Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

✧c.-015

N/A: Este es otro de mis capítulos favoritos. Aunque a veces siento que todo va muy rápido entre estos dos y quiero que las cosas vayan poco a poco, recuerdo que ese es el verdadero plot del fic xD

Cap dedicado a mygpouts ♡♡

Hoy os recomiendo 'JADED' de PLVTINUM. Cada vez me gustan más.

[...]

"Esto es una mierda." Decía Jungkook, con una evidente mueca de desagrado, mientras observaba el traje que tenía en mano. "¿Por qué tengo que ponerme esta chaqueta? Es la cosa más hortera que he visto en mi vida."

"Porque iremos a un desfile de la marca y es lo más normal del mundo." Fue la respuesta del jefe, ignorando por completo su pataleta. "Deberías agradecer que es gratis."

"Hombre, estaría gracioso tener que pagar por esto, encima, con lo humillante que es. Si me pongo un sombrero de copa y parezco Willy Wonka."

Oyéndole bufar, TaeHyung simplemente soltó un suspiro, dejando de mirar unos documentos en el ordenador para enfocarse en él. "¿Puedes dejar de quejarte por todo? Es sólo un traje, puedes quitarte la chaqueta en cuanto lleguemos al desfile si tanto te afecta."

"¿Y no me vas a decir nada si lo hago?"

"No."

"¿Seguro?"

"Que sí, Jungkook, seguro, te lo prometo." Casi lloriqueó, pasándose una mano por el rostro. "Es más, les pedí que ni siquiera incluyeran la corbata porque sabría que te daría un ataque."

La sonrisa del azabache fue inmediata. "Ow... Eso es todo un detalle por tu parte, jefe. Qué bien me conoces ya." Dijo, en un tono de voz excesivamente dulce, lo que hizo al mencionado resoplar. Sin embargo, Jungkook analizó sus palabras con detenimiento, frunciendo el ceño en cuanto se dio cuenta de lo que aquello significaba. "Un momento... ¿Les pediste? ¿Quieres decir que tú elegiste estos trajes?"

TaeHyung asintió. "Claro."

"¿Y hay alguna razón por la que eligieras esa bazofia para mí?" Cuestionó, observando como le brillaban los ojos repentinamente, como si se viera orgulloso de lo que estaba a punto de decir.

"Creí que te quedaría genial ese color rojo tan... brillante." Explicaba casi con sorna, mientras jugueteaba con su labio inferior, sin apartar la mirada de Jungkook, cuyo ojos estaban entrecerrados. "Aunque ahora que lo pienso, tal vez debería haber elegido uno más sencillo, ¿no?"

"Uno más sencillo, claro." Repitió, mentalizándose de que su jefe quería arruinar su imagen y aceptando aquel hecho. "Algo así como el tuyo, ¿no?"

"Sí... Más o menos."

Jungkook se quedó pensativo por unos segundos, masticando su labio inferior antes de enfocarse nuevamente en su jefe. TaeHyung quería cobrarse un poco de todos esos disgustos que tenerle como su asistente le causaban, lo cual podía verse como algo justo. Sin embargo, Jungkook encontraría una forma de salirse con la suya.

"Ya veo..." Asintió, acariciándose la barbilla y encogiéndose de hombros. "Pues buena elección, la verdad, creo que puedo lucir ese traje bastante bien. Me va a quedar como un guante, jefe."

La sonrisa de TaeHyung se hizo más amplia. "Genial, cómo me alegra saber eso."

Inmediatamente la puerta del despacho de abrió con brusquedad, casi sobresaltando al castaño, quién miró con ojos ensanchados al susodicho que se había atrevido a abrirla sin pedir siquiera permiso. Tras ella, Jamie Lee, el director ejecutivo de esa dichosa revista, se encontraba, junto con Daehwi, quién parecía estar a punto de tener un infarto.

"¿Qué crees que haces entrando así en mi oficina?" Quiso saber, frunciendo el ceño en cuanto el hombre se adentró.

"Señor, he intentado detenerle, pero no me ha dado oportunidad." Explicó Daehwi, sobándose el brazo tras haber sido estampado contra la puerta.

"Vengo a por respuestas. ¿Me puedes explicar por qué he recibido una denuncia de tu agencia?"

TaeHyung se puso en pie, ni siquiera mirando a Jungkook, quien compartía su misma mueca. Él se cruzó de brazos, apoyándose en su propia mesa. "No, no pienso explicarte nada, mucho menos si te presentas así. Da un paso hacia atrás, sal de mi despacho y discúlpate con mi compañero por haberle empujado e ignorado sus indicaciones."

"No tengo tiempo para tus reglas absurdas, Kim." Bufaba el hombre más mayor, quedando de brazos cruzados. El castaño se encogió de hombros.

"Pues ahí te puedes quedar hasta que te canses, no voy a darte ninguna explicación."

Seguido de aquello, un corto silencio inundó el ambiente, hasta que Jamie soltó un suspiro, su rostro desencajado al tener en cuenta que TaeHyung estaba siendo tajante con su decisión. Poniendo los ojos en blanco y perdiendo todo rastro de orgullo, miró al chico que tenía a sus espaldas.

"Lo siento mucho, cariño, no quería pasar por encima de ti, pero tu jefe me ha puesto de los nervios con su repentina denuncia." Le dijo a regañadientes, una sonrisa forzada tambaleándose en sus labios. Daehwi simplemente asintió, por lo que él miró a TaeHyung. "¿Ahora puedes atenderme?"

"Por supuesto." Asintió, aún cruzado de brazos. "Gracias, Daehwi, puedes retirarte."

"Claro, señor." Haciendo una reverencia, el mencionado no tardó en desaparecer por el pasillo.

"¿Qué se te ha perdido por aquí? Pensé que había quedado muy claro lo poco bienvenido que eres en esta empresa." Quiso saber, sus cejas alzadas, mientras ladeaba la cabeza.

"Bueno... Entiendo que después de lo de Wonbin estuvieras un poco escéptico con nosotros, pero yo pensaba que eso de denunciarnos porque tu cara aparezca en nuestra portada, siendo un personaje público, había quedado en el pasado. Se ve que no."

De inmediato, el castaño se permitió soltar una risita, pasando su peso de un pie al otro. "No, Jamie, no. Lo de Wonbin hace mucho tiempo que dejó de tener importancia y sabes muy bien por qué. Además, te equivocas si piensas que te he denunciado, porque no he sido yo."

"Ah, ¿no?" Sus cejas se alzaron. TaeHyung negó. "Entonces, ¿quién ha sido?"

"Para estar tan molesto por la denuncia, ni siquiera te has molestado en leer el nombre del remitente. Y mira que estando al mando de una revista, leer para ti debe ser como respirar." Señalaba Jungkook, metiéndose en la conversación voluntariamente y captando de inmediato la atención deseada. "Aunque te entiendo, después de ver toda la mierda que publica tu revista, yo también tendría dificultades para hacer algo tan básico como leer."

"¿Disculpa?" Jamie cuestionó, habiendo notado su presencia en aquel preciso instante y frunciendo el ceño. "¿Y tú quién eres?"

"Es mi asistente." Respondió TaeHyung, viendo como se elevaba una de sus comisuras.

"Tantas ganas que tenías de poner mi cara en la portada de tu revista, y ni siquiera te molestas en conocer mi nombre. Qué lástima..." Suspiró, bajando los hombros mientras que se lamentaba. Cada palabra que salía por su boca, lograba confundir aún más al susodicho. "Me llamo Jungkook, aparte de ser el asistente de jefe, soy quien ha presentado esa denuncia."

"Oh... Así que has sido tú." Comprendiéndole finalmente, Jamie asintió. "Supongo que se debe a que no eres un personaje público, ¿verdad?"

"Exacto. Creo que tengo todo mi derecho a querer preservar mi privacidad."

"Por supuesto, cariño, pe-"

Una mueca de desagrado pasó por el rostro de Jungkook. "Qué asco, tienes como cincuenta años, no me llames cariño." Pidió, viéndole sonreír.

"Pero, tu jefe sí es una figura pública, tienes que entender eso." Le dijo, ignorando por completo su rechazo.

"Pero yo no, así que no hay discusión."

"¿No hay discusión?" Repitió, ladeando la cabeza con un ápice de diversión brillando en su rostro. "Bueno... Yo creo que sí la hay."

De inmediato, las cejas de Jungkook se alzaron. "Oh, ¿sí?" Cuestionó, mirando instantáneamente a TaeHyung. "¿Tú qué opinas, jefe?"

"Deberíamos llamar a Mix, él nos dará una solución." Propuso, viendo a Jungkook hacer una mueca.

"Hm, no te molestes... Si él quiere publicar esa portada, adelante, yo seguiré adelante con la denuncia hasta que lleguemos a juicio." Encogiéndose de hombros, dijo. "Ahí incluso tendrá más fundamento, porque todo saldrá a la luz y se estará lucrando oficialmente con la imagen de una persona anónima que no ha dado su consentimiento."

TaeHyung mostró sorpresa por apenas unos segundos, antes de que una pequeña sonrisa hiciera el amago de jalar de sus comisuras, mostrándose tan orgulloso del azabache, que ni él mismo se conocía.

"Me parece una buena opción, sí." Apoyando las manos en su escritorio, miró a Jamie, quien parecía estar en un debate interno. "Imagino que eso no será un inconveniente para ti, ¿no? Digo, como estás tan empeñado en publicar esa portada... Sólo espero que merezca la pena todo el dinero en abogados que vas a gastar."

Finalmente, Jamie vació sus pulmones, acercándose a TaeHyung. "No va a merecer la pena, descuida. Descartaremos esa portada si tanto os afecta su existencia, sólo espero que no intentes escudarte en tu asistente la próxima vez."

"Bueno... Si eres inteligente, Jamie, no habrá una próxima vez." Aseguró, inocentemente encogiéndose de hombros y cruzando los brazos por debajo de su pecho.

"Me encanta que tengas tanta fe."

"Y a mí saber que mi vida te importa tanto como para seguir obsesionado, incluso habiendo pasado cuatro años desde lo de Wonbin. Supéralo, te va a venir muy bien."

"Sobre todo para las arrugas." Añadió Jungkook, inmediatamente recibiendo una mirada horrorizada por parte del hombre. "No me mires así, James, la edad nos pasa factura a todos. Especialmente a los que estáis amargados."

"Me llamo Jamie, niño."

El azabache resopló. "Uf... Si a ti te ha dado pereza leer mi nombre en la denuncia, imagínate la que me puede dar a mí aprenderme el tuyo."

Por segunda vez en lo que iba de día, TaeHyung tuvo que morderse la mejilla interna para no soltar una risa, porque Jungkook era increíblemente ingenioso cuando no se dedicaba a ponerle de los nervios. Lo cual era un gran punto a su favor.

Él se acercó con calma hacia Jamie, poniendo una mano amistosa en su hombro, mientras señalaba hacia la puerta. "Creo que va siendo hora de que te marches, Jamie. Agradezco que hayas tomado la decisión de no publicar esa portada, es lo más sabio que puedes hacer."

"Sí, será mejor que me marche, estoy de acuerdo. Pero ándate con cuidadito, TaeHyung." Le advirtió, no recibiendo más que una sonrisa por su parte.

"No me amenaces anda, vamos a llevarnos bien." Más que una propuesta, aquello sonó como otro tipo de advertencia diferente, una más indirecta, conforme le guiaba hacia la puerta. "Ah, antes de que se me olvide..." Murmuró, acercándose a su oreja, sólo para que él pudiera oírle. "Si vuelves a presentarte por aquí, asegúrate de no faltarle el respeto a ninguno de mis empleados, o yo mismo me encargaré de echarte a patadas."

"Claro, cariño. Un placer." Fue todo lo que Jamie dijo, antes de girarse y salir por donde había venido.

"El placer es mío." Respondió, esbozando una sonrisa falsa al verle marcharse. Una vez no hubo rastro de él, cerró la puerta.

Sintiéndose absolutamente satisfecho, TaeHyung llenó sus pulmones de aire, soltándolo en una bocanada. Este tipo de situaciones (de las cuales salía victorioso, claro), le hacían sentirse como nuevo.

"Lo hemos hecho bien, ¿no?" A sus espaldas, Jungkook cuestionó. El castaño se giró, encarándolo, sólo para darse cuenta de que estaba peligrosamente cerca de él.

"Pues sí, la verdad es que estoy muy orgulloso de tu participación. Ha sido genial." Felicitó a su asistente, presenciando el momento exacto en que una sonrisa de victoria jalaba de sus labios, aquellos que mordió poco después.

"¿Estás orgulloso de mí, jefe?" Quiso saber, su tono de voz bajo, manteniendo la vista fija en la boca de su jefe.

TaeHyung asintió, poniendo una mano en su brazo. "Claro, Jungkook."

"¿Cuánto?"

"Muchísimo." Aseguraba.

"¿Lo suficiente como para que ahora sí quieras besarme?" Todavía hincando los dientes en la jugosa carne de su labio, Jungkook preguntó, sus ojos fijos en los de TaeHyung.

Kim dejó escapar una carcajada, notando un leve cosquilleo en la espalda, antes de suspirar. Luego, su mano libre viajó hasta la nuca del azabache, permitiéndose juguetear con su cabello. "Estás como muy obsesionado con eso, ¿no?"

"Quizás." Él se encogió de hombros.

"Es todo un halago..." TaeHyung relamió sus labios esta vez. "Y a la vez una lástima, porque soy tu jefe, Jungkook, no podemos hacer eso."

Sólo entonces, las cejas del mencionado se alzaron. "Dimito." Fue todo lo que dijo, absolutamente convencido, causando otra risa en su jefe, quién negó.

"Eso tampoco puedes hacerlo, tienes un refugio que mantener. ¿O acaso lo has olvidado?"

Finalmente rindiéndose, Jungkook se alejó, soltando un bufido. "Menuda mierda, jefe. Ya podrías cambiar las reglas." Dijo, e inmediatamente TaeHyung esbozó una sonrisa.

"No puedo hacer eso, ¿qué imagen estaría dándole a esta empresa?"

"Allá tú, jefe. Pronto te estarás arrepintiendo de esas reglas, créeme." Advirtió, viendo la hora en su reloj de muñeca y descubriendo que ya podía irse a casa.

"Qué confiado, ¿no?"

"Bueno... Mejor dejémoslo en realista." Él se encogió de hombros, agarrando su cazadora y el traje que debía usar el día siguiente, dirigiéndose hacia la salida, no sin antes pasar junto a TaeHyung. "Te veo mañana, guapo."

"Claro, hasta mañana. Acuérdate que a las seis tienes que estar en el aeropuerto."

"¿De la mañana?" Cuestionó. El castaño asintió. "Joder, qué temprano... ¿Cuánto tiempo de viaje tenemos?"

"Son casi quince horas hasta Barcelona."

Al instante, un bufido salió disparado de sus labios. "Mis muertos a poni."

"¡Esa boca, grosero!" Le recriminó TaeHyung, riéndose por su reacción.

"Estaría mejor si me hubieras besado, jefe. Lástima que existen tus reglas absurdas." Volviendo a encogerse de hombros, suspiró dramáticamente. TaeHyung ni siquiera tuvo tiempo de mostrar su sonrojo, cuando Jeon ya cruzaba la puerta. "Adiós."

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro