Parte 3 ~ Escuadrón tipo C
Luego de un tiempo que Hayami apreciará aquella espada en su maletín sentí como mi estómago gruñía.
-Emm... Cam, es mal momento para decirte que tengo hambre -Dije apenado a su lado-. Es que nisiquiera he almorzado y ya es la hora de la cena.
-En realidad, es el momento perfecto; Es la hora de cenar -Replico abriendo la puerta-. Asi conocerás a Samuel, nuestro cocinero, es muy importante que ahora que vives aquí hagas amigos -Me dijo con una gran sonrisa.
-Genial! Más amigos -Respondí sardonicamente.
-¿Estabas siendo sarcástico? -Pregunto.
-No eres muy listo ¿Cierto, Cam? -Dije soltando una pequeña carcajada.
-No seas amargado, te será fácil hacer amigos, aquí todos son muy amistosos -Respondió frunciendo el ceño y empujándome para salir.
-¡Oye imbécil si llegas tarde a la cena te comerás las papas feas! -dijo una chica rubia pasando frente a la casa, obviamente refiriéndose a mí.
-¿Amistosos? -Le respondí a Cam frunciendo el ceño.
-Hay mucha gente aquí, no puedo hablar por todos -Me contesto-. Claire es grosera no puedo cambiarlo.
-¡Vamos rápido, Nir! Claire es grosera pero no se equivoca -Gritaba tirando de mi brazo.
En ese momento llegó Jesris con algo en sus manos viéndome con una sonrisa.
-Te traje la cena, Nir, supuse que llegarían tarde al comedor -Dijo dándome la bandeja con una sonrisa.
-¿Por qué me ves como si fuera mi culpa? -Replico Cam observando la cara de Jesris.
-No es nada, ten la cena de tu hermana -Respondió dándome una segunda bandeja.
-Gracias fue muy amable de tu parte... Espera... ¿donde está Hayami? -Dije intrigado.
-La ví irse con Amelia se llevó su maletín -Replico Cam sereno.
-¿¡Que!? Ella llega a un lugar extraño y lo primero que hace es desaparecer, claro, típico de ella -Dije realmente alterado.
-Oye, relájate amigo, está segura aquí incluso salir de los límites de la zona segura le tomaría demasiado -Respondió a mí inminente ataque cardíaco.
-Ti... Tienes razón, mientras esté aquí ella es problema suyo -Dije tomando mi cena y sentándome a comer.
-Ves, todo tiene solu... ¿Espera que?
~~~
A tempranas horas del día siguiente, desperté en aquella tienda de acampar en la que Cam muy amablemente me dejó luego de cenar.
-Dormilón, despierta, Nir...
-Mmmm... Déjame dormir -Dije aún dormitando en esa horrible manta en el suelo que el llamaba cama.
-No se cómo vivías pero aquí nos levantamos temprano a entrenar y ayudar en las labores -Dijo regañandome y quitándome la manta que me cubría hasta la cabeza.
-Tu hermana si se despertó temprano a estrenar su espada.
Replico Cam en tono burlón.
-¿Hayami? ¿Temprano? Es imposible -Dije impresionado.
-¡Si! A las 7 en punto estaba despierta y avispada para entrenar... Aunque aquí nadie sabe de espadas.
-¿Entonces que hace Hayami? -Pregunte estrujandome los ojos
-Golpear un árbol... Bueno el segundo porque el primero ya lo talo.
-¿Enserio? Pudo talar un árbol con un espada -Respondi sorprendido.
-Si, es increíble, aunque sigue sin aprender nada solo pegándole a los árboles -Respondio dándome una taza de café.
-Si aquí no hay nadie con dominio de la espada ¿cómo piensas entrenarla? -Pregunte intrigado.
-La verdad por eso pensaba en despertarte temprano -Respondió bajando la mirada-. Veras una de las divisiones amigas de llama Camelot.
-¿Como el cuento de los caballeros de la mesa redonda? -Respondi aún sin entender su propuesta.
-¡Exactamente! -Respondio con más confianza. -Me parece que allí tu hermana entrenaría más en ese lugar.
-¿No dijiste que estaríamos mejor aqui? -Respondi aún dormitando tomando a sorbos el café.
-Si eso te preocupa, la protección de Hayami en Camelot está garantizada, todos allí son fuertes y se centran en las espadas -Respondio animado tomándome de los hombros.
-¿Puedes soltarme? Siento que esto se tornará gay si te acercas más -Dije mientras lo alejaba de mi espacio personal con mi mano en su cara.
-Lo siento, solo... Es que siento que esto es buena idea y me preocupa que tu reacción sea negativa -Contesto perdiendo su emoción inicial.
-¿Te preocupa mi reacción? -Pregunte ya totalmente despierto. -Deberias preguntarle a ella y no a mi.
-Supuse que como eras su hermano tomarias la decisión -Dijo reafirmando su propuesta.
-Ella es mayor de edad puede hacer lo que quiera -Alegue dejando la taza vacía en el suelo. -Este café sabe a tierra amigo.
-¿Que esperabas?, es hecho por nosotros -Respondio soltando una carcajada.
-Le tienes baja expectativa a tu gente ¿cierto? -Respondi levantando un ceja.
-Eso no son tus asuntos, y ahora levántate que debes a alistarte que te perderás el desayuno y deberás esperar al almuerzo -Contesto golpeando mi cabeza.
-Auch... No me golpees no soy tu esclavo -Dije levantándome del suelo. -¿Enserio cortó un árbol?
-Su fuerza es impresionante ¿No? -Respondio como si Hayami fuera sobrehumana.
-No lo suficiente para cortar un árbol, créeme sus golpes duelen pero si pudiera cortar un árbol tendría un brazo roto al menos.
-¿Peleas mucho con ella? -Pregunto riéndose de mi reacción de miedo al saber que podría cortarme como a aquel árbol.
-No sería capaz de hacerlo, tranquilo... Creo -Respondí dudoso.
-Pues ahí está ella -contestó apuntando con su mano a Hayami mientras golpeaba agresivamente el árbol.
-Al menos le servirá para descargar su ira -Conteste a su comentario-. Tal vez así se vuelva menos agresiva.
-Hola, Nir, al fin te despiertas -Grito Hayami al verme, tirando la espada al suelo-. Este lugar es genial nunca te aburres.
-Sobre eso...
~~~
-Entiendo... -Respondio ella luego de explicarle junto a Cam.
-¿Y que piensas? -Conteste impaciente-. Tu tienes la última palabra.
-Puedes quedarte aquí vagando o entrenar y ayudarnos -Respondió Cam irrumpiendo en la conversación.
-No lo se, estaría un poco lejos ¿No? -Respondió dudosa.
-No estaría tan mal, los horarios son más estrictos pero he escuchado que tienes muchas actividades fuera de la rutina. Piénsalo como una escuela militar con mas libertades.
-Una escuela es lo último que quiero ahora, ademas... ¿Camelot? ¿Es un juego? -Dijo con voz temblorosa.
-No lo se, la verdad, sueños frikis se convirtieron en realidad -Respondió burlón.
-No quiero hacerlo, estaré muy lejos y no conozco a nadie será... Será incómodo y... Y raro -Replico triste.
-Solo es una sugerencia no tienes que irte si no quieres -Respondió Cam.
-Debo pensarlo ¿Si?.
-Ademas de eso quería decirte que tendremos una misión y quería llevarlos para que observen un poco, es algo de rutina no es muy peligroso -Dijo Cam cambiando el tema.
-¿Mision? ¿Que deben hacer? -Dije intrigado.
-Llevamos un tiempo vigilando un puerto que creemos trae más armas, si capturamos a algunos de los empleados podríamos conseguir a donde van estás -Respondio Cam.
-¿Y quieren que veamos cómo los espían? -Replique sardónico.
-No seas tan sarcástico te vuelves odioso -Respondio Cameron-. Y no del todo rastreamos los registros del puerto y creemos que llegará el sábado así que interceptaremos, si consigues un buen lugar pueden aprender un poco de cómo nos movemos.
-Interesante propuesta, suena bien -Replico Hayami.
-Deben conocer al grupo primero, les conviene caerles bien ellos los protegerán.
Unas horas después de haber tenido esa conversación llegamos al centro de entrenamiento, había muñecos con silueta humana situados perfectamente uno al lado del otro a una distancia de 2 metros cada uno. Estos tenían varios cortes en ellos algunos más profundos que otro pero todos ellos en puntos estratégicos como la yugular o puñaladas al corazón.
Detrás de ellos había un lugar vacío con varas de madera a los extremos de la habitación algunas largas y otras cortas todas en un estante de armería, están estaban ya desgastadas.
En aquel lugar vacío había colchonetas en el piso justo allí habían un chico y una chica peleando. El chico lanzaba golpes imprecisos al rostro de la chica, ella los esquivaba con facilidad mientras mantenía su guardia alta. Y así en un abrir y cerrar de ojos el chico estaba en el suelo, ella sujetaba su mano alargada mientras tenía su pie derecho en su cuello.
-Estas dejando muchas aberturas en tu defensa, Oliver -Dijo aquella chica de ojos café claro, pelo rizado y corto, de piel morena, está llevaba una gabardina igual a la de Cam pero con menos adornos y de un color azul oscuro confundíble con el negro, unos jeans también de color azul oscuro ajustados con un cinturón lleno de cartuchos y una funda para un arma pequeña.
-A la próxima no lo lograras te lo aseguro -Dijo aquel chico que al parecer su nombre era Oliver. -Me distraje solo fue eso esta vez tu caerás -Aseguro mientras tomaba la posición de pelea con sus puños levantados.
-¡Oliver! ¡Maira! -Grito Cam apareciendo en escena. -Ellos son Nir y Hayami son de los que les hable -Afirmo.
-Un gusto, Oliver -Saludo el chico de piel pálida y pelo castaño con las mismas ropas que la chica pero un pantalón menos ajustado. Parecía simpático presentándose con una sonrisa en su rostro. -Bienvenidos al escuadron suicida -Bromeo... Espero.
-Dejalos, Oliver -Respondio Maira a la broma. -Esa broma solo fue graciosa cuando la hicimos contigo.
-Callense los asustan -Dijo Cam cortándolos-. No fue gracioso ni la primera vez... -Hizo una pausa-. Solo un poco
-¿Puedo preguntar por qué los llaman como la película? -Pregunte curioso.
-Porque...
-Porque son muy estúpidos -Respondió Cam cortándolo.
-¿Ok? -Respondi dudoso.
Hayami seguía desconfiada y confundida parada junto a la puerta, parecía esperar que la llamarán.
-Eso dicen todos, yo prefiero decir que somos más bruscos que los demás escuadrones -Se defendió Maira- ¿No piensas en nuestros sentimientos mientras nos dices estúpidos? -Bromeo.
-Mucho gusto -Dijo una voz grave y tosca que apareció repentinamente en la puerta espantando a Hayami- ¿Son ellos Cameron.
El chico era alto y rubio con ojos verdes profundos, musculoso, con una camiseta de gamuza con botones.
-¿Castell? ¿Así te llamas? -Pregunte intrigado de tan peculiar nombre.
-Es mi apellido -Afirmo-. En realidad mi nombre también es Oliver pero bueno... Entiendes.
-¡Oh! claro.
-Castell... -Dijo Cam más serio y molestó mientras apretaba la mandíbula-. Llegas tarde, Sabes que lo odio.
Parecía estar excesivamente molestó más de lo que debería por un poco de retraso.
-Lo siento -Se disculpo Castell -. No volverá a suceder.
-Bueno ahora está todo el escuadrón -Afirmo Cam con una sonrisa de oreja a oreja, cambiando su expresión tan rápido que daba miedo.
-¿El escuadrón son tres personas? -Pregunto Hayami hablando por primera vez desde que llegaron al lugar.
-¡Vaya! Si habla -Exclamo Oliver bromeando.
-Somos seis en realidad -Aseguro Cameron.
-¿Somos? -Pregunte frunciendo el ceño.
-Si... -Afirmo respondiendo su pregunta-. Tu, Hayami y yo somos parte del equipo.
-Crei que eras mucho mejor que un escuadrón de principiantes -Dijo Hayami irrumpiendo de nuevo en la conversación.
-Exactamente por eso estoy aquí -Respondió Cam. -Necesitan guía.
-¿Y cómo nos uniremos a un escuadrón? -Pregunté-. Acabamos de llegar.
-Aun no serán parte de el, estarán a prueba -Afirmo-. Ademas es un escuadrón de tipo C es lo más fácil que tendrán por ahora.
-¿Tipo C? -Pregunto Hayami acercándose lentamente con los brazos cruzados.
-Veras...
-Hay tres tipos de escuadrones -Dijo Oliver cortando a Cam-. El tipo A, tipo B y tipo C. El tipo A se encarga de las más difíciles de la misiones, son lo mejor de lo mejor, son expertos en sigilo. El tipo B son el nivel intermedio este hace misiones más difíciles que las de tipo C, pero, no son expertos en sigilo, estos son más bruscos para misiones más toscas y... Desastrosas. El tipo C -el cual somos nosotros- este tipo se supone no saber estar aptos para presentarse a misiones de peleas aún, nos encargamos de vigilar y avisar a otros escuadrones para que hagan lo divertido.
-Seria bueno que no me interrumpieras... -Dijo Cam.
-Si solo deben vigilar porque los llaman el escuadrón suicida -Interrumpio Hayami a Cameron de nuevo.
-No quisieron decirles cierto -Agrego Castell con una sonrisa burlona-. Los muy idiotas debían vigilar una casa, así de simple je, je, je. -Prosiguio hablando viendo con una sonrisa a Oliver y Maira.
-No tiene importancia lo que pasó -Interrumpio Oliver dubitativo, Parecía nervioso.
-Oliver insistió en que vio algo dentro de ella, debía reportarlo y seguir vigilando, pero no, no pudo, quería mas. Entro en ella y Maira como su cola -Seguia riendo mientras hablaba-. Entro allí, en realidad no era nada, imaginación suya, irónicamente casi se mueren, pero no por alguien dentro de la casa. Se cayeron por las escaleras. Oliver cayó encima de Maira rompiendo su brazo. No fue grave pero fueron el primer escuadrón tipo C en llegar heridos de una vigilancia.
Nir no pudo evitar soltar una pequeña risa discreta viendo a Oliver.
-Cuentales como terminaste aquí, eh, Castell -interrumpio Maira-. Nos dice idiotas y el quedó en un escuadrón tipo C por su incapacidad de conservar un anillo.
-¡Se cayó al lavabo! -Se defendió el-. No fue mi culpa además, no era tan valioso.
-¡Basta! -Grito Cameron separando a Maira y Castell que parecían querer pelear. Tenía una vena en su frente que parecía querer saltar de allí-. Por eso ustedes tres siguen en el tipo C.
Tenía cara de no entender nada, intentaba no meterme en la discusión.
Seguían discutiendo, mientras que Hayami parecía tener cara de asco mirándolos con una ceja enarcada.
***
Al día siguiente era el momento de aquella misión, pero, no sin la vestimenta adecuada, cada escuadrón llevaba un uniforme predeterminado, el del escuadrón de Cameron consistía en una gabardina larga de color azul oscuro, que, a primeras impresiones parecía negro, una camiseta azul, pantalones largos de color negro y botas de color negro.
Tome aquel conjunto después de una larga ducha fría para despertarme.
Esa noche mientras ajustaba mis botas, alistandome para partir apareció Cameron, deslizando la cortina de aquella tienda.
-Nir, estamos listos para partir -dijo mientras daba un paso para salir y seguir caminando.
***
Un rato después llegue a la entrada, los límites de la ciudad había un auto... una camioneta negra, grande y Cameron estaba en el asiento del conductor esperando. Estaban Oliver, Maira, Hayami y Castell esperando recostados en la camioneta.
-Llegas tarde -murmuro Cameron con el ceño fruncido.
-Son las seis en punto esa era la hora -afirme intentando tener razón.
-Si llegas 5 minutos tarde no llegaste, si llegas a la hora llegaste tarde, si llegas 5 minutos antes llegaste a tiempo -dijo mientras subía encendía el auto en señal de que ansiaba marcharse.
-Lo siento, no volverá a pasar.
En ese momento me di cuenta de lo serio que es Cameron al momento de una misión.
Subí al auto, al ser el último quedé en la ventanilla derecha junto a Castell apretujado contra la puerta, conducía a través de la ciudad, estaba nervioso de que las demás personas en la calle nos vieran, pero, aún así Cam y los demás parecían muy relajados como si solo fueran alguien mas en la ciudad.
Pasábamos por partes que no conocía, íbamos a las costas, nunca había ido, ni siquiera a la playa.
Pasamos por una zona de grandes containers que parecía abandonado, aunque los containers parecían estar en buenas condiciones aún.
-Ahi viven los renegados -dijo Maira, notaba tristeza en su mirada.
-¿Renegados? -Pregunte quitando mi mirada de la ventana para llevarla a Maira, aunque ahora ella solo miraba el piso del auto.
-Son monstruos, adefesios... mutantes -dijo Oliver respondiendo por Maira que parecía molesta.
-¿Monstruos? CaptainSafe no se encargaba de esas cosas -respondí.
-Kira no deja que CaptainSafe tenga autoridad aquí, les teme y nadie la culpa -dijo Oliver asqueado por hablar de ella-Talvez sería bueno que Kendall Smith tomara el control de este país y asi...
-¡Basta! -grito Castell. Luego de eso hubo un momento de silencio que parecía infinito; Castell parecía frustrado y muy iracundo, de repente, esa irá se convertía en tristeza y su frustración en lágrimas, mientras llevaba las manos a su cara.
Todos parecían sorprendidos de que aquel hombre que se veía tan empoderado podía estar en esa situación.
-Si ese maldito estuviera aqui todos... todos y cada uno de nosotros sin excepción estaría condenado, Kendall Smith es solo un psicópata infeliz -replico sin subir la mirada y limpiándose las lágrimas de la cara, aún intentándolo no lograba que ellas de resbalaran de sus manos y cayeran al piso.
-Lo siento... -Siguió Oliver intentando continuar con una disculpa pero las palabras no salían de su boca y estaba petrificado con un nudo en su garganta.
El resto del viaje nadie hablo más, Oliver y Maira miraban por el parabrisas el mar que estaba cada vez más cerca de nuestro destino, Castell seguía sin subir la mirada y además su furia parecía haberse ido ya y solo quedar una mirada melancólica y triste, Hayami estaba en el asiento de adelante dormida, yo solo veía por la ventana sin prestar atención a nada de lo que había, solo pensaba en los renegados, todo lo que sabía sobre los mutantes es que eran monstruos de la naturaleza pero aún así sentía cierta empatía por ellos, ¿no todos podían ser malos?
-Llegamos -Interrumpió Cam mis pensamientos.
-Estamos en medio del bosque -afirmo Oliver.
-Que observador Oli -Respingo Cam. -Debemos vigilar el puerto, Solo eso -Remarco Cam.
-¿Nos quedaremos sentados viendo cómo llegan los barcos? -Irrumpio Maira.
-Sentados no, acostados... en los arbustos -Corrigio Cam.
-Que molestó -murmuro Castell en el fondo.
-Acostumbrense -Replico Cam tomando una mochila de la parte trasera de la camioneta y entrando al bosque.
-¿Adonde vamos? -pregunte dudoso sobre entrar a un bosque es la Basta noche.
-No pueden vernos Nir, sería muy tonto de nuestra parte revelar nuestra ubicación -dijo evitando ramas e intentado no tropezar con raíces en el piso.
-Es aquí -murmuro agachándose y haciendo un ademán de sacar algo de la bolsa aunque no lo hizo, parecía haber olvidado algo que debía hacer antes de eso.
-¡Agachense! -exclamo en silencio. -Escucho algo... esa voz -dijo tembloroso y dubitativo.
Hubo un silencio, de fondo se escuchaba una voz tosca, como la de un fumador hablaba de entregas y de cajas no escuchaba nada fuera de lo normal.
Luego de un rato se escuchaba aquella voz tosca alejarse y varias voces más llegando, Cam parecía haberse relajado al escuchar que esa voz se alejaba.
-Lo que pasó en el auto... -empezó Hayami acercándose a Castell. -No debes avergonzarte, por lo que he oído de Kendall Smith es un maldito.
Castell no dijo nada solo dirijio una sonrisa simpática a Hayami
-Él... él mato a mis padres, eran mutantes, pero, no hacían nada malo -dijo con voz temblorosa. -Me habrían matado a mí también si no fuera normal.
-Fue injusto -respondió Hayami intentando animarlo.
-Si lo fue, desearía que los mutantes pudieran vivir en paz, la mayoría solo quiere vivir una vida normal -dijo más animado y casi inspirado.
-Estoy seguro de que algún día pasará -replico Hayami dándole una palmada en la espalda.
-Gra... -Castell estaba a punto de agradecerle a Hayami, no antes de que la sangre salpicara en su cara, vio sorprendida como un agujero perfecto se hacía entre las cejas de Castell y como caía lentamente al piso con los ojos abiertos viéndola a ella.
Todos escucharon sorprendidos el sonido del disparo, temerosos a voltear y ver la bala en su compañero, Hayami seguía en shock frente al cuerpo inmóvil de Castell.
-¡Maldición! -maldijo Cam al aire al ver el cuerpo en el piso. -¡Todos a la camioneta! ¡Ahora!
Todos corrieron frenéticamente a la camioneta, tuve que tomar a Hayami del brazo ya que estaba paralizada, muerto de miedo corría mientras seguíamos escuchando disparos unos tras otros que chocaban contra los árboles.
Mire atrás y vi aquel hombre con un francotirador apuntandonos, al hacer contacto visual conmigo solo dirijio una sonrisa burlona bajando el arma y guiñandome el ojo.
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