Era la primera vez que HeeSeung le mentía a su papi In. Bueno, en su defensa no era exactamente una mentira, solo estaba ocultando una parte de la verdad.

Por qué si iría a pasar el rato con Jake, pero no iría a hacer tarea. Él tenía una cita con unos de sus mejores amigos. Así que cuando las clases se acabaron HeeSeung caminó hacía Jake, quien se encontraba sentado en una de las bancas que estaban en la entrada de la escuela. HeeSeung se sentó a su lado, ganando la atención del alfa.

—Hey —susurró Jake, se encontraba igual de nervioso que HeeSeung. Este sonrió antes de mirar al piso y susurrar un hola al alfa—. ¿Seguro que tus padres te dieron permiso?

HeeSeung asintió. Pero entendía por qué Jake preguntaba, sus padres juntos, siendo serios, ceños fruncidos, si daban un poco de miedo.

Jake se levantó y le extendió su mano a HeeSeung para que la tomara, cosa que hizo antes de levantarse y ambos empezaron a caminar. Oh tal vez HeeSeung debió pedir ayuda a su padre Innie, ¿Cómo se supone debía actuar en una cita? No tenía idea de nada.

Solo sabía que Jake le había pedido muy amablemente si quería tener una cita con él y HeeSeung aceptó por que siempre pensó que Jake era malditamente adorable con su cabello negro un poco ondulado, ojos cafés que con cierta luz parecían un poco rojizos y una sonrisa tan linda con esos labios rosados y esponjosos, mostrando ademas unos lindos hoyuelos, nada especial, pequeñas cosas que se notaban solo si te concentrabas en eso y HeeSeung si que se concentraba en eso. 

—Oye tu, no quiero que nos volvamos raros por esto.—dijo Jake cuando llegaron a la pequeña cafetería. Deteniéndose frente a HeeSeung para cerciorarse que todo estuviera bien.

—Creí que ya eramos raros antes —Jake rió—. Dijiste que seríamos raros juntos, quiero que lo seamos. —sonrió y arregló el flequillo del alfa menor.

Entraron y tomaron asiento en una de las mesas más lejanas a la entrada, escondidos en una esquina susurrando secretos, el olor a tierra húmeda de Jake rodeándolos, tomando un par de malteadas y compartiendo una rebanada de pastel. Tenían catorce, apenas y tenían dinero.

HeeSeung no podía dejar de sonreír cuando salieron de la pequeña cafetería. Iban caminando a la par, sus manos entrelazadas, se soltaron al entrar a la casa de Jake. HeeSeung le había dicho que le dijo a su papi In que haría tarea en su casa, así que Jake respondió que era mejor para todos si hacían al menos una parte de la tarea.

Al entrar la madre de Jake los saludó y cómo usualmente los mandó al cuarto de Jake a hacer la tarea. HeeSeung estaba acostado en la cama y Jake sentado en el piso, uno haciendo tarea de física y el otro de literatura.

Cuando acabaron la tarea HeeSeung supo que debía de regresar a casa o estaría en problemas, guardó todas sus cosas, agradeció por el sándwich a la madre de Jake y salió corriendo. Fue detenido por el alfa a un par de cuadras de distancia. HeeSeung era demasiado rápido.

—Se supone debo acompañarte —dijo Jake—. No huyas de mi tonto.—empezaron a caminar, el Australiano tratando de igualar el paso de HeeSeung, quien caminaba muy rápido para llegar a casa antes.

—Para aquí —dijo HeeSeung a un par de casa de su hogar—. Jamás me vienes a dejar, harán preguntas.

—Bien, pero me quedaré aquí para ver que entres —HeeSeung rió un poco, todo el asunto le parecía ridículo—. ¿Qué es tan gracioso?

—Tu me invitaste a una cita, aceptaste que fuera un secreto y ahora te estás comportando como alfa conmigo, es algo chistoso.

—No entiendo, ¿Por qué es chistoso?

Por qué no soy un omega. Pensó contestar, pero decidió callarse, solo negó con la cabeza antes de dejar un beso en la mejilla de Jake y salir corriendo gritando un adiós. Al entrar a su casa pudo escuchar a su padre preguntando por él. Gritó un ya llegue para tranquilizar a su familia.

***

Sentado en clase de matemáticas fue donde aceptó ser novio de Jake, después de una cita más. HeeSeung se sentaba al lado del alfa, este ahora recargaba su cabeza en el hombro de HeeSeung y tomaba su mano, incluso cuando escribían, afortunadamente Jake era zurdo y HeeSeung diestro, así que nada les impedía tomarse de la mano.

HeeSeung paseaba su dedo por el brazo de Jake, trazando figuras sin sentidos sobre la piel blanca. Escuchó murmullos y levantó la cabeza, era una omega, era nueva en la escuela, castaña, ojos grandes, olor a malvaviscos, mejillas sonrosadas. HeeSeung bajó su mirada una vez más y volteó a ver a Jake. El alfa que estaba recostado en su hombro, sus ojos estaban cerrados. Eso le tranquilizó un poco.

Jake tenía una marca de nacimiento en su clavícula en la que HeeSeung concentraba su atención cuando el alfa pasaba a hablar frente a la clase. Había caído hasta el fondo sin saberlo.

***

Jake no había ido ese día a la escuela, HeeSeung se había sentado solo en el almuerzo, quería pensar, pero ella preguntó si el asiento estaba libre, así que aquí estaban.

—Soy WonYoung.—dijo la omega, sonriéndole a HeeSeung. Este despegó la vista de su libro y le sonrió de regreso.

—Soy HeeSeung, todos me dicen Hee. —regresó su mirada al libro al no obtener una respuesta inmediata. Pero dejó de leer al escuchar esa pregunta.

—¿Tu novio no vino a la escuela? —HeeSeung levantó la cabeza—. Perdón, enserio, es que a veces no sé cuando debo callarme y siempre hago las preguntas más incómodas, lo lamento. —HeeSeung sonrió, colocó el separador en su libro y lo cerró.

—Está bien, él no vino.

—Ustedes son una linda pareja —HeeSeung se sonrojo, nadie le había dicho eso antes—. Desde el primer día que los vi juntos me dije que ustedes debían ser la pareja más bonita en esta escuela, han pasado días y no he cambiado mi opinión.

—Eres algo rara —la omega hizo un puchero automáticamente—. No, no, es algo bueno, lo digo de la mejor manera posible. —ella sonrió.

—¿Y desde cuándo están juntos?— HeeSeung rió antes de dar una respuesta. Ese fue el inicio de una rara y divertida amistad para ambos.

***

Tal vez empezó cuando Jake tuvo que hacer un proyecto con uno de los omegas del salón con aroma a cerezas. HeeSeung tuvo que hacer el proyecto con WonYoung y estuvo distraído viendo a su novio que se encontraba al otro lado de la biblioteca sonriendo mientras hablaba con el omega.

Pero HeeSeung negó con su cabeza, ese era Jake, siempre le sonreía a todos esperando mejorar el día de alguien con esa simple acción. Debía dejar de pensar todas esas cosas, Jake lo quería igual que él quería a Jake.

¿Cierto?

HeeSeung no esperó a Jake a la salida de la escuela. HeeSeung empezó a caminar a su casa sólo con sus pensamientos como compañía. Hasta que dos brazos lo rodearon.

—¿Te olvidaste de mí? —HeeSeung sonrió, pero no contestó—. Hyung, ¿Todo bien?

—Si —susurró. Jake lo detuvo y le hizo darse media vuelta para verlo a la cara.

—Cuéntame que pasa —HeeSeung bajó la cabeza—. ¿Hee?

—¿Qué pasa si me presento cómo alfa?

—Serías mi alfa, ¿Por qué preguntas eso? —HeeSeung cerró sus ojos cuando Jake le hizo levantar la cabeza—. Hey, no quiero que estés triste —HeeSeung logró asentir antes de ser abrazado por Jake—. Alfa, beta u omega te querré.

—¿Si?

—Claro que si, ¿Dónde más encontraré a alguien que le gusten tanto mis hoyuelos? —HeeSeung rió a su pesar y se separó del abrazo limpiando las pocas lágrimas que había caído—. ¿Entonces te acompaño a casa, mi lindo novio?

HeeSeung asintió, Jake le besó antes de empezar a caminar. Esta vez su brazo izquierdo sobre los hombros de HeeSeung y contándole chistes para hacerlo sonreír, diciéndole cuan lindo era para ver ese rosado en sus mejillas.

***

A veces se quedaba pensando en lo diferente que todo sería si tuviera una casta definida. ¿Algo cambiaría?. Su inseguridad acerca de no presentarse crecía con el pasar de los días hasta que simplemente dudó sobre todo. Solo compartiendo las dudas que cruzaban su mente con WonYoung en clase de literatura.

Desafortunadamente ese día Jake había tomado todo el valor que poseía para preguntarle a HeeSeung algo realmente importante.

Mientras caminaban a casa, Jake tomó la mano de HeeSeung y lo hizo desviarse, hasta que llegaron al parque, haciendo que el castaño tomara asiento en una de las bancas. Jake se sentó a su lado.

—¿Sabes cómo todos dicen que el cortejo es la forma más pura de mostrar tu amor?

—Jakey, tengo que llegar a casa a tiempo.

—Vamos, solo responde.—HeeSeung rió suavemente.

—Okay, si, lo sé.

—Bueno, yo... Yo te amo —HeeSeung sintió su corazón latir con más fuerza, mariposas en su estómago, antes de poder responder Jake continuó hablando—. Y por eso, siento correcto hacer esto.

Sacó de su mochila un pequeño ramo de margaritas, la flor favorita de HeeSeung. Le sonrió tímidamente y tomó la mano de HeeSeung.

—Este es mi cortejo y sería un honor que lo aceptaras.

No pudo hacer nada. Solo se quedó ahí viendo las flores, él no era un omega, él no era un alfa, ni siquiera era un beta. Nada tenía sentido; oh su mente era un remolino. No sabía cómo pensó en WonYoung, cómo la imaginó aceptando el cortejo de Jake, eso tenía más sentido en su mente confundida.

—¿Hyung? —el ramo estaba en sus manos, pasando su dedo por los tallos de las flores, aún sin dar un respuesta.

—Te amo—dijo antes de levantar la mirada, encontrándose con esos ojos brillantes—. Por eso no puedo aceptarlo, perdón. —dejó el ramo en la banca y se levantó, su plan era empezar a caminar pero Jake le tomó la mano para detenerlo.

—Espera, no entiendo, ¿Fue muy pronto?—HeeSeung negó—. ¿Es por qué no es primavera? —HeeSeung negó—. Entonces me amas pero no lo suficiente cómo para aceptar mi cortejo sin haberte presentado —HeeSeung no hizo ningún movimiento—. ¿Esto qué significa?, ¿seguimos siendo novios? ¿Aún me dejarás recargar mi cabeza en tu hombro? ¿Te podré seguir besando y esperaremos a qué te presentes para que estés seguro? —HeeSeung no había contestado, ni siquiera él sabía—. ¿Puedes hablarme?, me estoy volviendo loco aquí.

—No, no puedo hablarte, no sé que me pasa, no sé que hago, no entiendo nada —Jake se levantó de la banca y se puso frente a HeeSeung—. No sé.—dijo una vez más antes de ser abrazado por el alfa.

Pasaron unos segundos, dónde ambos lloraron en el hombro del otro, tratando de comprender lo que estaban viviendo. Hasta que HeeSeung decidió ser valiente y solo decir lo que sentía en el fondo de su ser.

—Te juro que te amo, pero... No creo que sea justo —se separó del abrazo y dio un paso hacía atrás—. No es justo que tu estés esperando para que yo esté seguro de algo —Jake bajó la cabeza—. Perdón, pero no sé quien soy, no tengo idea de que hacer y quiero que me beses y quiero que sigamos en esto, pero no es justo para ti, no es lindo que te rechacen un cortejo...

—HeeSeung solo dime si estás terminando conmigo ó no. —pero ni siquiera HeeSeung sabía a que lugar lo llevaría todo lo que estaba diciendo. Aún con dudas en su mente solo pudo responder un sí.

Jake se volvió hacia la banca, se colgó su mochila y tomó el ramo, pese a todo lo que estaba pasando seguía sintiendo que su alfa le decía que no se fuera, que se quedara y hablara con HeeSeung hasta llegar al fondo de todo. Era su persona, no su alfa, su omega ó su beta, era su persona y no lo quería cambiar por nada pero por lo mismo lo conocía. Sabía que esa duda seguiría hasta que se presentara, si lo llegaba a hacer, sabía que no lo debía apresurar a hacer nada.

—Ten. —dijo dándole el ramo a HeeSeung.

—Jake, yo...

—Yo no lo quiero, es tuyo, lo hice para ti, no me lo quedaré.

Al ver que HeeSeung no tomaba las flores las puso en la banca y se despidió antes de empezar a caminar sólo. El llanto de HeeSeung era incontrolable en este punto, sentía una presión en su pecho, empezó a caminar a casa, pero se detuvo, volteó sobre su hombro para ver el pequeño ramo que ahora representa el momento más triste vivido con Jake. Decidió volver por el ramo.

Cuando llegó a casa se sintió completamente confundido al tener el ramo en sus manos. Hasta que se sintió estúpido por haber tomado el ramo, dejó su mochila en el piso y corrió a la cocina a tirar el ramo en la basura. Debía controlarse antes de que su papi In llegara con sus hermanos. Al menos eso intentó.

***

Había dormido menos de un par de horas, quedándose despierto pensando en lo que quería hacer, considerando lo que sus padres le dijeron. Pensando en la solución correcta y cada vez llegaba a la misma conclusión.

Él quería estar con Jake. No importaba lo que pasaría después, él quería estar con Jake, quería amarlo todo el tiempo que pudiera.

Por eso había salido temprano de su casa, quería hablar con Jake con sus pensamientos en orden. Lo encontró a mitad del camino. Se detuvieron frente al otro, HeeSeung sonrió y lo saludo agitando su mano, eso hizo a Jake sonreír.

—Por favor dime que ayer no pasó.—dijo Jake.

—Pasó, me dijiste que me amabas y quisiste cortejarme, no supe reaccionar —se acercó al alfa—. Yo quiero seguir siendo tu novio, si eso también lo quieres.

—¿Qué te hizo cambiar de opinión?

—Darme cuenta que soy yo, no importa la casta que tendré, seguiré siendo yo —Jake sonrió un poco más—. Y yo te amo.

—¿Puedo saber por qué le dijiste a WonYoung todas tus dudas pero jamás me dijiste nada a mi?

—Por que tu tratarías de hacerme sentir mejor, WonYoung siempre dice la verdad —metió sus manos en los bolsillo de su abrigo—. Pensé que te cansarías de mi por todas mis dudas.

—Bien, te diré algo —dio un paso hacia HeeSeung, cerrando la distancia existente, metió sus manos en los bolsillos del abrigo de HeeSeung, para tomar las manos de este—. Yo no me cansaría de ti ni por que me lo pidieras, sé lo que ocurre en esa cabecita tuya pero quiero que sientas la confianza para decirme que pasa.

—Lo haré.

—Así que... ¿Qué somos?

—¿Podemos volver a ser novios? —Jake asintió—. Solo que hacer las cosas bien y tal vez un poco más lento.

—De acuerdo.

—De acuerdo. —repitió HeeSeung. Jake cerró la distancia entre ellos y le dio un beso.

***

HeeSeung sabía que su padre SeungMin no estaba feliz con todo este asunto de él teniendo un novio, pero había pasado casi un año y debía de aceptarlo en poco tiempo. Al menos eso pensaba HeeSeung.

No se sentía muy bien ese día, pero debía ir a la escuela, tenía un exámen y debido a que era gran parte de su calificación no quería perdérselo. Así que al salir de casa, se quitó el abrigo, aunque estuviera haciendo mucho frío él tenía calor. Jake frunció el ceño al ver eso.

—¿A caso quieres morir de frío?

—No, solo no tengo frío—dijo antes de besar a su lindo alfa—. Y un hola es la forma más popular de saludar a alguien.

Jake rió mientras empezaban a caminar a la escuela. Algo era diferente en HeeSeung ese día, ¿Había crecido un poco más? ¿Había arreglado su cabello de diferente manera? ¿Por qué se veía con un aura completamente diferente?

Cuando llegaron a la escuela de inmediato su tercer rueda se les unió, HeeSeung estaba tan distraído en la incomodidad que sentía ese día que ni siquiera había saludado a WonYoung.

—¿Hee, estás bien? —preguntó Jake, deteniéndolo antes de entrar al aula—. ¿Hyung, me escuchas?

—¿Estoy bien? —Jake sonrió posando sus manos en las mejillas de HeeSeung.

—¿Eso es una respuesta cielo?

HeeSeung asintió, Jake preguntó un par de veces para cerciorarse y justo cuando sentía que obtenía algo el maestro les dijo que entrarán a la clase.

Se sentaron en sus lugares de siempre, el maestro pasó los exámenes y justo a las ocho quince iniciaron a contestar el examen. En un punto HeeSeung dejó caer su lápiz, sintiéndose algo mareado, dejó caer su cabeza contra la mesa, Jake dejó de contestar su examen al igual que WonYoung, omega y alfa compartieron una mirada confusa.

—Shim, Kim, Jang, el examen es individual no en grupos.

Jake pudo ver a WonYoung levantarse de su asiento para alejarse un poco de HeeSeung, un nuevo aroma se expandía en el aire. Un aroma que llamó la atención de todos.

—Señor, creo que HeeSeung está entrando en celo —dijo Jake. El maestro salió del aula para ir en busca de un prefecto—. Hey, Hee, sé que duele pero estarás bien.

—Jake, quiero ir a casa.

—Lo sé, debes respirar Hee, pronto te llevarán a casa alfa.

El prefecto lo llevó a la enfermería hasta que su padre fue a recogerlo, HeeSeung sólo recuerda como su padre lo cargó hasta dejarlo en el auto y lo llevó a casa.

***

Habían pasado dos días, el celo de HeeSeung había terminado la noche anterior, Jake lo sabía por que HeeSeung le mandó un mensaje diciendo que todo había pasado. Así que aquí estaba Jake parado frente a la puerta de la casa de HeeSeung, tocó el timbre y esperó.

—¡Es Jake, papi!

—Hola MinJeong. —dijo el alfa, la pequeña le sonrió antes de tomar su mano y hacerlo entrar a la casa. Jake cerró la puerta.

—Es Winter —dijo guiando a Jake a la cocina donde estaba su mamá—. Mi nombre es MinJeong, pero debes llamarme Winter.

—Como digas Min —la niña bufo y dejó a Jake a solas con su papi In, el alfa rió un poco viendo a la niña enojada salir—. Buenas tardes señor Kim.

—Hola Jake, ¿A qué debo tu visita?

—Hmm, vine a ver a HeeSeung, ¿Puedo?

—Supongo debe estar despierto ahora, está en su cuarto, recuerda...

—Puerta abierta, ambos pies en el piso y contenido apto para menores de seis

JeongIn sonrió antes de asentir. Entonces Jake subió las escaleras encontrándose con O.De en el camino, el niño le quería enseñar lo que había construido con sus legos, así que después de ver la obra de O.De, Jake fue al cuarto de HeeSeung. Dejó la puerta abierta.

Tan pronto hizo eso, el aroma de HeeSeung llenó sus pulmones, era cómo la madera recién cortada pero con toque picante a brisa de mar. El nuevo alfa estaba dormido cubierto con su edredón y podía llegar a notar la manga de la playera que usaba.

Se sentó en la orilla de la cama y movió un poco a HeeSeung, quien abrió sus ojos, se veía demasiado cansado, pero sonrió al ver a Jake.

—Hola. —murmuró antes de darse la vuelta y cubrirse por completo con el edredón. Jake rió, y picó un costado de HeeSeung varias veces, HeeSeung se removió un poco.

—Anda tonto —HeeSeung se descubrió solo lo suficiente para que Jake viera sus ojos, acomodó un par de mechones de cabello que cubrían la frente de HeeSeung—. ¿Cómo estás?

—Cansado —Jake sonrió—. Conviérteme en beta, no quiero pasar por esto otra vez.

—Por más que quisiera cumplir tu deseo, me agrada tu aroma así que te dejaré como alfa —HeeSeung se sentó—. ¿Volviste a tener frío? —HeeSeung asintió, tenía su pijama puesta—. Tal vez es por que dejaste la venta abierta tonto.

—Me gusta... —enrolló su dedo en un mechón de pelo—. Sentir la brisa del viento pasar por mi cuarto, mientras estoy cálido —Jake asintió, escuchando al alfa hablar enamorado del mundo—. Ayer hubo un atardecer de algodón de azúcar, lo pude apreciar un poco antes de una ola de calor, ¿Tu viste el cielo ayer?

—Azul, rosa y morado, nubes difuminadas. —HeeSeung sonrió—. Claro que lo vi, sabía que me pedirías detalles.

—¿Qué más viste? —preguntó doblando una de sus piernas para recargar ahí su cabeza y ver con atención a Jake.

—Vi como paso de ser un rosa salmón a un rosa pastel sucio, un morado vibrante a un lila suave, el mismo que ensuciaba el rosa, un tono azul grisáceo que seguro era una nube rebelde que no quería ser pintada de un azul suave como las otras —HeeSeung sonrió—. El resto del cielo era azul, algunas estrellas brillaban ya y la luna estaba lista para hacerse notar.

—Que hermoso. —susurró. Quedándose viendo a Jake, con el tiempo aprendió que nunca se cansaría de apreciar a su chico.

Jake le hizo levantar su cabeza, se acercó en lo que se sintieron como minutos pero ni siquiera había sido un segundo, sus labios se juntaron con los ajenos en un beso suave y delicado. Tal vez Jake era su atardecer y por eso la mayoría de veces no podía hacer nada más que verlo y descubrir que tonalidad podrían reflejar sus ojos. Inmerso en encontrar un atardecer diferente en cada ocasión.

—Te amo.—susurró al romper contacto.

—También te amo. —respondió viendo las largas pestañas castañas aletear teniendo contacto con los pómulos de HeeSeung de vez en cuando.

Nadie sabía que pasaría entre esos dos, pero era lindo imaginarse el futuro, un futuro que no narraré por que nadie puede predecir el futuro de dos cachorros que apenas saldrían a conocer el mundo. Pero en definitiva, este era el comienzo de su historia.

***

finjamos que me olvide de subir el epílogo por un año entero...

¡Gracias por leer!