Había pasado un mes desde lo ocurrido, era novias así que se podría decir que la angustia ya había acabado, que todo lo que pasaron por un año fue una de las mayores aventuras en las que ha estado, ahora se pueden decir lo mucho que quieren y estar todo el tiempo juntas, que es lo que hacen, si no es Momo quien visita a Sana es Sana a Momo, todos los fines de semana ven una película o salen a donde sea, eso sí, los días de semana se lo toman como días labores en los que lamentablemente no pueden verse.

Por eso es que los sábados estaba tan emocionadas porque saben que cuando están juntas es lo mejor del mundo, no hay nadie que las detenga y la verdad es que escuchar lo tiernas y cursis que son entre ellas es bastante doloroso para Myoui, así que Sana decidió ir a la casa de la mayor para no molestar a su mejor amiga que se quedo esperando a Chaeyoung ya que ésta tenía algo que decirle así que las dejo solas de seguro era bastante importante, se notaba el na cara de Mina que no era algo que le pareciera muy lindo.

Al principio no quiso ya que quería apoyarla en todo es lo que han hecho desde que se conocen pero aún así decidieron que lo mejor que podía hacer era irse porque debía estar con Momo además de que Mina y Chaeyoung necesitaban tiempo a solas que es algo que no han tenido desde hace un par de semanas, la verdad es que las cosas entre ellas están raras y eso asusta a Sana porque no sabe cómo ayudarlas, he de decir que desde que tiene pareja se ha comportado como la típica cupido.

Si no saben que es es ese alguien que como ya encontró el amor no quiere que las parejas que ya están formadas, la que están a punto de formarse o las que ella misma formarán se rompan porque se encuentra en una gran felicidad y sabe que cuando comience la primera ruptura esa aura llena de amor y esperanza comenzará a fracturarse y no quieren eso porque será perjudicial para lo que han construido, en éste caso toda la espera para tener algo con Momo, así que no quiere que nada malo pase porque deben seguir en esa nube de amor y comprensión.

Ahora ese era su papel lo que significaba que iba a hacer hasta lo imposible para ver a su mejor amiga feliz con la pareja que tiene ahora, Son Chaeyoung, porque la coreana era perfecta para ella además de que su historia es digna de contarle a sus nietos o escribirlo en un libro, éste se venderá, es que hasta piensa en eso, se ha vuelto algo más grande que un cupido loco porque nadie se rompa ni haga sentir mal, va más allá, mucho más, es que su corazón siente que debe darle amor a todo el mundo.

Es algo que todos en el trabajo se han dado cuenta que ahora parece que quiere a medio mundo cuando antes, aunque era así, no lo demostraba tanto como ahora, se la pasa con una sonrisa que no se borra en ningún segundo del día, habla con las personas como si fueran pequeños tesoros que debe proteger y es demasiado amable con todos, claro que antes lo era de hecho una de sus virtudes según muchos, pero ahora se pasa ya no es lo mismo a sobrepasado los límites.

Parece que es una hada que anda danzando de un lado a otro dándole amor a los que cree que están necesitados de éste, es la cosa más extraña y graciosa que las personas a su alrededor están viviendo porque es una nueva Sana, alguien que parece que es una estrellita, una persona que ha notado el cambio más que nadie es Mina, bastante obvio, porque vive con ella y se da cuenta que cuida hasta a las plantas que debía que odiaba, todo su mundo parece que está pintado de rosa y que su sonrisa se ha agrandado.

Es algo que le gusta demasiado porque por fin se podría decir que es feliz y quiere hacer feliz a los demás lo que la hace sentir orgullosa de tener a una mejor amiga así de linda y respetuosa con todo el mundo, siente que es como esas chicas de las caricaturas que a pesar de todo siguen con una enorme sonrisa brindándole amor a todo el mundo a su alrededor y es algo que agradece porque últimamente las cosas con Son no han ido tan bien como quiere así que siente que necesita más cariño del normal y es algo que la peli gris le da sin ningún problema.

Se quedó mirando a la puerta y frunció los labios, la prima de Momo iría y estaba bastante entusiasmada ya que ésta tenía un bebé y le encantan, sobre todo cuando son tan adorables como el que le ha estado enseñando en cientos de fotos que tiene Hirai de éste, es tan lindo y todo el tiempo está sonriendo así que será un buen día para conocer a un pequeño humano que más tarde que nunca crecerá y se converso un demonio.

Siempre pasaba así que no le extrañaría que sea la misma situación de siempre, se quedó mirando hacia la ventana no entendía porque Momo no le abría la puerta ya había tocado así que no le quedaba de otra más que esperar a que la pelinegra se dignara a abrirle la puerta es entendible porque puede que esté en la habitación, debería escribirle pero como es tonta y no le gusta que la molesten lo dejó en su habitación, sería un día exclusivo para la mayor y para ella así que no quería a nadie molestando porque se enojaría mucho y es algo que prefiere evitar porque siente que ha perdido el toque.

Hace tanto tiempo que no se enoja que cuando lo hace así sea por las mínima cosa se siente extraña como si su pecho le negara que lo hiciera y es algo que agradece porque ya se estaba volviendo loca días antes de que Momo le pidiera ser su novia porque no entendía que era lo que les estaba pasando, porque se gustaban pero no llegaban a concretar nada y por más que no le gusta eso de las etiquetas o cosas por el estilo ya está un poco mayor como para necesitar a alguien a quien decirme pareja.

Era bastante lindo tener a Hirai ya que cada que la miraba le decía lo mucho que la quería y le pido demostrar todo el cariño que tiene sin tener miedo a que piense que está loca o algo por el estilo, así que todo estaba bien y su mundo por fin iba por donde debía, a un buen lugar en el que podrían llegar a decirse de todo, es que sentía que era la indicada con quién estaría por el resto de su vida, aunque no se quiera apresurar es exactamente lo que está haciendo porque apenas llevan un mes y ya piensa en un futuro.

Pero estará segura que no en uno muy lejano ya que ninguna de las dos está muy joven como para complicar las cosas, más, de lo que estuvieron antes de que se hicieran novias porque sería demasiada espera y es algo que de verdad la iba a volver loca, se podría decir que agradece con todo su ser por fin ser novia de la única chica que ha amado con locura de una manera tan entregada que lo único que desea es estar ahí para toda la vida porque es lo que siente que pasará, Momo sería ese alguien para toda su vida que ha estado esperando por tanto tiempo.

Apretó los labios y se quedó mirando la puerta tuvo que avisar que ya había llegado o que ya iba en camino porque parece que Momo no está en casa o algo por el estilo, volvió a tocar la puerta un paz de veces más y sonrió en grande al escuchar la voz de su novia, por fin se dio cuenta de estaba ahí, parecía estar entusiasmada y hablando con alguien de seguro era su prima, se supone que debía llegar temprano para no sentirse tan observada pero se le complicaron las cosas.

Era la primera vez que conocía a algún familiar de Momo y eso le estaba dando bastante miedo porque tal vez ésta hablaría con sus suegros así que debía dar una buena impresión si es que quiere caerle bien a toda la familia, claro que sí, le caerá bien a todo el mundo es su gran meta para que vayan las cosas bien, sonrió e infló el pecho cuando la puerta se abrió, lo primero que vio fue la gran sonrisa de su novia y sus manos tomando las suyas para acercarla, no deberían hacer ese tipo de demostraciones.

Sobre todo frente a alguien que siente que es como un crítico tienen que actuar como la pareja perfecta para que todo vaya bien pero tampoco así es un poco vergonzoso, sobre todo porque la chica parecía estar viendolas sin decir absolutamente nada lo que lo hacía incluso más incómodo de lo que ya era, miró a los ojos a la mayor y le hizo señas para que se diera cuenta de que no debería hacerlo pero parece que no le importó ya que ésta se encogió de hombros y la besó, se tensó y se quedó sin aire ya que no lo esperaba.

"Veo que tú eres quien hace tan feliz a mi querida prima". Se dio media vuelta, todavía boba por el beso y asintió. "Mucho gusto soy Hirai Rumi". Hizo una reverencia y se acercó para estrechar las manos, tenía una sonrisa bastante parecida a la pelinegra, de hecho muchas facciones eran similares así que supuso que los genes Hirai eran perfectos.

"Minatozaki Sana, el gusto es mío". Momo la miró y sonrió un poco, definitivamente era la chica que quería presentar a sus padres porque era hermosa, talentosa y respetuosa, de seguro la aceptarían aunque sean un poco excepticos en cuanto a su homosexualidad. "¿Y esta pequeña?".

Los ojos de la peli gris brillaron al ver a la bebé mirarla, era el ser más lindo que ha visto en toda su vida, como abría un poco los ojitos y movía las manos como si quisiera que la agarrara pero no sería capaz así que dio algunos pasos atrás y se sentó en el sofá. "Parece que quiere que la cargues". Sana sonrió ligeramente y asintió con cuidado, ella no quería hacerlo porque tenía bastante miedo de que algo saliera mal pero parecía que Rumi si iba a darsela.

"Pero antes, buscate la cámara para que me tomen fotos". Asintió, se quedó mirando a Momo pero tal parece que ésta estaba más concentrada en la bebé que en otra cosa por como hacía que tomara su dedo índice, quería que fuera la madre de sus hijos por la forma en la que se comportaba con la pequeña, era tan adorable que hacía que su corazón se agrandara, con una enorme sonrisa subió las escaleras de dos en dos para llegar más rápido, se quedó viendo las puertas hasta que consiguió la de Momo y entró.

No es la primera vez que entra pero cada que lo hace se impresiona, es muy linda y acogedora pero a la vez moderna y un tanto sombría, tendría que ponerle un toque Minatozaki para que no esté tan seria, suspiró y tomó la cámara, mientras caminaba por el pasillo notó que alguien había llegado ya que la puerta se abrió, no sabía que vendría más familia pero le agradaba la idea así podría dar una buena impresión a más personas así que todo está perfecto.

"Hasta que por fin llegas amor". Apretó los labios e infló las mejillas mientras bajaba las escaleras, su mirada subió y se quedó helada.

No se lo podría creer.