El amor no lo puede todo.

Para Taehyung, los días en el hospital son cada vez más largos, casi como sí el tiempo en sí mismo se congelase sin que él pueda evitarlo.

Las noches son frías e incómodas, su cuerpo tenso mientras intenta conciliar el sueño sobre el pequeño sofá del rincón porque a la mañana siguiente debe ir a la biblioteca a trabajar un turno doble. Sin embargo, lo peor de todo es el silencio que apenas es roto por los pitidos incomprensibles de las múltiples maquinas que rodean el cuerpo de Joon Seok, quien es incapaz de hablar y comer debido a su mandíbula fracturada.

Pero sus ojos, su mirada no le deja en paz.

Taehyung la siente sobre él mientras se mueve por la habitación, cada vez que le cambia las sábanas por unas limpias o intenta hacerlo sentir un poco más cómoda en la delgada y alta cama de hospital. Siente sus ojos seguirlo cuando recibe la bandeja de comida del enfermero, Taehyung ni siquiera necesita girarse y verlo para darse cuenta de que lo está observando, su mirada pesa sobre él, casi como una condena.

Ha intentado conectar con él, acariciar sus manos con cariño y contarle las pocas cosas interesantes que pasan en su ya de por sí monótona vida: todo se resume a la biblioteca y sus horas en el hospital, dedicado por completo a Joon Seok y una recuperación que se ve demasiado lejos para ser real. Los médicos ni siquiera están seguros de que sus funciones motoras y cognitivas permanezcan intactas tras el profundo trauma craneoencefálico, sin embargo, eso es algo en lo que Taehyung prefiere no pensar.

Toda la vida estaré atado a ti, a ayudarte porque soy responsable por esto.

Con cada hora que permanece acurrucado en el sofá, con los ojos fijos en la figura estática de su novio, Taehyung sólo puede rememorar lo qué han sido las últimas semanas, como terminó por romper definitivamente con cualquier lazo que tenía por fuera de esa habitación, incluso siendo incapaz de llamar a su madre y a su hermana, incapaz de decir en voz alta el por qué Yoongi atacó a Joon Seok de esa manera.

Es mi culpa, mía...

Sí ni siquiera es capaz de enfrentar a su familia, mucho menos podría ver frente a frente a quienes fueron sus amigos en el pasado, ¿cómo podría hacerlo luego de declarar a la policía que Yoongi los había atacado injustificadamente? ¿cómo podría hacerse responsable de haber dicho que no sabía el por qué las cosas se habían dado de esa forma? Taehyung había sentido las palabras pujar en su garganta, sus manos sudar por la necesidad de decir en voz alta todo lo que llevaba viviendo durante ese último año, pero no podía.

No podía traicionar de esa forma al hombre que tanto le ama, alguien tiene que entenderlo.

.- La señora Cho me regaño porque la clasificación de libros estaba mal – cuenta con voz suave, su cabeza sobre apoyándose sobre la camilla y las yemas de sus dedos acariciando suavemente el brazo de Joon Seok, los ojos de su novio permanecían cerrados desde hace rato – Pensé que eso te tocaba a ti, amor... pero no te preocupes, seguro se te olvido y yo lo hago con mucho gusto.

El silencio se extiende pronto, como suele suceder cuando se queda sin cosas que contar o sus pensamientos regresan a aquella última vez en que vio a Jungkook. No sabe bien cuántos días han pasado ya, lo único de lo que es consciente es de todas las veces en el día en que se frena a sí mismo de buscar el menor por su cuenta, de lo mucho que se repite que no debe hacerlo porque Jungkook está mejor manteniéndose fuera de lo desastrosa que es su existencia, porque él está mejor sin ilusionarse por un amor imposible al lado del menor.

Sin embargo, sus pensamientos terminan desviándose a su rostro, sus ojos brillantes y sus últimas palabras, aquella sentencia que parecía irrefutable: todo ha terminado para ellos.

.- ¿Puedo pasar?

La voz no suena demasiado alta, pero le toma por sorpresa y consigue que se sobresalte en su lugar, su cabeza alzándose en dirección a la puerta abierta de la habitación. Por un instante quiso pensar que era un enfermero, sin embargo, fue el rostro sonriente, pero incómodo de Kim Namjoon el que le mira desde ese lugar.

No ha visto al mayor desde meses atrás, cuando cortó lazos con quienes fueron parte de su grupo de amigos más cercano durante años, por lo que le resulta extraña la imagen frente a él. Namjoon lleva un portafolio en la mano y va vestido tan formal que Taehyung se siente en medio de algo demasiado formal. ¿Qué hace Namjoon en el hospital, en la habitación donde su novio se recupera? La respuesta llega de inmediato, casi sin tener que pensarla.

.- ¿Vienes en calidad de abogado, hyung? – pregunta cauteloso, irguiéndose en la silla de plástico en la que ha estado sentado las últimas horas – Dudo que vengas a ver cómo está Joon Seok... lleva semanas aquí y nadie ha venido a verlo, no más que sus padres.

Namjoon no se muestra afectado por la evidente acusación y eso no le sorprende a Taehyung. El mayor siempre ha sido sincero con sus afectos y opiniones, siempre directo en que Joon Seok no era ni sería nunca alguien que le importase, ni siquiera lo suficiente cómo para dirigirle un saludo amable. Taehyung lo sabía desde siempre, una de las tantas razones de las que se había valido su novio para argumentar que sus amigos no deseaban nada bueno para él, mucho menos su felicidad.

.- Así es, vengo como abogado – Namjoon responde con calma, aquella que es controlada y pausada, sus pasos resuenan en la habitación mientras entra – Debo hablar contigo.

Taehyung reniega, no desea saber nada sobre cómo va la investigación contra Yoongi ni por qué necesitaría un abogado: .- No creo que debamos, no tengo nada qué decir sobre lo qué pasó con Yoongi. Soy una víctima y...

.- Min Yoongi no es mi cliente – le corta Namjoon, dedicándole una sonrisa tensa – Tú lo eres, bueno, sí me aceptas.

La sorpresa y la confusión se reflejan momentáneamente en sus gestos, los mismos que se transforman en molestia con rapidez: .- ¿Por qué necesitaría un abogado? ¡He dicho que soy una víctima de esto!

.- Estás siendo denunciado por difamación – la contundencia de su voz le abruma, incapaz incluso de notar cómo el mayor le tiende un sobre cerrado con el logo de la fiscalía de Seúl y su nombre en él – Yoongi no será acusado mientras no se defina lo qué sucede con Joon Seok. Sí sobrevive, él podrá interponer la denuncia. Pero Yoongi, mientras tanto, te denuncia a ti por decir que cometió el ataque sin razón aparente y argumentar que es peligroso para estar en sociedad.

.- Eso no... no es posible. ¡Yo sólo dije lo que pasó! – sus piernas se movieron automáticamente, impulsándolo a levantarse mientras se revolvía el cabello - ¡¿De dónde sacó Yoongi que podía denunciarme?! Yo... no entiendo.

.- La familia Jeon le ha dado todo su apoyo económico y legal, salió bajo fianza hace dos días y supongo que fue una opción dada por su abogado – Namjoon se encoge brevemente de hombros – De parte de la familia Jeon y por decisión de tu madre, asumiría yo la defensa de tu posición. La realidad es que Yoongi está pidiendo que vayas a rehabilitación.

.- ¿Reha... rehabilitación? ¡¿Por qué rayos iría yo a algo como eso?! – su voz sube de tono, volviéndose más grave mientras las lágrimas se acumulan de pronto en sus ojos – Ahora soy un drogadicto o algo así, ¿verdad?

.- No creo que Yoongi se refiera a eso en su denuncia – es todo lo que dice el mayor, bajando lentamente la mano que sostenía el sobre – Creo que se refiere a que necesitas ayuda y que no deseas buscarla.

.- Yo no necesito ayuda de ningún tipo, ¿por qué no lo entienden? – se cruza de brazos, evitando gritar todo lo que se acumula en su mente – Ustedes no me entiende, no me conocen. ¿Cómo pueden creerse con el derecho de decidir sí necesito ayuda o no? ¡No la necesito!

Namjoon no responde a sus palabras, pero un gesto de desacuerdo cruza su rostro a la vez que sus ojos se desvían a Joon Seok, que ha abierto sus ojos y le observa fijamente desde su lugar en la cama, incapaz de decir lo que seguramente sería un discurso lleno de palabras desagradables: .- Tu madre está abajo, quiere verte.

.- ¡Pues yo no quiero ver a nadie! – es su respuesta inmediata, sintiendo todo su cuerpo temblar por la frustración que le recorrer – Que se vaya y vete tú también. ¡Lárguense! Lo único que quieren es hacerme infeliz.

La única respuesta de Namjoon a sus palabras es negar con la cabeza: .- Aquí está la notificación de la denuncia. Sabes dónde contactarme para que hablemos de tu caso.

Taehyung está por gritarle de nuevo para cuando el mayor ya está de nuevo en la puerta de la habitación, una enfermera a unos pasos mirando con confusión producto de su tono demasiado alto que ha alertado a quienes estaban cerca. Sus ojos se inundan incluso más en lágrimas, todo su cuerpo tenso por la tormenta que le acecha en el pecho. ¿Por qué ke hacen esto? ¿Por qué no lo dejan simplemente en paz?

.- Tae... - la voz del mayor toma un tono amable, lejano ya del tono profesional que mantuvo todo el momento dentro de la habitación, sus ojos lucen una mirada cariñosa, con una preocupación casi palpable – Nunca te he dicho esto y lamento hacerlo tan tarde, pero debes entender, Taehyung, que el amor no lo puede todo.

.- ¡Largo! ¡Déjame en paz!

Las lágrimas se derraman entonces, incontenibles mientras cae de rodillas al suelo, su mano sosteniéndose con esfuerzo de la barandilla final de la camilla. Siente su pecho subir y bajar con esfuerzo, sus hombros pesados como si cargase con algo inconcebible y, por un momento, piensa que es así, piensa en que lleva mucho tiempo cargando con un amor demasiado doloroso, que le ha dejado demasiadas heridas físicas y que ahora, descubre con tristeza, también lo ha herido emocionalmente, casi tanto como una vez sufrió por un amor unilateral hacia Jungkook.

Pero sí el amor no podía con todo, ¿cómo seguir viviendo, a qué podría aferrarse para no desmoronarse? 

Hola a todos, 

Uff, me tardé un poco en volver, pero la verdad es que estaba finalizando la planeación de esta historia y me he dado cuenta que falta muy poco para llegar a los últimos capítulos. Es difícil porque realmente quiero ser justa con todos los personajes, así que quiero ser muy cuidadosa con lo que se viene a partir de este momento. 

Como sea, ¿qué les pareció el capítulo? 

Estaré encantada de leer todas sus opiniones. 

Nos vemos pronto, mucho amor para todos.