Todos en la mesa se encontraban en silencio de la sorpresa, ninguno se atrevió a decir una sola palabra sobre lo que acababa de pasar, pero Stolas yacía en estado de pánico, tenía miedo de ver la mirada úrica de su padre por haber derramado un costoso vino sobre la comida, quiso darle un merecido golpe a Andrealphus, gritarle a todos en el comedor lo que le hacía, que el tenia la culpa, pero nuevamente, el miedo lo hizo callar, miedo a las consecuencias que tendría por revelarse, a que nadie se pusiera de su lado o le creyera.

—Hijo— rápidamente levantó la mirada al oír la voz de Paimon, sus ojos se cruzaron, no se veía enojado, no tenía ninguna expresión en su rostro —Ven conmigo, voy a ver si no te has lastimado— dijo con una calma que le transmitía terror, claro que no estaba preocupado por el, solo no quería hacer un escándalo en público.

En silencio salió del comedor junto a Paimon, quien cuando ya se encontraba fuera de la vista de todos, lo agarró del cabello todo el camino hasta su oficina, que se encontraba un piso arriba, su hijo se quejaba por el dolor, sin tratar de frenarlo, pues si trataba de oponer resistencia le iba a dar un castigo mas severo del que ahora tenía en mente.

—¡Eres un maldito estúpido!— le grito mientras lo arrojaba dentro de la habitación, su cuerpo se estrelló contra el escritorio de madera de su padre, botando algunas cosas por el impacto —¡¿Sabes cuanto me costo esa botella?! —

—¡Lo siento!— quiso cubrirse de los golpes que lanzaba a puños, pero estos llegaron con rapidez a su rostro y torso, volvió a tomarlo del cabello para que lo viera directamente.

—¡Tus putas disculpas no me sirven de nada! ¡¿Quieres dejarme en ridículo?!—

—¡N-No, claro que n...— antes de que pudiera terminar, recibió una cachetada en la mejilla derecha, devolviendolo al piso.

—Ahora te quedas encerrado sin comer, y agradece que no te hago limpiar toda la porqueria que causaste abajo— lo dejo ahi solo, llorando, mas que por el dolor que sentía, por la humillación que acababa de vivir, quedo acostado hecho bolita en el frío piso de la oficina. Solo quería desaparecer y reaparecer en algún lugar donde nadie lo lastimara mas, poder ser libre, ser el mismo, sin esconderse detrás del miedo que fue acumulando a lo largo de los años, esa era una hermosa fantasia que nunca se iba a cumplir.

—Joven— oyó la voz de su mayordomo en la habitación, él traía un botiquín en la mano mientras se acercaba a Stolas, no pudo decirle nada mas que dejarse curar los golpes que Paimon le habia propinado, el anciano lo trató con tanta delicadeza, como si fuera lo mas preciado para él, pero sentía como una basura, que no merecía tener compasión.

—Soy un idiota Alfred—

—Jamás vuelva a decir eso joven Stolas— levantó su rostro para revisar los golpes, tenía un ojo golpeado que seguro mañana estaría morado, el pómulo igual y la mejilla aun se encontraba roja, limpio las lagrimas que derramaba por la tristeza, por su parte se encontraba impotente por no poder hacer nada para protegerlo de su propio padre, de todos los que se creían dueños de esa casa, pero lo unico que podia hacer ahora era consolarlo —Usted es quien está libre de culpas aquí, ellos deberían sentirse como una basura por todo lo que le hacen— el solo atinó a abrazarlo, intensificando su llanto, simplemente necesitaba desahogar sus emociones reprimidas.

—G-Gracias Alfred—

El mayordomo lo ayudó a levantarse, sin importarle que a esa edad no debía hacer esfuerzos, acompaño a Stolas a su habitación donde podría ver que otras lesiones le habia causado su padre, una vez ahi, lo sentó con cuidado en la cama mientras el joven se desabrochaba la camisa revelando unas marcas rojas en sus hombros y abdomen, estas también estarian moradas a la mañana siguiente, rapidamente el anciano se dirigió a la cocina para tomar algunas bolsas de hielo, esto le ayudaría a bajar la inflamación en sus futuros moretones. Stolas solo se dejo curar en silencio, no se quejo ni cuando el frio se poso en su piel, espero a que terminara para colocarse una pijama y quedarse arropado en su cama.

Se quedó haciéndole compañía a un costado de la cama hasta que los invitados se fueron, el joven ya habia caído dormido del cansancio, cubrió su cuerpo hasta sus hombros para que no pasara frío durante la noche, y salió de la habitación en silencio, no sin antes cerrarla con seguro desde dentro por seguridad. En medio de la obscuridad, camino por los largos pasillos de la casa intentando ser lo mas discreto posible para que nadie se diera cuenta de su presencia, paró cerca de la habitación de Stella, viendo que se encontraba desmaquillandose, esto no le importaba y siguió su camino hasta la oficina de su jefe, la cual tenía las luces prendidas, a medida que se iba acercando pudo escuchar también la voz de Andrealphus dentro, no sabia de que estaban hablando en el momento, pero si que esa conversación podría ayudar en un futuro, así que saco un celular para empezar a grabar todo. "Vas a pagar por todo, Paimon".

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—Entonces ¿Striker ya te dio las respuestas?—Blitz se encontraba trapeando el piso de la comisaría junto a Moxxie, hace días que no habían tenido oportunidad de conversar adecuadamente porque al igual que el, debía estudiar para los exámenes de su carrera, y además, sus tiempos libres se los dedicaba a su novia Millie, si, ya habían oficializado su relación de pareja a todos sus conocidos.

—Sip, solo que me dijo que siga teniendo tutorías con Stolas para que nadie sospechara— dijo sin darle mucha importancia o eso trataba de aparentar, pues esa sensación de culpa aun no habia desaparecido.

—Vaya, ese sujeto sí que cumple con su palabra y no pide mucho a cambio— Moxxie no era tonto, de inmediato se habia dado cuenta de cómo se sentía su amigo, lo tenia escrito prácticamente en la cara por mas que tratara de negarlo, estaba empezando a sentir algo por su tutor y era por eso que estaba con ese pesado sentimiento de culpa —¿Oye alguna vez fuiste sincero con tus sentimientos o algo asi?—

—Mox no nos pagan por hablar— se alejó de su amigo lo mas que pudo, odiaba tocar ese tema sobre el, aunque era mas como un mecanismo de defensa para el, si mantenía lo que sentía oculto entonces nada podría salir mal, no como veces anteriores, "Pero joder, esta vez es mas difícil" pensó con la cara de Stolas en mente, mientras mas dias pasaba a su lado, mas deseaba que esa hora del almuerzo nunca se acabara, si pudiera decir solo una cosa que le haya gustado de el, seria su voz, cuando le explicaba los temas, podia quedarse ahi mismo escuchándolo todo el dia por lo relajante y melodiosa que era, de verdad si pudiera grabarla y reproducirla cuando no estuvieran juntos, seria el mas feliz, pero no quería parecer un psicópata.

"¿Pero que? ¡Mierda concentrate! Piensa que es como cuando estuviste con Verosika", sin embargo, ella no le llegaba ni a los talones, en ese año de relación que tuvieron, ninguno de los dos mostró un verdadero interés por el otro, parecía que simplemente les gustaba pasar el rato juntos yendo a las fiestas, gastando plata y teniendo sexo, no conversaban sobre cómo se sentían, o si les gustaba su noviazgo, todo era por conveniencia. En cambio Stolas no quería ni esperaba nada de si mismo, mas que aprendiera en las clases que tenían, se preocupaba si le pasaba algo como cuando se cayó o le dijo que no habia comido "¡Ya, suficiente de estos putos sentimientos! Lo único que debo hacer es aprobar y es lo que hare".

Inconscientemente terminó al frente de la oficina donde trabajaba su amiga Charlie, quiza podria hablar un poco con ella y así disipar la culpa que tenía en su pecho, pero justo cuando iba a abrir la puerta, de ahi salio un tipo gordo cargando un montón de papeles desordenados, mientras hablaba por teléfono con alguien.

—Eh, disculpe— se trataba del jefe de su amiga, cuyo nombre nunca se memorizo pero era el viejo mas cascarrabias que habia conocido hasta ahora.

—Esperame, ¿que quieres conserje?— le preguntó con desdén.

—Solo queria saber donde estaba Charlie—

—Esa perra "se fue a visitar a su papi" y ahora no tengo a nadie que me ordene estas mierdas, bueno ya largate a limpiar o algo— dijo volviendo a su conversación por teléfono, a Blitz no le pareció nada graciosa la forma en la que se expreso, asi que solo se quedo ahi mirando hasta que el señor aterrizó en el suelo que acababa de trapear.

—Ups, olvide poner el cartel de piso mojado— se alejo lo mas rápido que pudo para no recibir un regaño.

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—¿Y? ¿Como me veo cariño?— le pregunto Angel a su novio, ambos se encontraban en una tienda de ropa donde el mas alto se probó muchos conjuntos hermosos.

—Mon Angel todo lo que te pones te queda espectacular, pero ¿por qué tanta insistencia esta vez? ¿Ha pasado algo?— se acercó para tomarle las manos, esa ultima semana habia notado que su novio estaba distraído por algo, pero decidió darle su espacio hasta que el decidiera contárselo, al menos hasta ahora al ver la forma tan maniática en la que se cambiaba de ropa al notar la mas minima imperfección en esta.

—Ah... De hecho si, estoy muy nervioso por la audición para Ozzie's, quiero que todo salga bien, mi baile, mi canto, mi imagen, tiene que estar perfecto si quiero que el me elija entre los candidatos— la famosa compañía de entretenimiento habia lanzado unas audiciones en todo el país para encontrar a su próxima estrella, era una oportunidad que Angel no podía desperdiciar, siempre habia querido ser parte de esta.

—Querido, si alguien ya tiene el primer lugar ganado, ese eres tu mi arañita, pero siento que hay algo mas que te atormenta— Alastor lo conocía muy bien, a su novio nunca le habían dado miedo tales retos, puede que este sea el mas grande hasta el momento al tratarse de la posibilidad de volver realidad uno de sus sueños, sin embargo, era otra cosa y el motivo principal por el que estaba asi.

—Eres un brujo amor—

—Puede que sí, pero este brujo te ama, y por eso, quiero que me digas, que mas hay en esa cabecita tuya— Angel río suavemente.

—Si, hay algo mas, estoy muy preocupado por Stolas, no se de que forma ayudarlo para que pueda vivir una vida mas normal, quise hablar con Charlie pero ella se ha ido de viaje, así que por el momento estoy perdido— entre eso y sus ensayos para la audición habia perdido la oportunidad de hablar con su amiga, ademas que tampoco habia visto a Stolas en todo ese tiempo, pero aun asi sentia que debia hacer algo para que su amigo se liberara de la tiranía de su padre.

—¿Quieres que le diga a Rosie? Puede que no sea de la misma rama que Charlie, pero es una psicóloga con mucha experiencia— en ese momento a Angel se le prendio el foco, no habia pensado que su misma psicóloga también podría guiarlo en su misión, pensó que alguien que se dedicaba de lleno al trabajo social seria la mas indicada.

—¿Harías eso por mi? No quisiera preocuparte a ti tambien bebé—

—Cariño, tu nunca seras una molestia para mi, y cuando vuelvas a tener un conflicto así puedes decirmelo para juntos encontrar una solución— Angel no pudo evitar darle un beso en los labios a su amado, estaba agradecido por tenerlo en su vida, pues habia llegado en un momento oscuro de esta donde se sentía perdido —Por cierto, el vestido dorado de lentejuelas fue mi favorito—

—Entonces ese es el que voy a comprar— después de pagar este y algunos otros accesorios, la pareja salió de la tienda tomados de la mano, Alastor lo acompañó hasta la puerta de la casa que compartía con otra persona. Se dieron un ultimo beso de despedida antes de que este entrara para ser recibido por su fiel cerdito mascota —¡Nuggsy te extrañe mucho!— dijo levantándolo en el aire.

—¿Angie eres tu?—

—¡Cherry!— gritó entusiasmado —Que milagro verte aquí a estas horas—

—Oh mi ensayo no fue tan largo, pero que bueno que estas aquí para pasar una merecida noche de chicas— dijo la chica mas bajita que él mientras le daba puñitos en el pecho.

—Jajajajaja, saca el vodka mientras pido las pizzas— ambos se fueron corriendo a hacer sus deberes. Desde hace semanas no habían tenido oportunidad de pasar tiempo juntos, pues Cherry ahora estaba en la producción de su primer disco, seguido de su primer concierto en un pequeño local, pero aun así era algo con lo que siempre habia soñado y Angel la apoyaba en todo lo que podía, por su lado, Cherry también hacía lo mismo por el, cada vez que debía ir a una sesión de fotos iba en compañía de su fiel amiga que lo ayudaba a vestirse y maquillarse. Y su Fat Nuggets se escapó al jardín que tenían para escarbar otro hoyo en la tierra.

A las 10 de la noche ya se encontraban en la habitacion de Angel, empijamados y comiendo mientras se reproducía una serie de moda en la television, la escena era como la típica de las películas, con ambos con una mascarilla en la cara, riéndose de lo que veía en la pantalla.

—¡Oh vamos! ¿En serio esperaba que no se dieran cuenta que la obra se trataba de ellas?—

—¡Yo la hubiera dejado calva frente a todos!— comentaron riéndose de las escenas.

—Miralas, peleándose por un tipo—

—Es medio guapo, pero bueno, lastima que no todos pueden ser como nosotros ¿no Angie?—

—Estas en lo cierto tetas de azúcar, y hablando de chicos, ¿como te fue en la cita esa a la que fuiste?— le preguntó poniendo pausa a la serie.

—Ahg, no te mentire, parece que estoy maldita o algo asi porque resultó ser otro imbécil que se la paso mirando mis tetas durante la cena y aun así esperaba que lo siguiera a un motel— dijo frustrada al recordar ese desagradable incidente, aunque ya estaba acostumbrada a ello, por eso es que el tipo terminó en el piso retorciéndose por el gas pimienta que le arrojó a la cara.

—Oh mi Cherry, te entiendo mas que nadie, espero que le hayas dado su merecido a ese cabron—

—Jajaja claro que si, pero igual, no se por que solo me tocan ese tipo de hombres, ¿acaso no hay alguno decente por ahi?—

—Mira, puedes hacer dos cosas, la primera, ¡Disfruta tu soltería! y lo segundo, desinstala esa aplicación de citas y empieza a conocer gente de otro lado—

—¿Ah si? ¿Y en donde?— la primera opción que le dijo su amigo ya le habia durado casi cinco años desde una ruptura tormentosa con su ex, lo de la aplicación de todos modos lo iba a hacer por la cantidad de idiotas que le habían tocado.

—Pues en la universidad, no digo que el cien porciento sean un buen partido pero tal vez ahi encuentres alguno mejor que los pendejos anteriores—

—Mmmmmm lo pensare Angie ¿Quieres una sesión de karaoke?— dijo levantandose de la cama.

—¡Claro!—

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Blitz habia pasado las dos semanas faltantes para sus examenes de forma mas relajada, aunque no habia podido ver a Stolas en todo este tiempo pues el le habia escrito diciéndole que se iba a ausentar por un fuerte resfriado, si no tuviera las respuestas de sus exámenes habría entrado en desesperación por la falta de su tutor, simplemente le mando un texto deseándole una pronta recuperación pues aún tenían una platica pendiente.

Siguiendo lo que Striker le dijo, se "equivocó" en algunas respuestas, también cambiando palabras para que los profesores no se dieran cuenta ni sospecharan que estaba haciendo trampa, aunque siendo sinceros, estaban en la universidad, ya a nadie le importaba eso porque eran adultos todos, y estaba seguro que el noventa porciento de los profesores solo estaban hay por el sueldo, pero no importaba, esto le favorecía. La prueba final sería cuando le dieran los resultados, a ver si su plan era un éxito o un fracaso. Esa tarde saliendo de las clases decidió que se merecía un descanso después del estrés.

—¡Hola hola M&M!— saludo a sus amigos interrumpiendo nuevamente un momento romántico de la pareja.

—¡Maldita sea Blitz! ¿Esto será tu nueva costumbre?— le grito Moxxie.

—Jajaja tranquilo cariño no es tan malo— dijo Millie acariciando el rostro a su novio, provocando que este se pusiera aun mas rojo.

—Iugh hay público presente tortolitos, pero a lo que venía ¡Tenemos que celebrar en un club o algo!—

—¿El que?—

—Me habia olvidado que eras un aburrido Moxx ¡Que hemos terminado los parciales!— grito llamando la atención de quienes estaban al lado de ellos —¿Se les perdio algo?—

—Suena divertido ¿Podemos ir Moxxie?— a Millie realmente le gustaba salir a fiestas a bailar de vez en cuando, algunas de sus citas se trataban de eso.

—No lo se, Blitz estaría haciendo mal tercio con nosotro—

–Oh por mi no te preocupes, invite a Striker para beber mientras ustedes celebran su aburrida monogamia— dijo mientras sacaba su celular para escribirle al mencionado sobre la salida.

—Mmmm pense que despues de esto no volverias a hablarle—

—Ay Moxx, sabes que lo necesitare quizá en un futuro, además me cayó bien, parece buen sujeto— miro nuevamente la pantalla encontrándose con un mensaje de Striker confirmando su asistencia.

—Sigo pensando que hay algo extraño con el— realmente Moxxie estaba preocupado por la confianza que le tenía su amigo a ese desconocido, las circunstancias en las que se conocieron se sintió como si estuviera todo planeado para que este llegara a ser el "salvador" de Blitz, si bien este dijo que nunca lo habia visto en su vida, por el lado de Striker sí parecía que lo conocía, sino como hubiera sabido que le estaba yendo mal en los cursos, y por pura coincidencia este tenía acceso a las respuestas de los exámenes, decidiendo ayudarlo asi sin mas.

—No te comas la cabeza en eso amor, que tal si me acompañas a... Ver qué me pongo— dijo en tono coqueto, haciendo que su novio se estremeciera.

—Ok esto se esta poniendo horny, saben que yo los dejo en su pequeño paraíso— y se alejó de la pareja.

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Vaya si que es un milagro que actualice tan pronto, algo esta pasando, pero en fin, espero que les haya gustado el capitulo de hoy, trate de no hacerlo taaaaaaaaaaaaan dramatico, pero eso no significa que no habra drama mas adelante, no no no no no, esto no es nada a comparacion con todo lo que va a pasar mas adelante. ¿Quien mas quiere matar a Paimon? Pues no sera a el el unico al que quieran matar, esperen, eso ya lo puse en algun momento, pero si, van a querer matar a muchas mas personas.

MIK.