
Jungkook se sentía nervioso con cada paso que daba, eventualmente más nervioso que en el minuto anterior. TaeHyung no parecía dispuesto a darle pistas, así que debía aguantarse con lo poco que tenía.
"Ya hemos llegado." Anunció el castaño, deteniéndose en medio de la acera.
Jeon le observó con los ojos entrecerrados. "¿Y la sorpresa?"
"Ahí delante." Señalando al frente, donde los carteles publicitarios luminosos se encontraban, dijo.
Aquella respuesta tan simple hizo que el azabache se sintiera aún más confundido, su ceño fruncido saliendo a la luz. No entendía nada, y eso era lo que tanto emocionaba a TaeHyung.
"¿Carteles publicitarios?"
"No son carteles publicitarios, Jungkook." Le dijo, mirando su reloj de muñeca. Faltaba poco. "Es el cartel publicitario."
Haciendo énfasis en 'el', permitió que Jungkook continuara sin entender absolutamente nada por, al menos, diez segundos más, mientras su sonrisa empezaba a formarse.
"Estoy en blanco ahora mismo, TaeHyung. No entiendo por qué estamos aquí."
"Cinco..., cuatro..., tres..." Comenzó la cuenta atrás.
"¿Y ahora por qué cuentas?"
"Dos..., uno..."
Sin darle una respuesta concreta, alcanzó su mano, volviendo a entrelazar sus dedos con los propios, manteniendo la vista en el frente esta vez. En cuanto el cartel publicitario más amplio cambió de imagen, lo señaló.
"¡Ahí está! Míralo."
Jungkook dirigió su mirada hacia aquel cartel, aún con el ceño fruncido. En cuanto visualizó la campaña que se estaba publicitando en lo alto del edificio, con una fuerte luz blanca, sus ojos se ampliaron, incapaz de creer lo que estaba viendo.
"¿Qué...?" Balbuceó, no siendo dueño de sus actos, ni siquiera cuando por instinto dio un paso hacia el frente. "¿Qué hace Jungwon ahí?"
Miró a su jefe en busca de respuestas, únicamente para encontrarse con una enorme y brillante sonrisa.
"Calvin Klein." Mencionó, encogiéndose de hombros. "La primera campaña publicitaria de tu hermano a tan sólo unos días de haber firmado oficialmente con nosotros."
Los ojos de Jungkook alternaron del cartel hasta TaeHyung. "P-Pero, ¿cómo...?"
"Siendo muy bueno, apuesto. No es el único contrato que le han puesto por delante, pero obviamente es el más emocionante. El pobre de Sehun no da abasto."
"¿Sehun?" Repitió. "¿Ese no es el manager de Bible?"
"Sí, ahora lo comparten. Es normal que los managers lleven a varios modelos a la vez, así que no te sorprendas."
Jungkook se aclaró la garganta, negando mientras vaciaba sus pulmones de aire. Todo esto le había tomado por sorpresa.
"Dios, yo... No puedo creérmelo."
"Lo sé, Jungwon dijo que no lo creerías hasta verlo, por eso te traje." Asentía, señalando hacia el cartel de nuevo. Esta vez, el menor de los hermanos Jeon aparecía en ella con otro chico. "Mira, ahí está con Jay, ambos tienen el mismo perfil."
Para cuando TaeHyung observó a Jungkook de nuevo, este tenía una sonrisa enorme en el rostro y los ojos brillantes por las lágrimas que él no tardó en eliminar, tan pronto como estas comenzaron a caer.
"Es... Increíble lo feo que es, el hijo de puta." Susurró, sorbiendo por la nariz e inmediatamente escuchando la risa del castaño.
"Pues se parece a ti. Yo creo que incluso es más guapo." Se burló, haciendo a Jungkook bufar.
"Ajá..." Asintió, elevando la barbilla con orgullo.
Besándole en la mejilla, TaeHyung esbozó una pequeña sonrisa.
"Te diría que grabases para tenerlo de recuerdo, pero quienes se encargan de poner los anuncios ahí siempre nos envían vídeos. Los tendrás en cuanto me lleguen."
"Por favor. Yoona va a alucinar..."
"Ya, y los de ese anuncio de Coca-Cola ni te digo."
En respuesta, Jungkook soltó una carcajada, esta vez rodeando la cintura del castaño y empujándole hacia sí. Depositó un beso en su sien, notando cómo se le calentaba el corazón.
"Te debo una..." Susurró.
"No me debes nada, sólo hago mi trabajo."
"Traerme aquí no tiene nada que ver con tu trabajo, TaeHyung." Le recordó.
El mencionado hizo una mueca. "Hm... En eso tienes razón. Te lo cobraré cuando menos lo esperes, entonces."
"Me parece justo." Concordó.
TaeHyung le observó, asintiendo. Luego, se inclinó para depositar un casto beso en sus labios.
"Lo es."
Sí... Definitivamente debería darle la razón a Bible.
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