Hace bastantes años hubo un golpe de estado a mi ciudad, en ese momento Kira era una simple general militar con grandes contactos —claro está—. Nadie sabe como, pero, subió de rango en tan pocos días que la gente se asombró de que fuera parte de la milicia en realidad, llego a ser comandante de las legiones más prestigiosas contra la resistencia en poco más de unos años.

Su trabajo era recuperar el gobierno derrocado por todos los de la resistencia se hacían llamar Los elegidos, capturaron a varios ellos solo decían y cito "Los de arriba me eligieron en esta divina tarea" No solo después de eso no hablaban también intentaban suicidarse la mayoría lo lograba, eso paso a la historia.

Pero por supuesto, si Kira fuera recuperado el gobierno no se habría llegado a esta desprestigiósa situacion, ella decidió que la única forma de que el gobierno volviera a la normalidad era tomándolo por su cuenta, y fue exactamente lo que hizo, creo una división de ejército especial para esta resistencia tenían tecnología militar de última generación, el problema entro cuando, Los elegidos tomaron parte de esa tecnología fue una batalla bastante tensa y extensa que se cobro las vidas de muchos inocentes que buscaban su propia libertad, todos pensaron que esa tecnología se usaría en tanques y armas de fuego, pero no, eran los reyes del sigilo así que necesitaban algo silencioso entre ello: Espadas, dagas, cuchillos de cacería, ETC...; casi un año de batalla y estrategias todos perdían la esperanza de volver a lo que el pueblo era antes.

Pero, Kira no se rendía, cada vez los ataques a "Los elegidos" eran más elaborados, y mientras más batallas perdían mejor tecnología recibían de sus aliados, nadie sabía de donde venía, solo llegaban camiones y barcos llenos de armas y equipo, quedaban muy pocos de la resistencia entre ellos Sirius y Elena los padres de aquellos dos niños que tendrían que pagar las consecuencias de sus actos.

Una pareja que se enamoró en el calor de la batalla, juntos, eran imparables. Se los consideraba como la pareja del apocalipsis.

Ambos querían la libertad de su pueblo, pero, ese deseo fue opacado por el nuevo plan de formar una familia. Aún así no tenían ni una oportunidad de vivir una vida normal viviendo bajo la dictadura en Inglaterra.

Fueron rápidos y astutos al escapar de allí, no sabían a donde los llevaría el curso de su fuga, pero, nada les importaba mientras estuvieran juntos.

Después de llevar juntos casi dos años Sirius recibió la mejor noticia de su vida, Elena estaba embarazada. Para el eso era algo majestuoso, en ese momento lo que solo eran ideas de un escape se convirtió en realidad.

Esa ferviente idea de desear una vida mejor los llevo a la ciudad del sol naciente, Japón, allí decidieron formar su familia, apegarse a las tradiciones de ese país, criar a sus hijos de esa forma. Cuando apenas la pequeña Hayami —nombrada según las tradiciones— cumplía dos años de edad tuvieron otro hijo, está vez un varón, Nir.

La vida parecía perfecta, hasta que una noticia devastó a la feliz pareja que parecía estar a punto de tener su final feliz.

Elena estaba lista para volver a Inglaterra para pelear por su libertad, pero Sirius no lo deseaba, era feliz siendo una familia en Japón y le rogó que no fuera allí.

Sirius accedió a volver al país, pero, de forma legal.

A ella no le importo eso, quería liberar su ciudad, después de enterarse que Kira ya habría tomado la mayoría de los pueblos y que comenzó un gobierno de dictadura, no pudo aguantarlo, hizo un plan para robar el próximo cargamento de armas que llegara, Sirius ya no podía seguir con eso.

Quería alejarse así que abandono a Elena, esa mujer que algún día pudo amar tanto. Pocos días después anunciaron el robo de 2 camiones llenos de armas, parecía no importarle al padre que ignoraba la televisión a toda costa —especialmente los noticieros— tal vez por el miedo a ver a esa persona capturada o incluso muerta. Pasaron semanas sin saber nada de ella, hasta que, un día en televisión Kira anuncio atrapar a la "Líder Rebelde", dijo que ella era la prueba de un pueblo insignificante que a pesar de intentarlo no lo lograría jamás. Acto seguido Kira tomo un arma y le disparo a la hermosa mujer de pelo largo y rubio; el ver como en televisión se mostrara tal acto de violencia algo cambio dentro de él.

Ella se negó a revelarle a Kira la ubicación de las armas así que nunca fueron encontradas, la resistencia se disolvió, por miedo, claro esta aunque se relata que aun ahí grupos combatiendo desde las sombras.

***

Como cualquier otra mañana, Nir, ese chico de piel blanquecina y flacucho, con pelo liso y oscuro como la noche y su hermana Hayami —semejante a el en los rasgos básicos como su piel y color de pelo— se levantában... ,bueno relativamente, el la levantaba a ella para no llegar tarde, a pesar de que es 2 años mayor que Nir es muy irresponsable, a veces incluso predecía el tiempo con la posición en la que despertaba.

Camino al baño como siempre a hacer sus necesidades ducharse, cepillarse y vestirse; luego de eso se fijo que mi hermana aún no se levantaba, le resto importancia y se fue, le daba igual si llegaba tarde esd era su asunto ya era mayor de edad debía tener responsabilidades.

Bajé a la cocina a desayunar, estaba su padre, Sirius, haciéndolo.

—Buenos días Nir, ¿Cómo dormiste? —Dijo con una voz simpática

—Bien, Sirius, aunque Hayami estaba roncando un poco lo cual me molestó, debería dormir en algún otro lado como... En mi propia habitación —Su padre es muy tacaño por lo cual le cuesta invertir en una habitación propia para el chico

—Te dije que puedes decirme papá no debes llamarme por mi nombre. —Dijo con un tono de regaño—. Muchos otros padres dirían que eso es una falta de respeto.

—Asi es más divertido Sirius.

—Sabes, como quieras, me voy. —dijo mientras caminaba a la puerta, al menos dejo el desayuno listo.

Ese amanecer tenía algo raro, con una taza de café en su mano veía por la ventana, como el sol salía por las colinas del pueblo.

En fin, no sé porque sabía que la vida deparaba más para el, más que solo ser un estudiante graduado con honores, y tener una hermana floja e irresponsable, a pesar de perder media hora admirando la ventana pensando en distintas cosas, Hayami al fin se digno a despertarse y aún le sorprendia como podia alistarse tan velozmente, parece que para ella no es necesario despertarse temprano, salimos hacia la escuela, hablamos un poco ya que ir caminando era un poco largo y monótono.

Al llegar su hermana la cual es muy bromista por cierto, preparo una pequeña sorpresa/broma para Nir le pidió un cuaderno prestado y al bajar su mochila, se la arrebato y se la llevo corriendo, no le presti atención y solo solto una risa despreocupada pensando en que haría con su mochila, al entrar al salón de clases y ver a su hermana sentada en su puesto, pero, también vio su mochila en la mesa mojada hasta adentro, su furia de desbordaba hasta por las orejas que estaban rojas. No le molestaba que la robara. No le molestaba que la mojara. Le molestaba el hecho de los apuntes e innumerables tareas que había en ella.

Cuando el profesor entro lo primero que pidió exclamando a toda la clase

—La tarea en mi escritorio ¡Ya! —En ese momento sintió como todo su cuerpo se petrificaba de miedo, muchos dirían "tranquilo Nir solo es una tarea de muchas" Por supuesto ese es el credo de una persona ignorante, sin prestar atención a los diferentes registros de las universidades aunque no lo creas Harvard podría rechazarte solo por eso.

Intento explicarle a su profesor, inconscientemente el vivía en un mundo donde se revolcaba de su propia miseria, solo se pregunto qué pensaba mientras hablaba con el, solo lo miraba fijamente procesando los años y años de estudio que tuvo para llegar a un momento donde estaría solo y lo único en lo que pensaría es "como quisiera pegarme un tiro".

En el camino a casa mientras imaginaba su vida volviéndose un completo desastre sin imaginar lo que se volvería de su vida si no me aceptaban de una universidad prestigiosa y de gran calibre.

Llegaron a casa, su padre aun no llegaba así que fue a su habitación se recosto en su cama y miro el techo pensando en que cenarían, pasta a la bolognesa, talvez, estofado. Se dió cuenta que su cerebro divagaba mucho en retrospectiva a diferentes personas o eso le gustaba imaginar, ya que, lo hacía sentirse diferente a los demás y de un grupo más pequeño ajeno al normal y eso significaba que de algún modo debía ser más especial que los demás, la verdad solo pensaba en eso, por no pensar en la inmensa hambre que tenía ahí fue donde escuche un milagroso sonido —A cenar—. Grito su padre desde la cocina en el piso de abajo.

Corrío saliendo de su habitación, llegando a las escaleras sintio como alguien puso su mano alrededor de su boca. Dio un respingo de terror —¡Shh! —Exclamo.

—Nir hay alguien abajo y definitivamente no soy yo, ve al cuarto y protege a tu hermana ya vuelvo. —Tomo un cuchillo de cacería de su abuelo que había como decoración en la pared, era de un color platinado y muy filoso. Su mente estaba borrosa no pensaba con claridad no entendía que pasaba, luego como un rayo su mente se aclaró y pensó ¡Hayami! Cierto su hermana, se dije a si mismo, por suerte estaba escuchando música y no oyó a ese extraño gritar que bajáran, sin duda fuera llegado abajo muy rápido.

Le explicó la situación a pesar de que el no lo entendía del todo aun, escucharon el forzejeo de 2 personas peleando, se escuchaban cosas cayendo y rompiendose, su instinto le dijo que no debía bajar, que era demasiado peligroso, pero, se arme de valor y decidío bajar a ayudar a su padre, mientras corría abajo justo a punto de pisar las escaleras sintio un silencio, fue perturbador el pensar que la pelea había terminado tomo un abre cartas de la oficina de su padre y bajo dándose zancadas solo vio a su padre tirado en el piso con un gran charco de sangre creándose a su alrededor mientras corrió a ayudarlo vio una gran sombra detrás suyo. Al voltearse vio la silueta de una mujer yéndose del lugar.

Incluso hoy recuerda la frialdad que sentía al ver que sonreía hacia el soncarrona como si no le importara que... acababa de matar a su padre.

***

Unos días después, la policía determinó los reportes preliminares, concluían en que fue un intento de robo que se tornó violento al ver a los dueños de la casa, los dejaron ir al cementerio a visitarlo, a pesar de ser un hombre amigable, no tenia muchos amigos; Eramos solo 2 personas enfrente de una tumba que solo tenia significado para nosotros.

***

Después de todo esto pasaron unas semanas, Hayami tuvo la necesidad de abandonar la escuela y conseguir un trabajo. Sigue repitiendo que no le importa pero al ver su cara de preocupación y agonía todas las noches. Nir entendía que definitivamente no eran los planes que tenía precisos para su futuro.

Después de todo, Sirius si tenia amigos, cuando descubrieron que murió, decidieron hacer un buen entierro y les pidieron a los hermanos que buscáran algunas de sus cosas para hacer un altar, especificaron con mucho énfasis un par de maletines, no lo entendía, pero igual no les importaba, así que, los buscaron en su garage, solía acumular muchas cajas allí; Siempre llegaba con más de estas cajas casi cada semana. Normalmente eran baratijas o adornos que nunca usaríamos.

Encontro los dichosos maletines después de un tiempo entre polvo y tenebrosas arañas, eran pesados, sintio curiosidad en pensar que tenían dentro, se abstuvo de abrirlos hasta que se dio cuenta de que uno de ellos tenía su nombre estaba grabado en una pluma de tinta muy oscura y ese grabado que me traería tantos problemas "Nir" y pensar que mi propio nombre traería caos y terror a una dictadura.

El maletín resulto contener, una de las armas de sus padres más específicamente de su padre eran guantes, estos por dentro tenían pequeñas agujas, eran un poco más grandes del tamaño de mi mano.

En este maletín había una nota que noto apenas los levantó.

Nir, mi querido hijo. Si estás viendo esto es porque estoy muerto, esperaba no tener que llegar a este punto, pero, nunca creí llegar a tener una muerte natural o llegar a los cien años; y mucho menos mientras aún seguía en aquel peligroso lugar viviendo como un criminal.

Es muy irresponsable de mi parte tener que dejarte este legado a mis hijos, es algo que nunca me perdonaré incluso en la muerte, pero, espero que entiendas que no tenía ninguna alternativa. Mi mayor deseo es que vivan una vida longeva y para eso debo darte un regalo.

Es este maletín está un aparato de alta tecnología, es de las primeras generaciones de armas creadas por CaptainSafe, no te preocupes por eso, sigue siendo una de las más poderosas, pero, no es por su capacidad tecnológica, sino por el valor de la persona que la porta, para poder usarla se necesita un nivel de determinación y pureza que las demás personas no demuestran.

Así me despido, regalandote el poder para derrocar un gobierno y la confianza para seguir adelante incluso en las adversidades más duras.

Nunca me olvides y recuerda que lo más importante siempre será la libertad. La tuya y la de tu hermana.

Att: Tu padre
Sirius.

Antes de darse cuenta una lágrima cayó sobre la carta, era la primera vez que lloraba a la muerte de su padre —ya se sentía mal por no haberlo hecho— caían las lágrimas a montones mojando la hoja. Solo podía pensar en su padre y cómo podía haber sido ese su pasado, incluso si era un criminal, no le importaba seguía siendo su padre y siempre lo sería, estaba seguro que nunca lo olvidaría.

Se levantó y sin pensar mucho en lo demás entro al baño. Se paró en el lavabo y se miró al espejo.

Limpiándose las lágrimas se veía en el reflejo de el espejo que colgaba de la pared. Ese chico débil y flacucho, cómo podía tener una responsabilidad tan grande.

Sin darle más importancia interrumpió sus propios pensamientos, incluso si no podía, aún debía intentarlo a pesar de ser algo no pedido era un legado que aquel hombre que el tanto respetaba le había dejado.

Aunque decidiera intentarlo, no sabía por donde empezar. Los elegidos eran un pueblo perdido, uno que ya no regia en las calles de Inglaterra. Pero, recordó algo que le vino como si fuera un relámpago que caía del cielo directo a su cabeza, Highland.

Era un lugar que recordaba que un chico de su escuela había mencionado, se jactaba de haber ido allí y participar con los rebeldes en redadas y misiones muy peligrosas. Incluso si solo eran inventos suyos debía intentarlo, era la pista más cercana que tenía a los rebeldes.

Forzaba su cerebro a recordar el nombre de aquella fábrica abandonada que el decía que estaba a las afueras de sus tierras. Sweet... Sweet... ¡Sweet dreams! ¡Claro! Ese era el nombre de la fábrica. Ya tenía una pista lo suficientemente sólida para ir allí.

Solo tomo el maletín y se lo llevó. No le importó las altas horas de la noche que eran, decidido partió a un lugar peligroso sin ningún apoyo, solo la determinación en sus venas y la esperanza en sus ojos.