Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capítulo 2: Primer día.

Bajé de nuevo para preguntar donde estaban las cosas de limpieza.
Mauricio y su esposa se habían ido ya.
Solo estaba Aldo.

- lamento interrumpirte pero ¿me puedes decir donde están los utensilios de limpieza? -

- no interrumpes nada, no te preocupes Elena - me dijo con una sonrisa amable - están en el sótano, te llevo - me dijo y se paró del sofá.

Caminamos hasta llegar a unas escaleras que bajamos para entrar al sótano.

- aquí tienes todo: escobas, trapeadores, trapos, jabón, quita grasa, cubetas, etcétera etcétera - me indicó.

- perfecto, gracias - le dije agradeciéndole gentilmente.

- por nada Elena - me dijo acercándose un poco más a mí.
Por un momento creí que me besaría.

- eres una mujer muy bonita ¿porqué veniste a trabajar aquí? - me dijo tocandomé el pelo de una forma extraña, coqueta podría ser.

- perdí mi trabajo hace algunos meses, no conseguí otro debido a mi poca experiencia en la carrera que estudié así que cuando vi el anuncio de este trabajo sencillo y fácil no dude en venir - le conté con aire nostálgico.
Extrañaba mucho mi antiguo trabajo.

- ¿porqué te despidieron? - me preguntó mientras se entretenía enredando sus dedos en mis cabellos cafés.

- porque estaba saliendo con uno de mis compañeros de trabajo - admití.

- mmm... y ¿qué carrera estudiaste? - preguntó de nuevo.

- Negocios Internacionales - contesté nerviosa. Sus manos seguían en mi pelo.

- mi padre y yo estudiamos lo mismo ¿sabes?, deberías de trabajar en nuestra empresa - dijo interesado.

- solo soy una más de sus empleadas, nunca me contratarián -

- eres una mujer estudiada y además estás guapísima así que no eres una más de nuestras empleadas -

Me quedé de piedra.
Me estaba halagando demasiado.
¿También se sentía atraído por mí?

- bueno gracias pero ahora tengo que comenzar con mi trabajo - le dije y lo aparté.

- antes de que comiences te presentaré a otras personas que trabajan aquí - me dijo casi ordenándomelo.

Antes de ir con él tomé algunas cosas para limpiar y las metí en una cubeta para que fuera más fácil cargarlas.

- te ayudo con eso - se ofreció y tomó la cubeta llena de cosas para limpiar.

- gracias Aldo - le agradecí.

Me llevó hasta la cocina donde estaba una chica rubia de ojos azules peinada con una coleta alta.
Era bonita y muy jóven.

- ella es Denise - me presentó a la jovencita - hola Denise, ella es Elena, nuestra nueva empleada de limpieza - le dijo él dirigiéndose a ella.

- ¿la sirvienta? - dijo mirándome con recelos.
¿Le gustaba Aldo?

- ¿tú eres la que cocina? - le dije de mala gana.

- así es - dijo ella con una mueca de fastidio.

- ¿cuántos años tienes? - le pregunté curiosa.

- 18, ¿por? -

- por nada linda - le dije amable.

- ¿iremos al cine hoy? - le dijo ella a Aldo ignorandomé por completo.

- sí Denise, nos vamos a las 11 -

- ¡¿iremos a la última función?! - chilló ella emocionada.

- sí, como querías - le dijo él y ella besó sus labios.

Él correspondió su beso intenso y apasionado.
Tomé mis cosas y salí de ahí lo más rápido que pude.
¿Ellos eran novios?
Porque eso creía.

Subí las enormes escaleras de caracol y entré a la que parecía ser la habitación de Aldo.

Comenzé a limpiar los muebles y cuando llegué hasta su buro vi que tenía un cuadro con una foto de él y la cocinera (que ahora se que es su novia), en una playa, al parecer ya hasta se habían ido de vacaciones juntos.

Terminé de barrer y de limpiar el piso de su habitación y salí de ahí para ir a la segunda habitación.

Esta era de Mauricio y de Laura.
Tenía una cama hermosa, sábanas rojas de seda brillantes.
Muy sencilla, al parecer no se molestaban en ponerle lujos a su habitación.
Solo les servía para tener sexo.

- lamento lo de Denise, Elena, ella es muy indiscreta - escuché decirme a una voz masculina detrás de mí.

Me giré y vi a Aldo mirándome extraño.

- da igual, está bien - le dije alzando los hombros y esbozando una sonrisa - ¿desde cuando son novios? - le pregunté para saciar mi curiosidad y llenarme de más celos masoquistas.

- desde hace 5 años - respondió sentándose sobre la orilla de la cama destendida.

- ¿dónde se conocieron? - interrogué mientras barría el piso de la habitación.

- ella es hija del que fue mi maestro de matemáticas en preparatoria -

- ¿por cuántos años se llevan? -

- por 7 - dijo haciendo un mohín.

Así que él tenía 25 años.
2 años más que yo.

- ¿ella tenía 13 y tú 20 cuando empezaron a andar? - pregunté asombrada.

- sí, parece mucho la diferencia de edad pero nosotros no la notamos, nos amamos mucho - dijo sonando sincero.

¿Porque me había llamado guapísima?
Tenía novia, eso no estaba del todo bien.

- sí, aveces eso no importa - dije desinteresada.

- ¿tú tienes pareja? -

- no - dije seca.

- ¿y el chico por el que te despidieron? -

- él y yo no éramos pareja, eramos amigos -

- ¿amigos con derechos? -

- si, algo así - contesté y recogí la basura que había juntado en el suelo.

- eres muy guapa, me sorprende que no tengas más amigos con derechos -

- no deberías de llamarme guapa si tienes novia - dije por accidente en voz alta.

- ella no escuchará que te dije eso así que no importa -

- bueno - dije simplemente mientras comenzaba a trapear el piso.

- te veo mañana, me tengo que ir a prepararme para mi cita - me dijo como si me importara saber que haría.

- adiós - contesté y él se fue de la habitación.

Tres horas después terminé de limpiar todas las habitaciones.

- ¡Elena!, ¿sigues aquí? - me gritó Mauricio desde abajo.
Llegó justo a tiempo.

Bajé las escaleras para que pudiera verme y le sonreí.

- ¿acabaste? - me preguntó.

- sí Mauricio - contesté.

- bien, ¿comiste algo? -

- no -

- ¿la cocinera no te preparó nada? -

- ah... no - le dije riéndome por lo bajo - ¿tenía que hacerlo? -

- sí, yo le di esa orden, esa estúpida niña solo trabaja aquí para poder cogerse a mi hijo todos los días -

- ¿no te agrada? -

- no, nunca me ha agradado -

- a mí tampoco me agrada -

- alguien que piensa igual que yo, a mi esposa le agrada muchísimo -

- ¿enserio?, ¿porqué? -

- es lo que no sé, no entiendo porqué -

- bueno, tendrá sus razones -

- sí, supongo -

- yo ya me iba, nos vemos mañana -

- te acompaño - me dijo y caminamos hasta la puerta.
La abrió y salí de esa casa.

- hasta mañana Elena -

- hasta mañana - me despedí de un apretón de manos cálido y me fui a casa.

*Nota: Aquí les dejó una imagen de Denise (la cocinera)*

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro