Una noche más, me desperté sobresaltada en la cama después de la misma pesadilla de siempre, y aunque intento calmarme yo sola, no era capaz, tenía una pesada y dolorosa sensación en mi pecho que no me dejaba parar de temblar, al menos hasta que sentí unos brazos a mi alrededor.

-¿J-james?... -le pregunto con algunas lágrimas rodando por mis mejillas en cuanto me doy cuenta de que era él, notando luego como su mano se pasaba por mi cabeza y acariciaba sobre todo mis orejas.

-¿Otra pesadilla de esas? -me pregunta sonriéndome levemente, a lo que asiento con la cabeza levemente mientras me acurruco como una especie de instinto contra él, escuchándolo así suspirar levemente mientras me seguía acariciando -Bueno, ya pasó, ¿sí? Seguro que antes de lo que crees, se darán cuenta de que no son una amenaza y volveran a estar juntos -me dice mientras me seguía acariciando.

-Ojal-lá... -le respondo con voz baja, sintiendo mis párpados pesar cada vez más y más gracias a sus caricias en mis orejas, hasta que finalmente dejo de ser consciente de lo que ocurre a mi alrededor.

***********************************

Volví a despertarme esta vez más tranquila que antes, frotando levemente mis ojos con mis manos, aunque mientras hacía eso escucho el sonido de la cafetera empezar a preparar el café, eso también me recuerda a las mañanas con Shadow antes de que... Lo atraparan por mi culpa...

Tras suspirar, me levanto de la cama para poder ir hacia la cocina -B-buenos días... -le digo a James cuando llego con él.

-Buenos días Alba -me responde sonriendo -¿Mejor por la noche? -pregunta antes de ofrecerme una galleta con chispas de chocolate, de mis favoritas.

Al ver la galleta, rápidamente le agradezco por ella antes de tomarla, asintiendo con la cabeza a su pregunta mientras le daba un mordisco a la galleta, moviendo mis orejas del gusto antes de sentarme en una de las sillas mientras sacudía levemente mis piernas.

Cuando estaba por terminarla, noto que James ya se había sentado a mi lado con su taza de café, acercándome también el paquete con las galletas, a lo que yo intento agarrar una con uno de los trucos que había estado practicando, acercar objetos a mi con mi poder psíquico.

Hasta ahora se que puedo parar cosas de seguir acercándose con eso, pero nunca antes había intentado mover algo, aunque desde que James me lo dijo, he estado practicando bastante estos días.

-Vamos... -digo en voz baja concentrándome en la siguiente galleta, logrando al menos sacarla del paquete y empezar a acercarla, aunque se seguía tambaleando bastante al punto de casi caerse, pero logré que no cayera y seguí atrayéndola hacia mi hasta que no pude más y la solté, pero esta vez estaba lo suficientemente cerca como para agarrarla con mi mano, aunque casi teniendo que subirme a la mesa.

-¡Mira! ¡La conseguí traer! -empiezo a decirle a James, después de tanto practicar, por fin me había salido aquel "truco", aunque ladeo mi cabeza al ver como tenía agarrada su taza de café.

Este se ríe un poco, supongo que por mi confusión, y por eso mismo inflo mis mejillas y frunzo el ceño, se estaba riendo de mi.

En cuanto me ve, deja de reirse y se acomoda en la silla -Ay peque, es que poco más y me tiras el café encima con tu hazaña -me dice manteniendo la sonrisa, acercándome más el paquete de galletas -Anda, mejor practica ahora intentando comerlas sin usar tus manos, al menos mientras me termino el café -dice antes de tomarse un sorbo de la taza.

-Bueeeno... -tampoco me parecía mala idea esa, además, ya le llegué a tirar más de una vez el café encima sin querer.

***********************************

Tras una mañana algo ajetreada con algunos recados, James me fue explicando que ese día era uno especial, porque se terminaba un año y en unas horas iba a empezar uno nuevo.

Sinceramente, ya no sé cuantos pasaron desde la última vez que vi a Shadow, mucho menos desde lo de María... Aunque si puedo decir que crecí desde entonces. Quizás ahora sería de su altura, o puede que no, imagino que ella también habría crecido algo más...

Lo que si me daba curiosidad en general era el motivo por el que mucha gente iba con mucha ropa encima, hasta cosas para taparse las orejas, aunque James me dijo que era porque hacía frío.

Si que es verdad que cuando el suelo se cubría de nieve, a veces en la casa entraba el frío y solía pasar las noches abrazada a Shadow, su pelaje estaba calentito, y supongo que por eso tampoco hacía demasiado por cubrirse.

Lo que no entendía era por que a mi no me hacía falta, o al menos no tanto como al resto, aunque coincido con James que la explicación está probablemente en mis poderes, aunque tampoco tendría a quien preguntarle... Aún me dan miedo los militares, sobre todo esos que se hacen llamar G.U.N. ...

Tras un rato caminando, llegamos hasta una tienda con muchos juguetes, pero no recordaba que una de esas tiendas estuviera en la lista, por lo que miro a James ladeando la cabeza -¿Te acordaste de algo más que no anotaste?

Este se ríe levemente asintiendo -Sí y no. -antes de que volviera a preguntar, él ya me estaba contestando de nuevo -Venimos a por un regalo para Anthony por las fiestas. Todos los niños buenos reciben regalos por estas fechas, y como que ya han vuelto de su viaje familiar, es momento de darle su regalo, pero cuando se lo demos, no digas nada de que lo conseguimos nosotros, ¿vale?

Aquella aclaración era un tanto confusa, pero finalmente accedí, la verdad también me hacía ilusión ver a Anthony, podría decirse que es de los pocos amigos que tengo ahora... La mayoría de la gente me sigue mirando raro por mis orejas y mis alas, y muchos nos evitan o critican a James por mi presencia... A veces desearía no ser una carga para él, pero insiste en que no pasa nada, que todos son tontos por no ver que solo era una niña normal... Pero yo sé que eso solo lo dice para animarme, yo no soy normal... O al menos no en el estándar humano.

En la tienda, James eligió una caja con un circuito de coches montable y varios coches adentro, y me dejó escoger algo que a mi me gustara, animándome a buscar por la tienda en lo que él revisaba si había otra cosa.

La verdad no estaba muy segura de eso, pero finalmente me convenció de buscar algo, encontrando así unas cajas de música en uno de los pasillos.

Entre todas ellas, una en concreto de color castaño oscuro llamó mi atención, y cuando la abrí, la melodía que empezó a sonar enseguida me hizo recordar a cuando María dormía conmigo y con Shadow de pequeña... Y como terminaba entonando suaves nanas para que me durmiera antes, y sonrío un poco al pensar que a veces hasta Shadow se quedaba dormido antes que yo por ellas...

Salgo de mis pensamientos al escuchar mi nombre, moviendo mis orejas y viendo allí a James esperándome, y ya sabiendo que me gustaba esa caja, la cierro y voy junto a él para entregarla en el mostrador como me tenía enseñado, aunque la mirada del cajero decía bastante de su opinión sobre mi, estaba claro que no le agradaba, bajando mis orejas por el miedo que me daban esa clase de miradas.

Por su parte, noto que James coloca su brazo más cercano a mi para pegarme algo más a él en lo que hacía el pago del juguete de Anthony y la caja, y en cuanto está listo todo, toma mi mano con una mano y la bolsa que le entrega con la otra, agradeciéndole al señor antes de irnos afuera.

-¿Todo bien peque? -me pregunta manteniendo el agarre, a lo que yo le asiento, la verdad no quería hablar de ello -Bueno, entonces solo te diré que mañana vamos a tener visita en casa, vienen Michael, Beth y Anthony a comer.

-¿Y le darás ahí el regalo? -pregunto manteniendo de nuevo ladeada mi cabeza algo confundida, aunque suponía que se debía a las fiestas.

-Pues si, aprovecharemos para dárselo -me responde sonriendo, contagiándome esta misma al saber que iban a venir.

***********************************

Durante aquella noche, cerca de ser las doce y comenzar ese nuevo año, James encendió la tele y me ofreció una copita con 12 uvas, y me explicó que, esa noche, esperaban a que un reloj diera las 12 campanadas correspondientes a la hora, comiéndose una uva con cada campanada para atraer la buena suerte en el año que comenzaba.

La verdad me parecía algo curioso, pero no me iba a quejar, me gustan las uvas. Aún así, después me advirtió de que habría fuegos artificiales, y eso si que ya no me gustaba mucho, hacen demasiado ruido y suenan como disparos cuando explotan en el cielo, aunque bueno, supongo que si ignoras el sonido, es algo bonito de ver.

***********************************

Y

a ha empezado un nuevo día, la verdad es que anoche nos quedamos los dos despiertos hasta bastante tarde, aunque en parte por mi fue por el ruido que había afuera por la gente, pues esta noche prácticamente nadie dormía y estaban todos celebrando en fiestas, ya fueran en casa o en la propia calle.

La verdad, creí que se notaría en algo el cambio del año, y no que simplemente sea un día en el que se celebra eso y ya, pero tampoco iba a cuestionar mucho aquella costumbre.

Lo que sí noté es que James estaba raro, como que parecía querer esconderme algo, pues después de desayunar me dijo que tenía una cosa urgente en el trabajo que hacer y que necesitaba estar solo, pero ayer me había dicho que hoy la oficina estaría cerrada, y con lo que estaba ahora estábamos los dos.

No voy a negar que me asusté un poco en cuanto se fue por la puerta, ¿y si al final me había equivocado en confiar y desde el inicio tenía razón en no hacerlo? ¿Y si en verdad todo era una farsa para sonsacarme información y luego entregarme en cuanto tenga lo que quiere?

No, no podía ser... Seguro era alguna llamada de urgencia que le hicieron mientras yo aún dormía... Si, debe de ser eso, no tengo de que preocuparme...

Al estar sola, se me ocurrió salir por una ventana para al menos tratar de despejarme volando un poco, y eso hice, dando una vuelta más o menos rápida por toda la ciudad mientras la sobrevolaba, observando desde abajo a todas esas personitas seguir con su vida con tranquilidad.

Tras un buen rato entre las nubes y dejándome caer algunas veces para luego retomar el vuelo, por fin regreso a casa, entrando de nuevo por la ventana, aunque nada más hacerlo escucho más de una voz, parece que ya habían venido todos y yo era la última.

Y mis sospechas se confirman en cuanto se abre la puerta de mi habitación, estando allí Anthony -¡Albaaa! -dice antes de correr hacia mi y abrazarme, a lo que yo sonrío y le correspondo, este niño siempre ha tenido curiosidad por mi, sobre todo en esa semana en la que me tuve que quedar con ellos a vivir por algunos asuntos urgentes de James, y me dio demasiada ternura cuando me llamó "hermana" un día que fui a buscarlo a la escuela con Beth.

-Ven, ven, que no podemos empezar sin ti -me dice de nuevo muy emocionado, agarrando mi mano con la suya más pequeña mientras tiraba de mi, sacándome una risa por eso mismo, pero le hago caso y lo sigo.

En cuanto llegamos al salón y alzo la mirada, un grito conjunto de James, Beth y Michael termina de llamar mi atención -¡Sorpresa! -era lo que habían dicho, y tenían con ellos globos como los que vi en el cumpleaños de Anthony, y una pancarta con mi nombre deseándome eso mismo, un feliz cumpleaños.

Esa sorpresa me dejó algo bloqueada, ¿y si se repetía lo mismo que en ARK y?...

No me da tiempo a seguir pensando en eso, pues Anthony ya estaba tirando de mi de nuevo para acercarme a la pequeña fiesta.

-No sabemos cuando celebras tu cumpleaños, así que pensamos que hoy valdría por cualquier día del año -me dice Michael con una sonrisa.

-Y te preparé un pastel especial pequeña, ¿por qué no lo miras? -esta vez era Beth, y le termino haciendo caso aún sin salir del todo de mis pensamientos.

En cuanto me fijo en el pastel, este a simple vista parecía uno de chocolate normal, mi favorito, pero... Lo que me hizo bajar las orejas de este fue el dibujo de la parte de arriba... Eran unos de fondant con Shadow y María, como si ellos, donde quiera que estén, también me desearan un feliz cumpleaños... Había usado mi dibujo para hacerlos...

Cuando ya pensaba que no podría haber más sorpresas, James me ofrece un paquete envuelto en papel de regalo, ¿hasta un regalo me hicieron?

Con las manos temblorosas lo termino agarrando, aunque prácticamente fue Anthony quien lo abrió por mi... Era la cajita que yo había elegido ayer, pero... Estaba pintada en negro, y cuando la abrí... Tenía detalles rojizos, azulados y dorados... Y también la pinza en forma de flor que Shadow me regaló en ARK ese día... Creía que ya la habría perdido al dejarla atrás donde vivíamos cuando fui a buscarlo.

Al ver la pinza y agarrarla con cuidado sin quitarle el ojo de encima, al final el propio James la agarra y me la coloca en la cabeza, al lado de mi oreja izquierda -Listo, ¿te gusta? -me pregunta sonriendo.

Una vez con la pinza puesta, ya no pude evitarlo más y empecé a llorar, aunque más que de tristeza era de felicidad... No creía que pudiera volver a sonreír así después de todo... O al menos no antes de regresar con Shadow.

Antes de empezar la fiesta como tal, finalmente todos me terminan abrazando, dejándome total libertad para llorar mientras yo los abrazaba de vuelta con mis alas... Aquel día se iba a quedar en mi memoria por bastante tiempo... Ojalá no me separen de vosotros también.

***********************************

Wenaaaaas xd

Pos bueno, este es un short de cumple de la niña Alba en su tiempo en la Tierra cuando ya los humanos son conscientes de su existencia por pedido xd

Y si, debería haberlo publicado ayer, pero fue un día ajetreado y además ando medio acatarrada, así que bueno, al menos no me retrasé demasiado.

Con esto también quiero desearle un feliz año nuevo a todo el que lea esto, y que el 2025 sea un buen año para todos.

Y ahora si, sin mas que decir, ya nos veremos en la próxima.