La briza mañanera y el sol diurno me hacen moverme por la cama, derecha... Izquierda... Derecha. El quejido de Boscha no me incomoda pero me hace recordar que ella está soportando mis movimientos irregulares a la fuerza. Finalmente me digno a quedarme en la izquierda, abro los ojos y lo primero que encuentro es a una desnuda Boscha. Cada parte de su cuerpo pareciese brillar por la luz solar.

-<Hace un año era virgen>- pensé apenada mirando de nuevo el cuerpo que tantas veces toque en la noche

La puerta fue tocada con calma, se entre abrió. Apenas unos centímetros y una risa corta como cansada se escuchó.

-El desayuno esta lista niñas- dijo la abuela de Boscha con el tintinar de unas llaves, cerró la puerta y se fue riendo por el camino. Apenada me gire para despertar a Boscha

-Boscha, vamos despierta- sin respuesta –Vamos cariño... Hay desayuno, comida-

-¿Me quieres vender el desayuno?- se quejó con pereza -¿No podemos solo dormir más, las dos juntas?-

-¿Más?-

-No me refiero a eso-

Boscha se sentó, froto sus ojos y me miro. Se quedó en ese estado por un buen rato y de poco en poco su rostro se enrojeció hasta el punto de parecer enferma.

-Lo hicimos ayer- siseo acostándose de nuevo –Tú y yo... Las dos-

-¿Eso que tiene de malo?-

-Quería que fuera más especial, preparar algo antes, no... No que nos ganase la calentura-

-Estas exagerando- reí acostándome sobre su desnudo pecho –No estuvo nada mal, bueno. No es como que tuviera experiencia antes de eso-

-No digas eso que me va a dar algo- se quejó acariciando mi cabello –Entonces, bueno... ¿Lo volveremos a hacer?-

-Apenas va a ser el desayuno Boscha-

-No ahora, no, no-

-Primero vamos a vestirnos, desayunamos y veremos si nos matan-

-Buena idea- beso mis labios y ambas nos paramos en busca de nuestra ropa

....

Ahí están todas. Cath mira la televisión como si nada pasase a su alrededor, de hecho. Se nota un poco más infantil de lo que recuerdo, posiblemente sea por la llegada de la señora Patterson. La abuela de Boscha comía pero al vernos una sonrisa maliciosa fue dada por ella y la madre de Boscha... Ella solo nos miraba. Daba un bocado y nos volvía a mirar con seriedad.

-Buenos días- saludo Boscha con pena en su voz -¡Waffles! Que bien-

Ambas nos sentamos, tomamos algunos Waffles y nos dispusimos a comer o eso pensábamos antes de que la Señora Patterson hablase:

-No sé desde que hora empezaron a hacer... Eso- y nos señaló a las dos con un tenedor

-Mamá...- siseo Boscha apartando la mirada de mí con vergüenza

-En la madrugada fui por agua y no sé quién era, realmente no quiero saber. Pero una de ustedes estaba no gimiendo sino gritando-

-Puede que era Boscha-

-¡Luz!-

-Para la próxima sean más silenciosas, no por nosotras sino por ella- y la mamá de Boscha señalo a Cath –Lo bueno es que tiene sueño pesado-

Comencé a reír por todo esto, me parece cómico que en el desayuno estemos teniendo este tipo de conversaciones como si fuese lo más normal del mundo. Boscha se rindió y solo le da mordiscos a su Waffle.

-Yo también fui joven alguna vez- llamo la abuela de Boscha levantándose de su asiento –Pero incluso yo sabía en qué momentos era mejor el guardar silencio-

-Dios... Jamás van a dejar de atormentarnos con esto-

Después del desayuno me senté al lado de Cath para continuar mi historia, escribía en el celular ante la atenta mirada de la chica. Boscha y su mamá salieron de compras pero algo me dice que es más que eso.

...

-Esa niña- dijo mamá paseando el carrito del súper –Creo que, bueno... Algo me dice que ustedes no son solo pareja-

-No entiendo- dije metiendo pan integral al carrito de compras

-Me refiero a que ustedes son su soporte. Por lo que escuche y ella dice, Bueno. Es casi como si una no pudiera vivir sin la otra-

-¿Y eso es malo?-

-Para nada, una relación debe de ser de dos. No de uno y si mis instintos de madre no me traicionan nada. Eso es lo que tienen ustedes dos-

-... Gracias má-

-Ojala tu padrastro hubiese sido de esa manera, sé que jamás te obligue a amarlo  como otras madres. De hecho es más justo que me odies a mí-

-¡Hey!- llame molesta –Basta con eso. Lo estas intentando, yo lo estoy intentando... Es momento de parar con tanto odio personal, tomamos malas decisiones pero también está sobre nosotros el tomar las correctas-

-Es cierto- me abrazo y se quedó quieta, en mi -¿Desde cuando eres así?-

-Me gustaría decir que desde que me fui de casa, pero... Te estaría mintiendo, en realidad fue en el campamento. Es cierto que yo fui con la mentalidad de cambiar por Cath. Como también es cierto que Luz de forma directa e indirecta me ayudo... Mamá, dime ¿Cómo se siente estar enamorado de alguien?-

Mamá sonrió, se a parto de mí y apretó mi mejilla como lo hacía antes de... Todo.

-Esa es la cosa hija, no lo sabes-

-Vaya respuesta- bromee tomando unas cajas de leche –Gracias-

-No hija, gracias por decirme. Pero enserio, si la niña no miente con lo de ayer. Eres demasiado sensible-

-¡Ma!-

-Terminemos y vamos a casa-

-Casa- susurre mirando comprar a mamá –Casa....-

.....

Las calles de la ciudad lucen lúgubres, una lluvia probablemente acida cayó de forma repentina y yo. Bueno, yo estoy mirando a la gente correr de esta mientras espero a mi papá. El mensaje fue claro:

: Sé que se han visto con su hermana, debemos hablar de hombre a hombre

Suspire dando un sorbo al café que pedí, el mesero se acercó de nuevo y entre mi monotonía en la mesa y mi apetito pedí un plato del especial del día. No sé qué será pero espero sea bueno. Por la ventana vi llegar el auto lujoso, un negro pálido y pulido era la cubierta de este y el típico sello de: BMW en el frente. Papá bajo con la ayuda de su conductor y el entro al restaurant.

Me busco con la mirada y se acerco lentamente, con sus pasos decididos e incluso yo diría que terroríficos. Pero no soy el Edric que aquel entonces y no me interesa si él es el mismo viejo de antes.

-Te ves cansado- dije dejando la taza de lado y señale la silla frente a mí para que el tomara asiento –Sabes que el trabajo de más puede ser fatal-

-Como muchas cosas hijo- levanto su mano y el mesero se acercó. Pidió un vaso de agua y un filete con puré de papas y salsa -¿Qué te parece si comemos antes?-

-Alador. Te seré honesto- respondí sin apartar la seriedad de mis palabras –Cuando me llamaste estuve a nada de no responder, no mereces que lo haga como tú no necesitas escuchar mi voz. Así que solo dime ¿Qué necesitas?-

El me miro, suspiro como tanto lo recordaba cuando algo lo toma de sorpresa o sale mal. Dio un sorbo a su vaso recién llegado y junto sus manos como en cualquier negociación que le he visto hacer.

-¿Por qué has visto a tu hermana?-

-Porque nos quería ver-

-¿Por qué has incluso salido con tu madre?-

-Porque ella nos extraña-

El mesero llego con nuestros platos y me dio gracia notar que el especial es justo lo que mi padre pidió pero con otro tipo de salsa. La unte sobre el puré y un poco en la carne. Corte con delicadeza y lo lleve a mi boca.

-Delicioso-

-En efecto-

Los cubiertos sonaban en nuestra mesa. Cada uno comiendo a distinta velocidad pero a la vez tan iguales.

-Aun no apruebo tu estilo de vida, tu... Desviación, tu falta de moral y de hombría-

-¿Solo dirás eso?- cuestione de manera fría -Alador, si solo querías decirme eso. Pudiste decirlo de otra manera, tengo trabajo-

-Su negocio, cierto. He escuchado cosas buenas de este-

-¿Cómo sabes?-

Tomo agua de nuevo, se limpió la boca con una servilleta y hablo:

-Son mis hijos, sus fracasos me duelen. Pero el verlos tener éxito de la misma nada me enorgullece-

-¿Tomo eso como bueno?-

-Quiero decir que respeto la forma en la que tú y tu hermana han progresado, es de admirar sin importar el que-

-Bueno, gracias-

-También sé que Amity sale con esa vecina ¿Willow?-

-¿Qué quieres Alador?-

-Respuestas Edric... Mira, en este punto de mi vida no me interesa volver a tener la misma relación que tenía con ustedes. Pero con Amity, esa chica tiene futuro como para que yo lo destruya-

-Solo debes de dejarla en paz- comente con una sonrisa irónica –Te diré algo Alador. Cuando tú nos echaste no temía por nosotros, Emira y yo somos bandidos de la vida. Pero Amity, ese es y siempre será mi miedo- levante la mano y el mesero se acercó –El paga- me levante de la mesa y camine a la salida

-¿Y que harás si hago algo en su contra, si la echo, si le toco de la misma manera un solo cabello por ser como ustedes?-

-La respuesta se encontraba en mi mirada de hace años Alador y siempre será la misma-

-¿Y es?-

-Que olvidare que tenemos la misma sangre-

-¿Amenaza?-

-Advertencia-

.....

Alador se quedó mirando su filete, le dio otra mordida solo que esta le supo mil veces mejor a las anteriores. Miro por el ventanal como Edric subía a su auto y se marchaba de ese lugar. Quiere estar molesto, no degustar de la carne.

Pero en esos momentos solo pude sentir orgullo, del más puro que un padre siente al ver a su hijo convertirse en hombre.

-Es curioso- dijo tocando la parte canosa de su cabellera –Tiene tanto y tan poco de mí, somos iguales y diferentes- sonrío con amargura, se relajó en la silla y recordó esa noche con odio hacia el

"Sí que fue un error"