mamá mamá
Sana estaba nerviosa, llevaba dos meses saliendo con Dahyun, habían tenido seis citas en total, cuatro donde ellas habían estado completamente solas dos donde salieron con Tzuyu, en las cuales Tzuyu no soltó la mano de Dahyun y la llamó mamá varias veces. Una cita donde se convirtieron en novias. Un celo juntas. Pero la alfa se encontraba nerviosa por que estaba frente a la casa donde vivía Dahyun, tocando la puerta esperando para que alguien abriera.
Dahyun le había dejado plantada ese día, entonces Sana, al no poder controlar a su alfa se sintió obligada a ir en busca de Dahyun para ver si su omega se encontraba bien.
-Uhm, hola -dijo Mina sin dejar que Sana viera dentro de la casa.
-Hola, ¿Dahyun está aquí?-
-No, ¿por?-
-Ella no contesta mis llamadas ó mensajes, la esperé frente a la heladería y ella no apareció- Mina asintió- ¿Sabes algo?
-Seguramente dejó su celular, pero ella está bien, sólo fue por su hermana al aeropuerto, fue de último minuto, ella dijo que te llamaría en el camino.-
-Bueno, yo le llamaré después-Mina asintió― Te Veo otro día Mina.-
Sana camino hasta la parada del autobús y se sentó a esperar hasta que el próximo pasara, gotas de lluvia empezaron mojar el asfalto, Sana suspiró y miro al cielo. Escuchó el claxon de un auto, al bajar la cabeza vio ese auto gris frente a ella. La ventana bajó.
-Perdón-fue lo primero que Dahyun dijo-¿Aun quieres tener otra cita, alfa?
-Sabes que si- Dahyun rió un poco mientras Sana se levantaba y se acercaba para entrar al auto. Una vez adentro le dio un beso a Dahyun antes de sentarse y ponerse su cinturón-¿Todo bien?- Dahyun asintió mientras ponía en en marcha el auto.
-Si, todo perfecto -Sana sonrió- Hablé con mi hermana, me dejará quedarme con ella hasta que encuentre un lugar.
-Cierto, vi un lugar a unas cuantas cuadras del hospital, está en tu presupuesto.
-¿Enserio?
-Si, lo fui a ver por que Tzuyu me dijo y tomé fotos, de hecho te las debía de mandar, tiene 3 cuartos, dos baños, tiene un balcón, es lindo.
Dahyun asintió, viendo el frente, concentrada en el camino, se detuvo en el estacionamiento del centro comercial. Sana se extrañó ya que Dahyun no había contestado y no había dicho nada más en esos cinco minutos que pasaron.
-¿Dub?-está se volteó y observó la cara de Sana,pensando, aunque la alfa no estaba segura de que pasaba. Un segundo después Dahyun se estiró al asiento trasero para tomar un pequeño ramo de girasoles.
-Ten-Sana sonrió y tomó el ramo con su mano, pero Dahyun no lo soltó-¿Sabes que estoy haciendo?
-Realmente no sé- Dahyun sonrió y vio los girasoles, le daba pena decirlo viendo directamente a la alfa- ¿Luna?
-Te quiero cortejar-Sana frunció el ceño-Si aceptas este ramo, estás aceptando mi cortejo.
-Mirame-pidió Sana en un susurró, Dahyun levantó la cabeza y conectó su mirada con la de la alfa una vez más- Eres tan dulce omega, sólo tu pensarías en cortejar a tu alfa, pero no debes hacerlo -sacó de su abrigo una cajita en forma de rectángulo --Por que yo te quiero cortejar a ti.
-Pero te quiero cortejar-insistió Dahyun-¿No crees que es un bonito detalle?
-Es hermoso y si quieres hacerlo lo aceptaré con gusto Dahyun soltó el ramo de girasoles-Son muy lindas, como tú―la omega se sonrojó.
Sana abrió la cajita mostrando un brazalete plateado con tres dijes, un sol, una luna y un eclipse. Dahyun sonrió aún más, en este punto sus mejillas dolían por tango sonreír. Sana tomó el brazalete listo para ponerlo en la muñeca de la omega.
-Mi perfecta omega, hermosa luna, ¿aceptarías mi cortejo?-
-Por supuesto sol- Sana puso el brazalete en la muñeca de Dahyun, está aplaudió un par de veces cuando ya tenía el brazalete puesto.- Es tan bonito- puso sus manos en las mejillas de Sana y le dio un par de besos rápidos.
Sana rió suavemente al ver a Dahyun tan feliz, su aroma era pura alegría, al igual que el aroma de Sana.
-¿Puedo decirte algo más? - Dahyun asintió- Te amo - sus ojos marrones brillaron- Te amo desde la primera cita, amo todo acerca de ti.-
-También te amo sol-Sana rió nerviosamente, Dahyun acuno la mejilla izquierda de la alfa con su mano, moviendo su pulgar para pasarlo por el pómulo de la alfa-¿Qué pasa?
-Jamás le dije eso a nadie -Dahyun sonrió -Bueno, se lo he dicho a Tzuyu, pero es un tipo diferente de amor, ¿entiendes? -Dahyun asintió.
-Si, también amo a Tzuyu pero no como te amo a ti.
Sana besó a la omega, sorprendiéndola un poco, pero en menos de un segundo los ojos de Dahyun se cerraron dejándose llevar al lugar en el espacio donde los besos de Sana la llevaban.
-Puedes vivir con nosotras-dijo Sana, su frente recargada de la de Dahyun, ambas con ojos cerrados, recuperando el aliento que perdieron después de varios besos.
-¿No deberías hablar con Tzuyu primero? -Sana sonrió, pero negó.
-Créeme, ella amaría eso -Dahyun rió suavemente- Claro, de hecho podemos rentar juntas el lugar del centro, más cerca de nuestros trabajos y de buenas escuelas.
-Amo cuando hablas así - Dahyun se separó- Tan segura de nuestro futuro juntos que me das toda la confianza en lo que seremos.
-¿Eso es un si?
-Eso es un definitivamente si- Sana sonrió- Pero quiero hablarlo con Tzuyu primero, sé que le agrado pero lo puede sentir como una invasión.
-¿Cuándo quieres hablar con ella?
-¿Hoy?
-¿Ahora? -Dahyun asintió algo nerviosa-Okay, si, podemos ir por ella.
-¿Dónde está?
-En el departamento de Nayeon- Dahyun asintió.
La verdad era que Dahyun se sentía nerviosa en la presencia de la hermana de la alfa, era una beta, pero parecía tener el poder de una alfa. Parecía poder dominar el mundo.
Para su suerte no encontró un lugar para estacionar cerca del departamento de Dahyun, así que dejó a Sana frente al edificio y fue a dar la vuelta a la cuadra.
Sana en el elevador ya con Tzuyu trató de explicarle a su cachorra la situación un poco, diciéndole que Dahyun había aceptado el cortejo, naturalmente la niña se emocionó. Salieron del edificio y esperaron a que el auto de Dahyun se detuviera enfrente.
Cuando Tzuyu subió al auto lo primero que hizo fue acercarse a Dahyun para darle un beso en la mejilla.
-Hola mami -susurró antes de que Sana subiera a auto.
-Hola cachorra- Sana subió al auto y se puso el cinturón- Tzu, hazme un favor y ponte el cinturón bebé - vio a la niña asentir por el reflejo del retrovisor.
Sana se aseguró que la niña se pusiera el cinturón. Recordó que debía planear una fiesta de cumpleaños dentro de unas semanas para su cachorra. Le gustaba la idea de tener a Dahyun viviendo con ellas, tal vez no seria lo mismo que esos días donde la omega se quedaba con ellas, tal vez Tzuyu dejaría de ser tan formal cuando viera a Dahyun en las mañanas y probablemente la omega vería el real desastre que es vivir con una niña de tres años, Sana cruzaba sus dedos para que no hubiera problemas por eso.
Dahyun estacionó cerca del parque, los tres bajaron del auto. Dahyun cargaba a Tzuyu en su espalda mientras Sana cubría a las tres con la sombrilla.
-Tengo frío-susurró Tzuyu a Dahyun.
-Yo también- susurró Dahyun de regresó. La niña rió y escondió su cara en el cuello de la omega-¿Sana?―la alfa volteó a ver a Dahyun como si no hubiera escuchado nada de lo dicho.
-¿Si?
-Mi bebé y yo tenemos frío.-
Sana se quitó el abrigo y los puso sobre sus amores. tzuyu se acurruco aún más contra Dahyun y cerró sus ojos. Dahyun vocalizó un gracias a la alfa y cerró sus ojos un segundo cuando Sana besó su sien. dahyun respiró profundamente y pasó a Tzuyu frente a ella con cuidado.
-Cachorra, ¿puedes verme? -la cachorro despegó su cabecita del cuerpo del la omega y se concentró en los ojos oscuros -Tu mamá y yo hemos hablado, sólo necesitamos tu permiso bebé - la niña asintió-¿Te gustaría que yo viviera con ustedes?
-Si, pero no tenemos otro cuarto-Dahyun sonrió -Puedes quedarte en mi cuarto y yo puedo dormir con mamá -Sana rió suavemente por la respuesta de su cachorra.
-No Tzu, Dubu dormiría en mi cuarto.
-¿Y tu en el sillón? -Dahyun rió, pero se detuvo por la mirada que Tzuyu le dedicó. Sana cargó a Tzuyu -¿Si?
-Dahyun y yo dormiremos en la misma habitación, tu dormirás en tu cuarto y nadie dormirá en el sillón.
-¿Entonces mamá Dahyun será mamá mamá?- Sana asintió, la cachorra se volteó hacía Dahyun-¿Mi mamá mamá?-la omega asintió.
-¿Eso está bien para ti? -preguntó Sana y vio a su cachorra volverse algo tímida al envolver sus brazos alrededor de su cuello y enterrar su naricita en la fuente de aroma de su madre-¿Bebé?
-Dubu será mi mamá ― Dahyun sonrió ante el tono de alegría que Tzuyu había usado-¿Cuándo? -dijo y volteó su cabeza para ver a Dahyun, quien vio a Sana, hablándose con sólo la mirada.
-Tal vez la próxima semana- asintió. La niña se separó de Sana y aplaudió emocionada-¿Feliz Tzu?-
-¿Me vas a arropar y llevarme a la escuela?-
-Por supuesto ―se acercó un poco más y arregló un poco los pequeños cabellos castaños que caían por el rostro de la pequeña.
&¿Y me darás dulces cuando mamá no vea? -Sana frunció el ceño cuando Dahyun negó pero le guiñó un ojo a la niña quien rió.
...
Sana estaba esperando a que Dahyun acabara su turno, cuando la omega salió del hospital corrió hacia la alfa para besarla, ambas se susurraron un hola, antes de empezar a caminar hacía la pastelería de camino al departamento.
Dahyun entró a la pastelería, al día siguiente era cumpleaños de su cachorra. Tendrían una pequeña fiesta en el parque dónde básicamente sería la segunda vez que Dahyun vería a la familia de su alfa.
Llegaron al departamento, Nayeon laa saludó a ambas y fue con Dahyun a la cocina a hacer espacio en el refrigerador para el pastel, mientras Sana iba a saludar a su cachorra quien estaba sentado en la sala.
-¿Y mami? -Sana sonrió.
-¿No un hola mamá, sólo donde está mamá? - Tzuyu sonrió apenada-- Está en la cocina con tía Nayeon, ¿cómo te fue en tu primer día de preescolar?
-Me dejaron dormir- Sana asintió- Y comí un sándwich de aguacate y queso.
-¿Algo más?
-No fue un buen sándwich- Sana rió y la niña se levantó del sillón, la alfa lo vio caminar hacia la cocina.
Era una nueva etapa en la vida de todas, una familia, una marca, una mudanza en camino a ese departamento más grande cerca del hospital, el preescolar de Tzuyu y el trabajo de Sana.
-Hey bebé.
-Hola mami- Dahyun cargó a Tzuyu y la sentó en la isla.
-¿Cómo te fue hoy?
-Bien, tengo amigos, mi maestra es amable y nos dio arándanos, ¿sabes que son los arándanos? - Dahyun asintió-¿Podemos tener arándanos?
-Claro.
-Las vocales son a, e, i, o, u- Dahyun sonrió y Sana apareció, se recargó del marco de la entrada a la cocina -y mañana aprenderé contar hasta el 5.
-¿Enserio?-respondió Dahyun actuando sorprendida-Oh mi cachorra podrá contar hasta el diez en un santiamén.
-Oh oh me dieron una estrella dorada, ¿quieres verla? - Dahyun asintió y bajó a Tzu de la isla, la cachorra corrió por su pequeña mochila, pasando al lado de Sana.
-Bueno, mi hija me ha reemplazado - Nayeon y Dahyun rieron. Nayeon tomó su bolso, se puso su abrigo, le dio un beso en la mejilla a Dahyun y se detuvo al pasar al lado de Sana.
-No puedes culpar a Tzuyu, digo, es Dahyun - Sana sonrió- Laa veo mañana.
Sana se acercó a la omega y la abrazó, un brazo rodeando los hombros y el otro rodeando la cintura, el rostro de Dahyun había quedado en el pecho de la alfa.
-Que bonita marca tienes en tu cuello- Dahyun rió tímidamente. Llevando su mano a su cuello, cubriendo su marca sólo por instinto.
-Sanari, basta-murmuró, Sana dio un paso hacia atrás, sus manos yendo a la cintura de la omega.
Y se perdió ahí. Viendo los ojos de Dahyun que tenían un nuevo brillo, la marca que había sido hecha días atrás en el celo de la omega,apreciando esas arruguitas alrededor de los ojos del omega.
-Aquí está -dijo Tzuyu entrando a la cocina enseñándole a Dahyun la estrella dorada en su cuaderno.
Sana entendió que debía soltar a Dahyun cuándo su omega paseo el dedo índice por el dorso de su mano. Entonces Dahyun levantó a a Tzuyu en sus brazos y la abrazó con fuerza llenando de felicitaciones a su cachorra. La siguió cuando la omega comenzó a caminar haciendo reír a Tzuyu.
La vio recargado de la puerta del cuarto de Tzuyu, entró con ella a darle cada uno un beso de las buenas noches a su cachorra. La niña durmió rápidamente, entonces Sana siguió con naturalidad a Dahyun. Quien calentó un poco de la comida para cenar.
-¿Todo bien alfa?-Sana asintió.
-Todo perfecto.
Y la alfa no mentía, sabía que habría malos momentos, sabía que no todo sería perfecto toda la vida, pero sabiendo que su cachorra y su omega se encontraban felices, a salvo y a su lado, ella estaría en paz.
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