Capítulo 5
Inglés: "Letra con negritas"
Español: "Letra sin las negritas"
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2:00 am
Volviendo a nuestro un tanto singular grupo, ahora estos se encontraban esperando a que un semáforo cambiará de color, estando un tanto atorados en una larga fila, sobra decir que no había mucho espacio personal para ellos, literal estaban demasiado apretados y los que estaban adelante podían sentir uno que otro empujón, era muy molesto.
Así que todos se mantenían en un muy incómodo silencio, más por cierta chica, que estaba algo más perdida, después de todo ella había escogido que irían con cierta persona que estaba segura que los ayudarían, pero en el fondo aunque no lo quisiera tenía cierto temor de volver a verlo, le preocupaba demasiado el que pensaría de ella, y más si esté podría estar decepcionado, algo entendible y también podría estar demasiado molesto por como habían terminado las cosas antes de irse. Todo para que al final la hubieran traicionado y fuera a prisión, no mentiría que también tendría vergüenza de verlo a la cara, ¿Cómo llegaría con el?, A menos que le dijera "Oh hey!, Se que debería estar muerta y en nuestra última conversación terminamos mal, pero necesito que me ayudes a salvar al planeta de un alienígena que está con el clan del pie, y lo haremos junto a 4 tortugas gigantes ninja y a un policía!", ¡Claro! Si todo fuera tan sencillo como eso y que no quiera meterle un puñetazo en la cara después de decirlo.
—¡Hey!, ¡Oye!...T/N ya nos toca avanzar— pasaba su mano en medio de la mirada de la peli c/c, para que logrará reaccionar, parecía estar como de piedra, además de que no escuchaba ni siquiera a los otros autos estar tocando el claxon una y otra vez para que se moviera.
—¿Que?...Ah si!, Ya voy— respondió en voz alta un tanto exaltada al regresar en si gracias al castaño, pero sin más remedio comenzó a conducir, escuchando como el sonido de los otros autos cesaba, a la vez que llegaba a escuchar el típico de "tenía que ser vieja", algo que simplemente ignoro.
Pero esas reacciones no pasaron inadvertidas para los demás, eran la primera vez que llegaban a ver esas emociones en ella, ya que siempre se mostraba bastante indiferente, como si no tuviera más emociones humanas, que solo tener el gusto por acabar con la vida de alguien. Se podía ver muy tensa, preocupada y incluso con inseguridad.
—¿Estás bien?, Hace un rato estabas bien y ahora estabas como una estatua— preguntaba Mikey mirando desde atrás a la mayor, quizás hasta donde sus hermanos le repetían que debía cuidarse de ella por ser una asesina debería de ser un motivo para mantenerse con mucho cuidado con ella, pero al final llegaba a ser agradable y incluso no dudaba que una buena amiga cada que ella le ayudaba a molestar a su hermano Raphael o a veces conversaban.
—¿Estas así por ir al lugar al que nos estás llevando?— pregunto está vez Raphael, siendo más atento con la mayor, y alcanzando a ver sus ojos por el espejo retrovisor, mirando con atención su mirada algo insegura, al parecer había dado en el clavo.
La peli c/c se mantuvo en silencio por unos momentos hasta que tan solo se digno a asentir, no podía simplemente estar tranquila después de todo. —Así es...bueno será más bien el volver a ver a una persona— comenzó a contar mientras miraba la carretera, justamente en la calles que iban recorriendo, hasta llegar a entrar a cierta carretera, adentrándose a una zona verde. No le faltaba mucho para poder llegar y eso hacia que solo su pequeña ansiedad aumentará.
—Escuchen yo... Se muy bien que por todo lo que e hecho y hice está noche son unos grandes motivos para que desconfíen de mi, pero antes de llegar necesito que ustedes continúen fingiendo que son parte de mi equipo, ya saben.. que "trabajan para mí", no quiero que digan que están con la policía porque ahí si estarán jodidos, estaremos trabajando juntos y por como veo las cosas, no tenemos de otra que tener mas apoyo y no sera precisamente de la policía..— comenzó a contar la joven con un semblante totalmente serio más en sus ojos se notaba cierto toque nostálgico al parecer.
Mientras tanto los demás al escuchar todo aquello, tan solo los dejaba más intrigados y con más preguntas como ¿A quien buscaría pedir ayuda?, Además de que bien, de por si había sido muy arriesgado confiar en la joven para que consiguiera una vestimenta para salir inadvertidos y el conseguir un vehículo, podía ser más arriesgado si seguían así hasta quien sabe cuánto tiempo. Irían técnicamente al territorio de T/N eso implicaba cuidarse más que su propia espalda.
Más al final tenían las opciones muy escasas, sería un arma de doble filo para ellos pero no tenían más alternativas de nuevo.
—Esta bien, pero solo recuerda el acuerdo...y también sobre el brazalete en tu mano— hablo el joven líder dándole cierto recordatorio importante a la joven sobre el acuerdo con la jefa Vincent y lo que haría ese brazalete si tan solo pensará quitárselo a la fuerza o en traicionarlos.
El recorrido volvió a estar sumergido en cierto silencio algo pesado después de que la joven tan solo asistiera y estuviera de acuerdo, así como todos los demás estuvieran de acuerdo con lo que pasaría a continuación.
Y tal y como dijo, no tardo en llegar hasta cierto gran portón de un tono dorado brillante el cual parecía de oro y medía aproximadamente más de 10 metros a lo que ella recordaba o incluso podría jurar que lo habían hecho más grande.
Fue deteniendo la camioneta hasta cierto timbre, todo iba normal hasta que se escucho la voz de alguien por la bocina del aparato, pero no solo ocurrió eso ya que, en la pared pudo notar se cómo aparte había como ciertos mecanismos ya que al instante estaban siendo apuntados por ciertas armas.
—Soy T/N... necesito hablar urgentemente con "el cuervo"— comenzó a decir la joven sin importarle que ahora estaba siendo apuntada por esas armas, a la vez que después de todo, aquellas armas volvieron a estar como antes sin notar se que estaban ahí, a la vez que el gran portón se comenzaba a abrirse solo para dejarlos entrar.
Sin poder evitar ocultar su gran curiosidad, comenzaron a fijarse por las ventanas de la camioneta al menos un poco de lo que podían alcanzar a ver de la gran mansión.
—Valla es muy grande el lugar y hasta tiene su toque— comenzó a decir el menor, quien veía todo junto a sus hermanos mayores y amigo.
Claro que todo estaba tranquilo, hasta que la joven de cabellos c/c se detenía de nuevo, está vez notando unas luces en la cara de la chica y el castaño, Indicando que los dos bajarán de la camioneta, también veían como estos tenía armas en sus manos, demasiado por qué preocuparse.
—No salgan ustedes cuatro, yo me encargo de esto— hablo sin siquiera voltear a ver a los cuatro hermanos, realmente estaba muy sería, había dejado de lado su semblante burlón y algo demente debido a la situación.
—No se ve nada bien todo esto— murmuró el castaño para después salir del camión de igual manera con las manos levantadas, a la vez que se dirija a paso lento cerca de la menor.
El grupo de personas, la mayoría con máscaras los rodeaban a la vez que apuntaban con sus pistolas a los dos visitantes, sin mucha confianza de quien habían dicho que era.
—Asi que tú, eres la legendaria "Mariposa negra" ¿Eh?— comenzó a decir un hombre aproximadamente de unos 25 años, de cabello cortos azabache, teniendo una parte de su cabello rapado. Tenía la clásica vestimenta de "chico malo", lo mismo que le dió a las tortugas, casi, siendo una chaqueta negra, pantalones rotos, y uno que otro percing o tatuaje, nada nuevo.
Más sin duda la joven mientras veía a ese sujeto le daba demasiado asco, su actitud, TODO, no entendía porque "El cuervo" había decidido tener a tan horrible personal.
—Si lo soy, pero no vine a hablar con un estúpido narcisista cómo tú, vengo a hablar con el cuervo— comenzó a decir la joven observando como el rostro del mayor se transformaba a enojo, haciendo que sonriera internamiente de solo ver la situación, además de que le gustaría demasiado hacer sufrir a este con algunas torturas.
—Mira engreída de mierda, no te dejaremos pasar a ver al jefe, si creiste que te dejaríamos por solo decir que "eres la Mariposa negra" estás muy retrasada, ella está muerta, todos escuchamos la noticia— comenzó a decir el de ojos cafés claros, mientras se iba acercando mirando a la joven y al castaño a la vez, más su atención era más con la joven que con el de piel más clara.
—Y ella no estaría con un gringo de quinta por dios eso es obvio... Bueno, a menos que lograrás probarlo haciendo tan siquiera la mitad de lo que ella hizo al comenzar, pero eso es imposible, ¿Verdad cabrones?— comenzó a decir este mientras a su vez preguntaba en un tono burlón y demasiado arrogante a sus compañeros, quienes estaban de igual forma divertidos por la situación. Este fue alzando su pistola hasta precisamente dejar pegada la punta al pecho de la más baja.
Algo que de verdad acabo con la paciencia de la peli c/c, no había pasado por estar dos años encerrada en prisión, obligada a cumplir con una misión por su libertad, estar en una persecución de autos y caer de un barranco, además de reencontrarse con su ex para que le diera información, era demasiado y en una sola noche como para seguir y soportar que un don nadie hiciera comentarios estúpidos en su cara. Sus ganas de torturarlo, matarlo se apoderaban de ella, todos sus impulsos y cuerpo tan solo deseaban ver la sangre del mayor correr y acabar con un gran charco de sangre en el suelo.
—Me considero alguien muy paciente y quizás demasiado generosa pero..
Yo también tengo cierto límite como todos— comenzó a decir con cierta sonrisa en sus labios siendo un tanto macabra mientras en sus ojos se comenzaban a notar ciertas intensas ganas de acabar con el, como si fuese un depredador acechando y ahora había encontrado a su presa ideal.
—Ahi si claro "que miedo tengo", eres demasiado delgada y pequeña ¿Que podrías ha..— empezaba a decir este más cerro la boca o bueno... literalmente se lo cerraron con el gran puñetazo que le habían dado que hasta lo hizo soltar la pistola y retroceder para tocar su mandíbula, sintiendo un gran dolor, y encima que al tocar su boca sintió un líquido, a lo que al observar su mano, noto que había sangre. —Okey, se acabó el señor amable, no vallan a disparar yo me encargo de acabar con esta— dio como orden a los demás que estaban apuntando a la chica, más al escuchar las ordenes de uno de sus superiores, bajaron sin más sus armas, un tanto irritados por la actitud de este, sería entretenido ver lo que podría pasar a continuación.
—Esto ya va demasiado lejos ¿No lo tenías todo bajo control T/N?— comenzó a hablar en voz baja el castaño, mirando con sus ojos azules a la menor con atención, solo para ser ignorado por esta y notar algo más en su rostro y ojos, se notaba que no escucharía a nadie a lo que no tenía un buen presentimiento para nada.
—Lo está... solo déjame darle una paliza a este imbécil— finalmente respondió a la pregunta del castaño mientras solo observaba al mayor de cabellos azabache como si analizará todo, su postura y más al ver cómo sacaba una navaja, listo para atacar a lo que tan solo hizo que su sonrisa creciera más.
Parecía tardar un poco pero al final el quien había comenzado a hacer el primer movimiento había sido el hombre, al acercarse corriendo hacía la menor, tratando primero por apuñalarla en su vientre, y quizás lo habría conseguido de no ser porque estaba tratando con alguien que había pasado por ataques similares muchas más veces de las que podría contar.
Así que al comenzar tuvo que moverse hacía atrás y llegar a tomar la muñeca con la que empuñaba la navaja el hombre, apretando su agarre aprovechando sus momentos de desconcierto, empezó a golpear con su rodilla derecha consecutivamente el estómago del mayor mientras le doblaba la muñeca para arrebatarle la navaja.
Con su mano derecha sostuvo los cabellos cortos y azabache del mayor para jalar su cabeza hacía abajo donde estaba su rodilla derecha y golpear su cara, viendo a este aturdido por el golpe lo soltó y dejo que cayera de espaldas contra el duro suelo, mientras está misma caminaba de una manera demasiado peligrosa hacia este con la navaja en mano.
—¿No deberíamos hacer algo?— pregunto uno de los que se encontraban rodeando la escena, además de la actitud algo tétrica que empezaba a mostrar la chica.
—Nah, deja que continúe..sirve que nos deshacemos de ese idiota— respondió una mujer a su pregunta mientras sonreía con diversión de ver esto, y no era la única, todos estaban hartos de ese idiota, si lo mataba les estaban haciendo un enorme favor.
Por parte de la joven de cabellos c/c su mente no estaba cuerda del todo, no estaba nada en orden, le estaba volviendo a pasar, no escuchaba nada, ni siquiera la voz de Casey todo estaba tan alejado, solo pensaba en una cosa y era en acabar con ese hombre, quería escucharlo gritar, ver su sangre correr mientras ella rebanaba su piel, de solo pensar en eso su satisfacción crecía, era su maldita droga, una adicción que no podía tener cura.
No tardo en colocarse arriba de este para retenerlo en el suelo, mientras alzaba la navaja quien apuntaba a su rostro disfrutando tanto de ver cómo la cara de este se volvía de terror puro, mandaba a un lado el maldito trato, ni siquiera lo recordaba ya.
Unas cuantas risas escaparon de sus labios demostrando que no estaba para nada cuerda a la vez que su sonrisa se volvía más tétrica mientras sus ojos solo mostraban su sed de sangre, a lo que finalmente dirigió la navaja al centro de su cara.
—¡¿Que está pasando aquí?!— pregunto en un grito totalmente enojado ante todo el alboroto que había y sin que le hubieran avisado, después de todo era el dueño del lugar y jefe de cada uno de esos matones, una gran falta de respeto cuando actuaban así al no respetar su autoridad.
Detuvo abruptamente el movimiento de su mano, dejando que justamente el filo de la navaja quedará a centímetros del rostro del azabache. Su mente y todo volvía en sí, respiraba de una manera bastante acelerada como le sucedía, esa voz... era la única que era capaz de hacerla regresar cuando se salía de control. Su sonrisa se fue borrando así como el iris de sus ojos se volvían un poco mas redondos, viéndose de una manera más dócil, a lo que fue lentamente levantándose aún con la navaja en mano. Finalmente alzo su cabeza notando a esos ojos color cafés que tanto recordaba, esos que la hacían regresar al mundo real cada que perdía el control, los únicos que podían mantenerla en sus cinco sentidos.
—Espero que tengan una buena explicación para todo...— se callo abruptamente así como detenía sus pasos al observar a la menor en medio del círculo, se quedó pasando al verla, sabía que ya había vuelto pero jamás pensó que verla en persona lo haría actuar así, al igual que ella sus pupilas se hicieron más grandes. Pronto comenzó a acercarse, parecía molesto o algo por la expresión que mostraba.
—Yo....se que estás molesto conmigo y lo entiendo, la última vez que hablamos yo no te escuché y todo termino mal, además de que es muy atrevido de mi parte venir a buscarte cuando te decepcione, pero no vendría aquí si no fuera importante— finalmente comenzó a hablar la joven de ojos c/o manteniendo una postura más firme mientras miraba al más alto ahora frente de ella, viendo como se detenía quedando a solo unos centímetros mientras lo miraba a los ojos.
Esperaba un golpe o algo más que demostrará que estaba enojado con ella pero lo que sucedió la dejo de piedra, pues de forma repentina sintió como este la rodeaba con sus brazos y estrechaba un poco contra el, esa sensación tan cálida que poco sentía...la estaba abrazando, su cuerpo se quedó congelado al no saber como reaccionar, así como su frío corazón comenzó a latir, realmente lo había extrañado y el a ella por como lo mostraba, instintivamente soltó la navaja que cayó al suelo. El era la única persona en el mundo que lograba hacerla sentir como un verdadero ser humano, era una de sus debilidades.
—Si estoy enojado pero...estoy más feliz de verte de nuevo, creí que había perdido a mi hermanita menor para siempre— formuló este sin soltar a a joven revelando y dejando con la boca abierta a los presentes el hecho de que estos fueran hermanos. Principalmente Casey y incluso las tortugas quienes observaban en silencio desde la camioneta todo ya que habían dejado bajos los vidrios llegaron a escuchar todo.
—Debes de estar muy cansada,por todo este alboroto, vamos adentro, me explicarás todo y... también puede venir tu compañero y los otros cuatro de la camioneta-—comento este mostrando una actitud más suave con la menor, algo que no demostraba con sus empleados.
Algo sorprendente pues este siempre se mostraba como alguien intimidante, encima de que su estatura era muy alta ya que media 1,90 cm, cuerpo ejercitado y su manera de mirar no ayudaban en muchas cosas.
—Oh y Jorge...estás despedido— comento el castaño al hombre que estaba en el suelo, después de todo ya conociendo lo sabía de lo que esté pudo ser capaz, y sin mucha expresión o sentimiento alguno por este, saco una pistola de su pantalón y apunto a su cabeza para disparar, siendo un ensordecedor ruido que resonó por el lugar por unos minutos. —Limpien esto, no quiero la mancha de su sangre contaminando mi césped, y deshagan se del cuerpo...espero que con esto sea una advertencia de que pasara para el siguiente que quiera propasarse con mi hermana— comenzó a decir este en un tono completamente sin emoción para estos para regresar su vista a su hermana con una expresión más viva. —Bueno si es que ella no los descuartiza primero...en fin, ya hemos perdido mucho tiempo, vamos, estoy seguro que debes de estar cansada así como tus compañeros— estaba por continuar cuando observó cómo una gota roja resbalaba por la frente de su hermana, retirando el mechón de cabello ahora se dio cuenta que estaba muy empapado y tenía una ligera cortada en su frente. —Dios ¿Que te paso?, Carajo, ahí que desinfectar te esa herida y ponerle unos puntos de sutura—
—Wow, tranquiliza te Damián, estoy bien, solo déjame le digo a mis compañeros que entren, es que vienen de Nueva York así que hablan más inglés que nada— comenzó a decir la joven, para soltarse de las protectoras manos de su hermano mayor, realmente no había cambiado casi en nada y eso le alegraba.
El oji café no estaba tan convencido de dejar pasar más tiempo sin revisar la herida de su hermana menor pero al final dejo que ella fuera con aquellos 5 sujetos.
La joven le hizo unas señas a Casey para que la siguiera y así dirigirse a la camioneta más calmados al ver que los que estaban rodeándolos con anterioridad ahora estaba dispersando se, aunque bien no estaban tan tranquilos con el muerto en el suelo, que ahora se estaban encargando de llevarse el cuerpo.
Cuando la joven abrió la cajuela junto a Casey cómo era de esperarse un montón de preguntas empezó a escuchar. —A ver para responder a todas sus preguntas, si es mi hermano mayor, alias "El cuervo", es algo muy largo de explicar porque vine con el pero solo les digo como adelanto que es la única persona en quien confío y puede ayudarnos si yo se lo pido... solo acompañen me, tendremos una platica con el, sabe inglés así que cuiden que dirán y sigan fingiendo que trabajan para mí, y dejen que yo me encargue ¿Si?— comenzó a explicar T/N a los cuatro hermanos y al castaño en un tono de voz bajo para que los demás no llegarán a escuchar, debían de ponerse de acuerdo ahora o todo su plan se iría a la mierda.
Sabía que su hermano la adoraba y haría todo por ella pero también sabía que el tenía un límite.
—Bueno, tendremos que continuar fingiendo por un tiempo más— dijo Leonardo pues ya estaban más implicados y en territorio criminal técnicamente, no sabían cuánto tiempo iban a estar ahí así que lo mejor era continuar fingiendo cómo lo decía T/N.
—Claro, como si tuviéramos alguna otra opción— menciono Raph en un murmuró sin estar muy convencido pero al igual que sus hermanos y amigo comenzaron a moverse, siguiendo a la mayor desde atrás, mientras ella seguía a quien es el hermano mayor de T/N.
Pronto los 6 presentes entraron a la gran mansión, viendo todo con detalle, pues en si la mansión era bastante grande y eso que solo era de dos pisos, también era muy espaciosa. Habían muchos candelabros colgando en el techo con ciertas piedras que parecían diamantes, bueno todo parecía ser de alguna piedra preciosa, y incluso se notaba lo caro de cada cosa en la mansión, desde los libreros, marcos de fotos y incluso el vidrio de las ventanas que tenían distintos colores de forma asimétrica, hasta el suelo que era de mármol y se veía tan brillante como si fuera algún cristal y las paredes de aquella mansión eran de un tono totalmente blanco.
Aunque aquel recorrido no duro mucho mas, ya que por como les indico el mayor, todos pasaron a una clase de cuarto de reuniones y bastante espacioso también.
Había una gran mesa de madera pulida en el centro, obviamente para las reuniones ya que era muy grande y habían varias sillas alrededor de esta.
Todo estaría bien si no fuera porque técnicamente estaban frente a un criminal de alta categoría de esa ciudad...o hasta del país. Además de que este estaba parado simplemente observando a cada uno de los presentes de una forma muy fija, casi como la de un cuervo.
—Señor... aquí esta el botiquín de primeros auxilios que me pidió traer— se escucho atrás de la puerta a la par que veían como una señora abría la puerta con aquel botiquín, a lo que este se acerco a tomarlo.
—Gracias señora Mari, ahora si puede retirarse— mencionó aquel peli castaño después de volver a cerrar la puerta y esta vez acercarse a su hermana menor una vez saco todo lo necesario. —Tienes mucho que explicarme tu..pero después de que te cosa esta herida, así que quédate quieta— decía este una saco una clase de algodón con agua oxigenada para limpiar primero la cortada.
—Es urgente, no tenemos tiempo para esto y me haces ver como niña chiquita Damián— se quejo en la última parte mientras se cruzaba de brazos y su hermano mayor e mucho mas alto estaba revisando su herida como cuando era menor, y lo peor era que estaba delante de su compañeros, sentía mucha vergüenza por lo que sus mejillas comenzaron a calentarse. —Por cierto, ya te dije que mejor empieces a hablar en ingles para que entiendan mejor lo que hablamos—
—Esta bien, si así me entienden mejor, primero que nada quisiera que ustedes se presentaran para saber a quien me dirigiré— comenzó a decir el castaño después de darle una mirada a los cuatro mas altos y incluso al oji azul quien era notablemente mas bajo de estatura que el, aunque su atención iba ahora en su hermana ya que comenzó a cocer su herida.
—Bueno señor..."Cuervo", yo soy Leonardo y ellos tres son mis hermanos, Raphael, Donatello y Miguel Angel, y nuestro compañero Casey— comenzó a decir aquel líder de cinta azul que bueno...no se notaba ni su rostro, así que para que el mayor llegará a saber quién es cuál de sus hermanos los señaló junto a su nombre, además de que a Casey pues no le diría mucho más que eso por seguridad.
Aunque al final aquel oji café observaba a cada uno de ellos con algo de extrañes, ya que por mucha que su vestimenta se viera como ellos, algo le decía que o quizás actuaban así de "mansos" por ser novatos o algo más.
—Son novatos...ya sabes nuevos en estos temas, les cuesta un poco integrarse pero ahí van— decía T/N a su hermano mayor ya que notaba y sabía que su mirada era de que estaba sospechando así que apoyaría a las tortugas, eran su boleto a la libertad técnicamente así que no podía dejarlos. Aunque bien justo en esos momentos podía sentir como su hermano le hacía aquellos puntos de sutura sin ninguna anestesia, algo muy doloroso por lo que apretaba sus puños pero aquella sensación de dolor le era algo adictiva, bien le podía doler pero le agradaba a la vez...si algo muy masoquista pero eso era apenas algo leve.
—Okey.... así que por lo que dijo T/N de que vienen de Nueva York, deben de tener un gran motivo como para venir de tan lejos así que mi duda es...¿A qué vienen aquí?— comenzó a interrogar aquel una vez termino de cocer la herida de su hermana menor a lo que ahora sí su atención fue directa a los 5.
Entre los 5 se miraron discretamente a la vez que también a T/N, quien ella por su parte de forma discreta con un ademán les pedía que respondieran.
—Bueno nosotros.... conocimos hace unos 4 años a T/N , nos volvimos equipo y ahora trabajamos para ella, solo que somos novatos cómo seguramente ya noto y le dijo T/N— comenzó a decir Donnie ya que después de pensar en todo y el tiempo en el que la joven había sido detenida, debía de concordar más.
A lo que la oji c/o los miro con un pulgar arriba de que todo estaba saliendo bien.
—Okey...solo tengo una duda...¿Porque en estos cuatro años tu no diste alguna señal de vida o regresaste?, Lo único que se supo de ti fue cuando el clan del pie te traicionó y dieron por muerta...y ahora regresas completamente entera junto a 5 tipos de aquí....que encima 4 no han mostrado su rostro— comenzó a decir aquel de cabellos castaños a la par que ahora se dirigía a su hermana menor, notando se un tono más serio a ella, bien el la adoraba pero sin embargo estaba aún molesto ya que todos esos años estuvo destruido por la noticia de pensar que su hermana menor estaba muerta y ahora ella regresaba.
—A eso voy Damián, solo escucha, y primero promete no hacer nada por lo que verás— empezó a hablar en un tono mucho más serio aquella joven a la par que miraba a su hermano y se dirigía a los cuatro chicos.
Aunque por aquello el oji café se mantuvo algo extrañado pero al escuchar el tono serio de su hermana y ver su actitud supo que era importante así que sin más lo prometio.
—Chicos, ¿Podrían destapar su cara?, De aquí no saldrá nada de los aseguro— comenzó a decir la mayor mientras claramente veía a los cuatro hermanos verse entre si con duda.
—Estas loco si dices que si debemos de mostrar nuestra cara a ese tipo Leo— murmuró Raphael ya que este no estaba nada confiado entre el mayor.
—Solo lo haremos unos momentos, si T/N logra convencerlo y resulta ser de ayuda para la misión será lo mejor— respondió en el mismo tono bajo el de cinta azul, no teniendo más remedio los demás que aceptar las ordenes de su líder comenzaron a revelar los cuatro tan siquiera solo sus rostros.
Algo que bien dejo con los ojos bien abiertos al castaño que rápidamente por reacción saco su pistola, más para sorpresa de los 5, T/N detuvo al castaño, quitándole el arma y lanzando la al otro lado de la habitación.
—Escucha es algo complicado de entender, así que mejor sienta te y escucha...como verás ellos no son humanos, son mutantes...los conocí en Nueva York en los cuatro años que no estuve, tuve que esconderme porque aún corría peligro de que el clan del pie estuviera detrás de mi o la policía, fue así primero como los conocí, ellos buscan acabar con el clan del pie y pues nos hicimos equipo los 4... también Casey— empezó a relatar una historia que obviamente estaba distorsionada para lo que los 5 lo sabían pero habían algunas partes que eran ciertas, aunque el policía al escuchar como está dijo su nombre la miro algo mal.
—Y bueno, en estos cuatro años digamos que el clan del pie casi destruye el planeta trayendo una nave alienígena y...ahora el mundo corre peligro con el clan del pie siendo liderado por Karai, así que vengo a pedirte ayuda porque planeamos detener al clan del pie— finalizó aquel relato además de revelar el porque necesitaba la ayuda del mayor, a lo que esté aún estaba como en un estado de shock pero que salió repentinamente al terminar de escuchar todo eso.
—¡¿Que?!... discúlpame T/N pero, me estás diciendo que...la razón por la que casi mueres, la razón por la que terminamos peleados y te siguen buscando, ahora ..¿Quieres volver a involucrarte de nuevo?— su tono era un poco más alto así como la forma en que dijo su nombre le era muy claro a ella que el estaba enojado y sería más complicado de convencer.
—Si se que es algo muy loco de mi parte volver a involucrarme en esto, y más después de todo lo que pasó, pero por favor hermano, el mundo literalmente puede ser destruido por idiotas como ellos, y quizás suene más a locura que pues queramos detenerlos como unos héroes de cómics, pero pues por desgracia nosotros vivimos en este planeta, de ser así creeme que no me importaría tanto— empezó a explicar tratando de convencer a su hermano mayor, pero realmente a él no le parecía nada.
—No, T/N ya basta de involucrarte en esto, además tú sabes muy bien, es más juramos que no íbamos a ayudar a alguien que no fuera parte de nuestra familia— comenzó a decirle aquel peli castaño y mayor, con total desacuerdo en lo que le pedía su hermana menor, pues técnicamente era como un suicidio lo que quería hacer.
—Bueno, será mejor que empecemos a irnos, ya lo dejo claro, no nos ayudará— decía aquel líder de cinta azul, a la par que sus hermanos y amigo asentían, estaban de acuerdo de retirarse, pues no tenía sentido quedarse.
Aunque por su parte la peli c/c pensaba en la situación, realmente estaba siendo muy difícil convencer a su hermano mayor pero... cuando dijo aquello de que a menos que fuera alguien de la familia, tuvo cierta idea instantánea pues todos estaban por retirarse y bueno literalmente había sido lo único que se le había ocurrido.
Así que antes de que se fueran, debido a que Raphael era el más cercano y al primero que vio, antes de que se cubriera de nuevo su rostro, ella tomo una de sus manos para tenerlo junto a ella. —Te equivocas hermanito porque, de hecho Raphael es mi prometido, así que será pronto parte de la familia—
Termino por decir, pareciendo tan calmada pero realmente en su interior se moría de vergüenza por decir algo así de la nada, pero no había pensado en algo más. Además de que literalmente su hermano casi se ahogaba, pues como vio que se iban a ir se había servido en una copa algo de vino, y apenas al dar un primer sorbo escucho aquella repentina noticia que literalmente casi lo hacía irse al otro mundo.
Y no era el único, pues hasta todos los demás hermanos y Casey apenas y volvieron en si al escuchar aquello a la vez que veían a la peli c/c y después a Raphael quién estaba igual o peor que ellos desde un comienzo.
—¡¡¡¿QUE?!!!— Y cómo era de esperarse aquel castaño al pasarse lo aturdido estaba totalmente aún sorprendido por el hecho de que su hermana menor aparentemente estaba comprometida con...un mutante, ni siquiera era humano. —¿Me permiten unos momentos con mi hermana?, Necesito privacidad con ella para hablar de algunas cosas— empezó a pedir mientras pasaba su mano derecha tocando su frente, tanta noticia así de repente le daría una gran jaqueca a su cabeza.
—Claro que si por nosotros no ahí ningún problema, también tenemos algo que hablar— contesto aquel de cinta azul mientras reunía a sus hermanos para salir de aquella habitación pues después de salir de la sorpresa tenían que hablar de algo muy urgente o bien precisamente con su hermano de rojo.
Al ver cómo aquellos hermanos y el único humano del grupo se retiraban, a lo que el propio castaño cerraba la puerta incluso con seguro mientras volvía a mirar a su hermana menor siendo evidente aún su impresión.
—Okey ya que estamos solos...me puedes hacer el gran favor de explicar ¿Que fue eso?, T/N el ni siquiera es un humano y ¿Que es el beneficio que te va a dar?...a mí no me engañas hermanita, te conozco y se muy bien que solo haces las cosas por obtener algo— comenzó a preguntarle una vez se calmo y comenzó a pensar más a fondo, ya que bien conocía demasiado a su hermana como para saber que cada que tenía alguna pareja ella solo los utilizaba para robarles ya sea grandes cantidades de dinero, algún objeto de gran valor en especial además de que no conforme con ello hacía algo que siempre los dejaba obsesionados por ella.
Una vez escucho aquella pregunta de su hermano mayor, realmente le llegaba a sorprender como era que su hermano la conocía de derecho y al revés, si bien...todo esto si lo hacía al costo de ganar su libertad pero eso no lo podía saber el, así que si o si debía de fingir estar demasiado enamorada en Raphael y a ver cómo le haría pero tendría que convencer a este de también continuar con la mentira y que se viera muy real así que eso implicaría tratarse con el...como una verdadera pareja.
—Escucha Damián...si se que yo siempre disfrute de solo hacerme pareja de alguien para quitarle algo y dejarlos destrozados también emocionalmente pero...con Raphael es distinto, en estos cuatro años cambie mucho hermano y realmente quiero estar con el... al menos lo que resta de nuestra vida porque si no logramos detener al clan del pie todos nuestros románticos planes se irán a la mierda— empezó a decir usando un tono más suave así como fingiendo uno más triste por el hecho de que se acabaría el mundo y no estaría con "su futuro esposo", y valla que hasta ella misma se sorprendía pues incluso casi se creía sus propias mentiras.
Aunque por parte del mayor observaba con clara atención a su hermana menor con clara duda de si lo que decía era verdad, hasta que comenzó a pensar mejor ya sea en sus acciones, sus reacciones, su tono, aún no le convencía.
—Ademas el ni siquiera tiene un centavo... pero aun así el me gusta aunque no sea un humano...aparte siempre te e dicho que me gustan los tipos grandes— murmuró lo último ganándose rápidamente la atención de su hermano a lo que tan solo río algo nerviosa por ello.
—Bueno...debo de decir que casi me convences hermanita— empezó a hablar el oji café mientras caminaba un poco alrededor de ella como si estuviera planeando algo. —Te diré algo...te brindaré todo el apoyo que necesitas así como a ellos solamente si me llegan a mostrar tu y...Raphael que su relación va enserio—
Termino por proponer, a lo que al inicio internamente brincaba de alegría al saber que su hermano mayor le brindaría el apoyo que necesitaban, pues evidentemente el no la dejaría de lado, aún la quería...bien fue hasta que escucho lo demás sobre...demostrar mientras el los apoyaba que ella y Raphael iban enserio, no cambio su expresión pero si lo estaba pensando ya que bueno su relación con el no era precisamente ni cercana a una de amistad... sería tan complicado.
—Claro hermanote, jah eso es muy sencillo después de todo el y yo nos amamos bastante— respondió con una suave sonrisa aunque internamente pensaba que quería pegarse un tiro de solo mencionar que amaba a alguien.
Aunque ellos no eran los únicos que estaban ocupados hablando de cierto asunto, si no que también los cuatro hermanos y el oficial hablaban.
—Okey...¿Que fue eso ahí adentro?, Acordamos fingir pero esto es demasiado chicos— empezó a decir Casey en un tono bajo por si alguien pasaba por el pasillo o alguien más estaba de fisgón.
—Estoy de acuerdo con Casey, mira Raph no sé que es lo que acordaron tu y T/N pero nos estamos arriesgando más a ahora fingir que tú y ella están comprometidos— empezó a decir Leonardo en un tono serio mientras observaba a su hermano de rojo, creyendo así como todos que su hermano y la joven habían acordado aquello.
—¿Cómo?, ¿Entonces Raph y T/N no se van a casar?— pregunto al instante el menor de los cuatro siendo el de cinta naranja, pues este al final si se había tomado como realidad la noticia de que finalmente al menos a uno de ellos se le haría realidad poder casarse o tan siquiera tener pareja. —Que mal, y yo que yo me había ilusionado de que Raph dejara de estar soltero—
—No es eso Mikey no te confundas, lo que pasa es que al parecer la señorita T/N está intentando convencer a su hermano mayor de darnos apoyo pero por medio de mentiras...como el hecho de que fingimos ser también criminales— empezó a explicar el de cinta morada tratando de que su hermano menor entendiera mejor lo que estaba pasando.
—¿Porque se quejan conmigo?, Si el más sorprendido soy yo, ella lo dijo de repente y por dios saben que ella y yo ni siquiera nos llevamos bien— empezó a responder el de rojo en el mismo tono bajo aunque se aguantaba las ganas de decirlo en alto, pues literalmente todas las preguntas iban hacia el cuando ni siquiera tenía una idea de lo que iba a hacer la peli c/c.
Al escuchar la respuesta de su hermano de cinta roja dejaron de atacarlo con preguntas, al final el tenía razón, además de que sabían que el no les mentiría en un asunto así.
Más tuvieron que guardar rápidamente silencio al escuchar como le quitaban el seguro a la puerta donde estaban los dos hermanos, además de ser abierta por la oji c/o y ir acercándose a ellos.
—Si acepto apoyarnos, pero debemos seguir fingiendo... Así que síganme la corriente prometo que después les explicaré cuando estemos a solas— comenzó a decir a los 5 chicos en un tono muy bajo, así como serio, más eso cambio cuando salió de la habitación el oji café.
Debido a eso la joven se abrazo de uno de los grandes brazos de Raphael manteniéndose un tanto pegada a el mientras sonreía un poco e miraba un poco al más alto, siendo que el de ojos verdes no tuvo mas opción que aceptar aquel gesto de parte de la más baja sintiendo su mirada, solo debía fingir cierto interés en ella al menos por ese momento o eso creía el.
—Bueno...los ayudare en lo que me necesiten, pero por ahora es bastante tarde, ya son casi las 3 de la mañana así que lo mejor será descansar, más en la tarde hablaremos de este asunto, así que si pueden hacerme el favor de seguirme, les daré un habitación, podrán quedarse el tiempo que necesiten— empezó a decir en un tono bastante sereno, aunque mirando de reojo el como su hermana menor iba muy cerca del de cinta roja, mientras al final estos lo seguían.
Aún no le convencía, pero también tenía pensado conocer a ese tipo en especial solo por si las dudas de saber que intenciones tenía con su hermana menor, pues ella era lo más preciado que tenía en su vida y lo único.
Sin mas que hacer estos comenzaron a seguirlo, ya que bien no estaban como para decir algo más y tal y como había dicho T/N más tarde hablarían así que debían de continuar como si nada pasara.
El recorrido por la mansión estaba siendo un poco largo pues al final está si que era muy grande, incluso al subir al segundo piso, aunque para su fortuna finalmente el castaño se detuvo frente a una puerta y la abría demostrando la gran habitación en su interior, pues había mucho espacio y habían hasta tres camas matrimoniales, eran lo suficiente grandes para que entrarán y compartieran.
Así que tan solo se hizo a un lado para que los 5 entrarán. —Me encargare también de encontrarles más ropa para que sigan cubriéndose, así que descansen lo que puedan hasta el desayuno— empezó a explicar el peli castaño mientras los 5 entraban observando más a detalle la habitación, aunque los que veía que le prestaban más atención eran el de cinta azul, el de rojo y el chico.
Para el no era ni siquiera nada gastar en cosas así, pero en fin lo que uno podía hacer teniendo mucho dinero a su disposición.
—Si...bueno hermanito gracias por ocuparte, yo lo haré desde ahora, ya te puedes ir a descansar en lo que yo me encargo de ellos— empezó a decir la joven a su hermano mayor empujándolo un poco más hacía afuera para pasar ella. —Muy bien chicos ahora...—
—Ahora mangos, tu querida hermanita estarás en tu habitación de siempre, porque ni creas que te dejare quedarte en una misma habitación con 5 hombres...bueno 1 hombre y 4 mutantes...en especial cuando uno de ellos es tu prometido así que ni lo pienses...no quiero ser tío tan pronto— empezó a decir este mientras sostenía del hombro de su hermana menor a la par que para sorpresa de todos la cargaba en su hombro como costal de papas mientras se la llevaba afuera de la habitación.
En cambio la menor sintió como su cara comenzó a arder ante lo que dijo su hermano mayor, además de que ahora este mismo la cargaba como costal, sintiendo tanta vergüenza y más enfrente de los 5. —¡Esperate Damián!, ¡Chingado que ya no soy una niña, que vergüenza!— empezó a quejarse mientras pataleaba un poco como niña chiquita pero sin más su hermano mayor cerro la puerta del cuarto dejando a los 5 presentes un tanto confundidos aunque algunos se aguantaban las ganas de reír por la penosa escena.
Sin mas opciones, los 5 tuvieron que aceptar el hecho de al menos dormir un poco, pues ya estaban algo agotados, aunque no alcanzaron a hablar con la joven, ya más al rato lo harían pues debían de aclarar mejor todo lo que estaba pasando y que iban a hacer.
Pero a lo lejos se encontraban un grupo de personas observando primero el como la joven había ingresado a la propiedad juntos a 5 personas más, siendo los mismos que estaban en la publicación.
—Tenian razón... vino con el cuervo como siempre— dijo una joven de cabellos cafés cortos una vez habían terminando de observar como entraban a la gran mansión.
—Eso era de esperarse pero no será nada fácil si esta con el— menciono un hombre mayor que la joven de cabellos castaños mientras guardaba sus binoculares en la camioneta para irse retirando.
—Si lo sé, pero relájate, puedo ser muy paciente, esperaremos a que se quede sola en algún punto y acabamos con su patética existencia— empezó a decir ella manteniendo una gran sonrisa en sus labios de solo pensar que no faltaría mucho para acabar principalmente con aquella joven. Más por ahora no era el momento así que solo entro a su camioneta en la parte trasera. —Vamonos de aquí, ahí mucho que planear— ordenó a uno de sus empleados para ver qué este fue arrancando al final.
Solo era cuestión de esperar y obtendría finalmente la venganza que tanto deseaba.
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