Jealousy?
¿Estar o no estar?.
La verdad es que luego de estar dándole tantas vueltas al asunto no le presta tanta atención a eso ya que por fin está con Momo, no es algo serio pero aún así están juntas lo que la hace sumamente feliz, ahora sí pueden besarse y se podría decir que los celos están justificados, hablando de ese tema, ambas irían al cine sin saber lo que les esperaba en aquel lugar en el que besándose o acariciando sus manos, es a lo máximo que han llegado ya que se dieron cuenta de que también son lentas en ese aspecto.
Sana esperaba cerca de la puerta mientras veía Instagram, estaba demasiado aburrida esperando a Momo, Mina estaba frente a ella ésta sonreía esperando que dijera una palabra para burlarse, porque ahora sí ouede usar lo que decía a su favor, por fin encontró a alguien y era la indicada así que no podía este más feliz por su mejor amiga solo que le gustaba molestar, y eso era exactamente lo que haría si llegaban a cruzar miradas, estaba casi segura que no sucediera porque parecía que primero se metería en el teléfono antes de voltear a alguna parte.
De seguro estaba esperando un mensaje de la mayor pero no diría ni una sola palabra sobre el tema porque le gusta hacerse la difícil, tanto que estuvo casi un año y medio esperando que Hirai tomara la iniciativa solo porque ella tenía que esperar que alguien le diera la luz verde porque ella nunca lo ha hecho y la verdad es que esperar nunca hacerlo, porque le da miedo que la rechacen así que prefiere rechazar porque es más fácil pedir disculpas a aceptar las disculpas.
Suspiró y rodó los ojos, estaba enojando se porque se supone que debía avisarle hace media hora que iba en camino pero nada, no hay un solo mensaje de Chou y eso la estresa, siente que se va a morir si no obtiene ningún tipo de aviso, es seguro que van a ir al cine la cosa es que la película que ella quiere ver está a punto de comenzar, lo más probable es que se la pierda y tenga que verla en casa junto con Mina que nunca dice nada acerca de la película, si llega hacer su comentario recibirá un golpe directo en el brazo para que se calle, eso la estresa.
Tiene una mejor amiga delicada que no va a poder cambiar porque le tiene mucho cariño, ni siquiera por Nayeon ya que ésta tiene a Momo de mejor amiga así que no tiene a dónde ir, es Mina o es Mina, es un si o si, subió un poco la mirada conectandola por tan solo segundos, que ella no contó porque la verdad es que estaba estresada, lo que si escuchó fue el grito de Myoui y como la señalaba mientras reía, no entendía el por qué lo hacía pero tampoco iba a contestar porque de seguro seguiría burlándose.
Se mantuvo en silencio viéndola con confusión para que se diera cuenta de que debía explicarle lo que sucedía porque no estaba entendiendo nada, no era tan normal que se fuera de esa manera, su rostro estaba rojo y parecía que le dolía el abdomen tanto que se retorcía en el sofá, algo malo le estaba sucediendo es que hasta se preocupó. "¿Estás bien?". Preguntó mientras elevaba ambas cejas esperando que le dijera algo, pero no decía nada ella seguía en su mundo riéndose tanto que no podía más, le dolía tanto el abdomen que lo aprestaba.
"Es que...". Seguía riéndose, al principio a Sana le pareció gracioso ahora ya no tenía nada de gracia porque le estaba dando miedo, sentía que no iba a dejar de reírse por un largo rato así que siguió con el teléfono como si nada estuviera pasando porque no quería estar al pendiente de alguien que parecía que estaba convulsionando, a la conclusión que pudo llegar es que se estaba burlando de ella y no le estaba causando ninguna gracia, algo extraño porque ella se ríe hasta de una mosca que chocó contra un vaso, a ese nivel de roto está su humor, pero ésta vez siente que no quiere reírse.
"Con palabras Mina, explícate". Ya no le estaba causando gracia lo que pasaba, había perdido todo rastro de la Sana que siempre está feliz y contenta, porque no entendía la situación y eso la enojaba, apretó los labios y se quedó mirando a la menor que seguía riéndose, rodó los ojos. "¡Ya! Dime de qué te estás riendo". Ella también quería reírse, no estaba siendo justo en lo absoluto, hizo un mohín y se cruzó de brazos, no entendía por qué no le decía lo que sucedía.
"Quiero que sientas lo que yo sentía cuando te reías de mi porque Chaeyoung desaparecía mágicamente". Minatozaki borró la pequeña sonrisa que se formó cuando Mina dejó de reír, eso no le estaba causando nada de gracia, es más la quería matar por lo que acababa de decir, ya entendía lo que sentía y se arrepentía de haber sido tan mala persona pero es que cuando le pasaba a la pelinegra era gracioso, obviamente porque no estaba sintiendo la desesperación y el enojo porque mágicamente desapareció la persona que iba a buscarla para pasar un buen día juntas, es que ya no podía más la quería llamar pero siempre su orgullo era más fuerte además de que no la quería molestar porque sentía que si la llamaba eso haría.
Momo era alguien demasiado ocupada así que de seguro tuvo un contratiempo y no pudo explicarle así que no le quedaba de otra más que ver otra película y esperar que Hirai estuviera bien, que era lo más probable porque le prometió que se cuidaría, la pelinegra es alguien de palabra es incapaz de romper una promesa así que todo estaría perfecto.
Desvió lentamente la mirada y sonrió en grande al escuchar la bocina de ésta.
"Por fin". Se levantó feliz. "En tu cara Myoui". Le sacó la lengua y cerró la puerta.
"Es la mejor película que he visto". Musitó la pelinegra super impresionada, al entrar a la sala no tenía muchas esperanzas ya que no es de esa clase de películas, detesta el romance desde que tiene uso de razón, no es de esas románticas empedernidas pero Sana si así que ella iba a complacerla en todo, lo que no sabía es que sería una de esas historias que se quedan en tu corazón de por vida, Minatozaki la miró de reojo y sonrió en grande.
"Te lo dije, lo que actualmente se considera como romance es más tóxico que otra cosa pero...a veces salen ésta clase de películas, que se podría decir que es más basada en las películas románticas antiguas y son una obra de arte". Suspiró y miró a lo lejos. "Te lo dije, sabía que te iba a gustar". Sonrió en grande y la tomó de la mano, como le encantaba estar así con la persona que le gusta, encontró a alguien perfecto que encaja con ella como si estuvieran destinadas a estar juntas, no creía mucho en eso pero había veces en las que si, como ahora, ya que se da cuenta que consiguió a alguien que se podría considerar perfecto.
"Tienes buenos gustos no lo puedo negar". Movió los hombros, enseguida se dio cuenta a lo que se refería y quiso reírse pero no lo hizo porque ella estaba muy de acuerdo, Momo era realmente hermosa y todo el mundo estaba al pendiente de ella, es más desde que llegó al cine se da cuenta de las miradas que Hirai se roba y los suspiros que provoca el todas las personas, tanto chicos cómo chicas y eso la incómoda.
Siente que nunca hará que alguien se sienta así por ella y le preocupa que en algún momento Momo se canse de ella y la cambie por alguien que es mejor, porque tiene para donde escoger, demasiadas chicas parecían estar esperando su momento para acercarse y pedirle el número, y aunque sabía que a la contraria no le gustaban los chicos éstos también estaban interesados, tal vez por como se vestía, era obvio que era alguien que tenía buenos gustos y su cuerpo perfectamente esculpido es lo que más atrae, ni se diga cuándo habla, lo hace con esa voz que le eriza la piel a cualquiera.
Soltó lentamente la mano de la mayor que no se dio cuenta ya que estaba pensando en que comprar para regalarle a Sana. "Como te decía que no pu-". Sana sintió como alguien chocaba contra ella y la empujaba, lo que no esperaba es que esa misma persona fuera tan ágil como para acomodarse y poner la mano en su espalda baja, abrió los ojos como platos al darse cuenta que estaba tan cerca del rostro ajeno, una chica preciosa, con ojos rasgados, piel suave y pálida, una nariz perfecta y unos labios finos que formaban una sonrisa, demasiado atractiva.
Queria hablar pero estaba tan hipnotizada que no le salían las palabras, lo único que hacía era balbucear, Momo quien veía toda la escena desde un punto de vista más "personal", para no decir celoso, se cruzó de brazos y esperó cuánto tiempo Sana recordaba que estaba con ella y no con aquella enana que seguía muy cerca a su gusto de la menor, se mordió la lengua y rodó los ojos cuando la acomodó, se percató de que la mano de la chica seguía en la espalda baja de Sana, apretó los dientes y volvió a rodar los ojos.
Parecía escena de KDrama, no le estaba pareciendo entretenido verlo, cuando era a través de una pantalla no pasaba, hasta se emociona cuando por fin había interacción, de ese estilo, en los protagonistas, pero ahora se daba cuenta que vivirlo, solo que no ser ninguno de los protagonistas, no era tan agradable con pensó que sería si llegaba a ver una escena como esa, ni siquiera le parecía gracioso, no había una pizca de gracia en lo que estaba pasando frente a sus ojos, es que quería separarlas pero se estaba controlando porque sin fin y al cabo no son novias.
Y aunque lo fueran tampoco haría nada esperaría que Minatozaki se diera cuenta de lo que estaba pasando.
"Gr-gracias". Ésta agradeció mientras se apartaba, por fin se dio cuenta de su presencia dio un paso hacia delante pero la chica también lo hizo ganándose la total atención de Sana, es que estaba segura que habían ventiladores cerca porque el cabello de la pálida se movía, miró a todas partes.
"Discúlpeme". La tomó de la mano y depositó un tierno beso. "Mi nombre es Kim Dahyun". No me había preguntado, estaba gritando por dentro.
"El mío Minatozaki Sana". Lo único que faltaba es que dijeran algo que pareciera de KDrama y así ya se iría enojada al auto porque es insólito, solo le pasan esas cosas a ella.
"Un gusto". Dijeron al unísono y se sonrieron, ya había tenido suficiente se dio media vuelta y se fue a la camioneta, ella, no estaría aguantando ésto era demasiado difícil de ver.
Apretó los puños y se dio cuenta de algo, que realmente estaba en peligro porque la belleza de Sana no era normal, nunca había visto a una chica tan hermosa como ella así que si quería la podría cambiar por quién quisiera porque de seguro tenía para escoger y eso le dolía, porque la verdad es que no se consideraba alguien tan importante e interesante.
Siguió y siguió caminando hasta que entró a la camioneta, pegó frente en el volante. "Tonta Kim Dahyun". Pegó un brinco al escuchar la puerta abrirse, miró de reojo a Sana, esta se sentó y sonrió.
"¿Ocurre algo?". Negó con la cabeza sin mirarla a los ojos. "Es que me dejaste sola y yo no sabía que te habías hecho". No fue un reclamo pero se escuchó como uno, suspiró y se acercó para dejar un pequeño beso en los labios ajenos. "No seas inmadura Momoring que tú eres la única que me gusta".
Me había olvidado de la historia, a veces me pregunto.
¿Que hice para merecer ser tan pendeja?.
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