Habia perdido la cuenta de cuantos días habían pasado, el tiempo para mi transcurría lento, con el paso de este, comprendía que de verdad el había sido un sueño, solo era parte de mi cerebro que imaginaba cosas que probablemente nunca me sucedería en la realidad.

La vida sigue, decían.

Pero no siempre es verdad, para mí está no seguía, mi vida se había estancado, para mí los días solo pasaban, mi vida había perdido el sentido.

—Cariño, hija, ¿te sientes mejor? —se sentó a mí lado

Dirigí la mirada hacia ella, tampoco estaba bien, había sufrido mucho por mí culpa, era realmente injusto.

—Si —asentí —Estoy mejor —respondí, sin embargo mis ganas de llorar habían regresado

—Me alegra escuchar eso —me abrazo fuertemente —Creí que te perdería

—Aquí estoy mamá —dije en un susurro audible —Aquí estoy.

___________

Y entonces fingi estar bien, todos me creyeron, menos yo.
Sabía que todo lo que sentía dentro, me dolía, estaba llegando a mi limite, significaba que estaba perdiendo el interés por absolutamente todo.

—Xia —una voz masculina se escucho un poco lejos

—¿Kun? —lo mire mientras el se acercaba a mi

—Xia —me abrazo rápidamente —no sabes cuanto te extrañe, te visitaba todos los días en el hospital, tocaba el piano para ti mientras dormías, me alegra que hayas despertado

—Si, a mi también —mentira

—Vamos, todos están esperando tu llegada —tomó mi mano y cenzo a caminar

—¿Todos? —estaba realmente confundida

—Si, nuestros amigos —sonrió —Estaban realmente felices al escuchar que despertaste

Al parecer todos estaban felices por mi regreso a la realidad. Todos excepto yo, la protagonista.

—Sorpresa —un grupo de chicos gritaron cuando entre a aquel departamento

—Wow —espete sorprendida —No me esperaba una fiesta sorpresa

_________________

—Dios, amiga, te extrañe —una chica me abrazo fuertemente, la recordaba perfectamente, Lian, mi amiga desde la secundaria —La vida era tan dura sin ti a mi lado

Nos encontrabamos en la terraza mientras todos bailaban adentro.

—Nadia había escuchado música desde tu accidente—rio —Al parecer será una larga y alocada noche

No dije nada, solo escuchaba, y observaba la ciudad desde ahí arriba.

—Xia, ya, por favor, dime ¿Qué sucede? —preguntó —¿Acaso no estas feliz de volver? Estuviste a punto de morir

—Lo sé —dije —lo sé

—Fue un milagro, todos habían perdido las esperanzas

—No fue un milagro —solté en voz baja —Fue el

—¿Eh? —me miró confundida —¿Quién?

De pronto esa canción retumbaba por todo el lugar, era imposible no reconocerla y recordar aquella noche.

"No tengas miedo, cuando la oscuridad te invada otra vez, recuerda que...En la oscuridad es donde nacen las estrellas."

—Xia ¿Qué ocurre? —me miró preocupada —¿Está todo bien? ¿Por qué lloras?

No, nada estaba bien.
Era cierto, estaba llorando.

—Lian —la mire —¿Está bien no estar bien?

—¿Qué? —frunció el ceño —Xia, no te entiendo

—Lian, estoy a un paso de quererlo el resto de mi vida, y a otro de olvidarlo para siempre —las lágrimas caían descontroladamente

—¿A quién? —estaba realmente confundida

—Joder, quiero que este aquí —me puse de pie rápidamente —¡¿PUEDES SALIR YA DE MI MENTE?!—grité

Me estás matando.