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Este capítulo es interesante y tenemos un Alec muy inteligente, sabremos para qué llamó a Lydia 😉

Resumen. Alec negocia algunos términos con Lydia y tiene una segunda pijamada en la casa de Magnus.

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Los agradables, pequeños bistros en Greenwich Village no son lugares que Alec suela frecuentar, lo cual hace que donde trajo a Lydia, se adapte perfectamente a sus necesidades. Están sentados en una mesa de la esquina en el patio exterior, ocultos a la vista por los muchos mundanos que almuerzan a su alrededor.

-"Me gustaría agradecerle a tu oficina por enviar a alguien tan rápido"- dice Alec- "Dada la delicadeza del asunto, prefiero mantener las negociaciones fuera de los muros del Instituto por ahora. La gente allí es leal, pero en momentos como este, cualquier riesgo es demasiado, ¿entiendes lo que quiero decir?"

-"Absolutamente"- responde Lydia- "Es bueno que pienses en el futuro. No es que hubiera esperado menos. He oído muchas cosas buenas sobre ti en Idris"

-"Lo Intento"- dice Alec, sonriéndole y luego mirando a uno de los camareros mundanos, ordena una botella de vino blanco para su mesa junto con una fuente de entradas- "Pensé que sería mejor almorzar mientras hablamos. No creo que tengas mucho tiempo libre para viajar fuera de Idris, trabajando en la oficina que estás"

Lydia levanta sus cejas con sorpresa, y Alec se encoge de hombros de una manera que espera que parezca casual y desarmante. Una breve mirada de incertidumbre cruza por el rostro de Lydia, pero luego se pone cómoda en su silla.

-"Soy un oficial subalterno, así que no"- responde ella- "¿Qué te parece esto? Primero quitemos del camino el negocio principal, y luego eres libre adularme todo lo que quieras mientras defiendes tu caso"- ella le sonríe dulcemente.

-"Muy bien"- dice Alec, sopesando diferentes ángulos en su mente, mientras el camarero regresa, sirviendo a cada uno una copa de vino- "Entonces, vayamos directo al grano, mi instituto ha localizado y asegurado la Copa Mortal. Para poder recuperarla completamente y devolverla a la Clave, necesito a Jocelyn Fairchild, quien creemos ha sido tomada como rehén por Valentine"

Para su crédito, Lydia oculta la conmoción que debe estar sintiendo muy bien, sólo el contener levemente el aliento delata que Alec acaba de lanzarle una bomba que fácilmente podría afectar su futura carrera- "Esa es – una información mucho más importante de lo que dejaste ver en tu solicitud de recursos"

-"Estoy consciente"- responde Alec- "Como dije, quiero mantener esto con la mayor discreción. ¿Todavía te sientes cómoda con negociar esto en nombre de la Clave, o debería pedirle al inquisidor Herondale que envíe a un funcionario de mayor rango?"

-"Creo que puedo manejarlo"- dice Lydia, y Alec puede ver un destello de emoción en sus ojos- "Sin embargo, necesitaré saber todo lo que puedas decirme. ¿Por qué necesitas a Jocelyn Fairchild? Comencemos allí"

-"La Copa ha estado escondida dentro de un objeto que ella hizo"- responde Alec- "Solo se puede recuperar con los mismos poderes angélicos que ella uso para ponerla allí"

-"Es increíblemente afortunado para ella"- comenta Lydia- "Por otra parte, como esposa y seguidora de un hombre que resultó ser un asesino en masa, creo que no puedo culparla por crear un seguro para ella y su hija. ¿Dónde está la Copa ahora?"

-"En un lugar seguro"- le dice Alec, y luego rápidamente desvía su atención hacia el camarero que llega con sus entradas- "Gracias, esto se ve genial. Ten, Lydia, ¿por qué no pruebas algo?"

Parece que ella quiere protestar, pero luego recoge sus cubiertos y toma algunos trozos de comida del plato que se colocó entre ellos para moverlos a su plato.

-"¿Cómo sabes que no está con Valentine por su propia voluntad?"- pregunta- "Quiero decir, después de todo están casados"

-"Ella y su hija permanecieron ocultas, lejos de él, vivieron como mundanas durante casi diecinueve años"- responde Alec. Debate consigo mismo acerca de mencionar a Luke, pero decide no hacerlo. Si bien sería una buena forma de juzgar qué tan tradicional es Lydia cuando se trataba de las relaciones Cazadores de sombras/Subterráneos, también es en definitiva un riesgo- "Por lo que entiendo, ella fue quien le quitó la Copa a Valentine después de que él se la robó a la Clave"- dice en cambio- "Y medida de seguridad o no, ella evitó que cayera en sus manos todo este tiempo – y las de cualquier miembro restante del Círculo"

-"Ya veo. ¿Y esta información proviene de...?"

-"Varias fuentes diferentes"- responde Alec- "Puedo asegurarte que todos han sido evaluados adecuadamente"

-"Sólo necesito asegurarme"- dice Lydia- "La hija de Valentine está en tu Instituto, después de todo. Un momento terriblemente conveniente para que ella aparezca, ¿no crees?"

-"No, estoy completamente de acuerdo"- dice Alec, complacido de que sus dudas acerca de Clary puedan funcionar a su favor por una vez- "Clary es un factor desconocido, por eso asigné a Jace para que la vigile. Créeme, si ella piensa que puede tomarlo por sorpresa, está muy equivocada"

-"Ah, sí, el ilustre Jace Wayland"- dice Lydia, sonriendo para sí misma- "Él es toda una leyenda en Idris. Corazones rotos dispersos a derecha e izquierda cada vez que va e visita"

Alec se obliga a sonreír. Pensar y hablar sobre Jace estuvo bien en la mañana cuando él e Izzy revisaron los archivos, pero ahora, su sola mención le causa una sensación punzante proveniente de su runa.

Él lo ignora y se concentra en Lydia nuevamente- "Ese es Jace. Siempre bromeamos acerca de cómo tomó la apariencia y el encanto que debía ser para ambos y se quedó con todo"

-"Oh, no estoy segura de eso"- dice Lydia, y hay algo en su lenguaje corporal que a Alec no le gusta mucho- "Muchas chicas en Idris están gritando por conocerte. Especialmente con los rumores..."

-"¿Y qué rumores serían?"- pregunta Alec, un poco demasiado rápido, luchando por mantener su voz ligera.

-"Que estás buscando establecerte"- responde Lydia, mirándolo atentamente- "Casarte"

Alec siente que se pone rígido. Así es como sus padres van a jugar. Alec ni siquiera sabe por qué está sorprendido; es algo completamente lógico para ellos, considerando la charla que tuvieron antes.

De alguna manera, sin embargo, esto podría ayudar con el plan de Alec. Así que compone una triste sonrisa en su rostro y niega con la cabeza.

-"No es cierto, me temo. Mis padres – bueno. Ya sabes cómo son los padres. Tienen buenas intenciones, pero no siempre... están al corriente de todo"

Lydia sonríe- "Sé lo que quieres decir. Los míos también intentaron emparejarme con alguien"

-"¿Oh enserio? ¿Cómo salió eso?"

-"No tan bien para ellos"- responde Lydia con ligereza, y luego duda, antes de cerrar los labios con una sonrisa tensa- "No es importante, en este momento. Regresemos a tu propuesta. Necesitas a Jocelyn Fairchild para recuperar la Copa Mortal. ¿Qué recursos está solicitando de la Clave para esto? ¿Asumo que también buscas la aprobación para llevar a cabo y dirigir esta misión?

-"Si. Y aquí es donde la solicitud... se pone un poco complicada"- responde Alec, inclinándose ligeramente hacia adelante, y mirando a Lydia directamente a los ojos- "Antes que nada, necesito un estatus de diplomático temporal de la Clave para Izzy. Para la Corte de las Hadas"

Lydia alzó las cejas, sorprendida- "Las Hadas han cortado toda comunicación oficial con la Clave"

-"Lo sé. Y los contactos de Izzy entre ellos es cómo obtiene información la Clave"- responde Alec- "Creemos que los exploradores que fueron asesinados pueden darnos una pista sobre dónde se esconde Valentine, pero los informantes principales de Izzy no están lo suficientemente posicionados en la como para tener la información que necesitamos"

-"No sé, Alec, estás pidiendo algo enorme"- dice Lydia- "

-"Reconozco que la relación de Isabelle con el Hada Meliorn ha producido cierta información útil en el pasado, pero la Corte es una liga completamente diferente, y la oficina del Inquisidor..."

-"Izzy es el miembro más calificado de mi equipo"- interrumpe Alec- "Ella es la mejor patóloga de Nueva York, una historiadora en Hadas y habla tres de sus idiomas. El hecho de que ella también sea excelente en el uso de su belleza para su ventaja es simplemente la guinda del pastel. Es mi principal negociadora, y la necesito para esto"

-"Está bien"- dice Lydia con voz uniforme- "Veré que puedo hacer. ¿Qué otras solicitudes tienes?"

-"Acreditación"- dice Alec simplemente, luchando por mantener su expresión tranquila y segura, incluso cuando su corazón se acelera en su pecho- "Sé que es costumbre que el heredero de un Instituto se case antes de que se les otorgue oficialmente el puesto de Jefe, pero tengo excelentes respaldos en mi hermana y mi parabatai, tengo más experiencia como Jefe Interino que la mayoría de las personas que toman esa posición"- finge vacilar y luego se inclina un poco más cerca de la mesa, invitando a Lydia a su espacio y bajando la voz- "Además, con Valentine en ascenso... confío en mis padres, por supuesto, pero con su... historia, y la Copa estando tan cerca... sólo quiero asegurarme de que el Instituto no esté en ningún riesgo"

Lydia toma otro sorbo de su vino, claramente meditando sus palabras en su cabeza. Alec toma otro bocado de su comida y se obliga a tragar mientras espera.

-"¿Alguna razón en particular por la que haces esta solicitud cuando podrías casarte y asumir el cargo de la manera habitual?"- pregunta Lydia, y el estómago de Alec da un vuelco. Debería haber sabido que no sería tan fácil.

Lo que va a decir a continuación es arriesgado, pero no tan arriesgado como dejar que Lydia sepa la verdad; él solo tendrá que esperar a que ella tenga una vena romántica. Y que le compre lo que está vendiendo- "Sé que esto va a sonar como una locura, siendo el mayor y todo eso"- comienza, agachando la cabeza- "Pero yo – um, realmente me gustaría casarme por amor. Y simplemente no he... encontrado a esa persona todavía, ¿sabes?"

Lydia lo mira por varios segundos cuando él levanta la mirada, y luego, de repente, parpadea varias veces y mira hacia otro lado. Alec ve su mano temblar ligeramente donde está apoyada sobre la mesa.

-"¿Todo bien?"

-"Sí, por supuesto"- responde Lydia rápidamente, parpadeando otra vez antes de volver a mirarle- "Lo siento, yo – tengo algo en mis ojos, creo"

-"¿Más vino?"- le ofrece Alec, llenando generosamente su copa cuando Lydia asiente- "Creo que hemos terminado con los puntos principales, ¿verdad? ¿Pedimos el plato principal?"

Lydia asiente de nuevo, y Alec cree que ve un destello de gratitud en sus ojos mientras él le entrega el menú y comienza a hablar sobre algunos platos que podría querer probar. Archiva mentalmente su reacción, preguntándose con qué punto débil de ella había conseguido tropezar.

Explican los detalles del trato durante un largo y prolongado almuerzo, y Alec piensa que le está yendo muy bien para ser el líder perfecto del Instituto, a pesar del continuo nerviosismo que parece no poder quitarse. A medida que pasa el tiempo (y se consume más vino) cada vez es más difícil ignorar la creciente incomodidad que se extiende a través de la parte inferior de su abdomen, y especialmente los pequeños picos de dolor que surgen de vez en cuando. No es constante ni abrumador, solo una oleada aquí y allá, pero cualquier cosa que Magnus haya hecho para calmar el dolor claramente está empezando a desaparecer.

Alec saca su teléfono y lo revisa a hurtadillas debajo de la mesa. Los mensajes que envió a Magnus todavía están marcados como 'no leídos', y han pasado más de ocho horas desde que envió el primero.

-"Pareces preocupado"- comenta Lydia- "¿Ocurre algo? ¿Te necesitan de vuelta en el Instituto?"

-"Probablemente no sea nada"- responde Alec- "Déjame llamar rápido a Izzy y hacer una doble verificación. Vuelvo enseguida"

Se mete en el restaurante y encuentra un corredor vacío, dibujando una rápida runa de reconocimiento para asegurarse de que notará que alguien se acerca y marca el número de Izzy en su teléfono.

-"Alec, ¿estás bien?"- pregunta Izzy tan pronto como contesta- "Mamá y papá parecían demasiado contentos cuando se reunieron conmigo y Max en el parque. Y mamá dijo que estabas pasando por un momento difícil y que deberíamos 'darte espacio'. Por favor, dime que no trataron de intimidarte otra vez para que te cases"

-"Oh, si lo intentaron"- responde Alec, sintiendo un pinchazo de amargura ante el recuerdo- "En este momento, les estoy dejando creer que tuvieron éxito, pero esa no es la razón por la que estoy llamando. Necesito que hagas algo por mí "

-"Claro, ¿que necesitas?"

-"¿Puedes mantener a mamá y papá alejados de mí por el resto de la noche?"- pregunta Alec- "Me estoy ocupando de algo en este momento, y luego necesito ver que Magnus esté bien. Se marchó esta mañana por algo que claramente era una emergencia, y no he tenido noticias suyas desde entonces"

-"Eso no suena bien. Pero sí, claro, los mantendré distraídos"

-"Gracias, Iz. ¿Has tenido noticias de Jace?"

-"No, pero el ocaso es en un par de horas, por lo que deberían prepararse para moverse"

-"Bueno. Mantenme informado"

Tan pronto como Izzy finaliza la llamada, Alec reanuda su conversación de texto con Magnus, comenzando a escribir un nuevo mensaje. Como si fuera una señal, su teléfono comienza a sonar, y el nombre de Magnus aparece en la pantalla.

-"¿Magnus?"

-"Hola, Alec"- responde Magnus. Él se da cuenta que suena cansado. Cansado y un poco sin aliento.

-"¿Todo bien?"

-"Empezando a estarlo"- dice Magnus- "Escucha, pregunté un poco sobre el color de la magia en tus sueños. Creo que tengo algunos posibles candidatos, y solo quería que lo supieras"

-"Eso es genial"- responde Alec- "Izzy y yo encontramos el archivo de un caso en el Instituto que parece sospechoso. Te envié un mensaje de texto al respecto"

-"Bien"- dice Magnus- "¿Lo traerías a mi guarida después de que hayas terminado en el Instituto esta noche? Necesito volver con los demás; todavía hay mucho trabajo por hacer"

-"Por supuesto"- responde Alec- "Hey, Magnus"- le llama cuando él comienza a despedirse- "Ten cuidado"

-"Gracias"- dice Magnus, con una nota de sorpresa en su voz- "Tú también"

-"Adiós"

Mantiene el teléfono en su oído unos segundos después de que Magnus cuelga, y luego vuelve a la mesa, sintiéndose mucho más ligero que antes.

-"Supongo que fueron buenas noticias" dice Lydia, cuando vuelve a sentarse.

-"Muy buenas"- responde Alec- "Lo siento, ¿me estabas hablando de uno de tus casos recientes?"

-"Sí, no hay mucho más que contar, en realidad"- dice Lydia con un suspiro- "El caso está resuelto, pero no hay pruebas suficientes para enjuiciar. Así que irá en mi pila de Camille, con todos los demás, y continuará frustrándome"

-"Espera, ¿estás armando un caso contra Camille Belcourt?"- pregunta Alec, dándose cuenta de que probablemente debería haber prestado mucha más atención a lo que Lydia le estaba diciendo.

-"No, estoy tratando de armar un caso contra ella"- responde Lydia- "Ha sido más de un año. Hay al menos diez casos, que sepamos, dónde rompió los Acuerdos; pero nunca hay un cuerpo, y el resto del Clan siempre corrobora su coartada, así que..."- apuñala con el tenedor la rebanada de pay de queso con fresa frente a ella- "Dios, haría cualquier cosa para conseguirle algo en este momento"

Alec se detiene en seco, su mente de repente trabajando a mil.

-"Lo siento, necesito hacer otra llamada"- dice, levantándose de la silla- "Vuelvo enseguida"

Se apresura a regresar al corredor vacío, marca el número de Jace y se maldice a sí mismo cuando lo recibe el mensaje de voz. Cuelga e intenta otra vez. Y otra vez.

-"Alec, no puedo hablar en este momento"- dice Jace cuando finalmente contesta- "Te llamaré más tarde, yo–"

-"No puedes dejar que Clary apuñale a Simon"- lo interrumpe Alec, y escucha la respiración sorprendida de Jace al otro lado de la línea- "Izzy me dijo lo que Clary necesita hacer, y me doy cuenta lo difícil que debe ser la situación para ella, pero solo hazla esperar hasta que lleguemos allí, ¿de acuerdo? Es importante"

-"Um, sí, sobre eso"- dice Jace, y Alec sabe de inmediato lo que viene.

"¿Ella no va a clavarle la estaca?"- pregunta, bajando la voz y mirando rápidamente para asegurarse de que nadie esté escuchando- "Jace, sabes que no puede involucrarse en asuntos de Subterráneos hasta ese punto – ¡la Clave tendrá su cabeza!"

-"Simon es su mejor amigo"- responde Jace- "Y ella aún no ha tomado una decisión. No seas tan duro con ella, ¿quieres? Imagina si fuera Izzy o yo"

La sugerencia por sí sola es suficiente para enviar una sacudida de miedo a la columna de Alec. La runa en su cadera pulsa incómodamente- "Jace, yo–"

-"Sólo hazte la vista gorda, por esta vez"- pide Jace- "Por favor, Alec. Si no lo haces por ella, entonces por mí. ¿Por favor?"

La runa vuelve a pulsar, esta vez más dolorosamente- "¿A dónde te diriges?"- pregunta Alec como respuesta- "¿Cuál cementerio?"

-"Alec, vamos, por favor"

-"Podríamos tener una forma de deshacernos de Camille permanentemente"- le dice Alec- "Demostrar que ella ha estado rompiendo los Acuerdos. Pon a Clary en el teléfono; déjame hablar con ella"

-"Bien, espera"- responde Jace, y Alec oye un murmullo de conversaciones en voz baja antes de que Clary se ponga al teléfono.

-"¿Hola?"

-"Clary, escúchame"- dice Alec- "Me doy cuenta de que tu vida parece ser una completa mierda en este momento, pero hay una posibilidad de que podamos hacer que Camille pague por lo que hizo, no solo a Simon, sino a un montón de otras personas. Quieres eso, ¿verdad?"

-"Más que nada"- responde Clary con fervor, y por una vez, Alec está feliz por su tendencia a arrojarse de cabeza a todo- "Dime lo que tengo que hacer"

-"Gracias, Clary"- dice Lydia, más tarde, cuando todo ha terminado y Camille ha sido llevada a través de un portal por cuatro Cazadores de Sombras, que llevaban el emblema de la oficina del Gran Inquisidor- "Has sido de gran ayuda para la Clave esta noche"- lleva su mirada de Clary al cuerpo de Simon tirado en el suelo y luego de vuelta de regreso a ella, poniendo una mano en el brazo de Clary- "Siento mucho tu pérdida"

-"Si elijo traerlo de vuelta"- comienza Clary, mordiéndose el labio mientras mira también el cuerpo de Simon- "Si se convierte en vampiro, ¿qué significará eso para él?"

-"Si Raphael decide traerlo de regreso, Simon será miembro de su Clan"- le corrige Lydia- "Tendrá que obedecer los Acuerdos, al igual que todos los demás. Tendrá que separarse de los mundanos hasta que pueda controlar la sed de sangre, y él se reportará con Raphael, estará obligado a seguir su dirección"

Le da un pequeño apretón al brazo de Clary y luego se acerca a Raphael, que ha estado observando toda la operación desde un costado.

-"Dentro de los próximos tres días, tendré la documentación para su toma de posesión oficial sobre el Clan de Nueva York"- dice, tendiéndole una mano a Raphael para que estreche- "Felicidades, señor Santiago, usted tiene su propio Clan"

-"Siempre es un placer ayudar a la Clave"- responde Raphael con una sonrisa irónica en los labios.

-"Alec, fue un placer conocerte" dice Lydia, dirigiéndose a él después- "Examinaré los detalles prácticos de lo que discutimos y me pondré en contacto lo antes posible"

-"Gracias, Lydia, lo aprecio"- dice Alec, extendiendo su mano para estrecharla también- "Avísame si necesitas algo más de nuestra parte"

-"Lo haré"- responde Lydia- "Ahora, si todos me disculpan, tengo mucho trabajo por hacer"

Ella está prácticamente rebosando de emoción mientras camina hacia el portal aún abierto y desaparece de la vista.

Alec deja escapar un largo y lento suspiro, siente que parte de la tensión que ha cargado durante toda la tarde deja sus hombros. Eso salió bien. Ahora solo puede esperar que haya hecho lo suficiente para que Lydia esté de su lado.

-"Clary, es hora de elegir"- dice Raphael acercándose, una pala y una estaca sujetas frente a él- "El reloj está corriendo"

Clary traga con dificultad, y Alec puede ver nuevas lágrimas formándose en sus ojos. Ella mira al cuerpo de Simon por un largo tiempo, y luego estira su mano hacia adelante, tomando la pala de la mano de Raphael.

-"Buena elección"- dice Raphael- "Lo prepararé mientras cavas"

Es después de la medianoche cuando Alec regresa al piso de Magnus, sólo para encontrar que todavía está vacío. Está temblando de adrenalina después de ver a Simon alzarse, todo en su interior al borde y gritando 'peligro' mientras miraba a Simon rasgar una bolsa de sangre tras otra, todo instinto demoníaco y sin ningún signo de la persona debajo de este.

Sin embargo, se alegra de que estuviera allí, viendo cómo Clary se desmoronaba por completo y Jace tenía que concentrarse en ayudarla, en lugar de al vampiro recién nacido. Juntos, Alec y Raphael lograron calmar a Simon lo suficiente como para llevarlo de vuelta al Hotel DuMort, hacer que lo limpiaran, lo alimentaran e instalaran en una habitación a dos puertas de distancia de Rafael. Cuando Alec se fue, Clary se había calmado considerablemente, ella y Simon estaban a punto de abrazarse.

Alec toma asiento en el sofá y saca el archivo que trajo, leyendo de nuevo su contenido mientras espera. Su runa se ha mantenido relativamente tranquila durante la noche, el dolor se ha disparado un par de veces desde que salió del Hotel DuMort.

Ahora, mientras lee el archivo, la sensación de picazón regresa, y cuando Alec cierra los ojos y se concentra, casi puede ver la brillante luz amarilla de sus sueños acercándose a él y sientre otra mano que sujeta la suya con fuerza.

'Mucha suerte, pequeños Nefilims'

Los ojos de Alec se abren de golpe, una sensación de nauseas floreciendo en su estómago mientras la sombra de una voz resuena dentro de su cabeza. Él recuerda, pero al mismo tiempo no, y cuanto más lo intenta, más intangible y borroso se vuelve el recuerdo.

Hay un agudo dolor de cabeza detrás de sus ojos, y Alec vuelve a poner el archivo sobre la mesa, frotándose las sienes para tratar de aliviar el dolor. Luego suspira y cierra el archivo, sacando su estela para dibujar una Iratze.

Parece que no está avanzando más sin Magnus. En su lugar, va a la cocina y mira a través de los armarios hasta que encuentra lo que necesita para hacerse una taza de té.

Ha pasado más de una hora cuando finalmente se abre un portal y Magnus llega a través, balanceándose precariamente sobre sus pies.

Alec rápidamente se levanta de su sillón y se acerca a él, poniendo una mano en su brazo y la otra en la parte baja de la espada de Magnus para estabilizarlo.

-"Jesús, ¿estás bien?"

-"Perfecto"- responde Magnus, y luego tropieza- "Usé un demasiada magia es todo. Sólo – necesito dormir un poco y estaré como nuevo"

-"De acuerdo"- dice Alec, mirándolo por si hay heridas obvias cuando comienzan a caminar hacia la habitación de Magnus- "¿Que pasó? ¿Fue Valentine?"

-"A menos que haya otro grupo de Cazadores de Sombras con un circulo andando por ahí"- dice Magnus cansado- "Atacaron una de las nuevas guaridas, pero todo está bien. Los derrotamos"

-"Bien"- dice Alec, sintiendo una punzada de preocupación cuando Magnus se balancea y tropieza de nuevo- "Vamos, a la cama. Casi llegamos"

-"Realmente tenemos que encontrar una forma de evitar estas constantes interrupciones"- murmura Magnus, mientras Alec lo ayuda a cambiarse de ropa y se ríe mostrando su acuerdo, manteniéndolo firme cuando Magnus se quita los zapatos.

Se queda al lado de la cama por un momento después de que Magnus se mete debajo de las mantas, inseguro de si debería dejarle solo para dormir o quedarse en la habitación y vigilarlo, en caso de que haya lesiones ocultas que se manifestarán una vez que toda la adrenalina de la lucha desaparezca. Magnus debe sentir su dilema, porque se da vuelta de costado y extiende una mano, buscando a Alec.

-"¿Te quedas otra vez?"

Alec toma la mano que se le ofrece y la aprieta, una decisión fácil de tomar. Se acerca al otro lado de la cama y se desviste dejando sólo su ropa interior, colocando su ropa en la misma silla donde las encontró esa mañana.

-"Hay cepillos de dientes extra debajo del fregadero"- murmura Magnus, ya medio dormido.

Alec lo mira por unos momentos más y luego se acerca para apagar la lámpara en la mesilla de noche del lado de Magnus antes de dirigirse al baño.

Alec se despierta en una completa oscuridad y la sensación de un cálido aliento acariciando su nuca. Durante un momento se siente desorientado antes de que los acontecimientos del día vuelvan a él, y luego siente una escalofriante emoción que recorre su espina dorsal cuando comienza a mirar a su alrededor. Está acostado de lado, mirando hacia afuera de la cama, y Magnus está acurrucado contra su espalda, con un brazo colgando casualmente sobre su cintura, pero hacerle cucharita del todo.

El corazón de Alec se acelera mientras gira cuidadosamente sobre su espalda, reprimiendo un gemido cuando el movimiento hace que el antebrazo y la mano de Magnus se arrastren lentamente sobre la parte inferior de su estómago. Se da vuelta completamente para que él y Magnus se encuentren frente a frente, a pesar de que no puede distinguir más que su silueta general en la oscuridad.

Alarga la mano y la coloca abierta sobre el pecho desnudo de Magnus, sintiendo su corazón golpea constantemente contra su palma. La piel de Magnus es cálida y suave, su pecho firme y completamente perfecto, mientras Alec traza sin pensar una línea por su esternón. Su mente se remonta a la noche de su cita, a la forma en que el cuerpo de Magnus se sintió presionado contra el suyo, y se encuentra acercándose más, deseando sentirlo de nuevo.

-"Mmm, eso es realmente agradable"- murmura Magnus somnoliento, moviéndose ante el toque mientras la mano de Alec sube por su pecho y cuello, hacia su cabello- "Ven acá"

Alec cierra la última distancia entre ellos y baja la cabeza con anticipación. Los labios de Magnus se rozan con los suyos dolorosamente lento al principio, apenas haciendo contacto. Alec se mantiene perfectamente quieto mientras el suave contacto se vuelve más audaz, jadeando cuando siente el primer roce de la lengua de Magnus contra el borde de su labio superior.

Utiliza la mano enredada en el cabello de Magnus para empujarlo de una vez, profundizando el beso. La boca de Magnus es increíblemente adictiva, y la forma en que se rehúsa a dejar que Alec acelere las cosas y convierta el contacto suave y perezoso en algo desesperado es el peor tipo de provocación y, al mismo tiempo, completamente celestial.

Magnus susurra algo en el beso que Alec no capta, y cuando vuelve a abrir sus ojos, encuentra la habitación bañada en luz de las estrellas, el techo sobre él se ha transformado en un despejado cielo nocturno.

-"Las lámparas son aburridas"- le dice Magnus, con una sonrisa demasiado petulante en su rostro. Echa a Alec de espaldas y cae sobre él; Alec suelta un gemido al contacto de todo su cuerpo. Separa las piernas para darle a Magnus más espacio, otro gemido escapa cuando sus caderas se alinean.

Magnus ya está a medio camino, y lo único que lo separa actualmente de Alec es su ropa interior y los sueltos y sedosos pantalones de pijama de Magnus, que no dejan mucho a la imaginación. Alec baja las manos por su espalda y sumerge las puntas de sus dedos debajo de la pretina, su propio pene se contrae mientras tira de las caderas de Magnus y rueda las suyas hacia él.

-"Definitivamente agradable"- murmura Magnus, y Alec puede sentirlo sonriendo en su beso mientras sus caderas se mueven a un ritmo lento y perezoso- "¿Pantalones puesto o fuera?"

Alec desliza sus manos completamente debajo de la tela de los pantalones de Magnus en respuesta, amando el jadeo que provoca y la forma en que el ritmo de Magnus falsea por un segundo- "Fuera, por favor"

Magnus gime y se aleja, sentándose sobre piernas y deslizando sus manos por la parte exterior de los muslos de Alec- "Levanta tus caderas para mí"

Alec lo hace, y Magnus lo ayuda a arrastrar su ropa interior por sus piernas, por sus rodillas, por sus pies. Luego coloca los pies de Alec de nuevo sobre el colchón y pone sus manos sobre cada rodilla, acariciando la piel en pequeños círculos con sus pulgares.

-"Dios mío, Alexander, eres absolutamente exquisito"

Alec cierra los ojos, sintiéndose caliente por todos lados. Los ojos de Magnus sobre él son como una marca, y sus manos se sienten aún más calientes cuando se inclina hacia adelante y las sube por el interior de sus muslos.

-"Magnus, yo–"

Se olvida qué más estaba a punto de decir cuando Magnus baja sus manos por sus piernas, levantando la derecha para descansar contra su hombro y girando su cabeza, colocando un prolongado beso en la parte superior de su pantorrilla.

-"¿Sí?"

Alec gime en respuesta, usando el apoyo que tiene para levantarse, tratando de acercarse- "Más"

Magnus sonríe y le da otro beso en la pantorrilla- "¿Más de qué? ¿Esto?"- Sus manos suben por los muslos de Alec otra vez, tortuosamente lento.

Y luego, como si eso no fuera suficiente, comienza a trazar el mismo camino con la boca.

Alec se estremece. Apenas han comenzado, y él ya siente que está a punto de vibrar, su cerebro un lío de emociones y pensamientos en conflicto mientras intenta procesar todo. La fácil familiaridad que sintió durante su frenética sesión de manoseo se ha ido, e instintivamente mira hacia su interior, tratando de encontrarla de nuevo.

Magnus sigue acariciando el interior de sus muslos mientras su boca se abre camino hacia adentro, los movimientos amplios y firmes se alternan con el toque de apenas la punta de sus dedos, y todo se siente tan nuevo; nuevo, incierto y completamente abrumador.

La boca de Magnus se cierne sobre la punta de su pene por lo que parece ser una eternidad, el aliento caliente apenas roza sobre la piel, antes de finalmente bajar la cabeza un centímetro y envolver sus labios alrededor de la cabeza. Baja cada vez más, la succión húmeda y caliente se hace cada vez más intensa, y Alec echa la cabeza hacia atrás, jadeando por aire mientras todo gira a su alrededor.

Su cuerpo quiere ir más rápido, quiere que el placer se estrelle en cada extremidad y manos apresuradas donde más las necesita para que ambos puedan obtener lo que quieren lo más rápido posible. El toque de Magnus es provocadoramente lento y abarcándolo todo – causándole placer a Alec de una manera que es tan diferente – Alec no tiene idea de cómo, sólo que lo es – y lo está volviendo loco, como si su cuerpo estuviera siendo jalado en dos direcciones diferentes a la vez, atrapado entre lo que sea que esté buscando y la realidad del toque de Magnus.

-"Más"- se las arregla, tirando de Magnus, poniéndolo de nuevo en posición sobre él para que pueda besarlo de nuevo, hacer que se toquen con cada parte de sus cuerpos- "Mas por favor"

Él no sabe lo que está buscando, sólo lo hace, y lo que falta está muy cerca. Puede sentirlo en sus huesos, en su sangre, todo dentro de él está al límite y esperando. Empuja la parte superior de los pantalones de Magnus, los baja por sus caderas y lo ayuda a patearlos, ambos gimen mientras se juntan de nuevo, piel contra piel.

Por instinto, agarra la mano de Magnus, girando la suya para que estén palma a palma y la sujeta fuertemente. Por una fracción de segundo, los ojos de Magnus resplandecen de brillante color dorado, y Alec pierde el aliento. Se lanza hacia adelante y captura los labios de Magnus con los suyos una vez más, besándolo desesperadamente, esperando que la conexión se forje.

Casi lo hace, Alec puede sentir el espectro mágico de Magnus sobre su piel, filtrándose dentro de él y comenzando a tirar. Pero entonces todo se rompe, y antes de que Alec tenga tiempo para reaccionar, Magnus se aparta de él, levantando su mano para evitar que Alec se acerque demasiado cuando intenta seguirlo.

-"Detente"- dice Magnus, ronco y sin aliento, como si necesitara cada pizca de su autocontrol para decir esa única palabra.

Alec espera a que continúe, la aprehensión se eleva dentro de él mientras Magnus respira profundo otra vez, claramente tratando de calmarse.

-"Magnus, ¿qué sucede?"- pregunta Alec, cuando ha pasado casi un minuto y Magnus todavía no lo ha mirado- "¿Estás bien? ¿He hecho algo? Fue–"

-"No. No, no es nada – yo, um – Lo siento. No eres tú, es solo... Por favor, dame un minuto"- responde Magnus, con los ojos firmemente cerrados y la cabeza baja.

-"Está bien"- responde Alec con cuidado. Se inclina levemente y extiende una mano- "¿Hay algo que pueda hacer?"

Magnus gime- "Demasiadas cosas, cariño. Ese es justo el problema"

-"Ah"- dice Alec sorprendido- "Oh, ¿te refieres a–?"

-"Debí verlo venir"- responde Magnus, su voz sonando más como la normal, aunque sus ojos permanecen firmemente cerrados- "Por supuesto que estarías acostumbrado a... no me di cuenta de que se transferiría tan bien a mi magia, eso es todo. Probablemente se deba a que me prestaste tu poder antes; mi magia ya te conoce, así que cuando le diste la oportunidad de vincularse, es solo que–"

-"Espera, ¿qué?"- le interrumpe Alec, retrocediendo un poco en estado de shock- "¿Qué quieres decir con la oportunidad de vincularse? ¿Es lo que acaba de suceder?"

Magnus respira profundamente y levanta la cabeza. Sus ojos se abren, y en lugar del rico marrón que Alec está acostumbrado a ver, un par de ojos felinos le miran, brillando levemente en la oscuridad.

La marca de brujo de Magnus. Alec traga con dificultad, pero mantiene su mirada firme mientras extiende su mano otra vez, dejando escapar el aliento que no sabía que estaba sosteniendo cuando Magnus la toma.

-"Mi magia comenzó a forjar una conexión"- explica Magnus- "Nada serio – esta vez no – pero inconscientemente ofreciste un vínculo directo a, bueno, tu esencia, a falta de un término mejor, y mi magia se abalanzó sobre eso. Lo siento mucho. Debería haber tomado mejores precauciones, ya que conocía tu historia – la forma en que se debilita la supresión de tu enlace parabatai, es lógico que tu cuerpo busque una forma de evitarlo. No sé con cuántas personas has estado desde Jace, pero este problema sólo sucedería con un compañero mágico, y no me imagino..."

-"Espera, ¿qué?"- lo interrumpe Alec, un repentino escalofrío baja por su espalda- "¿Qué quieres decir 'desde Jace'? No he hecho – Jace y yo no–"

-"Alec"- dice Magnus, con expresión seria- "Entiendo por qué sentirías que no puedes confiar en nadie con eso – yo sé cuáles son las leyes de la Clave. Pero si vamos a solucionar esto, necesito que–"

-"¡No me he acostado con Jace!"- casi grita Alec, luego inmediatamente se muerde el labio inferior, sorprendido por lo fuerte que salieron sus palabras- "Quiero decir. Sí, supongo que puedo ver de dónde... tendrías esa impresión, con el demonio y todo. Pero nosotros nunca... en realidad–"- traga saliva de nuevo, luego aparta rápidamente la mirada, tratando de detener el repentino sonrojo que amenaza con llegar hasta su cuello- "Nunca he tenido... soy virgen. Así que. No sexo previo. Con Jace o cualquier otra persona"

Regresa la mirada a Magnus, esperando... ¿sorpresa, tal vez? ¿Cautela? Repensar si vale su tiempo, en el peor de los casos. Definitivamente no espera la mirada de total incredulidad en el rostro de Magnus. O la mirada de entendimiento y horror que le sigue.

-"Eso es lo que te quitaron" dice Magnus lentamente- "Eso es lo que ellos – Oh, Alexander, lo siento mucho"

Él se acerca y abraza a Alec, y de repente, él se da cuenta del hecho de que todavía están desnudos.

Se aparta de Magnus y lucha por levantar el edredón para cubrirse, en un intento fútil de no sentirse tan vulnerable.

-"No sé lo que tú – ¿Quiénes son ello? Y estoy bien, ¿de acuerdo? Quiero decir, sí. Tuve un enamoramiento. No tenía esperanzas, y lo superé. Fin de la historia"

-"Alec, por favor escúchame"- dice Magnus- "¿Hay un hechizo de supresión en su vínculo parabatai, que ahora sospecho no recuerdas haber recibido"

Alec asiente con la cabeza cautelosamente en confirmación.

-"Está bien"- dice Magnus- "Entonces podemos estar de acuerdo en que ese hechizo es parte de los recuerdos borrados. Ahora, solo hay dos razones para suprimir un vínculo parabatai: proteger la vida de una de las partes, si la otra está bajo coacción extrema o muriendo; o para volver a equilibrar un vínculo que ha mutado. En el primer caso, el hechizo se elimina tan pronto como el peligro ha pasado, y el tuyo sigue activo. Además, su vínculo está tratando activamente de liberarse del hechizo, que es parte de por qué se está debilitando. Sólo un enlace mutado haría eso"

-"¿Qué? ¿Entonces crees que mi vínculo con Jace mutó? ¿Y alguien lo reprimió y eliminó nuestros recuerdos sobre eso?"- pregunta Alec, confundido- "Eso no tiene sentido"

-"Creo que la Clave tiene alguna leyenda dramática que les gusta afirmar sobre las facetas más... volátiles del vínculo"- responde Magnus- "¿La maldición Parabatai? Si fracasan en mantener el vínculo platónico y les sobrevendrán horribles cosas. ¿Te suena conocido?

-"Sí – pero eso sólo es una leyenda tonta, como dijiste. Nadie realmente lo cree"

-"Lo que pasa es que hay un grano de verdad"- dice Magnus- "Un vínculo parabatai es un enlace de alma en el sentido más literal. Une las energías místicas de dos Cazadores de Sombras, lo que aumenta su poder. Ahora, ustedes Nefilim tienen su propia marca de magia, como todas las criaturas en el Mundo de las Sombras, pero lo han vinculado a objetos durante siglos: sus estelas, sus runas, sus cuchillas, por mencionar algunas"

-"¿Y dices que la magia todavía está allí?"

-"Oh, definitivamente. Ha sido atada, y por lo tanto está inactiva. Pero realza lo suficiente y dale el empuje correcto... En esencia, tendrás una mágica bomba de tiempo en tus manos. Y a partir de los pequeños detalles que me has contado y de lo que he podido observar, creo que eso es lo que sucedió contigo y con Jace"

Daño masivo por explosión en el Centro Operaciones. Techo derrumbado en corredores adyacentes...

Alec siente quedase boquiabierto. La implicación de lo que Magnus le está diciendo es clara: si la Maldición Parabatai es real, si Jace y él la activaron, eso significa – eso significa...

Él traga saliva, sacudiendo su cabeza vigorosamente- "No. No, eso es imposible. Lo habría–"

-"¿Recordado?"- completa Magnus suavemente, y la sola palabra golpea a Alec como una tonelada de ladrillos.

Él se encoge sobre sí mismo, su pecho se agita mientras trata de atraer suficiente aire a sus pulmones. No sirve de nada; por cada aliento que intenta tomar, una presión sofocante empuja hacia abajo sobre su pecho. No puede pensar y su corazón está martillando; siente que se va a desmayar.

-"No puedo respirar"- ahoga, y Magnus está allí en un instante, ayudándolo a sentarse y agacharse, colocando una mano sobre su pecho y una sobre su espalda.

-"Respira conmigo"- le pide Magnus- "Adentro. Y fuera. De nuevo. Adentro. Fuera. Puedes hacerlo"

Alec niega con la cabeza otra vez. Él no puede. No puede. No hay manera de que él–"

El dolor de cabeza regresa con fuerza, atravesando su cerebro como una onda de choque, y Alec se agacha, gritando mientras el dolor se extiende desde su cabeza hacia abajo por su columna vertebral, la presión creciendo en su abdomen inferior, como si algo estuviera tratando de abrirlo y forzar su salida.

-"¡Cat, te necesito ahora mismo!"- escucha la voz de Magnus, como desde una gran distancia, incluso cuando siente una fría ola de magia correr suavemente por su piel- "Jace Wayland, Instituto de Nueva York. Contención inmediata. Hay un fragmento de portal en la habitación de Clary Fairchild que puedes usar para eludir las barreras. ¡Ve!"

-"Jace"- se las arregla Alec para murmurar, sintiendo el pánico surgir en su interior a medida que el dolor aumenta en su runa- "¿Dónde está–? Carajo. Duele tanto, yo–"

-"Aguanta, Alec, todo estará bien"- dice Magnus, y Alec siente que más magia entra y le quita parte de la presión- "Shhh, cariño, sólo respira"

-"No era nuestra intención"- murmura Alec, las palabras que salen de sus labios no tienen ningún sentido- "Lo siento. Lo siento mucho..."

El cuerpo de Magnus se envuelve alrededor del suyo, anclándolo mientras la magia aparta más del dolor. Cuando lo último se desvanece, Alec siente que todo su cuerpo cae, desplomándose pesadamente contra el pecho de Magnus, completamente agotado, mientras se deja deslizar en la negrura que lo espera.

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Espero les haya gustado​, hasta la siguiente actualización 😘🤗